El documento describe la técnica de Widal, desarrollada en 1896 para diagnosticar la fiebre tifoidea. La técnica detecta anticuerpos contra los antígenos de la bacteria Salmonella typhi en la sangre de pacientes. Sin embargo, la prueba tiene limitaciones como falsos positivos y negativos debido a reacciones cruzadas con otras infecciones. El documento analiza las bases inmunológicas y la interpretación de los resultados de la prueba de Widal.
Influenza: Datos biológicos, históricos y clínicos, para comprender la enferm...
Tecnicas y hongos
1. Técnica de Widal
La reacción de Widal test basado en el principio de aglutinación antígeno-anticuerpo, fue
desarrollada por Georges Fernand Isadore Widal, prestigioso médico francés, en Junio de
1896, para el diagnóstico serológico de la fiebre tifoidea.
La aglutinación se considera como una reacción en 2 etapas. Cuando se añade el Ag al
suero se produce una combinación fisicoquímica en la que el Ac se fija a la superficie del
Ag; va seguido de una aglutinación en presencia de solución salina. El grado de
aglutinación depende de la composición de la solución salina y de la temperatura de la
reacción (7).
BASES INMUNOLÓGICAS DE LA REACCIÓN DE WIDAL:
La reacción de Widal demuestra la presencia de anticuerpos aglutinantes (aglutininas)
contra los antígenos H (flagelar) u O (somático) de la Salmonella typhi en el suero de los
pacientes con fiebre tifoidea.
Los anticuerpos contra el antígeno O aparecen luego de 6 a 8 días de iniciada la enfermedad
y desaparecen posteriormente entre 3 y 6 meses. Los anticuerpos contra el antígeno H
aparecen a los 8 a 12 días, alcanzando títulos más elevados con respecto a los anti-O y
pueden persistir por más de 1 año. Los anticuerpos contra el antígeno Vi aparecen más
tardíamente, a la tercera semana, sin embargo lo hacen en títulos bajos 1:10-1:20 con
respecto a los previos (3,6).
Interpretación de los resultados
El título del suero es la dilución más alta que muestra aglutinación frente al Ag.
En el curso de la enfermedad se produce un aumento en el título de aglutininas contra los
antígenos somático (O) y flagelar (H), lo que alcanza un mínimo durante la 3ra semana. Un
aumento del título al cuádruple o mayor en ausencia de inmunización contra la fiebre
tifoidea durante las últimas 4 a 6 semanas, debe considerarse sospechoso de infección.
Sin embargo, el clínico no puede esperar este tiempo para establecer un tratamiento, por lo
cual se debe considerar la posibilidad de esta entidad con un título aislado determinado,
mas los datos clínicos, pues ningún título aislado puede considerarse diagnóstico.
En los individuos no vacunados es significativo un título igual o superior a 1/160 para los
Ag O y H; pero en los vacunados, estos títulos pueden aumentar hasta 4 veces en el curso
de enfermedades febriles no relacionadas con la fiebre tifoidea, por lo que no debe
utilizarse la serología como único método de diagnóstico. La técnica inicial de Widal se ha
sustituido por una técnica más precisa que investiga por separado las aglutininas O y las H
aparecidas en el suero como respuesta a la estimulación creada por los antígenos (Ag)
somáticos O y flagelares H de la salmonella. Los títulos altos frente al Ag O significan
2. infección en la fase aguda; los títulos altos frente al Ag H corresponden a la fase de
convalecencia.
En general, se recomienda tener en cuenta la fiebre tifoidea con títulos Anti-O=1:160-200
y/o H =160-200 en zonas endémicas; en zonas no endémicas se debe pensar con títulos más
bajos Anti-O =1:50-100. Además, debemos saber que una reacción negativa no excluye el
diagnóstico de fiebre tifoidea en el contexto de un cuadro clínico compatible.
