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Plus de Diocesis Bilbao Elizbarrutia(20)

Formación para presbíteros en el acompañamiento al final de vida y duelo

  1. Formación acompañamiento final de vida y duelo Barria 14/3/2013
  2. Acompañar en el sufrimiento “Hacer acto de presencia”
  3. ¿QUE ES EL SUFRIMIENTO?
  4. “Los que sufren, no son los cuerpos, son las personas” E. Cassell “El sufrimiento y los objetivos de la medicina” NEJM, 1982.
  5. Presupuestos antropológicos 1. No podemos vivir sin sufrir y pasar sin ver el sufrimiento. 2. No podemos sufrir sin esperar: qué podemos hacer aquí y ahora. 3. No podemos esperar sin abrir la propia existencia al otro, a la comunicación.
  6. El sufrimiento es una experiencia universal  Pero es distinto de  SABER MANEJARLA EN NOSOTROS…  … O EN EL OTRO
  7.  Anteel sufrimiento la tendencia es OBJETIVAR  ¿Cómo?  Proyectando la propia experiencia
  8.  Sinembargo la experiencia de sufrimiento es SUBJETIVA Y varía de sujeto a sujeto  ¿Qué implicaciones tiene esto?  Nos obliga en el marco de la relación a EXPLORAR “ESA” EXPERIENCIA
  9. ¿Cómo?  Latentación es pensar que eso es cosa de psicólogos… … porque normalmente conlleva mucha angustia.  (Como si solventado la angustia se arreglase todo)  Pero, la realidad, es que al final, después de todo… … HAY PERSONAS QUE SIGUEN SUFRIENDO
  10. ¿Qué hago con ese sufrimiento?  Me genera “disconfort”…  Intento huir, evadirme…  Los médicos, llegados a este punto… “sedamos”
  11. Entonces, ¿por qué no se alivia?  Porque esta experiencia tiene que ver con las PREGUNTAS RADICALES  Preguntas que no hayan respuesta…  … son el indicador de que estamos ante una persona que SUFRE
  12. ¿Qué hacemos?  Intentamos OBJETIVAR  Buscamos la causa de su sufrimiento…  … pero la respuesta no está en la etiología  Sino en el “sentido de la justicia y la injusticia”  ¿Por qué a mi? ¿Qué he hecho?
  13.  Intentamos que deje de pensar en ello … no te preocupes, piensa en positivo, …  Empleamos técnicas de reestructuración del pensamiento…  ¿Porqué nos empeñamos en que la persona evite esa experiencia?
  14. Porque cuando estás ante un hombre desnudo en su condición humana, éste TOCA TU PROPIA DESNUDEZ
  15.  Unos quieren curar  Otros nos empeñamos en aliviar todos los síntomas (físicos o psicológicos)  No damos la oportunidad para hacer experiencia…  … para transitar en ella y  redimensionarla
  16. Y es que esto supone…  … una INMERSION en esa experiencia que posibilita TRANSCENDER  Esto tiene un nombre (que tiene no muy buena prensa)  Se llama: COMPASION
  17. ¿Qué es la COMPASION?  Es una estrategia comunicativa optima.  Es meterse a fondo en la experiencia humana fundamental  Es hacer un viaje en el que afrontar los MIEDOS  Dolor  Soledad  Miedo
  18. Dos visones del sufrimiento  Como PROBLEMA: amenaza importante para la existencia y ante la cual cree que carece de recursos para afrontarla.  Como MISTERIO, como condición existencial del ser humano (Homo patiens)  Conecta con la experiencia de LIMITE, con la sensación de “estar al límite”  LIMITE como CARENCIA, que recuerda nuestra condición limitada.
