2. Presentación
Mi nombre Pablo A.
Jiménez.
Vengo a ustedes como
un compañero en la fe,
interesado en
fomentar la educación
teológica del pueblo
de Dios.
Espero que esta
conferencia sea de
bendición para
ustedes.
3. Introducción
El estudio de la teología es una disciplina
importante para la vida de la Iglesia.
Sin el análisis y el estudio de la fe, es imposible
desarrollar una tarea misionera adecuada.
El creyente que no cultiva su fe, no podrá crecer
en la fe de Jesucristo.
Del mismo modo, la Iglesia que no examina su fe
será débil, quedando a merced de las falsas
doctrinas.
4. Temario 1
Primera Parte: Aspectos teóricos
De la Escuela Bíblica Dominical a la
Escuela de Teología
¿Qué es el quehacer teológico?
Observaciones finales
5. Temario 2
Segunda parte: Aspectos prácticos
¿Qué leer?
¿Cómo leer?
¿Cómo usar los recursos de Internet en la
educación teológica?
Redacción de tareas y ensayos
Conclusión
7. De la Escuela Bíblica
Dominical a la Escuela
de Teología
8. Dos niveles distintos
La Escuela Bíblica dominical ha sido una
institución útil para fomentar el crecimiento
en la fe. Por lo regular, trata temas básicos,
de manera sencilla, evitando generar
controversias.
Por su parte, la educación teológica es
estudio riguroso y profundo de la fe.
Necesariamente, la educación teológica
confrontará la fe del estudiante, llevando a
hacer un análisis crítico de su fe.
9. El crecimiento en la fe
El crecimiento en la fe pasa por distintas etapas. De
acuerdo a James Fowler, estas son:
La fe primaria o indiferenciada
La fe intuitiva-proyectiva
La fe mítico-literal
La fe sintética convencional
La fe individual reflexiva
La fe conjuntiva
La fe universal
10. Una fe que busca
entendimiento
San Anselmo (1033-1109), uno de los
principales teólogos de la Edad Media,
definió la teología como “la fe en búsqueda
de “inteligencia” es decir, de entendimiento
(en latín, “Fides quaerens intellectum”).
Debe quedar claro, pues, que la teología
busca primordialmente entender a Dios, el
objeto de nuestra fe, y la revelación divina,
por medio de la cual recibimos el mensaje
evangélico.
11. El nivel crítico
Volvamos, por un momento, a examinar el
aspecto crítico de la fe.
Cuando hablamos de crítica, no estamos
refiriéndonos a una visión negativa de la fe.
Por el contrario, en el ámbito académico la
“crítica” es la capacidad para examinar un
tema de manera rigurosa. Por eso, el
acercamiento académico de la fe es “crítico”.
12. Examen y debate
El examen de los distintos aspectos de la fe
lleva, necesariamente, a la confrontación y hasta
al debate.
¿Por qué? Porque cada persona tendrá una
perspectiva un poco distinta de los diversos
aspectos de la fe.
Por eso, quienes comienzan estudios teológicos
deben cultivar una actitud de apertura y respeto
hacia la facultad y hacia los demás estudiantes.
13. Fe y crisis de fe
Algunas personas no pueden lidiar con la
presión que produce el examen de la fe.
Dichas personas pueden caer en crisis de fe,
que se pueden manifestar como estados
depresivos, la falta de entusiasmo y hasta la
apostasía.
Es importante, pues, buscar ayuda a la
brevedad posible si se experimenta alguno
de estos “síntomas” de crisis.
14. La meta de la educación
teológica
Debemos recordar que la meta de la
educación teológica es edificar al creyente,
de manera tal que pueda desarrollar un
discurso y un estilo de vida que sea
congruente con la fe de Jesucristo.
En términos más sencillos, lo que deseamos
es que el estudiante de teología pueda vivir
la fe, no sólo estudiarla. La mejor teología
nace de un corazón comprometido con Dios,
con el pueblo de Dios y con el bienestar de la
humanidad.
15. La búsqueda de la excelencia
ministerial
En términos ministeriales, nuestra meta es la
excelencia ministerial.
Deseamos que nuestros programas educativos
produzcan hombres y mujeres que tengan un
profundo deseo de dar lo mejor de su vida a la
causa evangélica.
