El documento proporciona información sobre ecocardiografías. Explica que una ecocardiografía transtorácica no implica riesgos y puede causar ligera molestia al aplicar el transductor sobre el pecho. También describe los diferentes tipos de ecocardiografía, cómo se realizan, cómo prepararse y qué esperar.
1. FISIOLOGIA RESPIRATORIA APLICADA A LA VENTILACIÓN MECÁNICA.pptx
Ecocardiografía: Prueba no invasiva para evaluar el corazón
1. En una ecocardiografía transtorácica no se corren riesgos. Puedes sentir alguna molestia cuando se apoya el transductor
firmemente sobre el pecho. La firmeza es necesaria para obtener las mejores imágenes del corazón.
Si te realizan una ecocardiografía transesofágica, puedes sentir irritación en la garganta durante algunas horas luego de realizada
la prueba. El tubo puede raspar el interior de la garganta, pero esto no sucede con frecuencia. Durante la prueba, se controlará
el nivel de oxígeno para detectar cualquier problema respiratorio causado por el sedante.
Durante una ecocardiografía de esfuerzo, la ejercitación o los medicamentos, no la ecocardiografía en sí, pueden causar latidos
irregulares de manera temporal. Es poco frecuente presentar alguna complicación grave, como un ataque cardíaco.
Cómo prepararse
Alimentos y medicamentos
No se requiere ninguna preparación especial para un ecocardiograma transtorácico estándar. Puedes comer, beber y tomar
medicamentos como lo harías normalmente.
Si te realizas un ecocardiograma transtorácico, el médico te pedirá que no comas por varias horas antes de la prueba.
Otras precauciones
Si te realizan una ecocardiografía transesofágica, no podrás conducir un automóvil después del procedimiento, a causa de los
medicamentos que probablemente te aplicarán. Asegúrate de que alguien te lleve a tu casa.
Lo que puedes esperar
Durante el procedimiento
Una ecocardiografía se puede realizar en el consultorio del médico o en un hospital.
Para una ecocardiografía transtorácica estándar:
Tendrás que desvestirte de la cintura para arriba y recostarte sobre una cama o una camilla de examen.
El técnico colocará parches adhesivos (electrodos) sobre el cuerpo para ayudar a detectar y conducir las corrientes
eléctricas del corazón.
El técnico también aplicará un gel al transductor que mejora la conducción de las ondas sonoras.
El técnico moverá el transductor de un lado a otro sobre el pecho para registrar imágenes a partir de los ecos de las
ondas sonoras del corazón. Tal vez escuches un silbido pulsátil, que es el registro ecográfico del flujo de la sangre a
través del corazón.
Es posible que te pidan que respires de determinada manera o que gires sobre tu lado izquierdo.
Si te hacen una ecocardiografía transesofágica:
Te insensibilizarán la garganta con un aerosol o gel.
Te administrarán un sedante para ayudar a relajarte.
Se guiará un tubo que contiene el transductor por la garganta hasta el esófago y se ubicará para obtener imágenes del
corazón.
La mayoría de las ecocardiografías duran menos de una hora. Después de una ecocardiografía transesofágica, es posible que te
controlen durante algunas horas en el consultorio del médico o en el hospital.
Después del procedimiento
La mayoría de las personas pueden retomar sus actividades diarias normales después de una ecocardiografía.
Si la ecocardiografía es normal, no se necesitarán nuevas pruebas. Si los resultados son preocupantes, es posible que te deriven
a un médico especialista en enfermedades cardíacas (cardiólogo) para que te realice más exámenes.
Resultados
La información de una ecocardiografía puede indicar lo siguiente:
2. Cambios en el tamaño del corazón. El debilitamiento o los daños en las válvulas cardíacas, la presión arterial alta u
otras enfermedades pueden hacer que las cavidades del corazón se agranden o que las paredes del corazón se
engrosen de forma anormal.
Fuerza de bombeo. Las mediciones que se obtienen en una ecocardiografía incluyen el porcentaje de sangre que se
bombea de un ventrículo lleno con cada latido (fracción de eyección) y el volumen de sangre que bombea el corazón en
un minuto (gasto cardíaco). Si el corazón no bombea suficiente sangre para satisfacer las necesidades del cuerpo,
pueden presentarse síntomas de insuficiencia cardíaca.
Daño del músculo cardíaco. Una ecocardiografía ayuda al médico a determinar si todas las partes de la pared cardíaca
contribuyen normalmente a la actividad de bombeo del corazón. Las áreas del corazón que se mueven con debilidad
pueden haber sufrido daños durante un ataque cardíaco o recibir muy poco oxígeno.