  19. CLAVES PARA ACOMPAÑAR NO PODEMOS SI PODEMOS Resolver problemas Acompañar personas Generar procesos de Tener respuestas búsqueda para no huir contundentes de las preguntas Provocar la apuesta por Describir en qué de-construir el consiste el sentido sinsentido
  20. CLAVES PARA ACOMPAÑAR  Respetar el derecho a no seguir luchando  Ayudamos al otro a poner palabra.  Le devolvemos la energía que recibimos.  ¡Ojo con los “si peros”!  Sino acogemos esa experiencia cuando nos la comparte no estamos legitimados para “sostener en el dolor”
  21. CLAVES PARA ACOMPAÑAR  Mientras hay ESPERANZA hay VIDA (Hope work)  Ante sus miedos, atentos a la LETRA,  Pero también a la MUSICA  (aquelloque conecta con lo simbólico y que es la puerta a lo trascendente)
  22. Las necesidades relacionales.  Seguridad  Autodefinción  Validación  De hacer impacto  Aceptación  De que el otro tome la  Confirmación de la iniciativa  De expresar amor experiencia
  23. Necesidad de ser creído y escuchado  No interrumpimos  Utilizamos animadores  Curiosidad  Desde el no saber  No focalizamos  No tenemos prisa Quizás nunca nadie le ha dejado hablar 15 minutos, nunca ha podido acabar de contar su historia
  24. Necesidad de ser protegidos en la expresión emocional  Ofrecer una figura estable y protectora.  No interrumpir las expresiones emocionales  Subrayarlas, facilitar su expresión  Ofrecer contención mediante la presencia.
  25. Necesidad de ser validados en la forma de afrontar la experiencia.  Encontrar un valor en las distintas maneras de afrontar la experiencia de sufrimiento.  Facilitar el nombrarlo.  Validar su función en el contexto de la vivencia subjetiva de esa experiencia.  No juzgar por más extravagante que sea la respuesta.
  26. Tanto da si el afrontamiento es de conexión o evitación, o es somático o comportamental o cognitivo o emocional. Si la persona lo está utilizando es porque tiene un sentido: señalar un asunto pendiente.
  27. Necesidad de definir la forma única de vivir esta experiencia  Poner voz a la defensa de autonomía de la persona sufriente: “¡Cómo es posible que nadie te dejara llorar!  Respetar su marco de referencia: no proyectar las propias necesidades.  Explorar y nombrar decisiones que no se pudieron tomar.  Validar la frustración experimentada por la invalidación de los deseos del doliente.
  28. Necesidad de reciprocidad  Autorevelación personal de algún aspecto… … de la historia, del impacto emocional, de los detalles del acontecimiento, de las consecuencias La necesidad de reciprocidad de las personas que han sufrido traumas o pérdidas importantes en su vida es proporcionalmente inversa al nivel de apoyo percibido
  29. Necesidad de sentir que tu dolor tiene un impacto en el otro  Escuchar atentamente  Mostrar resonancia a la historia  Dejarse sentir el impacto y expresarlo  Estar atentos a aspectos desautorizados.
  30. Necesidad de que el otro tome la iniciativa  Dirigir el proceso cuando la persona está perdida  Poner voz a lo que debería haber sucedido.  Dar voz a la falta de protección.  Identificar la necesidad y facilitarla (anticiparse)  Interesarse cuando abandonan  Recordar fechas.  Iniciar el contacto
  31. Necesidad de poder expresar el amor y la vulnerabilidad  Ofrecer espacio de seguridad, respeto, donde las expresiones de amor y vulnerabilidad sean acogidas y la persona pueda no sentirse avergonzada.  Respetar su necesidad de mostrar afecto y agradecimiento.  Permitirnos nuestra necesidad de mostrar afecto y agradecimiento.
  32. Las necesidades relacionales  Estas8 necesidades están presentes a lo largo de todo el proceso y la persona las vive con su familia, amigos, compañeros… son fruto del intento de manejar el dolor dentro de la relación con los demás.
  33. Hay 2 maneras de CALLAR  Desde el “no saber que decir”. INSEGURIDAD  Desde el poder del acompañante que permite al acompañado el contacto interno. SEGURIDAD
  34. La persona del acompañante
  35. Premisas  Acoger las propias heridas (vulnerabilidad)  Integrar las propias heridas (son un recurso)  Potenciar sus recursos sin negar sus heridas.
