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Escuela de Padres - Fútbol formativo
1. EL FÚTBOL EN LA EDAD INFANTIL
Y el papel de los padres
Prof. Iván Chaves Bermejo
2. Los niños son niños
• Los niños deben practicar deporte como un
complemento a su desarrollo integral como
persona
• En el caso en concreto del fútbol y otros deportes
de equipo, es una herramienta vital para la
socialización del menor
• El niño debe aprender, divertirse y disfrutar
jugando al fútbol… HAY QUE DEJARLO
CRECER
Prof. Iván Chaves Bermejo
3. Educar es difícil
• Todos los padres y madres desean lo mejor para
sus hijos
• No existe un “MANUAL DE INSTRUCCIONES”
que expliquen como educar a los hijos
• En ocasiones lo que hacemos creyendo que es
por el BIEN de nuestro hijo no es así
• Debemos ser un ejemplo positivo en todo, los
hijos tienden a IMITAR a los padres
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7. PASIÓN vs EDUCACIÓN
• El fútbol levanta tantas pasiones, que incluso a
un hijo recién nacido se le “IMPONE” ser hincha
del equipo de su papa, sin tan siquiera darle la
posibilidad de que elija cuando tenga capacidad
para ello.
• Por ello, muchos hinchas de un equipo lo son
por TRADICIÓN FAMILIAR, y no por la forma
de jugar el equipo u otros motivos menos
sentimentales
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8. PASIÓN vs EDUCACIÓN
• Tendemos a explicar a nuestros hijos lo que está
bien o mal… Menos cuando vemos un partidos
de fútbol en el que dejamos salir nuestros
instintos más primarios, e insultamos a arbitros
y rivales… Los niños tienden a imitar esas
conductas, y en ocasiones en vez de rectificar o
corregir… Reímos los comentarios e insultos que
el niño copia
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9. TIPOS DE PADRES DEL NIÑO
FUTBOLISTA
Prof. Iván Chaves Bermejo
10. TIPOS DE PADRES DEL NIÑO
FUTBOLISTA
¿QUÉ NOS TRANSMITE ESTA IMAGEN?
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11. TIPOS DE PADRES DEL NIÑO
FUTBOLISTA
¿Y ESTA?
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12. PADRES DESINTERESADOS
Son aquellos que no muestran mucho interés por la
práctica deportiva de sus hijos. No valoran lo mucho
que puede enriquecer a su hijo una actividad de este
tipo y no colaboran lo suficiente. Si pueden, hacen
que el niño se desplace con unos amigos que
también van al fútbol. No saben ni quién es su
entrenador, ni conoce a los compañeros de su hijo.
Les da igual que haga fútbol, violín y maracas. Lo
que pretenden es tenerlo ocupado en su tiempo libre
y quizá, de esta forma, tener tiempo para uno
mismo.
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13. PADRES EXCESIVAMENTE PROTECTORES
Especialmente madres pero también hay padres. Están muy encima
de su hijo preocupados de que no le pase nada. Le prepara la ropa
de entrenamiento en lugar de responsabilizarle de sus cosas. En los
partidos, acude corriendo cuando se hace daño y utiliza siempre
todo su ingenio para salvaguardar a su hijo de cualquier situación
desagradable. Convierten a sus hijos en deportistas blandos,
inmaduros y despistados.
Es un tipo de padre bastante frecuente en los campos de fútbol y que
hace mucho daño al niño sin darse cuenta de las consecuencias que
tiene su forma de actuar. En el fondo todo eso lo hacen porque les
quieren demostrar lo mucho que les quieren. Pero se equivocan
porque hay que saber aguantar y verles sufrir un poco porque eso les
hace mucho bien, les forma el carácter y les hace más fuertes para
afrontar su propia vida. No podemos tener siempre al niño entre
algodones.
