El documento describe los efectos fisiológicos de la actividad física en varios sistemas del cuerpo. Explica que el ejercicio aeróbico fortalece el corazón, mejora la función cardiovascular y reduce la frecuencia cardíaca y la presión arterial en reposo. También mejora la masa y fuerza muscular, la capacidad respiratoria y la coordinación neuromuscular. Concluye que la actividad física regular proporciona numerosos beneficios para la salud física, emocional y mental, y permite que las personas desempe
1. San Felipe, Junio 2015
REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
INSTITUTO UNIVERSITARIO POLITÉCNICO
“SANTIAGO MARIÑO”
EXTENSIÓN BARINAS.
INTEGRANTE:
Yajaira Ojeda
C.I 16.371.734
Ingeniería de Sistema.
Efectos fisiológicos de la actividad física
2. Efectos Fisiológicos de las Actividades Físicas
A Nivel Cardiovascular
Los efectos fisiológicos del ejercicio físico son bastante bien conocidos y
constatados. El sistema cardiovascular aporta al músculo, para su metabolismo energético,
sangre rica en oxígeno y nutrientes. En este nivel, el ejercicio físico aeróbico fortalece el
corazón y la función cardíaca y vascular. Esto significa un importante aumento de la
calidad y de la potencia del funcionamiento cardiaco y una mejor distribución periférica de
la sangre (mediante el ajuste de los procesos de vasoconstricción y vasodilatación que
aseguran un aumento de la cantidad de sangre que llega la musculatura). En reposo aparece
una disminución de la tasa cardíaca y de la presión arterial.
En el sistema cardiovascular se producen adaptaciones tanto en reposo post ejercicio
como a intensidades sub-máximas y máximas. Algunas son:
1. Aumento del tamaño del corazón dado por el aumento de la cavidad ventricular,
con mayores volúmenes sistólicos y diastólicos, al largo plazo y en actividades de
resistencia.
2. El entrenamiento produce descenso de la frecuencia cardiaca de reposo
(bradicardia). Influenciada esta por el sistema nervioso autónomo (disminución de
la actividad simpática o aumento de la parasimpático o ambos), como así por el
enlentecimiento del ritmo de descarga del nodo senoauricular.
3. El volumen sanguíneo como la hemoglobina aumentan con el entrenamiento.
4. Los niveles de tensión arterial descienden significativamente en especial en
aquellos sujetos con valores al límite de la normalidad o que presentan hipertensión
moderada (claros descensos en la media y en la diastolica)
5. La diferencia arteria-venosa aumenta ligeramente, a expensas de mecanismos de
disociación de la hemoglobina, adaptaciones mitocondriales, mayores
concentraciones de mioglobina.
6. Aumento de la eficiencia respiratoria: menor cantidad de aire ventilado
comparativo en entrenados y no entrenados, en especial en actividades
prolongadas.
7. El trabajo respiratorio alcanza los 25-30 en ejercicios intensos en sedentarios,
descendiendo a casi 20 en los entrenados debido a mayor y mejor actividad
ergonómica de la musculatura respiratoria, y disminución de las resistencias al flujo
aéreo al ser los movimientos más profundos a pesar de la mayor frecuencia
respiratoria.
3. A Nivel Muscular
El ejercicio aeróbico tiene importantes efectos al ser el músculo el efector del
sistema. Los principales cambios son los relativos a la mejora de la capacidad funcional del
músculo por aumentos en el tamaño muscular y en las mitocondrias y, por ello, en la
capacidad de extraer y liberar energía, cambios que se traducirán en un aumento de la
potencia y la resistencia muscular.
Otros cambios son los referidos a la mejora en la fuerza de los tendones y en la
flexibilidad o rango de movimiento de las articulaciones. Otros importantes efectos de la
actividad física en el sistema musculo esquelético son la mejora en la coordinación
neuromuscular y en la agilidad. La actividad física será, pues, en este sistema un control del
declive fisiológico asociado a la edad, especialmente en masa y fuerza muscular,
flexibilidad y coordinación motora.
A Nivel Respiratorio
Por la necesidad de aportar al torrente sanguíneo altas cantidades de oxígeno (O,)
para favorecer el metabolismo energético muscular y eliminar el alto nivel de dióxido de
carbono (CO2) resultante del ejercicio, el principal efecto de la actividad física aeróbica es
la hiperventilación (aumento de la profundidad de la respiración), así como el aumento de
la superficie alvéolo-capilar (para una mayor capacidad de transferencia de gases). Así,
tiene un fuerte efecto sobre el declive respiratorio asociado a la edad, aumentando la
capacidad vital.
4. A Nivel Neurológico
Sensación de agotamiento y cansancio, alteraciones del ritmo del sueño (insomnio)
y disminución de la destreza muscular. La participación en actividades físicas y deportes,
puede provocar emociones negativas como miedo, agresión, ira, y así mismo, puede
proporcionar al participante las herramientas para hacerle frente, aprendiendo a controlar
sus emociones.
Conclusión
La actividad física debe ser tomada como una práctica regular y sistemática en la
vida de todas las personas, sin distingo de edad, sexo, condición social u ocupación, por el
sinfín de beneficios para la salud orgánica, emocional y psíquica de las personas, se debe
tomar en cuenta que ofrece herramientas que le permiten al individuo afrontar la vida con
una aptitud diferente, con mejor salud, fortaleciendo la diligencia y la perseverancia, con
sentido de honradez, responsabilidad y del cumplimiento de las normas; en fin, permite que
las personas como entes individuales tengan la vitalidad, vigor, fuerza y energía
fundamentales para cumplir con su deber en el grupo social al que pertenecen.
La realización regular y sistemática de una actividad física ha demostrado ser una
práctica sumamente beneficiosa en la prevención, desarrollo y rehabilitación de la salud, así
como un medio para forjar el carácter, la disciplina, la toma de decisiones y el
cumplimiento de las reglas beneficiando así el desenvolvimiento del practicante en todos
los ámbitos de la vida cotidiana. Hoy en día esta visión ha sido aceptada por muchos, sin
embargo, a lo largo del tiempo, ha tenido sus períodos de auge y regresión.