2. SISTEMA RESPIRATORIO. DEFINICIÓN
El sistema respiratorio está formado por las estructuras
que realizan el intercambio de gases entre la atmósfera y
la sangre. El oxígeno (O2) es introducido dentro del cuerpo
para su posterior distribución a los tejidos y el dióxido de
carbono (CO2) producido por el metabolismo celular, es
eliminado al exterior.
Además, interviene en la regulación del pH corporal, en la
protección contra los agentes patógenos y las sustancias
irritantes que son inhalados y en la vocalización, ya que,
al moverse el aire a través de las cuerdas vocales, produce
vibraciones que son utilizadas para hablar, cantar, gritar.
El proceso de intercambio de O2 y CO2 entre la sangre y
la atmósfera, recibe el nombre de respiración externa. El
proceso de intercambio de gases entre la sangre de los
capilares y las células de los tejidos en donde se localizan
esos capilares se llama respiración interna.
3. NARIZ Y FOSAS NASALES
La nariz es la parte superior del sistema respiratorio y varía en
tamaño y forma en diferentespersonas.Se proyecta hacia adelante
desde la cara,a la que está unida su raíz,por debajo de la frente,y
su dorso se extiende desde la raíz hasta el vértice o punta.
La parte superior de la nariz es ósea, se llama puente de la nariz y
está compuesto por los huesos nasales,parte delmaxilar superior
y la parte nasal del hueso frontal. La parte inferior de la nariz es
cartilaginosa y se compone de cartílagos hialinos: 5 principales y
otros más pequeños.
En el interior de la nariz se encuentra el tabique nasal que es
parcialmente óseo y parcialmente cartilaginoso y divide a la
cavidad nasal en dos partes llamadas las fosas nasales. La parte
ósea del tabique está formada por parte del hueso etmoides y por
el vómer y se localiza en el plano medio de las fosas nasales hasta
el 7º año de vida.Después suele abombarsehaciauno delos lados,
generalmente el derecho. La parte cartilaginosa está formada por
cartílago hialino y se llama cartílago septal.
Las fosas nasales se abren al exterior por dos aberturas llamadas
los orificios o ventanasnasales,limitados por fuerapor las alas de
la nariz, y se comunican con la nasofaringe por dos orificios
posteriores o coanas. En cada fosa nasal se distingue un techo,
una pared medial, una pared lateral y un suelo.
4. LARINGE
Es un órgano especializado que se encarga de la fonación
o emisión de sonidos con la ayuda de las cuerdas vocales,
situadas en su interior. Está localizada entre la
laringofaringe y la tráquea y es una parte esencial de las
vías aéreas ya que actúa como una válvula que impide que
los alimentos deglutidos y los cuerpos extraños entren en
las vías respiratorias. Está tapizada por una membrana
mucosa con epitelio estratificado escamoso no
queratinizado y su esqueleto está formado por 9 cartílagos
unidos entre sí por diversos ligamentos.
Tres cartílagos son impares: el tiroides, el cricoides y la
epiglotis y tres cartílagos son pares: los aritenoides, los
corniculados y los cuneiformes.
5. TRÁQUEA
Órgano de carácter cartilaginoso y
membranoso que va desde la laringe a los
bronquios. Es un ancho tubo que continúa
a la laringe y está tapizado por una mucosa
con epitelio seudoestratificado columnar
ciliado. La luz o cavidad del tubo se
mantiene abierta por medio de una serie de
cartílagos hialinos (16-20) en forma de C con
la parte abierta hacia atrás. Los extremos abiertos de los
anillos cartilaginosos quedan estabilizados por fibras
musculares lisas y tejido conjuntivo elástico formando
una superficie posterior plana en contacto directo con el
esófago, por delante del cual desciende, lo que permite
acomodar dentro de la tráquea las expansiones del
esófago producidas al tragar. Termina a nivel del ángulo
esternal y de la apófisis espinosa de la 4ª vértebra torácica,
al dividirse en los bronquios principales derecho e
izquierdo. El arco o cayado de la aorta en un principio es
anterior a la tráquea y luego se coloca en su lado
izquierdo.
