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Desde los primeros tiempos de la existencia del ser humano, el hombre se ha hecho
una serie de preguntas a las que cada uno podemos dar respuesta de forma diferente.
Tales incógnitas son variadas, como; ¿de dónde vengo?, ¿a dónde voy?, ¿dónde
estoy?... Estas interrogantes han tenido diferentes propuestas, pero todavía no se ha
llegado a una conclusión definitiva, ni creo que esta se consiga algún día.
Tanto es así, que las mejores plumas de todos los tiempos, grandes directores de cine y
en general, grandes de las artes nos han deleitado con estos temas. Así tenemos
películas como ''Regreso al futuro'' o ''El tiempo en sus manos'', vista recientemente en
la gran pantalla de la clase, la tan trabajada este curso ''Matrix'', ''Alicia en el país de las
maravillas'' recientemente estrenada en pantalla con un gran éxito y escritores como el
norteamericano de origen ruso, doctor en filosofía y autor de novelas como ''Viaje
alucinante'', ''El código genético'' y en la que nos centraremos a continuación: ''El fin de
la eternidad'', Isaac Asimov. Todos estos filmes y libros han sido basados en las teorías
espacio-temporales de muchos filósofos, pero se centra en su mayoría en ciencia
ficción. Todos sabemos que son irreales y que los viajes en el tiempo son imposibles de
realizar, pero no de imaginar. Siempre podemos tener el cuenta la película ''El planeta
de los simios'' cuando Charlton Heston llega a una preciosa playa montado a lomos de
una caballo blanco y al final de una montaña ve la Estatua de la Libertad totalmente
destruida. Posteriormente, se encuentra rodeado de monos, dándose cuenta de que
venía del pasado. Con esto podemos pensar que para cada escritor de novelas o
guionistas cinematográficos, al igual que los famosos pensadores reflexionan cada uno
sobre un futuro distinto los unos con los otros, pero no significan que unos estén bien y
otros mal, sino que como nadie lo ha conocido nunca, cada uno deja volar su
imaginación son respecto a este tema. Lo mismo ocurre con el tópico tan polémico hoy
en día de Dios.
La filosofía del espacio-tiempo ha sido siempre el corazón o el eje central de los
estudios filósificos. Ya desde los presocráticos, los sabios anunciaban esta teoría, que
expresaban sus escasas ideas con factores naturales como el fuego, el agua, el aire,
los números e incluso los más modernos, los átomos. Otros también comentaban el
ciclo cósmico también conocido como eterno retorno o reencarnación. Todo estos
archés se encuentran en continuo movimiento, e incluso algunos hablaban sobre este,
de ahí a que otros filósofos pensasen más sobre el espacio-tiempo.

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De estos presocráticos, cabe destacar la doctrina jónica de los opuestos de Heráclito de
Éfeso en la que habla del mundo como un flujo permanente, que siempre esta en
movimiento, también el fuego lo está y este es posible gracias a estructuras contrarias
como el día y la noche. Otros que también lo comentan son Pitágoras, Parménides de
Elea y Zenón de Elea, aunque este lo niega totalmente pues se basa en la lógica para
hablar de él. Empédocles de Agrigento y Demócrito de Abdera quien afirma que el
choque de los átomos produce el conocimiento, se unen a este grupo.
Kant manifiesta su idea del espacio tiempo sobre todo en la historia, tal y como lo hace
Asimov. Todo objeto se da en un espacio y en un tiempo. Estas condiciones
espaciotemporales son las formas a priori de la sensibilidad externa (espacio) e interna
(tiempo). Espacio y tiempo se encuentran en la razón del sujeto previamente a cualquier
experiencia, haciéndola posible. Por eso son estructuras trascendentales o condiciones
que permiten conocer los objetos: todo lo que pensamos lo pensamos en un espacio y
tiempo concretos.
''El fin de la eternindad'' es un libro de ciencia ficción, y como tal, no se parece en nada
a la realidad. Los personajes van viajando a través del tiempo, tanto al pasado como al
futuro, de una forma para ellos muy cómoda y natural. Si esto fuera así de sencillo, se
podría alterar mucho la historia que transcurre en el tiempo, se hubieran evitado
muchas catástrofes, muertes y también el mismo tipo de desastres para tiempos
futuros, lo cual es totalmente ilógico. Los grandes filósofos, que a su vez son grandes
pensadores, cuando tratan de viajar en el tiempo lo tienen bastante difícil, se conforman
con hablar de ello. Saben que estan en unas coordenadas en las cuales hay un espacio
y un tiempo, tales como la X y la Y son a las matemáticas. Dichas confluyen en un
punto que sería un espacio y un tiempo determinados fijos, el momento en el que nos
encontramos ahora mismo.
''Hay algunas cosas, sin embargo, que no deben saber. La más importante, por su
puesto, es la forma en que alteramos la realidad cuando es necesario. Aparecen otras
creencias indeseables sobre la eternidad''. A nuestro modo, estos parecen ser nuestro
ángeles de la guarda. Es muy normal oir en los medios de comunicación de masas que
hablan sobre una catástrofe de un avión con multitud de vícitimas aunque suele haber
una diciendo que había cambiado el billete o que lo perdió por llegar tarde y lo que en