Y deseamos que tengan la meta de desarrollar
un ministerio de excelencia, que se destaque por
la calidad de su vida y de su proclamación.
17. ¿Qué es la teología
cristiana?
En términos etimológicos, la teología es “el
discurso sobre Dios”. También puede
definirse como el análisis de las palabras que
decimos sobre Dios.
Con el tiempo, el término “teología” comenzó
a ser usado para referirse a todo el cuerpo de
la doctrina cristiana y para el estudio de dicho
conjunto doctrinal.
18. ¿Qué incluye la teología?
Justo L. González indica que la teología
incluye:
La explicación de la realidad.
La sistematización de la doctrina cristiana.
La defensa de la fe y puente a los no
creyentes.
La crítica de la vida y la proclamación de la
Iglesia.
Contemplación de los misterios divinos.
19. Otras definiciones
Karl Barth define la teología de la siguiente
manera, en su libro Teología Evangélica:
La teología es la ciencia que busca el
conocimiento de la palabra de Dios
hablada en la obra de Dios. Es la ciencia
que aprende en la escuela de las
Sagradas Escrituras, que dan testimonio
de la Palabra de Dios.
20. Las “reglas del juego”
El futbol es un deporte con reglas claras,
particularmente en lo que se refiere a las
líneas de juego.
De manera análoga, la teología cristiana
establece las “reglas” de nuestra fe.
Establece linderos, indicando qué creencias
son aceptables y cuáles no. Nos ayuda a
diferenciar entre la sana doctrina y las falsas
enseñanzas.
21. El propósito de la teología
El propósito principal de la teología es
promover el crecimiento espiritual, de manera
que la Iglesia pueda participar con pericia y
libertad en la “missio Dei”, es decir, en la
misión; en el proyecto de Dios para el
mundo.
Para poder alcanzar esta meta, la teología
debe identificar las falsas doctrinas,
denunciarlas, equipar a la Iglesia para
restaurar a las personas que han caído
víctimas del error.
22. Los temas de la teología
La teología estudia toda la vida de la Iglesia, desde
la revelación divina hasta cómo ministrar a la niñez.
Por eso, la teología se divide en varias disciplinas
que estudian diversos temas.
Estos temas son tan amplios que, por regla general,
las personas que se dedican al estudio académico
de la teología deben especializarse en una de sus
muchas áreas.
A continuación enumeramos algunos de esas
disciplinas.
23. Teología
Cuando nos referimos a la “teología” de
manera discreta, hablamos sobre el estudio
de Dios.
Esto incluye el estudio del carácter de Dios,
de la revelación divina y de la acción de Dios
en el mundo.
El estudio de la revelación es el punto de
partida de la teología cristiana.
24. Cristología
Íntimamente relacionado a la teología, la
“cristología” es el estudio sistemático de la
persona de Jesús, el Cristo.
Incluye el estudio de las Sagradas Escrituras,
de la persona histórica de Jesucristo, de las
enseñanzas de Jesús, de pasión, muerte y
resurrección, de su ascención y de su obra
salvífica en beneficio de toda la humanidad.
25. Pneumatología
En griego, la palabra “pneuma” quiere decir
“aire” o “aliento”. Al igual que la palabra
“ruah” en hebreo, estos términos se refieren
al Espíritu Santo.
La “pneumatología” es, pues, el estudio de la
doctrina sobre el Espíritu Santo. Consider las
enseñanzas bíblicas sobre el carácter, la
obra, los dones y el fruto del Espíritu Santo,
entre otros elementos.
26. La antropología
La teología también estudia a la humanidad,
dado que el ser humano ha sido creado por
Dios.
La antropología teológica es el estudio de la
humanidad a la luz de las enseñanzas de la fe
cristiana.
El estudio de la naturaleza humana es crucial,
particularmente para definir los componentes de
la personalidad (cuerpo, alma, espíritu, intelecto,
emociones, valores, etc.)
27. La hamartiología
“Hamartía” es una palabra griega que,
literalmente, quiere decir “errar el blanco”. En
términos teológicos, significa “pecado”.
La hamartiología es el estudio de las
enseñanzas bíblicas y teológicas sobre el
pecado, incluyendo su origen, naturaleza,
manifestaciones y consecuencias, entre otros
elementos.
28. La soteriología
“Sotería” es la palabra griega que significa
“salvación” y “soteros” significa salvación.
