1. MANOS SOLIDARIAS
Cuando nuestras manos se acerquen al pobre, al que sufre y espera, cuando lo toquen, háganlo
con respeto, porque no tocan una cosa, sino un lugar sagrado, un sacramento doliente, dotado
de eminente dignidad. Las manos deben manifestar humildad y agradecimiento, porque no se
sienten dignas de prestar ese servicio. Y deben pedir perdón por no haberlo hecho antes y
porque no saben hacerlo bien. Naturalmente, nunca pedirán nada a cambio, ninguna ventaja
material ni afectiva ni siquiera espiritual. Sería una profanación del amor, cuya única
recompensa es poder amar.
Si quieres curar al pobre, déjate también curar por él, y así la caridad es compartida, con viaje
de ida y vuelta. «Los pobres son médicos de nuestras llagas, y las manos que nos extienden son
remedios que nos dan» (Fr. Luis de Granada).
Que tus manos tengan ojos y oídos para que puedan ver y puedan oír; que puedan ver y oír todo
lo que sufren, lo que esperan y lo que verdaderamente necesitan las personas a quienes sirven.
No vayas a hacer un servicio que no sirve para nada. Quizá el mejor servicio sea el de la
presencia y la cercanía. Y mejor que dar cosas, dar capacidades y oportunidades.
Tiende tus manos al caído y levanta del polvo al marginado, que no se contente con las migajas
de tu mesa, sino que pueda sentarse con dignidad a la mesa de la creación; pero lavándole
antes los pies y las manos: siempre así, de abajo arriba, la mano fuerte y amiga.
2. Da la mano al pobre para acompañarle en su camino liberador, hasta que deje de ser pobre y
dependiente, hasta que sea persona participativo y creativo. Es un camino largo, y que pasa
siempre por la cruz. Porque nuestro sufrimiento nuestra tarea no diferiría de la asistencia
social» (Mª Teresa de Calcuta).
No retrasen tus manos la ayuda, porque hace mucho que te esperan, porque «la hora de la
acción ha sonado ya» (Pablo VI). Deprisa, «como quien corre a apagar un incendio» (S. Vicente
de Paúl). «Las obras de caridad son las únicas que no admiten demora. Nada se interponga
entre tu propósito y su realización» (S. Gregorio Nacianceno).
Que tus manos se conviertan en oración y profecía. Oración, porque el sufrimiento es excesivo,
nos supera. El voluntario cristiano «escucha los gemidos sin palabras de quienes han sido
silenciados y suma su clamor al lamento apagado de quienes sufren». Pero hay también
profecía. Hemos de «denunciar de manera profética toda forma de pobreza y opresión» Cada
denuncia nos tiene que comprometer y nos tiene que doler.
Ofrece tus manos doloridas y acepta que puedan ser traspasadas, como las de nuestro Señor
Jesucristo. La mejor respuesta al dolor es compartirlo, como hizo nuestro Señor Jesucristo. La
mejor manera de ayudar a los pobres es hacerse pobre, como nuestro Señor Jesucristo (cf. 2 Co
8,9)¡ Qué pronto se hace pobre el que ama!
Tus manos siempre unidas, no trabajen por su cuenta. Es el valor de la colaboración y la
coordinación, es el sacramento de la comunidad y la comunión. Trabajando juntos, con las
manos bien unidas, sus dedos bien coordinados, es como podemos abrirnos a los sueños y la
esperanza, que (en esperanza fuimos salvados) (Rm 8, 24). Lo nuestro es siempre una
sementera, pero con semillas de Pascua.
DERRIBANDO EL MURO DE LA POBREZA
3. EL SEÑOR ME DIO HERMANOS:
ORDENACIONES DE SACERDOTE Y DIACONOS.
17/10 SAN FRANCISCO EL GRANDE (MADRID)
Oh Dios, que quisiste dar pastores a tu pueblo,
derrama sobre tu iglesia el espíritu de piedad y
fortaleza, que convierta a estos siervos tuyos en
dignos ministros de tu altar y los haga testigos
valientes y humildes de tu Evangelio.
Lo que se haga en San Francisco, el Grande, es
grande, solemne. Y es lo que sucedió el pasado
sábado 15 de octubre, cuando nuestros
hermanos; Fr. Jean Flémoquin Rasamison, Fr.
Lovanirina Henintsoa Rakotondravao, Fr.