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realidad le fue perjudicial, porteriormente le salvó la vida. Esto es una forma sencilla de
creer que nos han alterado el futuro y podemos pensar que el destino de las personas
está en manos de esos personajes que se mueven a través del tiempo, a los que tanta
importancia les da Asimov. Tras esta clase de sucesos, solemos plantearnos preguntas
como: ¿en realidad me han salvado la vida?, ¿la suerte existe en?, ¿mi destino está
escrito en alguna parte?...
''Cada mundo tendría su propio Tiempo, sus valores, la oportunidad de buscar la
Felicidad a su manera y en su ambiente. Hay muchas clases de Felicidad, de Bien, una
infinita variedad de propósitos. ¡Este es el Estado Básico de la Humanidad!'', dijo Noys.
El personaje de nuestra historia tenía todo el mundo a sus pies, podía hacer lo que
quisiera, pero no era feliz. A lo único que se dedicaba era a trabajar para la
organización viajando de alante hacia atrás. Pero en uno de sus viajes, choca con la
felicidad, se enamoró. Por ello, deja todo para encontrar su fin último, estar con su
amada Noys y así conseguir el punto más alto de la montaña de la felicidad, tan ansiada
en todos los seres del planeta.
Los filósofos suelen comentarnos este término. Hay distintos tipos de felicidad; para
Rousseau es la bondad del ser humano, para Marx, la destrucción del capitalismo y
para Nietzsche, conseguir el superhombre. Para no grandes pensadores podría ser, por
ejemplo, el placer o Dios como fin último, pero para Harlan es el amor, pues es capaz
de dejar todo por ella.
Nuestro protagonista que ha sido elegido entre muchos individuos de todos los siglos,
podríamos decir que es un superhombre de los que Nietzsche alude en su doctrina
intentando crearlo para alcanzar de algún modo la perfección. Estas cualidades las
tenía Harlan, por eso fue uno de los más cualificados para desallorar la misión. Pero se
dio cuenta de que la felicidad podía existir cuando se enamoró perdidamente y ya, toda
su vida fue dedicarse a ella.
''La eternidad desaparecerá junto con la realidad de mi siglo, pero nosotros nos
quedaremos para tener hijos y nietos y la humanidad permanecerá para llegar hasta las
estrellas''. Él primeramente no tenia una vida normal, no tenía hijos, ni amigos, solo se
encargaba de resolver los problemas que le ordenaban, pero una vez que la encontró,

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quiso pasar a mejor vida, y aunque no viviera para siempre, podría ser feliz el tiempo
que le quedase junto a ella y hacer cosas que en realidad preferimos hacer todos.
Permanecer en el tiempo de por vida no es lo mejor que nos puede pasar, ni ser de este
modo inmortales, pero vivir bien, y con bien me refiero a convivir rodeados por gente
que nos quiere y a los que no les importa soportarnos cuando estamos tristes.
''En realidad, en vez de regresar automáticamente a la eternidad, la cabina
permanecerá indefinidamente en el tiempo primitvo''. El tiempo es el transcurso lineal de
acontecimientos. El destino de lo pasado y del futuro es el mismo, todo va y todo
vuelve. Curvo es el sendero de la eternidad. Estas palabras de Nietzsche junto con el
diálogo extraido del libro, hacen referencia al eterno retorno.
Todo volverá a repetirse es una frase que no concuerda con la ideología de San Agustín
de Hipona ya que para él la historia es lineal y nada de repite: Dios hace siempre cosas
nuevas. Es el creador de todo lo que existe en el tiempo y también el tiempo mismo. Él
considera que el tiempo consiste en pasar desde un pasado que ya no existe a un
presente cuyo ser se basa en pasar al futuro que todavía no lo es, es decir, el tiempo es
lineal, todas las cosas se sucederán sin repetirse.
Los filósofos se contradicen entre ellos continuamente, sin embargo para los católicos,
por ejemplo tendrá razon el Santo, mientras que para los no creyentes, el que acertó fue
Nietzsche.
Tras estudiar a tantos filósofos, podemos llegar a la mímima conclusión de que todos, o
en su mayoría quieren alcanzar la felicidad. ¿Cómo?, para gustos los colores. Aclarar
las dificultades del mundo, intentando modificarlo y sobre todo viviendo con la máxima
libertad es el sueño de toda persona, pues de esta manera nos convertiríamos en una
especie de héroes. Pero, ¿lo haríamos de forma anónima?, ¿sin que nadie supiese que
están modificando la realidad?, y con esto me refiero a ese destino del que siempre nos
preguntamos cómo será.
Quizás sea mejor dejar el mundo, dejarlo pasar a su manera y no entorpecerlo ni
mejorarlo. Permitir que cada agua vaya por su correspondiente río sin que nadie intente