Esta prueba tiene sensibilidad moderada (negativa en el 30% de los casos demostrados
mediante cultivo), y además carece de especificidad (muchas cepas de Salmonella no
tifoideas tienen antígenos H y O con reacción cruzada; en la cirrosis se observa producción
inespecífica de anticuerpos, con falsa reacción positiva) (8,9).
Limitaciones de la reacción de Widal
La importancia de la aglutinación de Widal radica en ser un método serológico, rápido,
barato, y ampliamente conocido para el diagnóstico de la fiebre tifoidea; sin embargo, tiene
grandes limitaciones por reacciones antigénicas cruzadas con otras bacterias
(principalmente enterobacterias, incluyendo Salmonellas no typhi), parásitos, virus y
hongos, llevando con frecuencia al clínico a sobrediagnosticar síndromes febriles como
fiebre tifoidea (10).
Como ejemplo de estos falsos positivos, se ha descrito en fiebre paratifoidea por Paratyphi
A, títulos Anti-O y Anti-H =100 en un 53 y 22% de los pacientes, respectivamente (11).
En pacientes con malaria, estudiados en Nigeria, con hemocultivos negativos para
Salmonella typhi, se encontraron reacciones de Widal positivas con títulos 1:40, 1:80, y
1:160 en el 85, 12, y 3% de los casos, respectivamente (12). En la India, se reporto test de
Widal con títulos >1:100 en el 12, 17 y 24% de pacientes con malaria por Plasmodium
vivax, Plasmodium falciparum con bajas parasitemias, y altas parasitemias, respectivamente
(13,14). En Surat, se evidenciaron títulos Anti-O y Anti-H en el 15 y 10% de los pacientes
con malaria, respectivamente, informando que cuatro semanas después estos fueron
negativos (15).
Dentro de las limitaciones de la reacción de Widal, se debe tener en cuenta que hasta un 50
y 33% de los pacientes con fiebre tifoidea no tratada no presentan el aumento característico
en los títulos Anti-O y tienen negatividad en los títulos Anti-H, respectivamente (16).
En un estudio realizado en Vietnam se reportó que el 17 y 33% de los pacientes con fiebre
tifoidea y hemocultivos positivos tenían títulos Anti-O y Anti-H =100, respectivamente.
Otro elemento a considerar es la presencia de Anti-O y Anti-H en la población sana, lo cual
está determinado principalmente por la prevalencia de salmonelosis en una comunidad
determinada (17).
Los FALSOS POSITIVOS de la reacción de Widal se han descrito en las siguientes
entidades:
3. BACTERIANAS:
Salmonelosis no typhi (Serogrupos A-B-D).
Infecciones por Enterobacterias + Pseudomonas aeruginosa – Klebsiella sp. –
Escherichia coli – Citrobacter sp.- Yersinia enterocolitica.
Neumonías.
Infecciones urinarias.
Meningitis.
Tuberculosis pulmonar y miliar (18).
Brucelosis.
Endocarditis bacteriana.
Rickettsiosis.
Infecciones por Staphylococcus aureus.
Infecciones por Burkholderia pseudomallei.
Tétanos.
PARASITARIAS:
Malaria.
Amebiasis.
VIRALES:
Dengue.
Infección por VIH.
Hepatitis viral aguda y crónica.
HONGOS:
Cryptococosis (Meningitis).
NO INFECCIOSAS:
Hepatopatías crónicas.
Enfermedades autoinmunes (artritis reumatoide, lupus eritematoso sistémico)*.
Inmunización con antígeno de Salmonella.
Relacionadas a la estandarización de la prueba. Se han descrito más de 40
reacciones antigénicas cruzadas entre Salmonella typhi y otras enterobacterias
(19,20).
* 11.5% de los pacientes con enfermedades autoinmunes presentan un test de Widal
positivo.
En la reacción de Widal también hay que considerar los FALSOS NEGATIVOS como
toda prueba de laboratorio, entre sus causas tenemos:
4. 1. Antibioticoterapia temprana, la cual, retrasa la aparición de anticuerpos (descrito
principalmente con cloranfenicol) (3).