6. BRONQUIOS
Los bronquios principales son
dos tubos formados por anillos
completos de cartílago hialino,
uno para cada pulmón, y se
dirigen hacia abajo y afuera
desde el final de la tráquea
hasta los hilios pulmonares por
donde penetran en los
pulmones.
El bronquio principal derecho
es más vertical, corto y ancho
que el izquierdo lo que explica que sea más probable que
un objeto aspirado entre en el bronquio principal derecho.
Una vez dentro de los pulmones, los bronquios se dividen
continuamente, de modo que cada rama corresponde a un
sector definido del pulmón.
Cada bronquio principal se divide en bronquios lobulares
que son 2 en el lado izquierdo y 3 en el lado derecho, cada
uno correspondiente a un lóbulo del pulmón. Cada
bronquio lobular se divide, a su vez, en bronquios
segmentarios que corresponden a los llamados
segmentos pulmonares, cada uno de los cuales tiene sus
propios bronquio, arteria y vena segmentarios. Los
bronquios segmentarios, a su vez,se dividen en bronquios
más pequeños o bronquíolos.
7. BRONQUIOLOS Y ALVÉOLOS PULMONARES
Los bronquiolos son las pequeñas
vías aéreas en que se dividen los
bronquios llegando a los alvéolos
pulmonares.
No poseen cartílagos, la pared es
únicamente musculatura lisa.
Los alvéolos pulmonares son los
divertículos terminales del árbol
bronquial, en los que tiene lugar el intercambio gaseoso
entre el aire inspirado y la sangre. Son pequeños sacos en
donde se produce la hematosis, proceso en cual los
glóbulos rojos absorben oxígeno y se liberan del dióxido
de carbono.
8. LOS PULMONES
son los órganos en los cuales la sangre recibe oxígeno
desde el aire y a su vez la sangre se desprende de dióxido
de carbono pasando éste al aire.
Ambos
pulmones son
órganos
respiratorios
que se
encuentran a
ambos lados
del corazón
rodeados por
las cavidades
pleurales
derecha e
izquierda.
Las arterias pulmonares llevan sangre desoxigenada a los
pulmones desde el corazón y una vez oxigenada, retorna
de nuevo al corazón a través de las venas pulmonares.
La función de los pulmones es realizar el intercambio
gaseoso con la sangre, por ello los alvéolos están en
estrecho contacto con capilares. En los alvéolos se
produce el paso de oxígeno desde el aire a la sangre y el
paso de dióxido de carbono desde la sangre al aire.
Las venas pulmonares recogen la sangre oxigenada desde
los pulmones y la transportan a la aurícula izquierda del
corazón. Por su parte, las venas bronquiales recogen la
sangre venosa procedente de los bronquios y la llevan a la
vena ácigos (la derecha) y la vena hemiácigos (la
izquierda).
9. EL DIAFRAGMA
Como todo músculo, puede contraerse y relajarse. En la
inhalación, el diafragma se contrae y se allana, y la cavidad
torácica se amplía. Esta contracción crea un vacío que
succiona el aire hacia los pulmones (inhalación). En la
exhalación, el diafragma se relaja y el aire es expulsado de
los pulmones.
10. APARATO CIRCULATORIO
El aparato circulatorio o
sistema circulatorio es la
estructura anatómica
compuesta por el sistema
cardiovascular que
conduce y hace circular la
sangre. En el ser humano, el
sistema cardiovascular está
formado por el corazón, los
vasos sanguíneos (arterias,
venas y capilares) y la
sangre.
La función principal del
aparato circulatorio es la de
pasar nutrientes (tales
como aminoácidos,
electrolitos y linfa), gases, hormonas, células sanguíneas,
entre otros, a las células del cuerpo, recoger los desechos
metabólicos que se han de eliminar después por los
riñones, en la orina, y por el aire exhalado en los
pulmones, rico en dióxido de carbono (CO2). Además,
defiende el cuerpo de infecciones y ayuda a estabilizar la
temperatura y el pH para poder mantener la homeostasis.
