Complicaciones Psiquiátricas.
• 40 millones de personas en el mundo se encuentran infectadas por el
virus del SIDA.
• Un estudio realizado por Dr. Paul Thompson con 40 sujetos, 26 con VIH y
14 sanos. Hallazgos: El grosor de 3 áreas del cerebro Corteza sensorial
primaria, motora y premotora 15% menor en los pacientes con VIH.
• La prevalencia a lo largo de la vida en sujetos infectados por el VIH de
algún trastorno mental, incluyendo el abuso de sustancias, se encuentra
entre un 30 y un 73 por ciento.
• Esto exige que en todo paciente infectado por VIH se realice una
evaluación psicopatológica que valore su estado emocional y cognitivo.
• Los trastornos de adaptación con ánimo depresivo son la complicación
psiquiátrica más frecuente en pacientes afectados por VIH. Es frecuente
que aparezcan tras el diagnóstico de la enfermedad y se acompañen de
sentimientos de desesperanza y de culpa.
• La respuesta psicológica a una enfermedad depende de múltiples
factores: características de la enfermedad medica, personalidad, etapa
de vida, conflictos emocionales, vulnerabilidad, medio sociocultural.
• En enfermedades como el SIDA se conlleva un estigma agobiante debido a
las actitudes y prejuicios sociales, referentes a la orientación y actividad
sexuales, sufren elevado índice de rechazo familiar, discriminación en
hospitales, Estigmatización social asociados a Elevada mortalidad en los
pacientes que son factores decisivos en la respuesta emocional de los
pacientes que siguen con vida, por lo que es indispensable:
• Dar al enfermo un manejo biológico, psicológico y social en un equipo de
trabajo interdisciplinario.
Mecanismos de neurodegeneración y alteraciones
neurocognitivas
• Los mecanismos que conducen a la demencia y deterioro cognitivo en
pacientes con VIH/SIDA no están completamente entendidos.
• El VIH no infecta directamente las neuronas. La lesión en el SNC se
produce a través de dos mecanismos:
• 1-efecto directo, a través de la citotoxicidad de la envoltura de las
proteínas virales, probablemente la gp120, 2- efecto indirecto, a través de
los productos liberados por los macrófagos infectados, quienes producen
cientos de enzimas y citoquinas con gran potencial para causar daño
celular y daño del eje sináptico-dendrítico de las neuronas .
• Las estructuras subcorticales como los ganglios basales, especialmente el
núcleo caudado, y el hipocampo parecen ser más vulnerables.
• El proceso neurodegenerativo en pacientes con demencia por VIH se
caracteriza por los daños sinápticos y dendríticos en las neuronas
piramidales, pérdida de interneuronas inmunoreactivas al calbindin y
pérdida de mielina.
• Las poblaciones neuronales más gravemente afectadas en este proceso
incluyen las grandes neuronas piramidales en la neocorteza, neuronas de
tamaño mediano en el globo pálido, y en las interneuronas del hipocampo.
• Aunque la interrupción de las conexiones cortico-corticales podría dar lugar
al déficit de aprendizaje y atención, la patología del hipocampo está
vinculada a la pérdida de la memoria y los daños cortico estriatales generan
alteraciones motoras.
• El proceso neurodegenerativo que conduce a las alteraciones cognitivas en
pacientes con VIH incluye varios procesos entre los que se encuentran de
forma destacada: el daño al aparato sináptico-dendrítico maduro del de las
neuronas en desarrollo y el deterioro de la capacidad de las células
progenitoras neuronales en el giro dentado del hipocampo a generar
nuevas neuronas.
Trastornos Psiquiátricos del VIH.
• Síndromes depresivos: Los trastornos depresivos de moderada intensidad
pueden aparecer en cualquier momento de la enfermedad y pueden
relacionarse con distintos factores:
• – Reacción a problemas psicosociales relacionados con la enfermedad.
• – Consecuencia directa del virus en el cerebro que, según algunos
estudios anatomopatológicos, afecta más a las áreas límbicas implicadas
en la regulación de la experiencia emocional.
• – Episodios desencadenados por la infección en pacientes predispuestos.
• – Enfermedades orgánicas intercurrentes
• Con respecto a los trastornos adaptativos con síntomas depresivos, es
frecuente que aparezcan cuando el paciente conoce su seropositividad.
• Los síntomas emocionales más frecuentes son bajo estado de ánimo,
tendencia al llanto, ideas de desesperanza y culpa, déficit de
concentración e irritabilidad y trastornos del sueño.