2. Utilización de corticosteroides (3).
3. Medición temprana de anticuerpos (primera semana) (17).
4. Inmunodeficiencias adquiridas y congénitas.
5. Portadores crónicos de Salmonella typhi.
6. Relacionadas a estandarización de la prueba.
Para el diagnóstico de la fiebre tifoide mediante la reacción de Widal hay que tener en
cuenta estas premisas:
La reacción de Widal no es el gold standard para el diagnóstico de fiebre tifoidea.
La reacción de Widal sobrediagnostica fiebre tifoidea teniendo en cuenta sus
numerosas reacciones cruzadas.
Para la interpretación de la reacción de Widal se debe conocer la prevalencia de la
fiebre tifoidea en una determinada área (21).
HONGOS
MICOLOGIA. HONGOS. MORFOLOGIA.
REPRODUCCION
La Micología es la rama de la biología que estudia los hongos y las enfermedades que ellos
producen. Hasta el siglo XVIII, los únicos hongos conocidos fueron los macromicetos que
desarrollan cuerpos fructíferos visibles (setas), pero gracias a la creación del microscopio
por Leeuwenhoek, se tuvo conocimiento de los hongos microscópicos.
Estos organismos adquirieron la categoría de reino y su estudio permitió conocer diversas
patologías asociadas a los hongos, determinadas sustancias excretadas por diferentes
géneros de organismos fúngicos y el desarrollo de variados antibióticos a partir de ellos.
Los hongos, organismos que pertenecen al reino de los protistas superiores, son
microorganismos eucarióticos. Carecen de clorofila, son aerobios obligados o facultativos.
Son heterótrofos, es decir que requieren de compuestos orgánicos preformados como fuente
de carbono. Habitan en medios con alta concentración de protones, ph 6,5 a 3,5. La mayoría
de los hongos son saprofitos, sólo algunas especies son patógenas para el hombre y los
animales.
Los hongos pueden cultivarse en el laboratorio. Comparándolos con las bacterias, sus
requerimientos nutricionales son más simples.
Un medio de cultivo para hongos requiere:
5. Fuente de carbono: pueden ser hidratos de carbono como glucosa, que adenás actúa
como fuente de energía.
Fuente de nitrógeno: pueden utilizar compuestos inorgánicos de nitrógeno como
cloruro de amonio, sulfato de amonio, nitrato de potasio o compuestos orgánicos
simples como urea.
Oligoelementos: Zn, Fe Ca.
Ph óptimo de crecimiento:oscila entre 4,5 a 5,5. este Ph confiere al medio un
carácter seletivo sobre todo cuando se quiere cultivar hongos y éstos se hallan
acompañados de bacterias.
Temperatura: creen entre 37 y 38 ºC, algunos desarrollan a temperatura ambiente.
El medio de cultivo que habitualmente se usa es el Agar Sabouraud.
Morfología de los hongos
Existen dos tipos de hongos: las levaduras y los mohos.
Las levaduras son hongos unicelulares, que se reproducen por gemación. Las levaduras
son generalmente, células mayores que las bacterias, aunque este parámetro puede variar
dependiendo de la bacteria y la levadura. Su tamaño es muy variable, este se encuentra
entre 1 y 5 micras de ancho y 5 a 30 de largo. Son ovoides, en general, aún cuando no se
descarta la posibilidad de hallarlas esféricas.
Los mohos son hongos pluricelulares. Estos crecen formando un filamento llamado hifa,
que puede alcanzar varios cm. de largo. Las hifas pueden ser tabicadas o continuas. Las
tabicadas se dividen en una cadena de células mediante la formación de paredes transversas
o tabiques. Las continuas carecen de dichos tabiques. Las hifas crecen por elongación de la
punta ó ápice. Durante el crecimiento las hifas se entrelazan densamente constituyendo el
micelio. Existe un micelio tabicado y uno continuo. Los tabiques presentan orificios que
permiten el libre movimiento de citoplasma y sus núcleos. El organismo completo (micelio)
es una estructura cenocítica, esto significa que es una masa citoplasmática continua
multinucleada.