Problemas de las válvulas. Una ecocardiografía puede ayudar al médico a determinar si las válvulas cardíacas se abren
lo suficiente para permitir un flujo sanguíneo apropiado o si se cierran completamente para evitar la filtración de
sangre.
Defectos cardíacos. En una ecocardiografía se pueden observar problemas en las cavidades del corazón, conexiones
anormales entre el corazón y los vasos sanguíneos principales y defectos cardíacos complejos presentes en el
nacimiento
El ecocardiograma es una prueba diagnóstica fundamental porque ofrece una imagen en movimiento del corazón. Mediante
ultrasonidos, la ecocardiografía aporta información acerca de la forma, tamaño, función, fuerza del corazón, movimiento y
grosor de sus paredes y el funcionamiento de sus válvulas. Además, puede aportar información de la circulación pulmonar y sus
presiones, la porción inicial de la aorta y ver si existe líquido alrededor del corazón (derrame pericárdico).
Gracias al uso de los ultrasonidos para obtener las imágenes, el ecocardiograma es una prueba que no irradia al paciente (como
sí pueden hacerlo otras pruebas como las radiografías, TAC, etc). Otras ventajas que aporta es que no es una prueba dolorosa ni
produce ningún efecto secundario.
El ecocardiograma se obtiene a través de un aparato llamado ecocardiógrafo. Este aparato consta de 3 elementos básicos:
Transductor: dispositivo gracias al cual se puede captar las imágenes del corazón
Pantalla: en la cual se recogen las imágenes captadas por el transductor
Ordenador
Además se suelen colocar electrodos sobre el pecho del paciente para obtener un electrocardiograma al mismo tiempo que se
realiza la ecocardiografía, ya que aporta información para el especialista.
Las imágenes del ecocardiograma se pueden obtener en diferentes modos:
Modo M o unidimensional: se detecta una estrecha porción de corazón.
Bidimensional o 2D: ofrece una imagen de la anatomía del corazón (permite ver las diferentes estructuras) durante el
movimiento.
Doppler color: permite ver el flujo de sangre en el corazón y las arterias y medirlo.
3D: las imágenes que se consiguen son en 3 dimensiones. Se crea una imagen en 3D a partir de múltiples imágenes en 2
dimensiones.
Existen otros modos de mucha utilidad en la ecocardiografía: doppler pulsado, doppler continuo, etc.
El ecocardiograma que con mayor frecuencia se realiza es el ecocardiograma transtorácico, es decir, cuando se coloca el
transductor sobre el pecho del paciente.
Cómo se realiza el ecocardiograma
Se aplica un gel conductor bien sobre el pecho del paciente o directamente sobre el transductor. Se coloca el transductor sobre
el pecho del paciente, generalmente sobre el lado izquierdo del mismo. El cardiólogo moverá el transductor por el pecho del
paciente para ir obteniendo diferentes imágenes. La prueba suele durar entre 15 y 30 minutos, aunque en ocasiones puede
prolongarse.
El paciente
3. El paciente permanece tumbado y lo más tranquilo posible, sin requerirse ningún tipo de preparación especial previa a la
realización de la prueba ni acudir en ayunas. El ecocardiograma no es doloroso (puede sentir una ligera presión por el
transductor) ni produce ningún efecto secundario. Puede realizarse perfectamente a mujeres embarazadas sin ningún perjuicio
para el bebé, ya que es una prueba que no emite radiación. Durante el estudio es posible que se escuche algún ruido que
corresponda a la velocidad de la sangre dentro del corazón.
¿Qué se debe hacer después de la prueba?
El paciente podrá hacer vida normal e incorporarse a tus tareas laborales o domésticas diarias.
Tipos de ecocardiograma
Vamos a repasar ahora, de manera resumida, los tipos de ecocardiograma y las características de cada uno de ellos.
Ecocardiograma transtorácico
¿En qué consiste la prueba?
Para la visualización del corazón se colocará el transductor sobre el pecho del paciente, generalmente sobre el lado izquierdo. El
procedimiento se realizará según lo comentado previamente (arriba).
Ecocardiograma transesofágico
¿En qué consiste la prueba?
Consiste en visualizar el corazón por medio de un transductor acoplado a una sonda o tubo que se meterá a través de la boca y
llegará hasta el esófago, desde donde ya se podrán captar imágenes del corazón. Por tanto, es una técnica invasiva.
