El documento habla sobre la transformación hacia una Sociedad de la Información en el siglo XXI y los objetivos y esfuerzos del gobierno de El Salvador para facilitar el acceso a la tecnología e Internet. Incluye iniciativas en educación, acceso a Internet, comercio electrónico, redes de investigación, tarjetas inteligentes, capital riesgo, participación electrónica, salud en línea y transporte e administración pública inteligentes. Recomienda que las empresas y la educación jueguen un papel clave en acercar a la
3. Introducción
El mundo está experimentando
una transformación fundamental
que está llevando a la sociedad
industrial, que marcó el siglo
XX, a gran velocidad hacia una
Sociedad de la Información, del
siglo XXI. La Sociedad de la
Información abre un abanico de
posibilidades a los países en
desarrollo para alcanzar sus metas
de progreso a través de medios
alternativos.
4. Objetivos
Desarrollar programas de estudio que contemplen el
manejo de datos, información y conocimiento y que
refuercen el trabajo en equipo, la capacidad de
aprender y de resolver problemas.
5. Facilitar el acceso a los recursos y capacidades necesarias
para el desarrollo de empresas de tecnología (hardware,
software, contenidos y servicios) y estimular la
innovación en las ya existentes, otorgando especial
prioridad a las micro, pequeñas y medianas empresas.
6. Contexto
Construir una sociedad en torno al conocimiento, y, en
concreto, construirla con el acuerdo en común de todas
las partes que la integran, es una tarea compleja que
requiere seguir un modelo bien estructurado, donde se
fomenta la participación de todos y todas, en cualquiera
de los ámbitos de la sociedad pública, civil o privada.
7. Iniciativas del Gobierno del
Salvador
Educación: Introducir Internet y los instrumentos
multimedia en las escuelas y adaptar la enseñanza a la
era digital.
Acceso a Internet: Establecer una infraestructura
óptima (despliegue de red) y conseguir una reducción
significativa de las tarifas de acceso a
Internet, aproximándolas a los niveles más bajos del
mundo, a través de una mayor competencia y
facilitando la evaluación comparativa a nivel europeo y
nacional.
8. Comercio Electrónico: Implantar el correo
electrónico y la entrada en vigor de los marcos legales
asociados, así como ampliar el uso de la contratación
pública electrónica.
Redes de Investigación: Conseguir, para dichas
redes, un acceso acelerado a Internet y facilitar la
cooperación en el trabajo y el aprendizaje.
9. Tarjetas inteligentes: Para acceder de forma segura a
Internet y facilitar el establecimiento de una
infraestructura de alcance europeo para una máxima
incorporación.
Capital Riesgo: para desarrollar enfoques
innovadores que faciliten al máximo el acceso de la
Pyme de alta tecnología al capital de riesgo.
10. Participación Electrónica: Desarrollar políticas
encaminadas a evitar la exclusión en la
información, de manera que toda la ciudadanía pueda
acceder a los sitios Web públicos y a sus contenidos. Se
insiste también en la necesidad de garantizar el acceso
a unas tecnologías asequibles que hagan posible el
acceso a Internet.
Salud “On Line”: para fomentar el uso de redes y
tecnologías inteligentes para la atención y el control
sanitarios.
11. Transporte Inteligente: para conseguir un transporte
más seguro y eficaz gracias al uso de tecnologías
digitales.
Administración Pública “On Line”: para facilitar el
acceso de la ciudadanía a la información, servicios y
procedimientos de toma de decisiones de la
Administración.
12. Recomendaciones
Las empresas pueden jugar un papel de acercamiento a
la sociedad de la información de sus empleados y de las
familias con los planes de su organización de
formación en TIC, teleformación y los portales con
contenidos de utilidad profesional, familiar y personal.
13. El aprendizaje es un reto para cuya superación no
basta con impartir cursos, sino que hay que crear
campañas de sensibilización y motivación centradas
en el “para qué” de los potenciales
usuarios, especialmente para los colectivos más
alejados de las TIC.
14. Conclusión
La tecnología de la información se ha infiltrado en
todos y cada uno de los puntos de la cadena de
producción de valor, transformando la manera en que
se realizan las actividades. Estos efectos básicos
explican el que la tecnología de la información haya
adquirido un valor estratégico y sea diferente de
muchas otras tecnologías que emplean las empresas.
Esto hace indispensable la formación de los
ciudadanos en TICs, tanto de los sectores
gubernamentales como de los sectores privados.