El documento describe la crisis que enfrentó Gran Bretaña en 1940 al quedar sola frente a la amenaza nazi tras la derrota de Francia. Sin embargo, el liderazgo de Winston Churchill marcó la diferencia al mantener una estrategia clara contra la adversidad, unir al país en torno a su estrategia, y rodearse de un equipo de expertos que complementaron sus habilidades como líder.