2. BODEGA “LA CAROYENSE”
La bodega se encuentra sobre la arbolada y fresca avenida San Martín, que cruza
toda la larga colonia de Este a Oeste. A sólo diez cuadras de la Ruta Nacional 9,
se descubre la Bodega que invita a visitarla.
Su origen se remonta al año 1930 como una cooperativa de la zona, cuyos socios
eran todos inmigrantes friulanos. Por esa razón la fachada de la histórica bodega
es una copia de la Iglesia de la ciudad de Udine en Italia.
Al ingresar por este histórico edificio se encuentra el salón de ventas junto a fotos
de los primeros años de la bodega y de Colonia Caroya que permiten remontarse
en la historia.
Allí una amable guía acompaña el recorrido por las antiguas barricas, los nuevos
toneles y las modernas maquinas que generan de la uva el vino y de sus restos la
tradicional grapa italiana. Las uvas utilizadas en la bodega son de Colonia Caroya,
La Rioja y otros lugares para crear la exquisita variedad de vinos.
En el recorrido, también se visitan las instalaciones que ya no se usan como los
piletones bajo tierra donde se conservaba el vino y se puede sentir y revivir los
inicios de la cooperativa que relata la guía.
La cooperativa fue comprada por empresarios locales que mantienen el espíritu de
La Caroyense y la impulsan a la modernidad sin dejar de lado su origen.
Luego del paseo por las entrañas de la bodega, se retorna al lugar desde donde
partimos y es allí donde nos invitan a la degustación.
La bodega produce vinos varietales, frutales, lagrimilla, malbec, cabernet
sauvignon, syrah, moscato, grapa
y también uvas en grapa.
3. CHACINADOS “NORMA LÓNDERO”
Con más de 30 años de trayectoria, este establecimiento,
propiedad Norma Rosa Lóndero, es un emprendimiento
familiar de Colonia Caroya dedicada a la elaboración de
chacinados, dulces y encurtidos al estilo friulano.
Ubicado en la calle Don Bosco 3657 de Colonia Caroya,
Provincia de Córdoba, Argentina, su origen se remonta al
año 1972, cuando Doña Norma Lóndero y su esposo Don
Luis Ñañez deciden abrir una carnicería, que a la vez ofrecería los chacinados de
su propia producción.
Años más tarde, y fruto del incansable espíritu emprendedor de Norma, deciden
incorporar al negocio la elaboración y comercialización de dulces y encurtidos
siguiendo la tradición de sus nonos gringos.
Desde entonces los productos de Norma Lóndero encuentran mercados en
diferentes lugares del país a través visitantes, que en su paso por Colonia Caroya,
quedan cautivados por sus exquisitos sabores y su calidad artesanal.
En 1998, tras el fallecimiento de Don Ñañez, Norma Lóndero se puso al frente de
la empresa familiar, continuando la labor iniciada unas décadas atrás.
Durante muchos años el establecimiento fue conocido como La Casona de Norma
Lóndero, hasta fines de 2005, momento en el que toma el nombre de su dueña
Norma Lóndero, como marca registrada e inicia una nueva fase de desarrollo.
En la actualidad, si bien continua en su original local comercial en Colonia Caroya,
la empresa se encuentra en franco crecimiento, expandiendo los mercados para
sus productos.
Aquella original carnicería fue transformándose en una galería de productos
típicos, donde además de las mercaderías hechas por Norma se puede encontrar
toda una variedad de quesos, vinos, panificación casera y artesanías elaboradas
por otros productores artesanales de la zona.
En la búsqueda por difundir su tradición, Norma Lóndero participa activamente de
todas las fiestas típica que se organizan en Colonia Caroya, como así también en
Exposiciones y Eventos de Gastronomía y Turismo que se desarrollan en el
ámbito nacional.
4. Compromiso con lo artesanal y natural
Uno de los eslabones principales de la Filosofía Comercial
de Norma Lóndero, es su política de mantener el sistema
artesanal y natural de producción.
Todos los productos son el resultado del trabajo cuidadoso
de verdaderos artesanos, que ejecutan el proceso siguiendo
la tradición de los antiguos colonos friulanos, es decir, un
método mano de obra intensiva con muy poca participación
de máquinas a excepción de las herramientas tradicionales.
Asimismo, ningún producto contiene conservantes, ni colorantes, ni aditivos
químicos. En el caso de los chacinados (cuya marca registrada es Il Bom Salam)
se embute en tripa natural y no en tripa sintética y el estacionamiento es natural en
sótano, a diferencia de otros chacinados industriales que se maduran
artificialmente con productos químicos.