Hay dos tipos de micelio, de acuerdo a su función:
Micelio vegetativo: formado por hifas que penetran en el medio de cultivo o
difunden en la superficie absorbiendo nutrientes.
Micelio aéreo: formado por hifas que se proyectan por encima de la superficie del
medio hacia el aire y que presenta la estructura reproductora del hongo, que son las
esporas, es el micelio de reproducción.
Ciertos hongos, entre ellos varios patógenos para el hombre, presentan dimorfismo, es decir
que pueden crecer como levaduras o como mohos, de acuerdo a las condiciones
ambientales.
6. Reproducción
Los hongos pueden llevar a cabo dos mecanismos de reproducción: asexual y sexual.
Reproducción asexual: incluye la gemación, la fragmentación y la formación de
esporas asexuales.
La gemación es el mecanismo de reproducción de las levaduras y algunos hongos
acuáticos. Aparece en la célula madre un brote o protuberancia a la cual pasa un núcleo.
Ambas células que dan separadas por un tabique, y el brote es separado por ruptura. La
espora pequeña que se genera se llama blastospora. Estas esporas se presentan en el género
Candida spp.
La fragmentación consiste en que las hifas se segmentan dando células rectangulares de
paredes gruesas, la espora que se genera se llama artrospora, característica del género
Coccidioides spp, donde las artrosporas producen pequeños apéndices que favorecen la
dispersión.
Las esporas asexuales pueden ser clamidosporas, conidiosporas o conidios y
esporangiosporas, son características para cada especie. Por ejemplo el género Penicillum
spp presenta conidiosporas.
Reproducción sexual: se lleva a cabo cuando faltan nutrientes en el medio o
cuando las condiciones de crecimiento se vuelven adversas, en cambio si en el
medio existen nutrientes y las condiciones son óptimas el hongo lleva a cabo la
reproducción asexual. La reproducción sexual supone la unión de dos núcleos,
proceso por el cual se forman las esporas sexuales, de las que existen tres tipos:
zigosporas, ascosporas y basidiosporas.
Las esporas de los hongos son en general mas sensibles a los agentes físicos y químicos que
7. las esporas bacterianas, y entre las esporas de los hongos, las sexuales son más resistentes
que las asexuales.
Existen hongos que sólo llevan a cabo la reproducción asexual, son los hongos
imperfectos o fungi imperfecti.
Generalidades
Los hongos son considerados tradicionalmente como perenencientes al reino vegetal
aunque también comparten con los protozoos de los protistas. De las aproximadamente 100
000 especies de hongos conocidas, solo una decena de ellas provoca el 90% de las
enfermedades humanas.
Los hongos son organismos eucarióticos que carecen de clorofila, y obtienen sus nutrientes
de las sustancias químicas que encuentran en la naturaleza, las cuales absorben a través de
su pared celular y su membrana citoplasmática.
Estructura y funciones
La célula micótica está compuesta por una pared celular única, una Membrana
citoplasmática, y un citoplasma que contiene retículo endoplasmático, núcleo, vacuolas de
depósito, mitocondrias y otros organelos propios de la célula eucariótica.
Algunas especies elaboran una cubierta externa mucoide, o una verdadera cápsula más
compacta. De los hongos patógenos al hombre, una especie, Cryptococcus neoformans,
elabora una cápsula de gran tamaño, con propiedades antigénicas y antifagocíticas.
La pared de la mayoría de los hongos está compuesta fundamentalmente de quitina, Los
polímeros de carbohidratos similar a la celulosa, y por beta-glucanos dispuestos en varias
capas, las cuales adoptan una estructura fibrilar.
Al igual que en las bacterias, la pared celular proporciona rigidez y fuerza y protege a la
célula de los cambios osmóticos, determinando a su vez, la forma del hongo.
