3. Pedagogía de la Educación: Como objeto de la didáctica.ppsx
Las heroínas de la independencia en el ríoyoutuve
1. Las Heroínas de la Independencia
en el río de la Plata
Analía Vecchi Pomphile
2. • Desde antes de la
Independencia, las mujeres
Mujeres Heroicas sirvieron a la Patria en diversas
actividades, en la milicia o el
ejército. Como apoyo desde la
ciudad o acompañando a las
tropas en campaña, hasta con
niños y ancianos. Actuaron como
guerreras, enfermeras, cocineras
, pulperas, cantineras y
“bomberas”, y siguieron a las
milicias como guerreras o de
apoyo a sus maridos y tropa en
general, y hasta infiltradas en el
enemigo para fomentar de
deserción.
3. Vecina del barrio de San
Telmo, doña Martina Céspedes fue
MARTINA CESPEDES
nombrada “Defensora de Buenos
Aires” por su actuación durante las
segundas Invasiones Inglesas del 5
de julio de1807. Le fue concedido el
grado de Sargento Mayor del Ejército
y luciendo su uniforme desfiló junto
al entonces gobernador Las
Heras, en una procesión de Corpus
del año 1825.
4. JUANA AZURDUY
Fue popular por su coraje. Su acción más
famosa se produjo cuando su marido le
encomendó la defensa de la hacienda de
Villar, mientras él dirigía un ejército hacia la
región del Chaco. Los realistas atacaron Villar
para cortar la retirada al general Padilla, y
Juana Azurduy lo defendió con sólo treinta
fusileros. En uno de los asaltos mató ella
misma al jefe de la fuerza enemiga y le
arrebató una bandera que luego presentó a su
esposo.
Se trasladó a Salta en donde se convirtió en un
valioso combatiente junto a Güemes quien en
1816, obtuvo permiso del director Pueyrredón
para designarla teniente coronel con derecho
al uso del uniforme y con todos los privilegios
del rango el mismo. Tras la victoria en 1824
Belgrano le entregó el sable. Juana regresó a
Chuquisaca junto a su hija llevando una vida
tranquila y pobre, hasta su muerte en 1862 en
5. • En su parte dirigido a la metrópoli decía:
"No debe omitirse el nombre de la mujer
Manuela Pedraza de un cabo de Asamblea, llamada
Manuela la Tucumanesa (era nacida en
Tucumán), que combatiendo al lado de
su marido con sublime entereza mató un
inglés del que me presentó el fusil".
•
6. • Nacida en Jujuy, durante las guerras de
independencia, lideró en Salta, junto con
JUANA MORO Doña Loreto Sanchéz de Peón, una red de
(La emparedada) espionaje femenina conocida como Las
Mujeres de la Independencia.
• En una oportunidad fue apresada y obligada
a cargar pesadas cadenas, pero no delató a
los patriotas. Sufrió el castigo más grave.
Cuando Pezuela invadió Jujuy y Salta. Juana
fue detenida y condenada por espionaje a
morir tapiada en su propio hogar. Días más
tarde una familia vecina, condolida de su
terrible destino, oradó la pared y le proveyó
agua y alimentos hasta que los realistas
fueron expulsados.
Fue emparedada a los 29 años, pero murió
centenaria. A consecuencia de la difícil
situación que atravesó fue su apodo: «La
emparedada-
7. • Magdalena (Macacha) Güemes de
Tejada. Hermana del general Martín
Miguel de Güemes, de cuya acción en
Macacha Güemes pro de la independencia fue eficaz
colaboradora. Nació en Salta el 11 de
diciembre de 1787 y era hija de María
Magdalena Goyechea y de la Corte y
Gabriel Güemes Montero, tesoro de la
Real Hacienda. Recibió la educación
habitual para las mujeres de su época y
oposición, pero poseía cualidades
propias que le permitieron descollar en
un medio rico en mujeres de
personalidad.
Poco después de la Revolución de
Mayo, convirtió su casa en taller para
confeccionar ropa para los soldados de
la partida de observación organizada
por su hermano. A partir de entonces
fue su más entusiasta colaboradora
8. • Su nombre era Santos Moreno y había
nacido hacia 1840 y, criada por su padre al
morir su madre, tiempo después se pone al
RUBIA MORENO frente de la pulpería que su familia poseía
en la bajada del antíguo camino del El
Polear.