  36. El itinerario del acompañante  Identificar las propias heridas  Lograr la paz y la síntesis en nosotros mismos.  Aumentar la capacidad de pedir y recibir ayuda  Interiorizar esa zona oscura  No es eliminar el sufrimiento sino verlo como oportunidad  Posibilita no ser insensible  Coloca en simetría moral
  37. El “sanador herido” 4 modos para un camino
  38. El perfil del acompañante …  Una persona que ha cultivado su vida espiritual, tanto desde el conocimiento, como desde la experiencia vivida.  Tolerante con la diversidad, percibiéndola como una riqueza y no como una amenaza.  Buen conocedor de la tradición espiritual de su cultura, tanto desde el punto de vista religioso como desde el filosófico-ideológico.
  39. El perfil del acompañante …  Con capacidad para no huir y afrontar la angustia existencial y el desierto espiritual que en ocasiones inunda la situación de enfermedad.  Con capacidad para establecer una alianza terapéutica con el paciente que pueda motivar la reunión de lo disperso, la reconciliación de lo dividido y la liberación de lo alienado.  Dispuesto a trabajar en equipo, conociendo el lenguaje y metodología de los cuidados paliativos y participando como uno más en la dinámica asistencial (reuniones, proyectos...).
  40. El perfil del acompañante …  Testigo de la impotencia cuando a la pregunta que no tiene respuesta se le ofrece, al menos, una presencia significativa.  Con energía para convivir la espiritualidad del “equilibrio tenso”, sabiendo conjugar los tiempos de la vida, armonizando necesidades y deseos, implicándose desde la empatía pero sin perder perspectiva.  Dispuesto a formarse a fondo en estrategias de relación de ayuda – counselling.
  41. El perfil del acompañante …  Una persona sencilla capaz de desvelar la pequeñez de las cosas grandes y la grandeza de las cosas pequeñas, en un momento como el de la enfermedad terminal en el que se puede recuperar lo esencial.  Testigo de comunión, pues la salud espiritual remite siempre a la experiencia de comunidad.  Testigo de la esperanza, desde una dimensión trascendente de la vida.  Capaz de celebrar la vida en medio de tanto sufrimiento y muerte.
  42. Frases hechas que deshacen
  43. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “Es la voluntad de Dios”
  44. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “Hay que resignarse”
  45. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “Diospone a prueba a quienes más ama”.
  46. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “Hay que ser fuerte”.
  47. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “Mientras hay vida hay esperanza”.
  48. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “No cae una hoja sin que Dios lo quiera. Dios se lo ha llevado”.
  49. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “Dios aprieta, pero no ahoga”.
  50. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “Ofréceselo al Señor”.
  51. FRASES HECHAS QUE DESHACEN  “La idea de poder «ofrecer» las pequeñas dificultades cotidianas, que nos aquejan una y otra vez como punzadas más o menos molestas, dándoles así un sentido, era parte de una forma de devoción todavía muy difundida hasta no hace mucho tiempo, aunque hoy tal vez menos practicada. En esta devoción había sin duda cosas exageradas y quizás hasta malsanas…”. (Benedicto XVI, Spe Salvi, 40)