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14. PADRE ENTRENADOR
Son padres empeñados en ayudar a su hijo transmitiendo toda su
experiencia del fútbol con el objetivo de llegar a ser un gran jugador.
Se comportan como si fueran entrenadores. Aprovechan todo
momento para dar instrucciones a sus hijos durante el partido o
fuera de él. Incluso dan consejos a los otros jugadores también.
Muchos de estos consejos, como es natural, no coinciden con los que
reciben sus hijos por parte del entrenador y se produce
un bloqueo importante porque no sabe a quién de los dos debe
hacer caso y el niño desea complacer a los dos.
Es bastante frecuente verlos hablar con los otros padres o directivos
sobre temas referentes a la organización y desarrollo del equipo en
momentos que no son los más adecuados y delante de jugadores del
equipo donde juega su hijo. Esto hace mucho daño al equipo y a los
hijos
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15. PADRE BARRA BRAVA
Son aquellos padres que permanecen durante todo el
partido como si estuvieran en las gradas de un estadio de
Primera División como hinchas apasionados. Insultos al
árbitro cuando se equivoca, al equipo rival, e incluso al
entrenador y jugadores de su propio equipo.
En ocasiones, el entrenador y directivos de la entidad
han intentado persuadirles de su comportamiento ya que
dan una mala imagen del club al que representan, pero
no hacen mucho caso porque piensan que no hacen nada
malo.
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16. PADRE EXCESIVAMENTE CRÍTICO
Son padres muy exigentes con sus hijos. Quieren que todo lo
haga perfecto y sólo le hace ver lo que hace mal y
constantemente le va indicando cómo debe corregirlo. Nunca
le comenta lo que hace bien. Nunca está satisfecho de lo que
hace su hijo, siempre quiere más y le critica constantemente
porque piensa que así conseguirá hacer de él un gran jugador.
Es de aquellos padres que piensan que su hijo es más de lo que
realmente es o puede ser y, sus exigencias le originan al hijo
un fuerte estrés cada vez que juega ya que no consigue
alcanzar lo que su padre le pide. Estos fracasos deportivos se
convierten frecuentemente en fracasos personales. Son padres
muy peligrosos por el gran daño que producen a sus hijos.
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17. PADRES QUE HACEN DE PADRES
Ceden su hijo al entrenador y entienden que parte de la
admiración que hasta ahora su hijo les destinaba, a partir de
ahora se habrá de repartir con el técnico. No se muestran
competitivos con sus hijos y no relativizan las victorias de sus
hijos con sus batallitas de juventud. Cuando los hijos se
sienten frustrados porque las cosas no han salido como se
esperaban, son los primeros en ayudarle a hacerle ver el lado
positivo de la situación. Estos padres, también se caracterizan
por mostrar autocontrol delante de sus hijos; únicamente así,
predicando primero con su ejemplo, pueden después exigir a
sus hijos una conducta deportiva. Refuerzan el esfuerzo, la
progresión y la diversión. Cuando no han visto el partido, lo
primero que preguntan es ¿te lo has pasado bien?, ¿ya te sale
mejor el revés?, ¿has hecho amigos?; en lugar de ¿has
ganado?, o peor aún, ¿por cuánto has perdido hoy?
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18. COMO DECÍAMOS AL PRINCIPIO
- No lo hacen con mala intención
- Buscan lo mejor para sus hijos
Pero….
SE EQUIVOCAN
EN LAS FORMAS
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19. ¿SABEMOS SI AL NIÑO LE GUSTA EL
FUTBOL?
Quizás al niño le guste otro deporte, pero
tendemos a volcar nuestro gustos sobre el niño,
y en algunos casos nuestras frustraciones.
El niño es niño, debe de jugar y aprender
jugando, cuando llegue a los 18-20 años, si
puede llegar a la élite, será fantástico, pero no
debemos buscar pequeños Messis o Ronaldos,
en donde sólo hay niños
Prof. Iván Chaves Bermejo