Colaboradora de la causa del caudillo
Taboada, convence a su marido y a parte de
la familia para enlistarse en las fuerzas
locales y donó parte de su patrimonio a la
causa. Tuvo activa participación en una
decisiva y sangrienta batalla: la de Pozo de
Vargas, el 10 de abril de 1867, donde se
enfrentaron por espacio de tres horas las
fuerzas de Antonino Taboada y Felipe
Varela. La Rubia Moreno pierde a su padre
al atardecer de ese día, y con el tiempo, y el
devenir de los tiempos políticos, pierde
también sus posesiones, muriendo en la
mas triste pobreza. Sus restos descansan
hoy en el cementerio de La Misericordia.
9. La salteña Juana Manuela, hija de José Ignacio Gorriti vio la luz en la
localidad de Rosario de la Frontera en la provincia de Salta en los años en que
las luchas de emancipación se habían extendido por toda América hispana.
Su padre que había apostado desde los inicios al triunfo de la Revolución fue
una figura central entre las fuerzas de Martín Miguel de Güemes, el hombre
que mantuvo viva la lucha en la frontera norte desde las épocas tempranas
hasta su muerte acaecida en 1821.
10. Juana Manuela Gorriti
Juana Manuela Gorriti descolló como
docente, escritora, periodista en Perú, Bolivia y en su
tierra. Por sus escritos de los que tomamos
algunos, contenidos en la obra “Ficciones patrias
transcurren los recuerdos de sus primeros años que
se mezclan con los de los días del exilio boliviano
junto a su familia, y otros, mucho más cercanos al
tiempo en que escribe.
11. Buenos Aires de 1806
Los días 10, 11 y 12 de agosto de
1806 se combatía en las calles de
Buenos Aires para reconquistar la
ciudad que estaba usurpada por los
ingleses. Todos participaban en la
lucha, las mujeres con el mismo
fervor que los hombres.
12. Orden familiar y mujeres en medio de la Revolución
El comienzo del proceso de emancipación se tradujo en una fuerte movilización
social que abarcó a amplios sectores pero que a su vez significó una intensa
politización de todos los ámbitos de la vida en común. A contra corriente de
lo que se verificaba en la época en las sociedades burguesas más
avanzadas, donde lo privado tendía a disociarse de lo público para centrarse
cada vez más en la intimidad familiar, en América el quiebre del orden
colonial llevó a la redefinición de las esferas sociales, haciendo que en la
vorágine del cambio lo público se impusiese por sobre lo privado. Muchos
hogares, mundos cerrados presididos por sus respectivas
matronas, madres, esposas, hijas, hermanas se convirtieron en una
extensión de lo público y en el volcán de la política local. En este sentido
fueron el medio adecuado para llevar adelante la acción transformadora de
Estados nuevos que en su empeño por cambiar las costumbres y las prácticas
sociales,[8] carecían aún de espacios políticos abiertos a la participación
pública. En consecuencia la revolución allí donde estalló, resignificó el
mundo privado en sí y su proyección hacia el
exterior. http://webserver.rcp.net.pe/cemhal/revista4.html
13. La Casa de los Thompson
Con el triunfo de la Revolución, la vida pública con sus debates, intrigas e
incertidumbres invadió la rutina del mundo familiar. La casa de los
Thompson, al igual que las de otras familias notables, se convirtió en un centro
reconocido de la vida política, en una sociedad que carecía de espacios
adecuados a tal fin. Víctor Gálvez en sus memorias rememora la ciudad en la
que aristócratas y patricias, componían un grupo activo y comprometido en
cuyos salones se formaban y difundían las distintas corrientes de opinión
política.[El salón de la familia Thompson, bajo la tutela de una mujer rica e
influyente, era considerado por quienes lo frecuentaban como un espacio
donde el quehacer político se desarrollaba en medio de una sociabilidad
refinada y culta que acogía por igual a canónigos, científicos, oidores, políticos
y militares encumbrados, junto a “los comandantes navales tanto ingleses
como franceses” -cosa que debió ser frecuente dado que Martín Thompson
era capitán del puerto de Buenos Aires-, “los cónsules generales y… enviados y
diplomáticos extranjeros… que daban a conocer sus opiniones y juicios” en
relación a los asuntos de actualidad “con la certidumbre que harían su
camino”y llegarían a buen término.