3. A raíz del Informe Mundial de la UNESCO de 1996, existe un consenso generalizado sobre la necesidad de construir una escuela en y para la diversidad , que enseñe a los seres humanos a vivir juntos y que responda a un nuevo proyecto de sociedad. Nuestro país que, con el advenimiento de la democracia, adscribió a la tendencia universal de reconocimiento de la diversidad, adoptó la denominación Educación Intercultural Bilingüe (EIB) en la que, el carácter de “intercultural” en primer lugar, prioriza el rol que se le otorga a la cultura en el proceso educativo y, el de “bilingüe”, en segundo lugar, asigna reconocimiento a la lengua originaria-materna o patrimonial- de los educandos.