Francisco Javier Rojo Alique y Fr. Pablo Scioti,
fueron ordenados. Los dos primeros de
sacerdote, y de diácono los siguientes. Fueron
ordenados por Monseñor Antonio Ángel
Algora que, junto al Provincial y al guardián de la
casa, presidieron el altar. Concelebraron unos
cuarenta sacerdotes y se vieron unos diez
hábitos.
El pasillo central se abría a una hermosa
ceremonia cantando “Aquí estoy, Señor, toma mi
vida, sacerdote para siempre quiero ser.” Y se vio
enriquecida con la Palabra de Dios, donde las
voces del profeta hacían sentir la voluntad de
Dios, “lo que yo te mande, lo dirás”, para hacer
todo, como el apóstol, “por el Evangelio”, pues, “la
mies es abundante”, como dice el Señor por boca
de Mateo.
Primero fue la ordenación de los diáconos y
seguidamente la de los presbíteros. Como nota
curiosa, destacar el canto de la letanía en
malgache y el rito de la paz, cuyos diáconos,
desde el altar, portaron la paz de Jesucristo a
todos los fieles asistentes. Monseñor Algora
destacó en su homilía la importancia del
sacerdocio y la relevancia que tiene en nuestros
días el servicio al hombre de hoy, especialmente
a los pobres.
Y con el cántico, plegaria a Nuestra Señora de los
Ángeles, la provincia franciscana de la
Inmaculada Concepción recogió su alegría por
los nuevos clérigos y compartió un fraternos
ágape con todos los asistentes.
Concede, Señor, a tus siervos alimentados con esta Eucaristía ser siempre fieles ministros del
Evangelio, de los sacramentos y de la caridad.
4. EL SEÑOR ME DIO HERMANOS:
ESPIRITU DE ASÍS
EN GRANADA En la plaza del Triunfo Asistieron unos setenta hermanos de
diferentes confesiones religiosas: budistas, musulmanes judíos, cristianos…….
MADRID (SAN FRANCISCO EL GRANDE)
Esta es la vigésimo novena edición de la Oración en el Espíritu de Asís celebrada en San Francisco el
Grande. Este encuentro de oración, al que siempre se invitaron representantes de otras iglesias y
religiones, cada año ha ido adquiriendo más relieve.
En esta ocasión lo presidió, el Arzobispo de Madrid, acompañado por las jerarquías religiosas más
notables de la capital. Una muestra de esta progresión es que este año han participado unas 500
personas y tuvimos las cámaras de 13Tv para dejar constancia del evento.
5. EL SEÑOR ME DIO HERMANOS:
ISABEL DE HUNGRÍA
Isabel nació tal vez en Bratislava, actualmente en
Eslovaquia. Era el año 1207. Con apenas cuatro años, la
princesita fue dada en matrimonio al primogénito del gran
duque de Turingia, Hermann. Este pacto suponía que Isabel
tenía que ser educada en la corte de su futuro marido.
Hermann murió y sus derechos pasaron a su hermano Luis,
que fue conocido como Luis IV el Santo. Aunque el pacto
matrimonial quedó roto, Luis lo retomó para sí: durante su
tiempo de convivencia, había surgido entre ambos un
sentimiento profundo de hermandad. Según se dice, llamaba
la atención entre los amigos de Luis la fidelidad que éste le
profesaba a Isabel.
Una vez que Isabel fue la gran duquesa, todo su quehacer se
orientaba hacia las obras de misericordia: atender a los
enfermos, visitar a los presos, dar de comer al hambriento,
etc. Luis veía con buenos ojos la bondad de su mujer, pero no
así gran parte de la corte, que continuamente intentaba
indisponer al matrimonio. La vida de Isabel era una continua
denuncia de los atropellos, injusticias y libertinaje de muchos nobles: vestía con sencillez, renunciaba
a comer alimentos que provinieran de la injusticia o la opresión, no participaba en los excesos de sus
cortesanos.
De su unión nacieron tres hijos: Hermann (heredero de Turingia, asesinado por su tío en 1242),
Sofía (que sería por su matrimonio duquesa de Brabante) y Gertrudis (santa Gertrudis de Altenberg,
abadesa en esta abadía premostratense).
ISABEL, PENITENTE FRANCISCANA
Isabel de Hungría es la figura femenina que más genuinamente encarna el espíritu penitencial de
Francisco. Había ya numerosos penitentes franciscanos; muchos hombres y mujeres del pueblo
seguían la vida penitencial marcada por san Francisco y predicada por sus frailes.