Otra función importantísima es la circulación pulmonar, un
recorrido a través de los pulmones, donde se oxigena la
sangre; y la circulación sistémica, el recorrido por el
cuerpo para proporcionar sangre oxigenada. También el
sistema digestivo funciona con el circulatorio para
proporcionar los nutrientes que el sistema necesita para
mantener el bombeo del corazón.
11. Podemos considerar el aparato circulatorio como un
sistema de bombeo continuo, en circuito cerrado, formado
por:
Motor:
Corazón.
Conductos o vasos sanguíneos:
Arterias.
Venas.
Capilares.
Fluido:
Sangre.
Corazón: El corazón es un
músculo hueco, situado en
el interior del tórax entre
ambos pulmones; está
dividido por un tabique en
dos partes totalmente
independientes, izquierda y
derecha. Ambas partes
presentan dos cavidades
superiores llamadas
aurículas y otras dos
inferiores, los ventrículos.
Como una bomba, impulsa la
sangre por todo el
organismo. Realiza su
trabajo en fases sucesivas. Primero se llenan las cámaras
superiores o aurículas, luego se contraen, se abren las
válvulas y la sangre entra en las cavidades inferiores o
ventrículos. Cuando están llenos, los ventrículos se
contraen e impulsan la sangre hacia las arterias. El
corazón late unas setenta veces por minuto y bombea
todos los días unos 10.000 litros de sangre.
12. Las Arterias
Los vasos sanguíneos que
transportan la sangre fuera del
corazón son las arterias. Son los
vasos sanguíneos más gruesos,
con paredes musculares que se
contraen para mantener el
movimiento de la sangre del
corazón a través de todo el
cuerpo. Son vasos gruesos y
elásticos que nacen en los
Ventrículos aportan sangre a los
órganos del cuerpo por ellas
circula la sangre a presión
debido a la elasticidad de las
paredes.
Del corazón salen dos Arterias :
Arteria Pulmonar que sale del Ventrículo derecho y lleva la
sangre a los pulmones.
Arteria Aorta sale del Ventrículo izquierdo y se ramifica, de
esta última arteria salen otras principales entre las que se
encuentran:
Las carótidas: Aportan sangre
oxigenada a la cabeza.
Subclavias: Aportan sangre
oxigenada a los brazos.
Hepática: Aporta sangre
oxigenada al hígado.
Esplénica: Aporta sangre
oxigenada al bazo.
Mesentéricas: Aportan sangre oxigenada al intestino.
Renales: Aportan sangre oxigenada a los riñones.
Ilíacas: Aportan sangre oxigenada a las piernas.
13. Las Venas
Son vasos de paredes
delgadas y poco elásticas que
recogen la sangre y la
devuelven al corazón,
desembocan en las Aurículas.
Una vena es un conducto o
vaso sanguíneo que se
encarga de llevar la sangre de
los capilares sanguíneos hacia
el corazón. Por lo general
transporta desechos de los
organismos y CO2, aunque
algunas venas conducen
sangre oxigenada (como la
vena pulmonar). A diferencia
de las arterias, la ubicación precisa de las venas varía
mucho de individuo a individuo. Las venas, por otra parte,
se encuentran ubicadas a un nivel más superficial que las
arterias (es decir, más cerca de la piel). Otra diferencia
entre las venas y las arterias es que las primeras presentan
una pared de menor espesor.
Las venas
están
compuestas
por tres
capas: una
externa
(también
llamada
adventicia),
una media
(muscular) y
una interna
(endotelial).
14. Los Capilares
Son vasos sumamente delgados en que se dividen las
arterias y que penetran por todos los órganos del cuerpo,
al unirse de nuevo forman las venas. Los capilares
sanguíneos, al contar con una única capa de tejido,
posibilitan que se produzca un intercambio entre la sangre
y aquellas sustancias que se hallan a su alrededor. Se
puede diferenciar entre los capilares arteriales y los
capilares venosos. Los capilares arteriales llevan la
sangre oxigenada, mientras que los capilares venosos
transportan sangre desoxigenada.
15. La sangre
es el fluido que circula por
todo el organismo a
través del sistema
circulatorio, formado por
el corazón y los vasos
sanguíneos. De hecho, la
sangre describe dos
circuitos
complementarios. En la
circulación pulmonar o
circulación menor la
sangre va del corazón a
los pulmones, donde se oxigena o se carga con oxígeno y
descarga el dióxido de carbono. En la circulación general
o mayor, la sangre da la vuelta a todo el cuerpo antes de
retornar al corazón.
