5. REGULAR 2.7 mill ha BUENO 3.4 mill ha TEMPORAL ERRATICO 10.9 mill ha 16 % 64 % TEMPORAL 1 7 MILL HA RIEGO 4.8 MILL HA 7 8 % 2 2 % Total de Área Agrícola cultivada 2 1.8 Millones de Ha RIEGO 4.8 MILL HA Buen temporal 3.4 mill ha 50% Superficie c/vocación REGULAR 2.7 mill ha 20 % DISTRIBUCION DE LA SUPERFICIE MEXICO
6. Distribución Porcentual REGIMEN DE TENENCIA DE LA TIERRA Fuente: INEGI, 2007 Régimen de Tenencia de las Unidades de Producción Miles de Hectáreas TOTAL 3,556.4 Privada 2,154.9 Ejidal 1,254.1 Comunal 136.5 De Colonia 0.1 Pública 10.8
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18. ESTUDIO CC Y DTR EN MICHOCAN, MEXICO: IMPLICACIONES EN LAS POLITICAS LOCALES
Notes de l'éditeur
Desde 2008 RIMISP propuso al Gobierno del Estado de Michoacán, México poner en marcha un programa de fortalecimiento de las políticas públicas para el sector rural orientado al desarrollo de capacidades de los actores sociales para enfrentar las consecuencias del Cambio Climático (CC) sin sacrificar las perspectivas de desarrollo de los territorios rurales. En esta tarea hemos contado con la participación y respaldo del Banco Mundial a través del Área De Social Dimension Of Climate Change.
Es importante poner en contexto la importancia que tiene Michoacán en el ámbito nacional como una entidad que tiene más del 35% de la población en las zonas rurales, es decir, que vive en localidades de menos de 2,500 habitantes. 9° lugar en Marginación, con fuerte rezago educativo, ocupando el lugar 30 a nivel nacional y disminución neta de población en 86 de los 113 municipios.
Michoacán es de las entidades en México con un sector agropecuario muy importante a nivel nacional, cuya participación en el PIB rebasa el 15%; sobre todo destaca su liderazgo nacional en la producción hortofrutícola (aguacate, berries, duraznos, guayabas, etc.), sobresale también la producción de granos básicos como maíz, arroz y trigo; la producción ganadera, forestal y acuacultura.
De los 21.8 millones de hectáreas agrícolas cultivadas, el 78% corresponde a áreas de temporal y sólo el 22% son de riego. La superficie de temporal la hemos clasificado en temporal errático, regular y bueno, y solamente considerando las dos ultimas categorías más la superficie de riego, apenas alcanzamos las 10.9 millones de hectáreas, que equivalen aproximadamente al 50% de la superficie con vocación agrícola. Como puede apreciarse, una gran superficie está expuesta a fenómenos derivados del CC (sequías, lluvias atípicas, modificaciones de los patrones de temperaturas, etc.). Existe gran vulnerabilidad a los cambios climáticos, ya que se depende en gran medida de las estaciones climáticas tradicionalmente conocidas. Aún las zonas de riego han sido afectadas por la disminución considerable de los niveles de agua de las presas. Por ejemplo, Michoacán sembraba más de 35 mil hectáreas de trigo, ahora en este año, sólo se sembró apenas 10 mil hectáreas.
El ejido es una institución de hondas raíces en el campo mexicano, que se remonta a formas de tenencia y organización del México prehispánico. En el centenario de la Revolución, es uno de los símbolos más conspicuos de la lucha armada y de las aspiraciones y compromisos de justicia social para la gente del campo.
En año pasado 2009, en México se registro una sequía que afectó a una gran superficie nacional, en el caso particular de Michoacán, hubo afectaciones para un importante número de agricultores. Si bien el Estado Mexicano tiene diseñado el Programa de Atención a Contingencias Climatológicas (PACC), en la realidad no ha respondido a las expectativas de los productores que demandan mejores condiciones de apoyos para reiniciar su actividad productiva; es por ello que este proyecto nos permite comprender mejor las medidas adaptativas de los pequeños productores en las cuales podemos incidir mediante programas a nivel local que mejore sus condiciones de vida.
De acuerdo con el Panel Intergubernamental de Cambio Climático, organismo de Naciones Unidas, las implicaciones que tendrá la agricultura en México por efecto del CC son: Desde 2007, México tiene una estrategia para el CC, producto de la conformación de la Comisión Intersecretarial para el CC, conformada por siete Secretarías de Estado: Medio Ambiente, Agropecuario, Social, Educación, Relaciones Exteriores, Energía y Transportes; además de la participación del sector académico y las ONG’s; sin embargo, para esta estrategia, no se cuenta aún con recursos propios focalizados a su operación y aplicación bajo un esquema de concurrencia y transversalidad, lo que implica proponer acciones y programas concretos.
En los últimos años, es visible la problemática que enfrenta el Estado en las zonas rurales como se detalla en la lámina. Los sectores más vulnerables al cambio climático son los campesinos tradicionales, que practican mayoritariamente una agricultura de subsistencia de maíz bajo condiciones de temporal.
El PED en su eje rector “Desarrollo Rural Equitativo y Sustentable” establece que deben promoverse acciones para la Soberanía Alimentaria y para el aprovechamiento sustentable de los bosques y suelos, entre otras acciones; sin duda que los elementos del PSA y CC permitirán que los lineamientos programáticos sean ajustado a fin de dotar de instrumentos de política publica a los sectores más vulnerables.
