Pere Mauri fue un pastor pirenaico del siglo XIV que continuó predicando la fe cátara a pesar de la persecución de la Inquisición. Como pastor, conocía bien los pasos de montaña que le permitían escapar fácilmente de la Inquisición y acercarse a su amigo Belibasta. Pere Mauri creía en los principios cátaros como el "consolament" y que el alma sólo se reunía con el Creador a través de este ritual impartido por un Perfecto en el momento de la muerte. Era un hombre libre que se dedicaba a