Los hermanos menores llegaron a Eisenach, la capital de Turingia, a finales de 1224 o principios
de 1225. En el castillo de Wartburgo residía la corte del gran ducado, presidida por Luis e Isabel.
La predicación de los frailes menores entre el pueblo, predicación que habían aprendido de
Francisco de Asís, consistía en exhortar a la vida de penitencia, es decir, a abandonar la vida mundana,
a practicar la oración y la mortificación, y a ejercitarse en las obras de misericordia. Este estilo de vida
lo describe Francisco en la Carta a todos los fieles penitentes.
Un tal fray Rodrigo introdujo en la vida de penitencia a Isabel, ya predispuesta para los valores
del espíritu. Los testimonios de su franciscanismo, que aparecen en las fuentes isabelinas, son
innegables:
Consta que Isabel cedió a los frailes franciscanos una capilla en Eisenach.
También, que hilaba lana para el sayal de los frailes menores.
Cuando fue expulsada de su castillo, sola y abandonada, acudió a los Franciscanos para
que cantaran un Te Deum en acción de gracias a Dios.
El Viernes Santo día 24 de marzo de 1228, puestas las manos sobre el altar desnudo, hizo
profesión pública en la capilla franciscana. Asumió el hábito gris de penitente como signo
externo.
6. Las cuatro doncellas, interrogadas en el proceso de canonización, también tomaron este
hábito gris. Esta "túnica vil", con la que Isabel quiso ser sepultada, significaba que la
profesión religiosa le había conferido una nueva identidad.
El hospital que fundó en Marburgo (1229) lo puso bajo la protección de san Francisco,
canonizado pocos meses antes.
El autor anónimo cisterciense de Zwettl (1236), afirma que "vistió el hábito gris de los
Frailes Menores".
El empeño demostrado por Isabel en vivir la pobreza, regalarlo todo y dedicarse a la mendicidad,
¿no eran las exigencias de Francisco a sus seguidores?
Estos testimonios vienen corroborados por otras fuentes que ilustran la vida penitencial de
Isabel, tales como las reglas y otros documentos franciscanos, el Memoriale propositi o regla antigua
de los penitentes, las semejanzas o conformidades entre Isabel y Francisco.
PRINCESA Y PENITENTE MISERICORDIOSA
La breve vida de Isabel está saturada de servicio amoroso, de gozo y de sufrimiento. Su prodigalidad y
trato con los indigentes provocaba escándalo en la corte de Wartburgo; no encajaba en su medio.
Muchos vasallos la tenían como una loca. Aquí encontró una de sus grandes cruces: vivió crucificada en
la sociedad a la que pertenecía y entre aquellos que desconocían la misericordia.
En el ejercicio pleno de su autoridad, cuando era todavía la gran condesa y en ausencia de su marido,
tuvo que afrontar la emergencia de una carestía general que hundió al país en el hambre. No dudó en
vaciar los graneros del condado para socorrer a los menesterosos. Isabel servía personalmente a los
débiles, los pobres y los enfermos. Cuidó leprosos, la escoria de la sociedad, como Francisco. Día tras
día, hora tras hora, pobre con los pobres, vivió y ejerció la misericordia de Dios en el río de dolor y de
miseria que la envolvía.
En los desventurados Isabel veía la persona de Cristo (Mt 25,40). Esto le dio fuerza para vencer su
repugnancia natural, tanto que llegó a besar las heridas purulentas de los leprosos.
Pero Isabel no sólo usó del corazón, sino también de la inteligencia en su obra asistencial. Sabía que la
caridad institucionalizada es más efectiva y duradera. En vida de su marido, contribuyó en la erección
de hospitales en Eisenach y Gotha. Luego construyó el de Marburgo, la obra predilecta de su viudedad.
Para atenderlo fundó una fraternidad religiosa con sus amigas y doncellas.
Trabajaba con sus propias manos en la cocina preparando la comida, en el servicio de los indigentes
hospitalizados; fregaba los platos y alejaba las sirvientas cuando éstas se lo querían impedir. Aprendió
a hilar lana y a coser vestidos para los pobres y para ganarse el sustento.
En cierta ocasión le preguntaron a Isabel de Hungría de qué forma se podía dar limosna si no se
tenía dinero. “Descuidad, contestó Isabel, la escasa economía no es impedimento para la
caridad, ya que siempre tenemos dos ojos para ver a los pobres, dos oídos para
escucharlos, una lengua para consolarlos y pedir por ellos, dos manos para ayudarlos y
un corazón para amarlos”.