Productos
Chacinados Il bom salam ® y quesos caseros
Salame - Bondiola - Jamoncito - Lomito - Arrollado de cerdo - Queso de cerdo -
Leverwuss - Morcilla - Chorizos (cerdo) - Codeguines - Jamón crudo (de pierna
entera) - Quesos caseros
Dulces
Durazno, Higo, Zapallo, Ciruela, Tomate, Pera, Frutilla, Damasco, Naranja,
Sandía, Membrillo, Manzana, Pomelo, Berenjena, Leche y Miel . Frascos de 1 kg.
y de 500 grs.
Frutas en almíbar
Zapallos, Batatitas, Duraznos, Higos, Kinotos, Naranjas, Frutillas, Sandia cayote,
Tomates, Peras, Berenjenas, Uvas, Mamones. Frascosde 1 kg y .500 grs.
Encurtidos
Escabeche de Vizcacha, de Pavita y de Conejo - Escabeche de Verduras,
Morrones al natural, Pickles y Verduras "sotto oleo" - Lenguas en escabeche -
Aceitunas - Quesos al pickle. Frascos1 kg y .500 grs.
Sistema de comercialización mayorista y minorista
Los productos consignados se pueden adquirir en nuestro Salón de Ventas de
lunes a domingos de 8 a 20 hs. Para envíos a todo el país mediante pedido
telefónico o fax al teléfono de lunes a viernes de 8 a 20 hs. Pago mediante
depósito bancario.
5. ARCOR
Arcor fue fundada en 1951 en la ciudad de Arroyito, Córdoba (Argentina), con el
objetivo de elaborar alimentos de calidad accesibles para consumidores de todo el
mundo.
Con un crecimiento sostenido, la compañía se consolidó en un grupo industrial
que se especializa en la elaboración de alimentos, golosinas, galletas, chocolates
y helados.
Gestionando sus negocios de manera sustentable, Arcor desarrolla marcas líderes
que son preferidas por consumidores de los cinco continentes. Su amplia gama de
productos es de alta calidad y diferencial. Además, elabora productos que
contienen ingredientes funcionales y promueven un estilo de vida saludable.
En la actualidad, Grupo Arcor es la principal empresa de alimentos de Argentina,
el primer productor mundial de caramelos y el principal exportador de golosinas de
Argentina, Brasil, Chile y Perú y a través de Bagley Latinoamérica S.A., la
sociedad conformada con el Grupo Danone para los negocios de galletas,
alfajores y cereales en Latinoamérica, es una de las empresas líderes de la región.
Su liderazgo se construye a partir de un conjunto de pilares que caracterizan su
gestión:
Una consistente política de exportación y de reinversión permanente de
utilidades en desarrollos industriales, tecnológicos y comerciales.
La construcción de un modelo de distribución exitoso que se replica en la
región.
La integración vertical de sus insumos estratégicos en la Argentina.
La expansión de su importante patrimonio marcario.
El desarrollo de una gestión sustentable a través de la cual Arcor busca
crear valor económico, social y ambiental.
Grupo Arcor hoy:
Es la principal empresa de alimentos de Argentina.
Es el primer productor mundial de caramelos duros.
Es el principal exportador de golosinas de Argentina, Brasil, Chile y Perú.
Es una de las empresas líderes de la región a través de Bagley
Latinoamérica S.A., la sociedad conformada con el Grupo Danone para los
negocios de galletas, alfajores y cereales en Latinoamérica.
Exporta a más de 120 países de los cinco continentes.
Desarrolla marcas altamente reconocidas.
Emplea 21 mil personas de distintas partes del mundo.
Posee 40 plantas industriales: 30 en Argentina, 5 en Brasil, 3 en Chile, 1 en
México y 1 en Perú.
6. Tiene unidades productivas certificadas bajo las normas internacionales
ISO 9000 e ISO 14000.
Cuenta con 11 oficinas comerciales a lo largo de América, Europa y Asia, y
19 centros de distribución en Latinoamérica.
Desarrolló un modelo de distribución minorista considerado de categoría
mundial.
Está Integrada verticalmente en sus insumos estratégicos.
Es líder argentino en la producción de cartón corrugado.
Elabora el packaging de sus productos.
Es uno de los principales productores argentinos de leche.
Desarrolla sus negocios a través de una gestión sustentable.
Con esta breve introducción, les damos la bienvenida a nuestro sitio corporativo
donde podrán conocer todo acerca de Arcor.