La membrana citoplasmática se corresponde con la de una célula eucariótica típica. Regula
la entrada y salida de solutos y facilita la síntesis de la pared celular y del material
capsular.
Las células contienen, a veces, varios núcleos, lo cual parece conferirles una aparente
organización pluricelular pero los tabiques que parecen delimitar las diferentes células
están perforadas y el citoplasma es común, estableciéndose a través de él un flujo
continuo de organelos.
Las mitocondrias realizan los procesos energéticos y su número aumenta durante la
germinación.
Hongos filamentosos y levaduriformes
8. La mayoría de los hongos tienen una forma vegetativa llamada micelio, la cual consta de
una masa de citoplasma multinocleado encerrada dentro de un sistema de tubos rígidos y
ramificados, que son bastantes uniformes en cuanto a su diámetro. Cada uno de los tubos y
filamentos que componen el micelio, recibe el nombre de hifa. La porción del micelio que
se desarrolla dentro del sustrato de que se nutre el hongo de manera similar a las raíces de
las plantas, es el micelio vegetativo, mientras que aquel que sobresale de la superficie del
sustrato, es el micelio aéreo.
La capacidad del micelio aéreo de crecer indefinidamente determina que el hongo alcance
dimensiones macroscópicas (colonias), las cuales pueden alcanzar un gran tamaño, como
en el caso de las setas (champiñón).
A diferencia de los hongos filamentosos, las células de algunas especies son únicas ,
aisladas y tienen forma redondeada u oval, recibiendo el nombre de hongos levaduriformes,
los cuales se multiplican por la emisión de yemas (gemación) de menor tamaño que la
célula madre, las cuales pueden permanecer unidas, adoptar una forma alargada y semejar
hifas, constituyendo un pseudomicelio.
Cultivo y características del crecimiento de los hongos
Los hongos de importancia médica crecen en condiciones aeróbicas a una temperatura entre
22 y 37oc, en medios de cultivo que contengan compuestos nitrogenados y carbohidratos,
ajustados a un PH 6,0-6,5. Algunas especies patógenas requieren de factores de crecimiento
(vitaminas, aminoácidos) y de microelementos minerales.
En los medios de cultivo líquidos, muchos hongos crecen formando un sedimento
algodonoso en el fondo del recipiente o creando una película sobre la superficie. En los
medios sólidos forman colonias redondeadas que se expanden concéntricamente y pueden
adoptar un aspecto pulverulento, algodonoso, coriáceo, granular, lanudo, cremoso y otros.
Algunas especies elaboran pigmentos que colorean el micelio aéreo o el vegetativo y se
difunden en el medio del cultivo.
Formas de reproducción de los hongos
Los hongos se reproducen por procesos asexuales, sexuales y parasexuales.
La reproducción asexual puede ocurrir simplemente, como crecimiento y expansión de una
colonia, cuyo mecanismo intrínseco puede ser en los hongos levaduriformes una gemación
en que el núcleo se divide en dos porciones de diferentes tamaños, una de las cuales emigra
a la superficie de la célula, donde es rodeada por un abultamiento que destruye, se
estrangula por producción de un tabique transversal y forma una célula hija (blatospora), la
cual se desprende y permanece adherida.
9. Los hongos filamentosos pueden reproducirse mediante la formación de esporas asexuales,
las cuales son resistentes a las condiciones ambientales, y favorecen la sedimentación y la
propagación del hongo en la naturaleza, al ser transportadas por el aire.
Las formas de reproducción sexual siguen el mismo patrón que en otras formas biológicas,
donde la meiosis da como resultado un intercambio genético entre los gametos y después se
forman esporas sexuales, cuyas características se utilizan con fines taxonómicos.
La parasexualidad que se observa en ciertos hongos de importancia médica, consiste en la
formación de heterocariones o talos, que contienen núcleos haploides de dos genotipos
diferentes, surgidos por la fusión de dos hifas entre las cuales se produce intercambio de
material genético entre copas diferentes de la misma especie.