Dos elementos son fundamentales para el diseño e instrumentación de la estrategia del PSA y CC: planeación territorial y desarrollo de capacidades. Los procesos de crear las capacidades estatales están orientados a identificar las vulnerabilidades y capacidades adaptativas. Asimismo, el proceso de desarrollo de capacidades debe estar orientado a entregar las herramientas a los estados para construir sus propios planes y evitar así los procesos centralizados.
Es conocido que el principal sector afectado por los fenómenos estudiados de sequías e inundaciones es la agricultura, es por ello que desde este año se han iniciado a orientar acciones para diseñar y poner en marcha un Sistema de Alerta Temprana orientadas a disminuir la siniestralidad agropecuaria y a fomentar la reconversión productiva: COMPONENTES: 1. Identificar y cuantificar el riesgo climático 2. Mejorar la calidad de la información agroclimática 3. Alertar a productores de la presencia de eventos climáticos 4. Disponer de alternativas tecnológicas para la producción 5. Desarrollo de capital social para la prevención El Banco Mundial También ha hecho recomendaciones para la agricultura en México, destacando dos aspectos: Sistemas de Alerta Temprana Monitoreo meteorológico Seguimiento de eventos extremos Pronósticos de clima de corto y mediano plazo Mecanismos de difusión de gran alcance Estrategias para minimizar el riesgo Estudios de potencial productivo Análisis del riesgo agroclimático Modernización tecnológica de las unidades de producción Esquemas de protección ante eventos catastróficos Esta situación cambia la perspectiva en México, como en la mayoría de los países, donde la planificación ante el CC tiende a concentrarse en el suministro de bienes públicos; tales como información sobre los posibles escenarios, evaluaciones de riesgo en el público dominio público y campañas de sensibilización. Actualmente en Michoacán, el gobierno estatal en conjunto con el nivel federal y académicos de la UNAM, se encuentran trabajando en el diseño de una estrategia estatal de adaptación y mitigación del cambio climático en la forma del Programa de Sustentabilidad Ambiental y Cambio Climático.
El proyecto ha influido en la necesidad de identificar los trabajos para integrar el PSA y CC que abarca medio urbano, rural, etc., ya que identifica las estrategias de adaptación y mitigación de las comunidades rurales ante los fenómenos de CC y que deben ser tomadas en cuenta para la formulación de políticas para el sector. En dicho programa también se incluye: Marco institucional o de gestión política Ámbito urbano Ámbito rural Economía del cambio climático Inversiones Monitoreo y evaluación El BM y el Gobierno del Estado de Michoacán acordaron realizar actividades para la estructuración e implementación de un Programa Estatal de Sustentabilidad Ambiental y Cambio Climático. El primer paso ha sido la conformación de un comité directivo conformado por Dependencias Públicas, Centros de Investigación, ONG’s y el propio BM. De igual manera, consideramos la necesidad de trabajar en el rediseño de la estrategia alimentaria, ya que la vulnerabilidad alimentaria afecta principalmente a los sectores más pobres de la población y contribuye sustancialmente a la agudización de su condición de pobreza. En el campo se encuentra la mayor concentración de pobreza multidimensional y particularmente la pobreza alimentaria, que puede agravarse todavía más con los efectos del CC. La pobreza alimentaria en Michoacán supera el 40% de los hogares pobres; es decir, se consideran a aquellos cuyo ingreso total no alcanzaría para adquirir la canasta alimentaria. Esta cifra es superior a la registrada a nivel nacional (24%). Se focaliza principalmente en zonas rurales, hogares indígenas, en hogares jefaturados por mujeres, y en hogares en donde predominan niños y adultos mayores.
Una de las preguntas centrales del proyecto fue: ¿Qué puede hacer distintas instituciones para mejorar la capacidad de adaptación de los territorios rurales de Michoacán? Y una vez analizada la información preliminar del proyecto, es clara la falta de información y seguimiento de las estrategias en todos los niveles. Se requiere de un programa de capacitación que incluya el intercambio de experiencias, reflexiones, propuestas, etc. sobre temas específicos que afectan a los agricultores, así como la necesidad de que productores, lideres y técnicos puedan acceder a procesos de profesionalización, así como atender las necesidades de las organizaciones considerando las particularidades de cada una en cuanto no sólo a su pensamiento ideológico, sino también su escala y tamaño, estructura, etc. Dos programas especialmente importantes que deben fortalcerse son el Programa de Conservación y Manejo Sustentable de Recursos Forestales Comunitario (PROCyMAF II) y el Proyecto de conservación de la biodiversidad por comunidades e indígenas de los estados de Oaxaca, Michoacán y Guerrero (COINBIO), por sólo por sus objetivos de conservación y desarrollo e implementación de medidas adaptativas, sino por el fortalecimiento de capacidades técnicas y de organización en las comunidades; ambos programas han trabajado intensamente en Michoacán.
Productos especializados para los productores, así como instrumentos de gestión de riesgo, tales como seguros para la producción, son fundamentales en la elaboración de estrategias de adaptación de largo plazo.
Desde 2008 RIMISP propuso al Gobierno del Estado de Michoacán, México poner en marcha un programa de fortalecimiento de las políticas públicas para el sector rural orientado al desarrollo de capacidades de los actores sociales para enfrentar las consecuencias del Cambio Climático (CC) sin sacrificar las perspectivas de desarrollo de los territorios rurales. En esta tarea hemos contado con la participación y respaldo del Banco Mundial a través del Área De Social Dimension Of Climate Change.