El torrente sanguíneo proporciona la completa circulación
de la sangre cada 22 segundos, lo que supone un caudal
aproximado de 800 litros a la hora (en una persona de 80
años, el caudal que ha circulado es de 560.640.000 litros ó
560.640 m3).
La circulación que parte del lado derecho asegura la
oxigenación de la sangre; se llama Circulación Pulmonar
o Circulación Menor. La circulación que parte del lado
izquierdo, asegura la circulación por todos los órganos y
vísceras del cuerpo humano; se llama Circulación Mayor.
Para movilizar la sangre, y que realice estos recorridos, es
preciso que el corazón tenga unos movimientos o latidos,
estos son: Contracción o sístole y dilatación o diástole.
16. El corazón actúa como una bomba aspirante-impelente,
con un número de latidos por minuto de 60-80 en el adulto
y un poco más rápido en el niño (80-100) y más aún en los
bebés (100-120).
Los latidos cardíacos se transmiten a las paredes de las
arterias produciéndose, por la presión, una distensión en
su pared elástica; esta distensión se puede apreciar al
palpar: es el pulso.
La sangre está contenida en el cuerpo en cantidad de unos
4,5 a 5,5 litros y está compuesta por:
Una parte líquida: el plasma.
Una parte sólida: las células sanguíneas. Estas células
son: glóbulos blancos o leucocitos, glóbulos rojos o
hematíes y plaquetas o trombocitos.
17. Glóbulos blancos
leucocitos. Son células
sanguíneas que ayudan al
cuerpo a defenderse de
las infecciones. Hay
muchos tipos de glóbulos
blancos. Algunos
tratamientos, como la
quimioterapia, pueden
reducir la cantidad de
estos glóbulos y dejar a la
persona más propensa a infecciones. Los glóbulos
blancos o leucocitos son las células sanguíneas que se
encargan de efectuar la respuesta inmunitaria, actuando
en la defensa del organismo contra antígenos y sustancias
extrañas. El origen de los glóbulos blancos se encuentra
en la médula ósea y en el tejido linfático. Se encuentran en
una concentración de 6.500 a 7.000 por milímetro cúbico
de sangre.
Hematíes o glóbulos
rojos. Su número es de
4 a 5 millones por
milímetro cúbico de
sangre. Transportan el
oxígeno. Los glóbulos
rojos, que carecen de
núcleo y mitocondrias,
albergan la
hemoglobina en su
interior. Esto quiere
decir que los glóbulos rojos se encargan de llevar oxígeno
al resto de las células y de los tejidos del cuerpo. Gracias
a su membrana flexible, los eritrocitos pueden atravesar
los capilares más estrechos, donde liberan el oxígeno.
18. Plaquetas o trombocitos, de 150.000 a 400.000 por
milímetros cúbicos de sangre. Intervienen en la
coagulación de la sangre. Estas células, de forma
irregular, carecen de núcleo. Las plaquetas se hallan en el
flujo sanguíneo y son claves en el desarrollo de los
coágulos que contribuyen a detener una hemorragia. Cada
plaqueta, por lo tanto, interviene en el proceso conocido
como hemostasia, que hace que la sangre no salga de los
vasos que permiten su circulación.
Esto quiere decir que,
si la cantidad de
plaquetas en un
organismo es
reducida, las
eventuales
hemorragias serán
profusas. En el otro
extremo, una cifra
elevada de plaquetas
provoca una tendencia
a la formación de
trombos y coágulos,
capaces de generar
obstrucciones en los
vasos y de provocar graves trastornos de salud (como una
embolia, un infarto o un ACV).
Las plaquetas son generadas en la médula ósea a través
de la trombopoyesis. Existe una hormona denominada
trombopoyetina que se encarga de regular esta
producción. Una vez que se hallan en la sangre, las
plaquetas se almacenan en el bazo, aunque también son
destruidas por este mismo órgano y por células presentes
en el hígado.