  52. FRASES HECHAS QUE DESHACEN “El tiempo todo lo cura”.
  53. FRASES HECHAS QUE DESHACEN  “Es el destino”.
  54. FRASES HECHAS QUE DESHACEN  “Es ley de vida”.
  55. FRASES HECHAS QUE DESHACEN  “Si tenía que suceder, mejor que fuera pronto”.
  56. FRASES HECHAS QUE DESHACEN  “Es mejor así”.
  57. FRASES HECHAS QUE DESHACEN  “Hay que olvidar”.
  58. FRASES HECHAS QUE DESHACEN  “Pídeseloa Dios, que puede hacer un milagro”.
  59. Factores sociales: la negación del duelo o los mitos falsos (James, Friedman, 2001)  Ya verás como el tiempo lo cura todo  Se valiente; hazlo por los demás  No llores más. ¿no ves que te estás torturando?  Distráete un poco, te irá bien.  El primer año es el peor, ya lo verás.  Es la vida, todos hemos de morir …  Mejor ahora que no dentro de …  Piensa que es peor para otros …  Tu tienes suerte que tienes otros hijos …  Resígnate, ha sido voluntad de Dios  Ahora está con los Angeles y no sufre
  60. FRASES HECHAS QUE DESHACEN EL LENGUAJE  Cuando basta una palabra, evitemos el discurso;  Cuando basta un gesto, evitemos las palabras;  Cuando basta una mirada, evitemos el gesto y  Cuando basta un silencio, evitemos incluso la mirada.
  61. VIVIR SANAMENTE EL SUFRIMIENTO
  62. VIVIR SANAMENTE EL SUFRIMIENTO  Luchar contra el sufrimiento injusto.  Eliminar el sufrimiento innecesario.  Mitigar, en lo posible, el sufrimiento inevitable.  Integrar el sufrimiento que no se puede superar.
  63. Integrar el sufrimiento que no se puede superar.  Relación sana consigo mismo.  Relación sana con los demás.  Relación sana con Dios.
  64. PURIFICAR EL LENGUAJE SOBRE EL SUFRIIMIENTO Una conversación con María José Carlos Bermejo
  65. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento María está ingresada a causa de unos dolores abdominales y en período de observación. Tiene 84 años. Desde muy joven ha vivido con una señora de su misma edad como criada. Siempre la llamaba: "Señora". Le dedicaba toda su atención, todo su interés de manera espontánea y libre. Una dependencia de la que ella misma dependía.
  66. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento Al pasar cerca de su habitación. Ya había tenido otros encuentros con María porque había pedido la comunión y me había hablado de la muerte de "su señora" hace unas semanas. Tienen la luz encendida y parece que hablan de ella. Llamo a la puerta antes de entrar.
  67. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento A.1 Buenas noches, ¿se puede pasar? (María y su compañera ya están acostadas). ¿Qué, cómo habéis pasado el día? (María mira a su compañera y los ojos se le humedecen. Al ver esto me siento en su cama, le cojo la mano y observo fijamente sin decir nada. Sus ojos me lo decían todo: hoy está triste, apagada). María, cuéntame, ¿qué te pasa? (Baja la mirada, ladea la cabeza y aprieta los labios. Las lágrimas corren por su cara).
  68. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.1 Mi señora... llevaba con ella 60 años. Estaba siempre conmigo. La quería como a una madre (su voz cada vez es más ahogada por el sollozo y yo le seco las lágrimas), y Dios se la ha llevado. (Llora) A.2 Es ley de vida, unos se van más pronto que otros.
  69. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.2 ¡Ya me podía haber ido yo antes! (Solloza). La quería mucho. Era tan buena... A.3 Quizás Dios la necesitara a ella y no a ti. (Se va calmando de llorar y me mira a los ojos)
  70. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.3 Dios no la necesita. Tiene a mucha gente a su lado y yo estoy sola. Yo no tengo a nadie. Solamente la tenía a ella y Dios me la quita. ¡No es justo! A.4 No hay que juzgar a Dios, María. Quizás esté probando tu fe.
  71. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.4 Sí, quizás, pero es una prueba muy dura. (Está más tranquila. Es ella quien me sujeta ahora la mano a mí). A.5 Además, María, no estás sola. Tienes una buena compañera de habitación. He visto que el personal de la planta te trata con afecto. Y me tienes a mí para lo que me necesites...
