1. República Bolivariana De Venezuela
Instituto Universitario Politécnico “Santiago
Mariño”
Extensión Porlamar
Escuela: Arquitectura
Cód.: 41
Sección 1A
Cátedra: Semiótica de la Arquitectura
Ensayo
Docente: Autora:
Aguilar, Estela Pinto, Karen
C.I: 26.680.936
Porlamar, diciembre de 2016
2. Los orígenes de la semiótica, su definición y su aplicación en la
arquitectura
En sus orígenes, la Semiótica parte de dos tradiciones diferentes: la
de Ferdinand de Saussure (1857-1913) y la de Charles Sanders Peirce (1839-
1914); para Saussure la lengua es un sistema de signos que expresan ideas,
entonces se podía concebir una ciencia que estudie la vida de los signos en el
marco de la vida social, que establezca en qué consisten los signos y que leyes
los regulan, a dicha ciencia él decidió llamarla Semiología (del griego
semeion=signo). Por su parte, Sanders Peirce definió la semiótica como la
doctrina de la naturaleza esencial y de las variedades fundamentales de
cualquier clase posible de Semiosis, y que por Semiosis se entiende una
acción, una influencia que sea, o suponga, una cooperación de tres sujetos,
como por ejemplo, un signo, su objeto y su interpretante.
Partiendo de su origen, se puede definir a la semiótica como aquella
ciencia que se encarga de estudiar los signos, y como estos funcionan en la
sociedad, apoyándose en la búsqueda de la esencia, origen o bases de
cualquier significado.
Al hacer referencia a la semiótica en la arquitectura, esta comprende
tanto lo arquitectónico de cada edificación, como lo que supone o quiere
transmitir cada una de estas, por lo tanto, se define como arquitectónico, a
todo plan que modifica y altera el ambiente físico para satisfacer las
necesidades del ser humano.
A simple vista, se puede afirmar que los objetos arquitectónicos no están
hechos con la finalidad de comunicar, sino, con la de cumplir una función, pero
si se interpreta la función como comunicación, se puede decir que estos están
diseñados para comunicar la función a realizar, esta estimulación es un signo,
aunque no sea tan evidente. Por consiguiente, el signo en la arquitectura,
representa un significante cuyo significado es la función que lo hace posible,
entendiéndose por significante (la imagen) y el significado (la noción que se
tiene en la mente acerca de la imagen), es decir, el primero es lo observable,
tangible o perceptible, y el segundo, es el concepto que se le atribuye al
3. primero, el cual varía según los códigos que se utilicen para interpretar al
segundo.
Los códigos pueden estar llenos de significados sucesivos que se les
atribuyen, no solo por denotación sino por connotación. Denotación se define
como el significado propio de una palabra o una expresión sin matizaciones
subjetivas, mientras que la connotación es el "doble sentido" que se le atribuye
a las palabras y también el sentido figurado que se le da a las palabras según
el contexto. Se supone que la forma de los objetos arquitectónicos, denota su
función, pero también permite la connotación de otras funciones, un ejemplo
de esto, son iglesias convertidas en bibliotecas, o recintos de murales.
Es importante establecer qué es un código en arquitectura y conocer las
reglas de interpretación de los mismos. Los códigos están rigurosamente
definidos y clasificados en: tipológicos (tipo de edificación, iglesia, vivienda,
hotel), geométricos (curvas, líneas rectas, ángulos) estructurales (vigas,
soportes), sintáctico (elaboración de planos), distributivos (áreas públicas,
semiprivadas y privadas) entre otros. A pesar de esto, en arquitectura hay y
debe haber siempre lugar para la creación, utilizar los códigos ya establecidos
para crear unos nuevos, y transmitir o comunicar un mensaje, sentimientos o
sensaciones distintos a los comunicados en proyectos anteriores.
Si la semiótica se define como el estudio de un sistema de signos, así
mismo la arquitectura, signos que emplea el arquitecto para darle sentido a su
obra, para convertirla en arte, sin dejar de pensar siempre en el cumplimiento
de las funciones del usuario.