7. REFLEXIÓN:
EL PAPA A LOS SIN TECHO: PERDÓN POR LOS CRISTIANOS QUE
PASAN ANTE UN POBRE Y MIRAN HACIA OTRO LADO.
El Papa ha vuelto a pedir perdón en
nombre de toda la Iglesia católica. Esta
vez ha sido ante miles de sin techo de
Europa que han peregrinado al Vaticano
para el Jubileo. «Les pido perdón por
todas las veces que los cristianos delante
de una persona pobre o de una persona
pobre miramos hacia otro lado. Perdón»,
les ha dicho el Papa conmovido ante sus
rostros, sus gestos y sus testimonios.
«El perdón de ustedes hacia hombres y
mujeres de Iglesia que no los quieren
mirar o que no les quisieron mirar, es
agua bendita para nosotros, es limpieza para nosotros, es ayudarnos a volver a creer que en el corazón
del Evangelio está la pobreza como gran mensaje», ha explicado.
Francisco predica con el ejemplo. En el pasado regaló sacos de dormir, tarjetas telefónicas y postales con el sello
a los sin techo que duermen en los alrededores del Vaticano. Les ha construido duchas y un refugio en el
8. Vaticano. Pero por experiencia, sabe que lo que más les duele es la indiferencia y la soledad. Por eso, los ha
convocado para el último gran evento del Jubileo de la Misericordia.
Unos cuatro mil sin techo han respondido a su propuesta y han viajado desde toda Europa para participar en
tres días de eventos en Roma, que incluyen encuentros de oración y confesiones, y que concluirán con una misa
en San Pedro con Francisco el próximo domingo.
La mayoría de los participantes han viajado desde Francia, donde nació la idea del encuentro que apadrinó el
cardenal de Lyon Philippe Barbarin.
El obispo de Solsona, Xavier Novell, ha guiado la delegación española, que contaba con al menos un centenar de
peregrinos de Lérida, Bilbao, Madrid, Alicante y Mallorca.
El Papa ha inaugurado el encuentro escuchando sus testimonios y dándoles una breve catequesis. Francisco se
ha conmovido con las palabras de Roberto, quien desde hace años duerme por las calles: «Como seres humanos,
nosotros no nos diferenciamos de los grandes del mundo, tenemos nuestras pasiones y nuestros sueños que
tratamos de sacar adelante con pequeños pasos».
«Cuando un hombre o una mujer pierde la capacidad de soñar, se hace verdaderamente pobre, porque pierde la
capacidad de llevar su pasión adelante», le ha respondido el Papa. «No dejen de soñar. Soñaron que un día
vendrían a Roma, y el sueño se realizó. Ahora sueñen que el mundo se puede cambiar para sembrar paz en el
mundo», les ha pedido.
«Enséñennos a los que tenemos un techo, a los que no nos falta comida ni medicinas, a no estar satisfechos. Con
sus sueños, enséñennos a soñar», ha añadido Francisco.
Para el Papa «con la riqueza uno se olvida de ser solidario, porque se acostumbra a que no falte nada. La pobreza
te hace sufrir, te hace solidario, te hace tender la mano a quien está pasando una situación más difícil: enseñen,
enseñen solidaridad al mundo», ha insistido.
Francisco ha lamentado que nunca faltan quienes se aprovechan de la pobreza de estas personas para sus
propios intereses. Por eso les ha instado a responder con dignidad: «Pobres sí, pero esclavos no. Con la misma
dignidad que tienen un hombre
y una mujer que viven de su
trabajo. Pobres sí, dominados o
explotados, no».
En un gesto elocuente, al
concluir el encuentro, el Papa
ha pedido a un grupo de
personas sin techo que hagan
sobre él un gesto parecido al
que hacen los sacerdotes
cuando invocan la ayuda de
Dios. Entonces, una docena de
ellos lo han rodeado y han
rezado por él mientras
Francisco tenía los ojos
cerrados.
http://www.abc.es/sociedad/abci-papa-sin-techo-perdon-cristianos-pasan-ante-pobre-y-miran-
hacia-otro-lado-201611111814_noticia.html
9. LECTURA FRANCISCANA:
RAÍCES DE LA LAUDATO SÍ
Es el título del nuevo libro que hemos publicado en nuestra Colección “Hermano Francisco”.