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desviarlo. Solo debemos preocuparnos de nosotros mismos y de las personas que nos
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rodean e intentar alcanzar nuestras metas, así como arreglarnos con los que nos
hayamos peleados, para poder alcanzar un estado de paz y tranquilidad en nuestra
vida. Debemos de buscar la felicidad, como Marx lo hacía con el trabajo no asalariado e
intentando que floreciese el comunismo y como Niezstche lo hacía con la búsqueda del
superhombre.
Los propósitos de cada uno de los filósofos no son ficticios, hemos estudiado a Platón ,
Aristóteles, San Agustín, Descartes, Marx ...no para aprendernos sus ideas de memoria,
sino para utilizarlas y poder afrontar con más facilidad nuestros problemas. La filosofía
es uno de los fines para poner alcanzar un mundo mejor, aunque muchas veces los
pensadores nos parezcan aburridos, pero con su diversidad de ideas, aunque sean los
más antiguos gozan aún de actualidad, ¿quién no conoce a Platón?. Todas las filosofías
están en la verdad, cada una piensa y reflexiona en puntos y temas diferentes, porque
la resolución a cada problema planteado no es único, sino que cada uno presenta su
punto de vista, ofreciéndote de esta manera diversidad de opiniones de las cuales
puedes elegir la que más te convenga en cada momento, alcanzando la virtud.
Al igual que nuestros personajes, Harlan y Noys buscan su felicidad a través del amor
dejándolo todo a un lado, si nosotros hacemos un resumen destacando las opiniones
más relevantes de todos esos grandes pensadores, podríamos llegar a vivir en un
mundo perfecto. Tendríamos desde que nacemos la inocencia de un niño, pasaríamos
de camello a león para poder elegir y crear nuestros propios valores y si estamos bien
educados lograríamos ser libres a pesar de que la sociedad intentase corrompernos.
Otro de los grandes aspectos que me ha llamado la atención ha sido el político Marx.
Sus ideas son bastante lógicas y brillantes para un mundo utópico. Si no hubiese
dinero, el egoísmo desaparecería y tal y como este se va, vendría un mayor desarrollo
del amor y la amistad, pues compartiríamos todo y seríamos bastante más felices.
Para Harlan el trabajo era toda su vida y obsesión, no tenía de nada. Es sorprendente
la idea de Marx sobre el trabajo. Llevar a cabo esta actividad sin obtener recompensa
es algo irracional en esta sociedad. Cada vez todo es más caro y la gente no puede
llegar a fin de mes. Para el filósofo esto no es un problema ya que si las personas ''no

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tienen'' supuestamente el hombre debe liberar todos sus demás sentidos físicos y
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espirituales y hacer las cosas ''por amor a ellas''.
Se trabaja por dinero, nos guste o no, y la mayoría de las personas preferirían dedicarse
a otra cosa que les hiciera más felices. En ocaciones las 8 horas de trabajo se hacen
con desgana, cansancio, porque no les gusta, pero realmente es difícil que cada uno
encuentre la máxima satisfacción en las 8 horas de jornada laboral, ya que la mayoría
están sujetos a unos jefes a los que lo único que les importa es ganar y ganar dinero y
más dinero, mientras que la preocupación de estos siervos es alimentar y satisfacer las
necesidades de sus familias.
La misión de los grandes pensadores y la de nuestro protagonista Harlan es mejorar el
mundo para conducirlo hacia un final feliz en política, economía, derecho, religión,
socialmente... siempre quedarán en mi mente ideas que serán difíciles de borrar y las
llevaré siempre conmigo tales como:
•Sócrates: Nada enseña tanto como la convivencia ciudadana
•Plarón: Buscar el bien y hallar el conocimiento
•Aristóteles: La razón por la cual el hombre es un ser social es que el hombre es el
único animal que tiene palabra.
•Santo Tomás Dios existe
•San Agustín: Es Dios quien dirige la historia
•Hume: La costumbre actúa antes de que nos de tiempo a reflexionar
•Descartes: Pienso luego existo; ''Yo existo pensando''
•Maquiavelo: El fin justifica los medios. Permite traición, violencia y engaño con tal
de alcanzar los fines perseguidos
•Kant: ¿Qué puedo conocer?, ¿qué debo hacer?, ¿qué me cabe esperar?
•Rousseau: EL hombre es un ser naturalmente bueno que ama la justicia y el orden.

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''Somos ciudadanos libres''
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•Marx: Transformación de la filosofía poniéndola al servicio de la transformación del
mundo
•Nietzsche: Sanar una civilización enferma y decadente.
''La eternindad desaparecerá junto con la realidad de mi siglo, pero nosotros nos
quedaremos para tener hijos y nietos y la humanidad permanecerá para llegar hasta las
estrellas''. Él se volvió para mirarla y ella le sonrió. Era la Noys de siempre y su propio
corazón latía como antes.

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