La coneja
Es la historia de una joven mujer que tuvo una infancia de austeridad y malos tratos, que de una u otra forma la llevaron a tomar decisiones que cambiarían su vida. El alimento que más consumía la familia para subsistir, era la pasta y, las lentejas por tratarse de productos baratos y rendidores, que la “coneja” llegó a aborrecer cuando creció. Por su inexperiencia e ingenuidad fue engañada en las relaciones afectivas, quedando como resultado la crianza de dos niños de padres diferentes. La muchacha con el tiempo se vio precisada a separarse de sus hijos por no contar con los medios suficientes para darles una vivienda y alimentación apropiada y digna. Ella trabajó vendiendo faroles, posteriormente se empleó como costurera, pero en eso no le fue bien, ya que no era lo suficientemente diestra y ágil manejando máquinas de coser, además de que pagaban muy mal. Por fin encontró un trabajo de su agrado, en el cargo de mesera en hoteles de prestigio, sin embargo, como trabajaba para empresas temporales la explotaban con un salario de miseria y jornadas laborales extenuantes. No sabía lo que era descansar un día festivo por lo que casi nunca pudo disfrutar y compartir con sus pequeños, y pocas veces tuvo la alegría de ir a un parque con ellos para jugar y comerse un helado. El mote de “coneja” se lo colocó un novio que tuvo, porque ella siempre estaba dispuesta a ayudar y escuchar a los demás, pero algunos se aprovecharon de su buena fe, maltratándola física y psicológicamente. Se trata de un cuento que no es cuento porque se basa en un caso de la vida real, que llevará al lector por lugares y acciones cargadas de emociones, por las que cualquier persona puede, o pudo haber atravesado, teniendo en cuenta las circunstancias en que se presentaron.
