La violencia intrafamiliar es un problema social que afecta a muchas familias. Se aprenden roles de género desde una edad temprana que pueden conducir a la violencia. En México, la mitad de las mujeres han sufrido algún tipo de violencia familiar y la mayoría de los casos quedan sin castigo. Es importante crear conciencia sobre este problema y ofrecer recursos de apoyo a las víctimas.
4. La violencia
intrafamiliar es
una cuestión
privada o un
acontecimiento
que
supuestamente
no se presenta
en las buenas
familias.
Los participantes
hacen todo lo
posible para
ocultar la
violencia dentro
de su familia ante
extraños e
incluso suelen
reprobar, en
público la
conducta violenta
que permiten o
justifican en
privado.
La violencia
intrafamiliar es
un problema
internacional y
muchas
sociedades la
permiten de
una manera
abierta o
encubierta.
5. Es un hecho que la familia es donde por primera vez se
aprenden a abordar los conflictos, y donde se aprenden y
asignan identidades, roles y relaciones intergenéricas que
posteriormente se afianzan o desmarcan en la
socialización de las personas en los diferentes escenarios
fuera del contexto familiar.
7. Es importante reconocer que tanto mujeres
como hombres hemos sido educadas/os de
forma diferente en nuestra sociedad.
8. Tradicionalmente, a los
niños se les educa para
ser fuertes, duros y
competitivos, entre otros
rasgos.
A las niñas se les educa,
entre otras características,
para ser silenciosas, además
de depender de otros y
servirles.
Esto forma una identidad
de género que se traduce
en roles específicos:
Hombre y mujer.
9. La perspectiva de
género señala que las
mujeres y los
hombres han
aprendido
determinadas ideas
sobre su identidad y
sus relaciones con el
mismo/ distinto
género, y actúan
conforme estas
ideas.
11. Entendemos la VIF
como el abuso que
ejercen unos
miembros de la
familia sobre otros.
Puede ser física,
sexual o
psicológica, y
causar daño,
sufrimiento físico,
sexual y
psicológico
12. La violencia intrafamiliar, precisamente, permite observar en la
intimidad de la agresión, a hombres y mujeres, adultos/as y jóvenes,
divididos en una lucha violenta por la adquisición o preservación de
un espacio de poder, por una oportunidad para el ejercicio de la
autoridad, por un instante de dominio de las circunstancias, de los
recursos o de los sentimientos: claro está que en medio de una
intensa e infortunada manifestación de las inseguridades, dolores,
frustraciones y deseos de control de cada quien.
13. La violencia
intrafamiliar afecta
al 50 por ciento de la
población femenina.
Se puede encontrar
en siete de cada diez
hogares en el país.
99 por ciento de los
casos quedan
impunes.
Estudios del Banco
Mundial revelan que
en los en los últimos
años y por cada año
se registran un
aproximado 10 mil
500 muertes de
mujeres por
homicidio, suicidio y
accidentes en el
hogar.
15. La Comisión Nacional de
Derechos Humanos
(CNDH)
SAPTEL (Apoyo
psicológico por teléfono)
en el 53950660
VICTIMATEL en el
55755461
ADIVAC en el 56827969
Tech Palewi en el
55237444
16. Fundación para la equidad
en el 56590548
Colectivo Hombres por
Relaciones Igualitarias,
A.C. en el 56963498
Acción de los Cristianos
para la Abolición de la
Tortura en el 52647332
Centro de Derechos
Humanos Miguel Agustín
Pro Juárez en el 55356892
Programa de Atención
Integral a Sobrevivientes de
la Tortura en el 52647332
18. Nuestra sociedad tiene
costumbres arraigadas
que llevan a configurar
familias con predominio
patriarcal, el hecho de
que sea el hombre el que
organice y dirija una vida
en familia implica que la
mujer sea vista como una
persona menos
importante dentro del
desarrollo de este núcleo
social.
19. La violencia contra la
mujer puede hacerse
evidente desde el
noviazgo, con los gestos
celosos o posesivos de su
pareja, estas señales se
confunden pues tiende a
pensarse que son
muestras de un amor
excesivo, lo que en
realidad revela un
comportamiento
dominante.
20. La violencia en contra de la familia no sólo es
física, también puede ser psicológica o sexual.
De los episodios violentos a los cuales se
somete una mujer suele pensarse que ella es la
culpable; tiende a justificarse al cónyuge
agresor y se tiene la creencia de que el
maltrato no puede ser demandado o tratado,
solo evitado o reprimido.
21. La violencia, además de dejar serias secuelas físicas
que menguan la autoestima femenina y reprimen
su libertad de expresión, derivan también en serias
consecuencias psicológicas como inseguridad,
temor constante y zozobra, hechos que de por si le
impiden socializar y desarrollarse de manera
autónoma como ser humano libre y auténtico.