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LA RELIGIOSIDAD Y SUS ABISMOS (Jacqueline).pptx

  1. LA RELIGIOSIDAD Y SUS ABISMOS EMIL M. CIORAN (Émile Michel Cioran) Rasinari , Rumania 1911 – Paris, Francia 1995
  2. Libro de Job. • El hombre frente al abismo de su conciencia de ser. • “¡Muera el día que nací, La noche que dijo “has concebido un varón!” en el capítulo 3 del libro de Job, el deseo de la no vida.
  3. • Los abismos de la fe en el cuerpo físico de Job y la fe inquebrantable que se manifiesta en la interpelación a Dios. • “Llevo clavadas las flechas del Todopoderoso y siento como absorbo su veneno, los terrores de Dios se han desplegado contra mí.” (Job 6, 4) • “Me he cosido un sayal sobre el pellejo y he hundido en el polvo mi hombría. Tengo la cara enrojecida de llorar y la sombra me vela los párpados; aunque en mis manos no hay violencia y es sincera mi oración.” (Job 16; 15-17) • “Te pido auxilio, y no me haces caso; insisto y me clavas la mirada. Te has vuelto mi verdugo y me atacas con tu brazo musculoso.” “Ya sé que me devuelves a la muerte, donde se dan cita todos los vivientes.” “Esperé dicha me vino desgracia; esperé luz, me vino oscuridad” (Job 30, 20 -21; 23; 26)
  4. E. M. Cioran 1911 -1995 Hijo de un sacerdote ortodoxo y de una mujer propensa a la música y la melancolía, Cioran nació en Rasinari, (Rumania) el 8 de abril de 1911. Licenciado en filosofía en la universidad de Bucarest, con una tesis sobre Bergson, continúa sus estudios en Berlín y envía artículos a diversas revistas rumanas. Regresa a Rumania donde trabaja como profesor, pero la experiencia no dura más de un año. En diciembre de 1937 se radica en Paris, ciudad en la que muere en 1995, y se acoge al estatuto de apátrida desde 1946 – único que le parece aceptable- , durante años alternará el rumano y el francés en la escritura hasta que en 1947 decide escribir sólo en francés.
  5. • La historia de las ideas es la historia del rencor de los solitarios. • Las fuentes de inspiración de un escritor son sus vergüenzas; quien no las descubra en sí mismo o las eluda está condenado al plagio o a la crítica (ref. Job) • Si Nietzsche, Proust, Baudelaire o Rimbaud sobreviven a las fluctuaciones de la moda, se lo deben a la gratuidad de su crueldad, a su cirugía demoníaca, a la generosidad de su hiel. Lo que le permite durar a una obra, lo que le impide envejecer, es su ferocidad. ¿Afirmación gratuita? Considérese el prestigio del Evangelio, libro agresivo, libro venenoso entre todos. • EMILE CIORAN
  6. • La búsqueda del signo en detrimento de la cosa significada; el lenguaje considerado como un fin en sí mismo, como rival de la “realidad”; la manía verbal, incluso en los filósofos; la necesidad de renovarse a nivel de las apariencias;… características de una civilización en que la sintaxis prevalece sobre lo absoluto y el gramático sobre el sabio.
  7. Nunca se criticará demasiado al siglo XIX por haber favorecido esa ralea de glosadores, esas máquinas de leer, esa malformación del espíritu que encarna el Profesor – símbolo de la decadencia de una civilización, de la degradación del gusto, de la supremacía del trabajo sobre el capricho. Ver todo desde el exterior, sistematizar lo inefable, no mirar nada de frente, hacer el inventario de los proyectos de los demás… Todo comentario a una obra es ramplón o inútil, pues todo lo que no es directo es nulo. En el pasado, los profesores se consagraban con preferencia a la Teología; al menos tenían la excusa de enseñar lo absoluto, de limitarse a Dios, mientras que ahora nada escapa a su competencia asesina. Llega siempre el momento en que el escéptico , tras haberlo cuestionado todo, no tendrá ya de qué dudar; será entonces cuando realmente suprimirá su juicio. ¿Qué le quedará? Divertirse o dormitar –la frivolidad o la animalidad.
  8. De la religión • Si creyera en Dios mi fatuidad no tendría límites: me pasearía desnudo por las calles… • No es Dios, sino el Dolor, quien disfruta de las ventajas de la ubicuidad. • En los momentos cruciales de la vida, la ayuda del cigarro es más eficaz que la de los Evangelios.
  9. El gran pecado del cristianismo es haber corrompido el escepticismo. Un griego jamás hubiera asociado el gemido a la duda. Retrocedería aterrorizado ante Pascal y más aún ante la inflación del alma que, desde la época de la Cruz, desvaloriza al espíritu.
  10. • ¿Cuántos saben lo que significa caer desde el abismo celestial a un abismo más profundo aún? Ninguna música ha entonado aún la ruptura con Dios… • En el fondo no hay más que Él y yo. Pero su silencio nos anula a los dos. Es posible que nada haya existido nunca. Puedo morir con la conciencia tranquila, pues no espero ya nada de Él. Nuestro encuentro nos ha aislado aún más. Toda existencia es una prueba suplementaria de la nada divina.
  11. • No estar en armonía con las cosas es un signo evidente de vitalidad espiritual, y ello es aún más cierto en el caso del desacuerdo con Dios. Reconciliarse con Él significaría dejar de vivir uno mismo para ser vivido por Él. Asimilándonos a Dios, desaparecemos; rechazándole, perdemos toda razón de existir.
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