• Otro momento de crisis suele coincidir con el momento de comenzar
tratamientos antirretrovirales.
• El papel del médico como informador de beneficios del tratamiento,
efectos secundarios, posibilidades alternativas, etc.
• Va a ser un factor condicionante del cumplimiento y la buena adherencia y
a disminuir la ansiedad en el paciente.
• La reacción de las personas cercanas cuando reciben la noticia de que el
paciente es seropositivo es un factor que va a influir notablemente en la
aparición de síntomas emocionales en estos pacientes.
• En algunos estudios se ha encontrado relación entre depresión y
progresión de la enfermedad, mientras que en otros no se ha hallado.
• Algunos autores señalan que el efecto del estado emocional sobre la
supervivencia podría relacionarse, además de con variables
inmunológicas, con otros factores como malos hábitos de salud y falta de
cumplimiento del tratamiento.
• Actitudes recomendables en síndromes depresivos asociados a VIH:
• – Diferenciar síntomas somáticos asociados a la depresión (insomnio,
pérdida de peso, cansancio) con otros síntomas secundarios a la
enfermedad o al tratamiento antirretroviral.
• -Los síntomas de culpa, característicos de depresiones mayores, deben
diferenciarse de autorreproches puntuales relacionados con la adquisición
de la enfermedad y el temor al contagio.
• – Explorar factores de vulnerabilidad que van a contribuir a que el paciente
con infección por VIH presente síntomas depresivos:
• antecedentes psiquiátricos personales
• y/o familiares y escaso apoyo familiar y social contribuyen a la aparición de
síntomas psiquiátricos.
• Explorar ideación autolítica: el riesgo de suicidio es mayor en pacientes con
VIH que en la población general.
• Se asocian con riesgo alto de suicidio la existencia de depresión mayor,
consumo de tóxicos, sentimientos de desesperanza y antecedentes
psiquiátricos.
• – Ayudar a que los pacientes puedan identificar y reconocer los síntomas
emocionales que presentan y a que puedan hablar de la relación entre estos
síntomas y sus temores. Esto favorece una mayor capacidad de
afrontamiento de los mismos y ayuda a diseñar objetivos alcanzables.
• Alteraciones cognitivas: Comenzaron a describirse como un síntoma
frecuente en 1980, con prevalencias cercanas al 50 por ciento de los
casos. Posteriormente se describió el síndrome ADC (Complejo Demencia-
Sida).
• Este síndrome se manifiesta por disfunción cognitiva, motora y
conductual y suele aparecer después de la presentación de infecciones
oportunistas que caracterizan la enfermedad avanzada.
• Clínicamente se caracteriza por inatención, pérdida de memoria
bradipsiquia, apatía, ataxia y debilidad en extremidades inferiores de
curso progresivo, para posteriormente en fases avanzadas manifestarse
por una disfunción cognitiva global, severo retardo
psicomotor,mioclonias, convulsiones y coma.
• El pronóstico es desfavorable.
• Muchos pacientes con infección por VIH son conscientes de la posibilidad de
presentar cuadros de demencia y expresan temor y preocupación a presentarla en
relación a pérdidas subjetivas de memoria y dificultad de concentración. Hay que
tener en cuenta que, en muchas ocasiones, estos síntomas son secundarios a
trastornos depresivos y no obedecen a síndromes demenciales.
• En estos casos, los síntomas cognitivos desaparecen al mejorar el estado de
ánimo. No obstante, ante la posibilidad de una afectación del funcionamiento
intelectual está indicada la realización de una evaluación neuropsicológica.
• En el caso en el que se detecten afectaciones cognitivas vinculadas a la infección
por VIH, se debe insistir al paciente en que el tratamiento específico puede
producir mejoría de síntomas.
• En pacientes con déficits cognitivos graves, las intervenciones deben ir dirigidas a
conseguir una mejor adaptación del individuo y de su entorno a las circunstancias
relacionadas con la enfermedad, teniendo un papel esencial en este caso los
recursos de apoyo específicos.
• Otros trastornos psiquiátricos:
• – Pueden aparecer episodios maníacos asociados a la infección por VIH en
estadios avanzados de la enfermedad.
• Se ha comprobado en algunos casos una evolución posterior hacia la
demencia.
• – Los síntomas psicóticos pueden ser anticipatorios de la instauración
posterior de un trastorno mental orgánico asociado al VIH.
• – La recuperación de los cuadros de delirium no es completa si se
superpone a una demencia.
