Este documento narra la historia de Anthea, una pequeña hierba que ve cómo sus hermanas mayores son llevadas por los vientos mientras ella permanece en su lugar de origen. Un día, un soplo de aire la eleva por los cielos hasta que aterriza suavemente en un agujero en la pared de la escuela, donde encuentra un lugar propicio para crecer. Anthea florece y se desarrolla con fuerza a pesar de lo pequeña que es, demostrando que la naturaleza puede prosperar incluso en situaciones difíciles. Los
8. Mientras sus hermanas se extendían con valentía hacia
los vientos: Noto, Bóreas, Argestes, Céfiro … haciendo
planes sobre sus lugares de destino, ella permanecía en
la planta madre tenue y paciente.
3
10. No pensaba en grandes viajes ni en exóticos destinos. Le gustaban
el jardín, las risas de los niños en el patio del colegio, la curiosidad
de sus caras al asomarse …
5
12. Aunque temía a algunos de sus juegos, como a esa cosa redonda
como un fruto y con escamas de alcachofa. Esa cosa había aplastado
a más de una planta y despeinado a alguna que otra flor.
7
18. Anthea no llevaba en su nombre la esencia de los vientos aunque sí
la serenidad que aportan la sabiduría y la paciencia.
Su momento llegaría estaba completamente segura de ello.
Y así fue.
13
30. Al despertar le maravillaron las vistas. Estaba en lo alto y veía el
mundo desde una perspectiva distinta ¿se habría convertido en un
arbusto? ¡Imposible! Ella era una hierba.
25
32. Una hierba que nacería en el muro, ¡Eso era, estaba en uno de los
agujeros del muro del colegio!. Tenía todo lo necesario para crecer
un poco de tierra, humedad y unos maravillosos rayos de Sol.
27
41. El viaje de Anthea ha sido objeto de trabajo durante las
sesiones de Tendales de Poesía de 4º de primaria. Bajo el título :
“Seres encontrados” , y acompañados de poemas de Antonio
Machado, Paco Abril y Wisława Szymborska, hemos descubierto la
belleza de lo pequeño en nuestro día a día.
La naturaleza es un
diccionario. Uno dibuja
palabras de ella.
Eugène Delacroix