La soteriología es el estudio sistemático de la
salvación. Estudia quién salva a la
humanidad, cómo lo hace y por qué medios.
Además, analiza la gracia divina y considera
cómo se manifiesta.
29. La eclesiología
En griego clásico, “ecclesía” es la palabra
griega que describe la asamblea del pueblo,
compuesta por los hombres libres,
ciudadanos y propietarios. En el Nuevo
Testamento, la palabra “ecclesía” significa
“iglesia”.
La eclesiología es el estudio sistemático de la
iglesia, considerando su naturaleza, su
composición y su misión.
30. Misiología
Hablando de misión, la “misiología” es el estudio
de la misión divina.
Aunque acostumbramos hablar de la “misión de
la iglesia”, en realidad la misión le pertenece a
Dios; es “mission Dei”.
La Iglesia no tiene una misión en sí misma, sino
que comparte y colabora en la misión divina.
La misiología también estudia la evangelización.
31. La ética y la moral
La conducta humana no se escapa del
análisis teológico.
La ética estudia la conducta humana,
considerando sus naturaleza y sus patrones.
Se habla de ética: casuística, deontológica y
perfeccionista,
La moral estudia temas particulares de la
conducta humana, tales como el aborto o la
pena de muerte.
32. La escatología
“Escatós” es otra palabra griega. Significa “lo
último”.
Por lo tanto, la “escatología” es el estudio de
las “últimas cosas, es decir, de los últimos
tiempos.
Considera temas tales como el fin de los
tiempos, la segunda venida de Cristo, la
eternidad, el cielo y el infierno, entre otros.
33. Otros temas teológicos
En adición a los temas previamente
esbozados, los diccionarios de teología
definen otras disciplinas teológicas
pertinentes para el estudio.
Baste, por ahora, la enumeración de estas
disciplinas básicas para el estudio académico
de la teología.
34. Las fuentes de la teología
Como indicamos anteriormente, los seres
humanos sólo podemos conocer a Dios
porque éste se ha revelado a la humanidad.
Las “fuentes de la teología” son las
mediaciones que Dios emplea para revelarse
a la humanidad.
Afirmamos que Cristo Jesús encarna la
plenitud de la revelación divina.
35. La experiencia de Cristo
Queda claro, pues, que la experiencia de
conocer a Cristo Jesús como Señor y
Salvador el punto de partida para toda
reflexión teológica desde la perpectiva
cristiana.
La persona que hace teología debe ser
creyente fiel , comprometida con Dios, con la
Iglesia como comunidad de fe, con la
humanidad y con toda la creación.
36. La Biblia, palabra revelada
Si bien Jesús es la palabra hecha carne, la Biblia es
palabra de Dios porque por medio de ella conocemos
la persona y la obra de Cristo.
En este sentido, la Biblia es palabra de Dios porque
da testimonio de Cristo y porque nos conduce a
establecer una relación de fe con nuestro Señor y
Salvador.
Empero, dado que la Biblia fue escrita para otros
pueblos y en otros idiomas, es necesario interpretarla
responsablemente.
37. La tradición de la Iglesia
Es claro que nosotros no somos los primeros
cristianos. La Iglesia tiene una historia de
cerca de 2,000 años, que se unen a la fe de
Israel. Por eso tenemos que prestarle
atención a la tradición e la Iglesia, que se
manifiesta en:
La historia de la iglesia
Los credos y los demás escritos teológicos
Nuestra tradición denominacional
38. La razón
Los seres humanos sentimos y pensamos la fe.
Por lo tanto, la razón es una fuente importante
de revelación.
Sin el uso de la razón, no podríamos discernir las
verdades teológicas que Dios desea revelar por
medio de las Sagradas Escrituras, de la tradición
y de las otras fuentes de revelación.
Por eso, los creyentes no deben tener una visión
negativa de la razón.
39. La experiencia
La experiencia es otra fuente de revelación.
Otra manera de ver esta fuente es afirmando
que la vida misma es una fuente de
revelación.
Dios nos habla constatemente por medio de
la experiencia. A esto debemos añadir la
interacción con la naturaleza, creada por
Dios.
La “revelación natural” describe lo que Dios
manifiesta por medio de la creación.
40. La teología académica
Hablemos sobre cómo los programas de
teología organizan sus currículos de estudio.