Clasificación de los hongos
Los grupos taxonómicos de mayor interés para la micología médica están incluidos en los
Ascomicetos, que comprenden algunos géneros de hongos patógenos al hombre, en los
cuales también existe la reproducción sexual, además de la asexual que ya se conocía:
Trichophyton, Microsporum, Histoplasma, Blastomyces.
El resto de los patógenos pertenecen a los Deuteromicetos (hongos imperfectos), en los que
no se ha descubierto ningún tipo de Reproducción sexual|reproducción sexual: Candida,
Cryptococcus, Epidermophyton y otros.
Tipos de micosis
Las enfermedades producidas por hongos (micosis), han sido clasificadas según el sitio de
localización primaria, en cuatro grupos, aunque algunos autores emplean tres grupos, en
que unen a los dos primeros.
Queratomicosis o micosis superficiales: son las que afectan solamente la capa más
superficial de la piel y otras maneras: pitiriasis.
Dermatomicosis o micosis cutáneas: si afectan estratos más profundos de la piel, pelos y
uñas: epidermofitosis, candidiasis cutánea.
Micosis subcutáneas: como su nombre lo indica rebasan la piel en profundidad:
cromomicosis, micetoma.
Micosis profundas o sistémicas: cuando afectan diferentes órganos y sistemas:
histoplasmosis, aspergilosis, candidiasis sistémica, criptococosis.
Patogenia de la infección por hongos
10. Muchos hongos que producen enfermedad al hombre existen en forma saprofita en la
naturaleza y son adquiridos por contacto exógeno mientras que otros provocan infecciones
de carácter endógeno o son integrantes de la flora normal (candida), o se adaptan para
provocar infecciones persistentes (ciertos dermatofitos). La invasividad se debe a la
penetración de las hifas o de las células levaduriformes en la luz de los vasos sanguíneos o
linfáticos y a su transporte a distancia.
La respuesta del hospedero juega un papel importante en la patogenia de estas
enfermedades. Muchas personas son altamente resistentes a la invasión micótica y otras no.
Los anticuerpos que elabora el organismo contra los antígenos de los hongos, parecen no
ser protectores y solo son útiles para fines diagnósticos lo que hace pensar que la resistencia
específica del hospedero humano, está más bien vinculada a mecanismos de inmunidad
celular.
¿QUÉ ES UN HONGO?
Los hongos no son plantas ni animales, aunque se parezcan en algunas de sus
características tanto a las unas como a los otros. A las plantas, por ser organismos
sedentarios que se encuentran fijos a un sustrato y, mientras están vivos, no cesan de crecer.
A los animales, pues, aunque las células de los hongos poseen pared como las de las
plantas, las paredes celulares fúngicas son ricas en quitina, la misma sustancia que hace
duro el esqueleto externo de los insectos.
En realidad, los organismos que conocemos como hongos tienen diferentes orígenes en el
árbol de la vida, razón por la cual se distribuyen en tres distintos reinos. La mayoría, los
más familiares y reconocibles, conforman el reino de los hongos verdaderos (Fungi o
Eumycota). Otros se ubican en el mismo reino de las amebas, el llamado Protozoa, como es
el caso de los hongos mucilaginosos; y otros más, entre los que se cuentan ciertos mohos
acuáticos que parasitan peces, comparten un tercer reino, el denominado Chromista, con las
diatomeas, esas particulares algas microscópicas de curiosa simetría.
Se estima que existe más de un millón de especies de hongos en el planeta, pero tan sólo
unas 70,000 de ellas han sido descritas por los especialistas, lo cual hace evidente la
necesidad de contar con más científicos (micólogos o micetólogos) que estudien estos
organismos. Mientras tanto, muchas especies de hongos se han extinguido y otras se
encuentran amenazadas en todo el mundo. Esto es particularmente cierto en países
tropicales ricos en diversidad biológica como Colombia. Los hongos tienen distintos
hábitos de vida. Los hongos saprófitos, es decir descomponedores de materia orgánica,
cumplen una función ecológica de la mayor relevancia pues garantizan el reciclaje de la
materia muerta y, por lo tanto, la recirculación de sustancias nutritivas en los ecosistemas.