• – Son predictores clínicos de desarrollo de demencia en un paciente con
infección por VIH: anemia, menor índice de masa muscular, edad
avanzada y presencia de un síndrome constitucional anterior al
diagnóstico de SIDA.
• Efectos del VIH sobre el lenguaje
• Con frecuencia, el habla y el lenguaje se deterioran en los niños en fase
sintomática. Se ha observado que algunos niños que hablan hablan
utilizando frases completas experimentan un retroceso y utilizan
solamente palabras aisladas.
• Aparecen problemas de articulación y el niño tiene dificultades para
hablar. A pesar de este deterioro del lenguaje expresivo, la capacidad de
comprender del niño suele conservarse o presenta menos deterioro que
las habilidades expresivas; de hecho, parecen tener habilidades verbales
compresivas casi apropiadas para su edad.
• Conforme avanza la enfermedad, el lenguaje se va empobreciendo cada
vez más. En general, el mayor retraso se observa en el período
comprendido entre los 12 y 24 meses. En los niños mayores, empeora
tanto el lenguaje expresivo como el receptivo, aunque siempre el lenguaje
expresivo resulta más afectado .
• Wachtel et al encontraron un rendimiento significativamente peor en el
lenguaje de los niños seropositivos con edades comprendidas entre los 12
y 18 meses, pero no a los 6 meses de edad, comparados con los
seronegativos y serorrevertidos .
Desarrollo motor
• Debido a la presencia generalizada de alteraciones en los núcleos de la
base en los niños seropositivos, no es extraño encontrar disfunción
motora en muchos de estos sujetos.
• El retraso psicomotor se describió como inicialmente más grave que el
retraso cognitivo en los niños pequeños y, a menudo, se observa
deterioro de las habilidades motoras cuando la enfermedad progresa.
• Nozyce et al estudiaron a 181 niños con una serie de cuestionarios
estandarizados. Observaron un deterioro motor predominante, aunque
no exclusivamente, en los infectados por el VIH que desarrollaban una
enfermedad grave definitoria de sida en los dos primeros años de vida
[10].
• Mellins et al evaluaron los efectos del seroestado, exposición prenatal a
medicamentos y drogas y disfunción neuropsicológica sobre el desarrollo
motor y mental mediante las escalas Bayley del desarrollo del niño.
• Los niños que habían nacido infectados y se habían expuesto
prenatalmente a drogas o fármacos rindieron significativamente peor en
los índices de desarrollo mental y motor que los niños nacidos sin estos
factores de riesgo.
• Se observó un solapamiento considerable entre la disfunción neurológica
y el seroestado, lo que indica que lo más probable es que la asociación
entre las alteraciones neurológicas y el rendimiento en las escalas Bayley
del desarrollo del niño refleje los efectos del VIH sobre el SNC.
• En resumen, los niños infectados seropositivos tienen retraso
significativos en el desarrollo de la psicomotricidad gruesa comparados
con sus iguales.
• Los retrasos evolutivos iniciales en el desarrollo de la psicomotricidad fina
pueden o no mantenerse.
• Son más frecuentes los retrasos en el desarrollo cognitivo y motor en
niños con los síntomas médicos más graves, pero muchos niños infectados
siguen un desarrollo normal.
• Los retrasos en el desarrollo motor se observan de forma más frecuente,
continua y coherente en lactantes que en niños más mayores.
• Los diagnósticos más frecuentes fueron la depresión mayor (TDM: 47%) y
el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH: 29%).
• El diagnóstico de depresión mayor se asociaba significativamente con
anomalías de las imágenes neurales o anomalías neurológicas clínicas
• El porcentaje de linfocitos CD4 estaba próximo a 0 para más del 80% de
los niños que presentaban complicados psiquiátricas.
• El porcentaje muy bajo de linfocitos CD4 de estos niños indica que la
aparición de una complicación psiquiátrica se debe considerar como un
factor indicativo de infección por VIH grave. Los trastornos depresivos
pueden ser una forma clínica de la encefalopatía.
EVALUACION NEUROPSICOLOGICA.
• Una parte importante de la evaluación neuropsicológica son los
problemas
• conductuales y otros recogidos en el Manual diagnóstico y estadístico
• de los trastornos mentales, 4.ª edición revisada (DSM-IV-R), tales como:
• Problemas de aprendizaje.
• Trastornos Psicosomáticos.
• Impulsividad hiperactividad.
• Ansiedad.
• Depresión.
• Autismo.
• El test más importante en esta área son las escalas de puntuación para
padres de Conners.