2. Aborto
Para otros usos de este término, véase Aborto (desambiguación).
El aborto (del latín abortus, participio pasado de aborīrī, con el mismo significado que
en español, a su vez de ab-, «de», «desde», y oriri, «levantarse», «salir», «aparecer») es la
interrupción y finalización prematura del embarazo de forma natural o voluntaria. En un sentido
más amplio, puede referirse al fracaso por interrupción o malogramiento de cualquier proceso o
actividad
3. Tipos de aborto
Aborto inducido[editar]
Artículo principal: Aborto inducido
El aborto inducido es la interrupción activa del desarrollo vital del embrión o feto hasta las 22
semanas del embarazo. Puede tratarse de un aborto terapéutico (oaborto indirecto) cuando se
realiza desde razones médicas, o de un aborto selectivo (interrupción voluntaria del embarazo),
cuando se realiza por decisión de la mujer embarazada.3
A su vez, según la técnica empleada para inducir el aborto, se puede hablar de aborto
médico o aborto con medicamentos4 y de aborto quirúrgico.5 6
Aborto espontáneo[editar]
Artículo principal: Aborto espontáneo
El aborto espontáneo o aborto natural es aquel que no es provocado intencionalmente. La causa
más frecuente es la muerte fetal; por anomalías congénitas del feto, frecuentemente genéticas. En
otros casos se debe a anormalidades del tracto reproductivo, o a enfermedades sistémicas de la
madre o enfermedades infecciosas. Cuando la edad gestacional es superior a 22 semanas o el peso
del feto supera los 500 gramos, se habla de muerte fetal. Entre los signos y síntomas se encuentran
el sangrado transvaginal anormal, por el cual se tiene que ser valorada por su ginecólogo y verificar
que no queden restos placentarios.
4. Debate sobre el aborto
El debate sobre el aborto, en relación al aborto inducido o interrupción
voluntaria del embarazo, se refiere a la discusión, controversia y polémica
sobre su práctica, contexto social y económico en el que se produce –referido
especialmente a la mujer– así como la situación legal y penal aplicable en los
distintos países y la diferente implantación de los derechos reproductivos y el
acceso a la planificación familiar.
El número de abortos inducidos en todo el mundo anualmente es de unos 46
millones, 26 millones se llevan a cabo en países donde el aborto es legal y los
restantes 20 millones se practican ilegalmente.1 El riesgo sanitario para la
mujer que se practica clandestinamente un aborto como consecuencia de su
ilegalidad ha llevado a que diferentes sectores sociales y organizaciones
soliciten su legalización.2 Sin embargo, esta postura se ha enfrentado a otros
sectores y organizaciones que defienden el derecho a vivir del nasciturus,
fundados en el consenso científico y médico sobre el inicio de la vida humana
en el momento de la fecundación.