Aunque toda clasificación o taxonomía tiene
algo de artificial, la mayor parte de las
escuelas teológicas organizan los cursos en
bloques.
A continuación describo los bloques más
comunes.
41. Teología bíblica
La teología bíblica es el área que incluye los
cursos sobre Biblia e interpretación bíblica.
Algunos cursos comunes son: Introducción a
la Biblia, Introducción al Antiguo o Nuevo
Testamento, Exégesis y hermenéutica,
exégesis de algunos libros de la Biblia y
cursos sobre temas Biblias (por ejemplo, La
salvación en el Nuevo Testamento).
42. Teología sistemática
La teología sistemática es el área que abarca
el estudio de las doctrinas, de la historia de
las doctrinas, de la ética y de la moral
cristiana.
Por lo regular, los seminarios y las escuelas
teológicas ofrecen un curso general
introductorio a la teología sistemática.
Empero, también pueden ofrecer cursos
sobre temas específicos (cristología,
pneumatología, etc.).
43. Teología práctica
El área de la teología práctica incluye cursos
las diversas tareas que lleva a cabo la
Iglesia.
Algunos de estos cursos son: educación
cristiana, administración de la Iglesia,
adoración, predicación, ministerio con la
juventud, ministerio con la niñez, ministerio
con envejecientes, evangelización, etc.
44. Los “lugares teológicos”
La teología no se limita a las áreas que hemos
indicado. Se pueden hacer análisis teológicos de
casi todos los temas imaginables.
Por ejemplo, se puede estudiar la conducta, la
niñez, la ecología, la postmodernidad o el
trabajo, entre muchos otros temas.
Cuando se hace teología desde uno de estos
temas, se convierte en un “lugar teológico”.
46. La búsqueda de la verdad
En cierto sentido, la teología es la búsqueda
de la verdad.
Ahora bien, debemos recordar que para la
Iglesia Cristiana la verdad no es una
declaración que se escribe en libros o
ensayos.
Para el creyente la verdad es una persona:
Jesucristo (Juan 14.6). Por lo tanto, la
teología es la búsqueda de la presencia de
Cristo.
47. La humildad ante Dios
La persona que hace teología debe mantener
una actitud de humildad ante Dios y ante la
tarea de hacer teología.
Del mismo modo, debemos mantener una
actitud de humildad ante los creyentes que
difieren de nosotros, sean de nuestra misma
tradición o de otras tradicones teológicas.
Recordemos las palabras de Pablo en 1
Corintios 13: nuestro conocimiento es
incompleto.
48. La capacidad de dialogar
Por todas estas razones, es importante
desarrollar la capacidad de dialogar con los
demás, particularmente con quienes piensan
de manera distinta o quienes provienen de
otros grupos étnicos o nacionales.
“Diálogo” quiere decir “a través de la
palabra”. Y recordemos que Jesús es la
palabra por excelencia.
49. La solidaridad con “el otro”
Más allá del diálogo, es importante estar en
solidaridad con los demás.
El término “solidaridad” evoca la palabra
griega “koinonía”, que significa comunión.
Más aún, significa ser “codueños” de algo.
¿Qué compartimos con los demás? La vida,
que es el regalo divino por excelencia.
50. La vida antes de la teoría
La vida es más importante que la teología. La
teoría no es más importante que la vida.
Por eso, debemos sopesar las
consecuencias que tienen nuestras ideas
teológicas en la vida real.
Por ejemplo, aunque somos cristianos
compeometidos, debemos considerar las
consecuencias que tendría quemar
públicamente una copia del Korán.
51. Una teología que afirma la vida
Terminamos la primera parte de esta
conferencia indicando que necesitamos
hacer reflexiones teológicas que afirmen la
vida, bendiciendo a los demás y
motivándoles a alcanzar su pleno potencial
de desarrollo humano, social y espiritual.
Recordemos que Jesucristo vino a traer vida
y vida en abundancia, en el nombre de
Jesús. AMÉN
52. Bibliografía
Dos libros importantes y fáciles de leer son:
Justo L. González, Diccionario Manual
Teológico. Barcelona: Editorial CLIE, 201o.
Justo L. González y Zaida Maldonado-Pérez.
Introducción a la Teología Cristiana.
Nashville: Abingdon Press, 2003.