Los hongos parásitos, que viven sobre o dentro de otros seres vivos, obtienen su alimento
de éstos y llegan a producir enfermedad en su hospedero. Los hongos simbiontes que se
asocian de manera mutualista con otros organismos constituyen alianzas vivas de beneficio
11. mutuo como por ejemplo los líquenes (asociación de hongo y alga) y las micorrizas
(asociación de hongo y raíz de una planta), simbiosis estas de gran importancia en la
naturaleza en procesos de colonización de hábitats y de circulación de nutrientes.
Desde la perspectiva económica, los hongos ofrecen múltiples servicios, pues se utilizan
como alimentos, levaduras de la masa de pan, fermentadores en la producción de vino y
cerveza, en la maduración de quesos y en el control biológico de plagas agrícolas. Además,
como fuentes de sustancias que por su actividad biológica pueden ser de enorme utilidad en
medicina y en la bioindustria (eg. antibióticos) y como agentes para estimular el desarrollo
de las plantas (hongos formadores de micorriza). Sin embargo, también son dañinos cuando
actúan como parásitos de plantas y animales o cuando estropean estructuras de madera,
alimentos almacenados, libros y hasta obras de arte, amén de ser peligrosos si, por
desconocimiento, se consumen aquellos que tienen principios tóxicos o alucinógenos.
En el siguiente trabajo se presenta una clasificación lo mas completa posible del reino de
los hongos, desde la clase hasta los géneros. Esto nos permite tener una idea mas clara de la
gran diversidad de este reino.
12. CLASIFICACION DE LOS HONGOS
Después de las últimas modificaciones hechas en el Congreso Internacional de Micología
de 1994, donde se han introducido muchos cambios, el reino queda:
REINO FUNGI:
Phylum Chtridiomycota
Phylum Zygomycota
Phylum Ascomycota
Phylum Basidiomycota
Los otros ex integrantes del grupo fueron distribuidos en:
Reino Stramenopila:
Phylum Oomycota
Phylum Hyphochytriomycota
Phylum Labyrinthulomycota
Reino Protistas:
Phylum Plasmodiophoromycota
Phylum Dictyosteliomycota
Phylum Myxomycota
Phylum Acrasiomycota
Los hongos no son un grupo monofilético natural. La conclusión de que han tenido un
origen evolutivo separado, está basado en muchas observaciones. Se los agrupa solo con
13. finalidades prácticas hasta tener suficiente información de sus verdaderas relaciones
evolutivas.
Las características usadas para agruparlos, como su heterotrofismo, formación de esporas,
presencia de quitina en sus paredes y la falta de cuerpos complejos con órganos, pueden ser
el resultado de una evolución convergente y no de tener un antecesor común.
El estudio de la secuencia de ácidos nucleicos, mantiene la promesa (como en muchos
grupos) de proveer la información definitiva de su filogenia.
En las plantas se trata de seguir un orden natural, agrupándolas según las estructuras
involucradas en la reproducción sexual. En los hongos también, para identificarlos y
clasificarlos, es necesario contar con este tipo de estructuras; en caso contrario, al hallarse
solamente estructuras relacionadas con la reproducción asexual, tradicionalmente se los
clasificaba como Deuteromycetes.
Por razones prácticas, como se hace aún en la bibliografía básica, se siguen considerando a
"todos" los grupos tradicionales de "hongos", con su clasificación apenas modificada.
También al referirse a los grandes grupos, es común que se continúe utilizando la
terminología de Clase (v.gr. Ascomycetes, Basidiomycetes, Zygomycetes) incluyendo lo
que ahora corresponde a los distintos Phylum.