Generalmente es un estudio complementario al ecocardiograma transtorácico (primero se suele realizar este último), que
aporta información similar pero más detallada de ciertas estructuras, como son las válvulas cardiacas. Además, ayuda a
descartar la presencia de trombos (coágulos), tumores o alteraciones congénitas del corazón que no se pueden ver de forma
completa con un ecocardiograma transtorácico.
¿Cómo prepararse para la prueba?
Es necesario no haber ingerido alimentos sólidos ni líquidos (ayuno completo) en las 4-6 horas previas a la prueba debido a que
se debe introducir una sonda por el esófago. Tampoco se debe haber tomado ninguna medicación oral en ese periodo de
tiempo. Es preferible que el paciente acuda acompañado por un familiar o amigo puesto que en ocasiones es necesario
administrar un sedante para llevar a cabo la prueba. Si tiene dentadura postiza deberá quitársela en el momento de realizar la
prueba. La duración de la prueba es de 45-60 minutos.
¿Cómo se realiza la prueba?
Una vez en la sala de exploración, la enfermera podría dar un comprimido para chupar o aplicarle al paciente un spray
anestésico para la garganta. Una vez tumbado sobre la camilla, con el pecho descubierto, le colocarán unas pegatinas con cables
(electrodos) en el pecho para visualizar el electrocardiograma durante el estudio. Es posible que, además, la enfermera le
inyecte una medicación con efecto sedante en una vena de los brazos.
A continuación, el cardiólogo colocará la sonda dentro de la boca del paciente y le pedirá que trague para introducirla en el
esófago, lo que puede provocar algunas náuseas que desaparecerán una vez que la sonda esté dentro. Posteriormente, se
realizará el estudio, durante el cual, si se ha administrado el sedante, el paciente estará tan relajado que puede llegar incluso a
dormirse. Al levantarse, puede sentir cierta sensación de mareo.
El anestésico de la garganta puede producir tos y el spray resultar algo amargo. Al extraer la sonda es conveniente toser para
sacar las flemas que se hayan podido retener.
¿Qué se debe hacer después de la prueba?
No se debe tomar ningún alimento hasta pasadas unas 2 horas después de la exploración. No es aconsejable conducir en las
siguientes 2-4 horas del estudio si se ha recibido el sedante por vena. Las personas de edad avanzada deben estar acompañadas
durante las siguientes 2-4 horas.
Ecocardiograma de esfuerzo
¿En qué consiste la prueba?
4. Consiste en visualizar el corazón mediante ecocardiografía mientras se realiza un esfuerzo. Se utiliza con pacientes que no
pueden someterse a una prueba de esfuerzo convencional o para mejorar el rendimiento diagnóstico de esta.
¿Cómo prepararse para la prueba?
No se deben ingerir alimentos sólidos en las 2 horas previas al estudio. El médico que solicita la prueba le indicará al paciente si
debe tomar la medicación habitual o esta tiene que ser suspendida previamente a la realización del test.
¿Cómo se realiza la prueba?
El paciente estará tumbado sobre una camilla, con el pecho descubierto, donde se los electrodos para visualizar el
electrocardiograma y un manguito para la toma de la presión arterial. A continuación, se debe subir encima de un tapiz rodante
o una bicicleta estática, donde caminará durante unos minutos. Una vez terminado el esfuerzo, pasará con rapidez de nuevo a la
camilla. El cardiólogo le realizará registros con el ecocardiógrafo antes de hacer el ejercicio, durante su desarrollo e
inmediatamente después de finalizarlo.
Durante la prueba puede aparecer dolor torácico, fatiga o malestar que desaparecen en la fase de recuperación. Deberá avisar al
médico si aparece alguno de estos síntomas. La duración aproximada del estudio será de 30-60 minutos.
¿Qué se debe hacer después de la prueba?
Podrá hacer vida normal, incorporándose a sus tareas laborales o domésticas diarias.
Ecocardiografía de estrés farmacológico
¿En qué consiste la prueba?
Consiste en visualizar el corazón con ultrasonidos mientras se administra un fármaco que hace que el corazón trabaje con más
rapidez e intensidad. Es una prueba no invasiva que combina el uso del ecocardiograma transtorácico con la administración de
un fármaco. Generalmente el fármaco administrado es la dobutamina. Los efectos de la dobutamina son el aumento de la
frecuencia cardiaca (incrementa las pulsaciones) y el aumento de la fuerza de contracción del corazón (entre otros efectos). Con
el ecocardiograma normal se valora el corazón durante el reposo; con esta prueba se consigue estimular el corazón y ver cómo
trabaja durante el esfuerzo (cuando estamos en movimiento o realizando ejercicio). Primero se obtendrán imágenes con el
corazón en reposo y después tras administrar el fármaco, para así poder compararlas.