  72. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.5 Sí, ya... (Baja la mirada y me suelta la mano), pero todos se van. Todas las personas buenas se marchan. (Se entristece) A.6 No, María, siempre que nos necesites nos tendrás. Esta noche le podrías ofrecer tus sufrimientos al Señor. Verás cómo te tranquilizas. (Le doy un apretón de manos y me retiro poco a poco saludándoles a las dos).
  73. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento ?
  74. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento REVISANDO
  75. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento A.1 Buenas noches, ¿se puede pasar? (María y su compañera ya están acostadas). ¿Qué, cómo habéis pasado el día? (María mira a su compañera y los ojos se le humedecen. Al ver esto me siento en su cama, le cojo la mano y observo fijamente sin decir nada. Sus ojos me lo decían todo: hoy está triste, apagada). María, cuéntame, ¿qué te pasa? (Baja la mirada, ladea la cabeza y aprieta los labios. Las lágrimas corren por su cara).
  76. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.1 Mi señora... llevaba con ella 60 años. Estaba siempre conmigo. La quería como a una madre (su voz cada vez es más ahogada por el sollozo y yo le seco las lágrimas), y Dios se la ha llevado. (Llora) A.2 Es ley de vida, unos se van más pronto que otros.
  77. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.2 ¡Ya me podía haber ido yo antes! (Solloza). La quería mucho. Era tan buena... A.3 Quizás Dios la necesitara a ella y no a ti. (Se va calmando de llorar y me mira a los ojos)
  78. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.3 Dios no la necesita. Tiene a mucha gente a su lado y yo estoy sola. Yo no tengo a nadie. Solamente la tenía a ella y Dios me la quita. ¡No es justo! A.4 No hay que juzgar a Dios, María. Quizás esté probando tu fe.
  79. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.4 Sí, quizás, pero es una prueba muy dura. (Está más tranquila. Es ella quien me sujeta ahora la mano a mí). A.5 Además, María, no estás sola. Tienes una buena compañera de habitación. He visto que el personal de la planta te trata con afecto. Y me tienes a mí para lo que me necesites...
  80. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento M.5 Sí, ya... (Baja la mirada y me suelta la mano), pero todos se van. Todas las personas buenas se marchan. (Se entristece) A.6 No, María, siempre que nos necesites nos tendrás. Esta noche le podrías ofrecer tus sufrimientos al Señor. Verás cómo te tranquilizas. (Le doy un apretón de manos y me retiro poco a poco saludándoles a las dos).
  81. Purificar el lenguaje sobre el sufrimiento… PURIFICAR LA IMAGEN DE DIOS
  82. Fases del duelo 1. Choque 2. Evitación / negación 3. Entrega al dolor 4. Transformación / integración
  83. Fase de aturdimiento o de choque “Me siento como una zombi, todo me parece tan irreal”  C. M. Parkes (1972) Numbness  Bowlby (1980) Numbing  M. Horowitz (1985) Outcry  C. M. Sanders (1999) Shock
  84.  Objetivo (tarea de duelo)  Salirdel estado de choque  Recuperar funcionamiento general mínimo  Aceptar respuestas fisiológicas  Evaluación médica y de medicación  No es aconsejable intervención grupal en esta fase, ni hacer exploraciones. (no pueden escuchar)
  85.  Intervención:  Tiene poca disponibilidad para una relación terapéutica (no entienden preguntas, no hay energía, …)  Apoyo general de protección y seguridad: acompañar, sostener, permitir cualquier expresión.  Poca directividad: facilitar la descarga emocional  Dar tiempo, dejar, no medicar.  Permitir y acompañar ver el cuerpo, el escenario o los lugares relacionados con el suceso  Acompañar las reexperiencias del trauma: identificar los sentimientos de impotencia, horror, desvalidez, reestablecer la conexión.  Intervención en crisis
  86. Fase de rechazo y negación ¿Qué te puede ayudar en este momento de tu proceso? Sólo una cosa: ¡Que me devuelvan a mi hijo!  C. M. Parkes (1972) Searching and Pinning  Bowlby (1980) Yearning and Searching  M. Horowitz (1985) Denial and Numbing  W. Worden (1991) Accept the reality of loss  T. Rando (1993) Avoidance  C. M. Sanders (1999) Awareness of loss – Conservation withdrawal
