1. Poesía: Rimas,
hablante y
objeto lírico
Escuela Pdte.J osé ManuelBalmaceda YFernández
Departamento deLenguajey comunicación

2. *Rima consonante
Cuando la terminación de la
última palabra de dos o más
versos coincide.
Cantaba
Amaba.
*Rima asonante
Cuando la terminación de la última
palabra de dos o más versos
coincide solamente en la vocal final.
Comió
Cocinó
*Rima libre
Cuando no es consonante ni asonante.
Música
Árbol

3. Por tus ojos verdes yo me perdería,
sirena de aquellas que Ulises, sagaz,
amaba y temía.
Por tus ojos verdes yo me perdería.
Por tus ojos verdes en lo que, fugaz,
brillar suele, a veces, la melancolía;
por tus ojos verdes tan llenos de paz,
misteriosos como la esperanza mía;
por tus ojos verdes, conjuro eficaz,
yo me salvaría.
AMADO NERVO, “Madrigal”

4. Es la voz o narrador quien
expresa sus emociones,
pensamientos, experiencias
o reflexiones a través de las
palabras. Puede ser una
persona real o imaginaria.
Hablante lírico ¿Quién
cuenta la historia?
• Madre cuando sea grande
¡Hay que mozo tendrás!
• Yo no quiero que a mi niña
golondrina me la vuelvan.

5. Es la idea, situación,
emoción o sentimiento que
piensa el hablante lírico
cuando construye su poema.
Motivo lírico ¿Qué o
quién lo inspiró?
• Mi escuela es muy bonita
es un lugar de reunión
¡tan grande y calentita!
como lo es mi corazón.
• Cuando pienso en ello sonrió,
cuando se va me da pena ojalá
siempre lo tuviera

6. Es lo que motiva al autor a
crear un poema. Puede ser
una persona, objeto, animal,
cosa, situación o hecho.
Objeto lirico ¿Sobre
qué o quién es?
• Vosotras, las familiares,
inevitables golosas,
vosotras, moscas vulgares
me evocáis todas las cosas.
• Porque es áspera y fea,
porque todas sus ramas son
grises yo le tengo piedad a la
higuera.

7. —Pablo Neruda
“Chisporrotea en el aceite hirviendo la alegría del mundo:
las papas fritas entran en la sartén como nevadas plumas
de cisne matutino y salen semidoradas por el crepitante
Ámbar de las olivas.
El ajo les añade su terrenal fragancia, la pimienta, polen
que atravesó los arrecifes, y vestidas de nuevo con traje de
marfil, llenan el plato con la repetición de su abundancia
y su sabrosa sencillez de tierra.

8. Asomaba a sus ojos una lágrima
y a mis labios una frase de perdón;
habló el orgullo y se enjugó su llanto
y la frase en mis labios expiró.
Yo voy por un camino,
ella por otro;
pero al pensar en nuestro mutuo amor,
yo digo aún: «¿Por qué callé aquel día?»
Y ella dirá: «¿Por qué no lloré yo?
-Gustavo Adolfo Bécquer
Vocabulario
Enjugó: secó
Expiró: murió

9. En tanto que de rosa y azucena
se muestra el color en vuestro gesto,
y que vuestro mirar ardiente, honesto,
con clara luz la tempestad serena;
y en tanto que el cabello, que en la vena
del oro se escogió, con vuelo presto,
por el hermoso cuello blanco, enhiesto,
el viento mueve, esparce y desordena;
coged de vuestra alegre primavera
el dulce fruto, antes que el tiempo airado
cubra de nieve la hermosa cumbre.
Marchitará la rosa el viento helado,
todo lo mudará la edad ligera,
por no hacer mudanza en su costumbre.
-Garcilaso de la Vega, “Soneto XXIII”