Quizá el grupo que mas se aleja de los hongos, cuya posición taxonómica es aun muy
discutida, es el de los hongos mucilaginosos (Myxomycetes). Caracterizados por un ciclo
de vida con una fase móvil y amorfa (mixameba). Según las condiciones de hidratación del
medio pueden interconvertirse con una fase flagelada (1 ó 2 flagelos) formando células en
enjambre. Cuando las condiciones son óptimas pueden reunirse de a dos para formar un
zigoto, que puede ser primero flagelado y luego ameboide. Luego este produce un
plasmodio plurinucleado. Al llegar a la madurez se convierte en uno o más esporóforos
típicos.
El otro grupo grande que también siempre resultó complejo para incluirlo en el grupo, es el
de los Oomycetes, que tenían como principal diferencia, la presencia de celulosa en sus
paredes. Además en su ciclo (también atípico), aparecían esporas sexuales móviles con un
par de flagelos: uno anterior en forma de cepillo y otro posterior en forma de látigo.
Phylum Chytridiomycota
Dentro de los que ahora consideramos reino Hongos, los Chytridiomycetes son los únicos
que producen células móviles en su ciclo de vida, aunque con un solo flagelo posterior en
forma de látigo.
Phylum Zygomycota
Entre los Zygomycetes quizá los mas conocidos sean algunos representantes del orden
Mucorales como Mucor o Rhizopus, pero en realidad el grupo tiene integrantes que
representan líneas evolutivas muy dispares.
14. Están caracterizados por un micelio aseptado, cenocítico, con septos en la base de las
estructuras reproductoras o septos secundarios. El nombre del grupo proviene de la
presencia en parte de su ciclo de una zigospora característica. Pero en todo el grupo
también es muy importante la reproducción asexual, incluso algunos sistemas clasificación
de partes del grupo, están basados en ésto.
Dentro de este grupo tenemos a un orden muy importante agronómicamente, el de las
Glomales, que serán tratadas en el tema micorrizas.
Phylum Ascomycota
Los Ascomycetes están caracterizados por la presencia en su ciclo de vida, de una célula
fértil, llamada célula ascógena, denominada asco, que producirá endógenamente 8
ascosporas (típicamente).
Esta célula ascógena proviene de un ascogonio y en general está dispuesta en una capa de
células similares y en estructuras características denominadas cleistotecio, peritecio o
apotecio.
Los representantes de este grupo prácticamente se encuentran poblando todo tipo de
hábitat, y pueden presentar cualquier tipo de forma de nutrición, ya sea saprobios, parásitos
o simbiontes.
Deuteromycetes (Hongos Mitospóricos)
Los mas conocidos quiza sean los principales degradadores de celulosa: Trichoderma y
Chaetomium. Aunque ampliamente conocidos son también: Aspergillus y Penicillium.
Las conidiosporas son mas conocidas como conidios, término utilizado para describir
esporas asexuales producidas especialmente por Ascomycetes, Basidiomycetes y algunos
Zygomycetes. Su morfología es diversa. Se distinguen dos tipos básicos:
El conidio tálico proviene directamente de la segmentación de los segmentos preexistentes
de hifas (por partición).
En el conidio blástico hay un alargamiento del conidio inicial antes de separarse por un
septo.
Phylum Basidiomycota
Los Basidiomycetes están caracterizados por la presencia de una célula fértil en su ciclo de
vida, llamada basidio, que produce exógenamente 4 basidiosporas (típicamente).
15. Normalmente originadas en tétrade, desde un basidio por medio de un esterigma que es una
prolongación del ápice del basidio, desde donde, generalmente, son violentamente
expulsadas, por lo que reciben el nombre de balistosporas (ver animación de este proceso);
aunque en Gasteromycetes las basidiosporas no son expulsadas violentamente, por lo que
se denominan estatismosporas.
Para asegurar la manutención del estado dicariótico heterocariótico del micelio secundario,
una buena parte de los Basidiomycetes presentan una estructura peculiar denominada
fíbula, la cual asegura que cada célula hija resultante, tenga la combinación original de
núcleos distintos y compatibles.