  87. Modelo dual de afrontamiento del duelo (modif. Stroebe & Shut, 1999) Mecanismos orientados a Mecanismos orientados a expresar el dolor evitar el dolor (Loss oriented) (Restoration –Oriented) Estar conectado con la pérdida Desconectar de la pérdida Concentrarse en el propio dolor Negación Llorar Distraerse Hablar de ello Minimización Pasividad, abatimiento Racionalizar Aislamiento Esforzarse en no llorar Descarga emocional Evitar hablar de ello Ir a los lugares, promover el Centrarse en la vida recuerdo Hacer cosas nuevas Negación de la posibilidad de Actividad recuperación Invertir relaciones
  88.  Objetivo (tarea de duelo)  Disolver las defensas de negación de forma gradual…  Identificar, expresar, y elaborar los sentimientos alrededor de las circunstancias de la muerte.  Integrar recuerdos, pensamientos…  Aceptar la responsabilidad real de lo sucedido y liberarse de la rabia inapropiada  Elaborar mecanismos de conductas destructivas o de riesgo  Recuperar responsabilidad familiar, social y laboral  Establecer mínimos de autocuidado
  89.  Intervención:  Facilitar la re – experimentación  Explorar en fantasía o regresión las distintas opciones sobre lo sucedido  Explorar emociones ausentes o distorsionadas  Facilitar la actuación de la rabia y / o venganza en espacio seguro  Elaborar sentimientos de culpa  Identificar qué les ayuda y qué no les ayuda.  Trabajar los mitos o negación social del duelo
  90. Duelos desautorizados (Doka 1989)  Pérdidaque no puede ser abiertamente reconocida, públicamente expresada ni socialmente apoyada.  La relación no es reconocida: exparejas, amantes, relaciones homosexuales, amistad, pacientes.  La pérdida no es reconocida: aborto, muerte perinatal, esterilidad, paro, enfermedad mental, cuidadores, abusos.  La persona en duelo no es reconocida: niños, personas mayores, enfermos mentales o disminuidos  El tipo de muerte es censurado: sida, suicidio, homicidio, sobredosis.
  91. Duelos desautorizados (Doka 1989)  Problemas del duelo desautorizado  Emociones difíciles: inadecuación y vergüenza  Falta de apoyo social  Falta de rituales apropiados  Aspectos éticos y legales  Intervención terapéutica:  Legitimación, validación, rituales alternativos con apoyo comunitario
  92. Duelo y género (Marin, T & Doka K.J. 1996)  Duelo masculino:  Sentimientos limitados o bajos de volumen  Mecanismos racionales – cognitivos preceden a los afectivos.  La orientación del proceso se dirige más en resolver problemas que en expresar sentimientos  La expresión de sentimientos suele incluir enfado y/o culpa.  Los ajustes internos se suelen manifestarse a través de la actividad  Los sentimientos intensos suelen vivirse privadamente.  El dolor más intenso suele expresarse inmediatamente después de la pérdida (durante o después de los rituales)

Notes de l'éditeur

  1. Satisfacer las necesidades relacionales: Seguridad:   Ante la experiencia de vulnerabilidad la provisión de seguridad física y afectiva y respeto, (no verbalmente “tus necesidades son normales y aceptables para mi “)- total aceptación y protección ; estima incondicional.   2.  Validación e importancia : afirmación y normalización de la experiencia subjetiva (afectos, fantasía, creencias...)  3.    Aceptación por parte de una figura de referencia : Búsqueda de alguien que sea referencia y que me acepte. 4.    Confirmación de la experiencia . Estar con alguien que ha tenido experiencias similares autorevelación experiencias personales cuidadosamente seleccionadas ; y compartirlas estando presente. 5.   Autodefinición : Necesita de expresar las propias preferencias , intereses , ideas sin ser humillado. Acoger la diferencia aún sin compartirla. 6. Necesidad de tener impacto : Captar la atención del otro y sentir que le afecta el tema de la “compasión”… 7. Necesidad de que el otro tome la iniciativa . Que el otro reconozca y valide la importancia de uno (tener a alguien disponible fuera):comenzar el diálogo , sentarse cerca, hacer una llamada telefónica .  8. Necesidad de expresar amo r: como gratitud , agradecimiento, afecto o hacer algo por el otro.