¿Por qué se solicita un ecocardiograma de estrés farmacológico?
El objetivo de esta prueba es ver si existen alteraciones en la contracción de las paredes del corazón, que en la mayoría de los
casos son secundarias a enfermedad de las arterias coronarias. Entre las indicaciones para solicitar esta prueba están:
Pacientes en los que se ha hecho una prueba de esfuerzo por sospecha de enfermedad coronaria y el resultado no ha
sido concluyente.
Pacientes que ya han tenido un infarto y en los que se desee valorar el riesgo.
Pacientes con lesiones en las arterias coronarias que ya son conocidas y, de forma previa a tratar estas lesiones, se
desee conocer cuál es la repercusión en la función del corazón de estas lesiones.
Ver si existe músculo cardiaco que todavía pueda recuperar su función después del tratamiento de las lesiones de las
arterias coronarias.
¿Cómo prepararse para la prueba?
El paciente no debe ingerir alimentos sólidos en las horas previas al estudio. El médico que solicita la prueba le indicará si debe
tomar la medicación habitual o si tiene ser suspendida previamente a la realización del test (normalmente si está tomando
tratamiento con betabloqueantes es necesario suspenderlo de 1-3 días antes de la prueba).
¿Cómo se realiza la prueba?
El paciente estará tumbado sobre una camilla, con el pecho descubierto. Se le pondrá un suero (gotero) en el brazo. A
continuación, se le colocarán los electrodos en el pecho para visualizar el electrocardiograma durante el estudio. Asimismo, le
pondrán un manguito para la toma de la presión arterial.
La prueba consta de 4 fases: cuando el corazón está en reposo, a bajas y altas dosis de dobutamina y la fase de recuperación.
Una vez se obtienen las imágenes normales del ecocardiograma (en reposo, sin fármaco), se realizarán varios registros
ecocardiográficos mientras se administra el fármaco.
5. Puede notar sensación de hormigueo facial, calor en la cara, dolor de cabeza, temblor, mareo, náuseas, palpitaciones (las cuales
casi siempre están presentes por el aumento de la frecuencia cardiaca) fatiga o dolor en el pecho durante algunos segundos. Se
debe comunicar al médico cualquier molestia o síntoma. La duración aproximada del estudio será de 45 minutos.
¿Qué se debe hacer después de la prueba?
Excepto si el médico te indica lo contrario, se podrá hacer vida normal e incorporarse a las tareas laborales o domésticas diarias.
Ecocardiografía de contraste
¿En qué consiste la prueba?
Mediante el uso de la ecocardiografía convencional, se introduce a través de una vena un contraste especial que permite ver
mucho mejor estructuras del corazón y los vasos sanguíneos.
¿Cómo debo prepararme para la prueba?
No precisa ninguna preparación especial y, por tanto, no es necesario acudir en ayunas, salvo que expresamente lo indique el
médico.
¿Cómo me realizarán la prueba?
El paciente estará tumbado sobre la camilla, desnudo de la cintura para arriba. Una enfermera le colocará una vía venosa en el
brazo por donde le introducirán el contraste. Le colocarán los electrodos para ver el electrocardiograma durante el estudio.
Luego, mientras la enfermera realiza varias inyecciones del contraste a través de la vía venosa, le pondrán el transductor en
diferentes partes del pecho para explorar desde varios planos el corazón y las válvulas. La inyección habitualmente no se nota,
así que no dude en comunicar cualquier sensación extraña. Durante el estudio es posible que se escuche algún ruido que
corresponde a la velocidad de la sangre dentro del corazón. Una vez finalizado el estudio, la enfermera te retirará la vía venosa y
le colocará un apósito (tirita).
La exploración no producirá ninguna molestia, salvo las derivadas de la punción venosa. La duración aproximada del estudio será
de 30-60 minutos.
¿Qué se debe hacer después de la prueba?
Podrá hacer vida normal e incorporarse a sus tareas laborales o domésticas diarias.
Indicaciones en soplos: La ecocardiografía Doppler es la técnica de elección para estudiar la existencia de cardiopatía
estructural (valvulopatía, cardiopatía congénita, etc.), por lo que debe realizarse en todos aquellos casos en los que, por
exploración física, se sospeche su existencia. La auscultación de un soplo es con frecuencia el primer hallazgo exploratorio que
sugiere la presencia de una cardiopatía. Aunque la mayoría de los soplos no significan la existencia de cardiopatía estructural,
algunos de ellos indican la presencia de patología cardiaca la cual debe confirmarse y evaluarse. Por tanto, los objetivos del
estudio ecocardiográfico deben ser: establecer la existencia de cardiopatía estructural, evaluar la severidad de la lesión y evaluar
el tamaño y la función de las cavidades cardiacas.