CHOCOLATES
Un destacado crecimiento en América del Sur
Arcor participa en el negocio de chocolates desde el año 1970 y produce en 7
unidades industriales en Latinoamérica desde donde abastece las necesidades del
grupo en todo el mundo. Sus productos se distribuyen en
más de 100 países con una creciente participación en el
mercado de exportación que avala su calidad, su eficiencia
productiva y la fidelidad de sus consumidores.
Arcor es líder del mercado argentino de
chocolates y es la única compañía
presente en todas las categorías.
Asimismo, ocupa una de las principales posiciones en el
mercado chileno y es líder en el segmento de bombones.
En el resto de Latinoamérica, se caracteriza por haber tenido un progresivo
desarrollo en los últimos años.
En un negocio donde la fidelidad y confianza del consumidor son clave, la
empresa supo capitalizar una cartera de marcas de gran importancia para todas
las categorías de productos, entre las que se destacan Arcor, Bon o Bon, Cofler,
Tofi, Águila, Rocklets, Tortuguita, Nikolo, Hamlet, Cabsha, Sapito, Golpe y Chokko
Snack.
Arcor elabora una amplia variedad de chocolates tales
como bombones y bocaditos, tabletas, confitados,
chocolates para taza y productos de repostería,
chocolates infantiles, obleas bañadas, barras con
chocolate y productos estacionales para fechas relevantes
como Pascuas, Halloween y Navidad.
7. ESTANCIA JESUITICA DE CAROYA
La de Caroya fue la primera de las estancias organizadas por la Compañía de
Jesús, allá por 1616, y está ubicada en el límite oeste de la localidad de Colonia
Caroya, a 44 km. al norte de la ciudad de Córdoba.
En 1661, la hacienda fue adquirida por el fundador del Colegio Monserrat, el
Presbítero Ignacio Duarte y Quirós, quien logró transformarla en una pródiga tierra
con producción de maíz y trigo, frutas, vino, miel y algarrobo. Con esa producción
ayudó a sostener el establecimiento educativo y, además, usó el lugar como solar
veraniego de sus
alumnos.
Entre los años
1814 y 1816, las
guerras
independentistas
hicieron que
Caroya se
convirtiera en la
primera fábrica de
armas blancas del país, abastecedora de las puntas de bayoneta para el Ejército
del Norte.
La estancia pasó a manos del gobierno nacional y en 1876, en plena política de
promoción a la inmigración europea, el presidente Nicolás Avellaneda dispuso que
fuera el lugar de alojamiento de los inmigrantes provenientes de la región de Friuli,
en Italia. Esos mismos colonos organizarían luego el poblado, en cercanías del
casco de la estancia.
8. La mansión está estructurada alrededor de un patio central. El clanustro está
conformado por diez habitaciones, con muebles y objetos de diversas épocas, y
en la capilla, que data del siglo XVII, se encuentra la imagen de la Virgen de
Monserrat.
A raíz de su enorme valor histórico y arquitectónico, fue declarada Patrimonio
Cultural de la Humanidad por la Asamblea Anual de la UNESCO, en el año 2000.
La Casa Grande, abierta al este, mirando la salida del sol, con habitaciones
corridas comunicadas entre sí, frente a galerías entorno a un patio central al estilo
musulmán.
El ala sur, incluía comedor, refectorio, cocina y despensa.
La sabiduría de esta arquitectura está en la adaptación acertada al ambiente
climático del lugar, que permite una vida casi a la intemperie durante largas horas
del día y el recogimiento se hace al atardecer cumpliendo con la
jornada solar del trabajo. El destino de las habitaciones cubrían las
necesidades del hombre, descansar, alimentarse, recrearse”.
9. Cotidianamente las labores se desarrollaban fuera de la casa: el molino el granero,
el secadero, la huerta, el pesebre, la herrería, el tajamar.
En el ángulo sur este de la casa, la Capilla, desarrollo del oratorio.
Tiene acceso independiente desde el exterior, a través de un atrio de 10,60m de
largo por 4,65 m de ancho, enmarcado por un muro de piedra a la vista con juntas
alisadas. Una escalera de cuatro escalones, salva la diferencia de nivel entre atrio
y nave. Este acceso permitió su uso a los feligreses que no pertenecían a la casa
hasta finales del siglo XIX.
La capilla dedicada a la Virgen Negra de Monserrat, es
de una nave rectangular de 17,50 m de largo por 4,80
m de ancho. Sus paredes conformadas por piedras a la
vista de alrededor de 0,83 m de espesor, soportan una
techumbre cuya estructura está compuesta por once
cabreadas, alfajías y cabios de madera dura con
bovedillas a la vista.