  2. Me voy a servir aquí de unas palabras de Javier Barbero, maestro de muchos en este difícil arte de hacer camino al lado de los que sufren, fundadas en el modelo del “Sanador herido” (H. Nowen) A partir de esta premisa, la tesis sería: 1.- No es posible acoger la fragilidad y ayudar a curar o cuidar las heridas de los demás sin haber acogido antes y cuidado nuestras propias heridas , nuestra propia vulnerabilidad. 2.- A partir del reconocimiento y la integración de las propias heridas , seremos más capaces de conocer, comprender y acompañar el proceso de curación de las heridas del otro. Nuestra propia fragilidad se convierte así en un magnífico recurso. 3.- Si somos capaces de ayudar a la persona a descubrir y potenciar sus propios recursos, sin por ello negar sus heridas , estaremos consiguiendo que él sea el auténtico protagonista del cambio, apoyando así su autonomía, disminuyendo la dependencia y reconociéndole la profunda dignidad que posee como ser humano. Indudablemente, también ello será de una enorme riqueza para nosotros.
  3. Todo este proceso llevaría un itinerario personal del profesional , con estas características: El primer paso será identificar las propias heridas . Las que podemos tener como cualquier persona (la inmadurez, la soledad no querida, los conflictos no resueltos, las sutiles dependencias, las pérdidas y separaciones, la inseguridad...) y las que son propias de nuestra profesión o actividad específica (el miedo ante el contacto cotidiano con la muerte y el sufrimiento ajeno, la impotencia ante problemas que nos desbordan, etc.) No sirve la sola toma de conciencia de las heridas. Se trata de lograr la paz y la síntesis en nosotros mismos con la dimensión nocturna de la vida, en un proceso difícil pero liberador. Para curar las heridas es necesario previamente aceptarlas como parte integrante de ti mismo, única manera de descubrir su potencial sanador. Alimentar la capacidad de pedir y recibir ayuda . Como hizo el mismo Jesús de Nazaret en un momento de enorme sufrimiento en el Huerto de los Olivos: "Mi alma está triste hasta el punto de morir; quedaos aquí y velad conmigo" (Mt 26,32). Es un reconocimiento público de tu propia fragilidad que, indudablemente, será un factor de cercanía. El proceso de interiorización sobre esa zona oscura de ti mismo te ayudará a redescubrir y valorar el fruto de lo positivo que también existe en ti. Asumir y reconciliarse con las heridas no significa eliminar necesariamente el sufrimiento , pero sí cambiar de signo esta realidad, iluminándose con un significado que lo transforma. De amenaza, a oportunidad de cambio . Se trata de transformar la soledad alienante en lugar de encuentro con uno mismo, la desesperación en una estación de la esperanza, la enfermedad en oportunidad de crecimiento. La conciencia de la propia vulnerabilidad, insuperable e inseparable de la condición humana es la que posibilita que el profesional no sea insensible a los sufrimientos ajenos y se comprometa en un acompañamiento al enfermo terminal, para que pueda realizar el mismo camino. Es interesante observar el planteamiento de relación que, aunque con responsabilidades y aprendizajes distintos, coloca a las dos personas en condiciones de simetría , por lo menos en lo más esencial (la capacidad de ser los dos sanadores heridos). Quizás no sea evidente , probablemente porque, como decía Saint Exupery en "El Principito", lo esencial es invisible a los ojos.
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