Indicaciones en dolor torácico: El ecocardiograma se indica en dolor torácico para establecer el diagnóstico correcto y
decidir conductas adecuadas para el manejo terapéutico.
Indicaciones en cardiopatía isquémica: 1. Ante dolor torácico y evidencia clínica de enfermedad isquémica, valvular,
embolismo pulmonar, afección pericárdica o miocardiopatía.
2. Dolor torácico sugestivo de origen isquémico, con ECG no diagnóstico y posibilidad de realizar ecocardiograma en la crisis
dolorosa.
Indicaciones en enfermedad pericárdica: Se indica ante sospecha clínica o patología que se asocie. Su realización es
imperativa en sospecha de taponamiento.
Indicaciones en miocardiopatías: Se indica para el diagnóstico de miocardiopatías. Se requieren revisiones periódicas,
sobre todo si se realizan cambios terapéuticos. Se indica, además, en toda persona familiar en primera línea de un paciente con
diagnóstico confirmado.
Indicaciones en arritmias, bloqueos y trastornos de la conducción.
Indicaciones en insuficiencia aórtica: Se indica para diagnóstico, evaluación de severidad y decisiones terapéuticas.
Todos los casos de insuficiencia aórtica moderada o severa requieren reevaluación con periodicidad mínima anual. Así mismo, se
6. indica reevaluación anual siempre que exista dilatación de raíz aórtica, aunque la insuficiencia aórtica sea leve. Finalmente, se
debe reevaluar ante cualquier cambio de situación funcional.
Indicaciones en estenosis mitral: Indicada para su diagnóstico, grado de severidad y decisiones en el manejo
terapéutico. Es indispensable una reevaluación ante el mínimo síntoma o cambio de situación funcional.
Indicaciones en prolapso valvular mitral: Se indica para el diagnóstico, requiere reevaluación anual si hay insuficiencia
mitral moderada o severa y se recomienda en familiares de primer orden con diagnóstico de prolapso valvular mitral.
Indicación en insuficiencia mitral: Se indica para diagnóstico, evaluación de grado de severidad, etiología y
repercusiones sobre el tamaño y la función ventricular izquierda. Se necesita reevaluación, como mínimo anual, en pacientes
con insuficiencia mitral moderada o severa o leve con datos de disfunción ventricular izquierda. Igualmente, se requiere su
reevaluación cada uno o dos años, en insuficiencia mitral leve sin disfunción ventricular izquierda.
Indicaciones en la evaluación de las prótesis valvulares y valvuloplastias: 1. Se indica en primera evaluación
postoperatoria. 2. Requiere reevaluación ante un mínimo cambio funcional. 3. Se recomienda una reevaluación anual.
Indicaciones en nefropatías crónicas e insuficiencia renal: Se indica para descartar cardiopatía urémica o cardiopatía
estructural adyacente.
Indicación en accidentes cerebrovasculares y accidente isquémico transitorio: Las patologías más frecuentes que
producen accidentes cerebrovasculares son: fibrilación auricular, infarto del miocardio, disfunción ventricular, enfermedad
valvular reumática y prótesis valvulares cardiacas.
Indicaciones en enfermedades autoinmunes: Se indica para descartar patología pericárdica y/o valvular asociadas. Se
hace reevaluación según hallazgos previos.
Indicación en pacientes que reciben medicamentos cardiotóxicos o quimioterapia: Se debe realizar previa y
posteriormente de forma periódica de por vida, para detectar de manera precoz complicaciones de miocardiopatía dilatada,
miocardiopatía restrictiva y pericarditis constrictiva.
Indicación en pacientes que reciben medicamentos cardiotóxicos o quimioterapia: Se debe realizar previa y
posteriormente de forma periódica de por vida, para detectar de manera precoz complicaciones de miocardiopatía dilatada,
miocardiopatía restrictiva y pericarditis constrictiva.
Indicaciones de ecocardiografía en psiquiatría: Ante sospecha de cardiotoxicidad por fármacos y en anorexia nerviosa
(la mayor mortalidad es cardiológica).
Indicaciones en patología vascular periférica. Aneurismas aórticos y disección aórtica: Se indica para descartar
cardiopatía estructural asociada. Es el método de diagnóstico que brinda información de la raíz aórtica, la aorta ascendente el
cayado y la descendente.
Indicación en el embarazo: Se requiere reevaluación en cardiópata previa y síndrome de Marfan