El libro está prologado por Fr. Carlos Amigo, Cardenal Arzobispo Emérito de Sevilla. Nos valemos de
sus palabras para presentaros la obra:
No es la primera vez que el profesor Martín Carbajo Núñez se ocupa de temas de ética y, más
concretamente, de aquellos que se refieren a la responsabilidad social, política, económica y de la
comunicación. Pero se venía echando de menos algún estudio más específico sobre temas ecológicos
desde la perspectiva franciscana.
Francisco de Asís compuso, hace siglos, el Cántico de
las Criaturas; el Papa Francisco nos lo ha recordado y
puesto al día en la encíclica Laudato Si’, sobre el
cuidado de la casa común. El espíritu de Francisco de
Asís revolotea de continuo en esta encíclica, como un
eje transversal que la impregna de impresionante
sencillez.
Se nos invita así al gozoso deber de acercarnos al
libro de la creación y a construir la paz, superando
los desafíos éticos del mundo globalizado. Este es
también el objetivo de las páginas de este libro.
Coincidimos con el autor en afirmar que Francisco de
Asís es un modelo excelso de inspiración para una
verdadera ecología del cuidado de la casa común.
Siguiendo su ejemplo, tenemos que superar algunos
ecologismos con ambiguas militancias y no pocos
contrasentidos, que hacen evidente seguir avanzando
en la reflexión y en el asentamiento de la verdad. Se
necesita una ecología completa que sea, a la vez,
intelectual, moral y trascendente. No cabe el divorcio,
sino la integración. La ecología no puede ser
únicamente una cuestión académica pluridisciplinar;
debe ser también una actitud vital, que respete y
potencie esa unidad incuestionable que existe entre
el mundo, la persona y Dios. En este línea de ecología
integral se sitúa este libro.
Resulta evidente la visión franciscana de su autor; y la verdad es que nos hubiera sorprendido que no
fuera así, pues su formación, su amplitud de ideas y su preocupación por la vigencia y actualidad del
franciscanismo en los temas sociales lo estaban requiriendo. En efecto, lo franciscano es
imprescindible en cualquier reflexión seria sobre el cuidado de la casa común. A nadie puede
sorprender que Francisco de Asís sea el Patrono universal de los ecologistas. El profesor Martín
Carbajo no ha necesitado mucho para demostrar en estas páginas los méritos que tiene
el Poverello para tan merecido título.
El problema ecológico es complejo y va mucho más allá de la protección de los grandes espacios
naturales y de la relación del hombre con el medio ambiente. El interés por la ecología no puede
quedarse reducido a la aventura de algunos militantes y activistas, empeñados en sacar adelante unos
10. determinados programas. Se necesita una verdadera escuela, con la pedagogía más adecuada, para
que todos podamos comprender y orientar los temas ecológicos y para que sepamos superar algunos
evidentes contrasentidos.
No es, por tanto, extraño que el autor de este libro subraye la ambigüedad del pensamiento actual
sobre la ecología, la ética ambiental y la sostenibilidad. hace notar la necesidad de una reflexión serena
y bien ponderada, en la que todos participen, para poder abrir nuevos horizontes de esperanza. Para
ello, propone a san Francisco y a la tradición franciscana como fuentes de inspiración.
Argumentos, caminos y vías franciscanas del acercamiento a Dios no son tanto los razonamientos
filosóficos y los discurso apologéticos, cuanto la seducción por el bonitatis splendor, la fascinación
ante el amor de Dios que se ha derramado en la creación entera y particularmente en el hombre.
Martín Carbajo, como no podía ser de otra manera, termina el libro con un espléndido capítulo sobre
la reconciliación y la reconstrucción de la gran familia cósmica. Una familia cordial y universal, en la
que soñaba y para la que vivía Francisco de Asís.
EL AUTOR: Martín Carbajo Núñez, franciscano, (Figueruela de Arriba.
Zamora). Es doctor en teología moral (Academia Alfonsiana, Roma),
diplomado en comunicación social (Univ. Gregoriana, Roma),
licenciado en filología germánica (Univ. Santiago de Compostela) y
técnico especialista en informática de gestión. Actualmente enseña
ética y comuni-cación en tres universidades; dos en Roma:
Antonianum (PUA) y Alfonsiana (PUL), una en USA: el FST, afiliado a
la Univ. San Diego (California). En la PUA ha sido tres años
Vicerrector y Rector Magnífico ad interim.
Ediciones Franciscanas Arantzazu
Castillo de Villamonte, 2 01007 Vitoria-Gasteiz
Tel. 945147224 info@edicionesfranciscanasarantzazu.com
12. SEÑOR, ¿QUÉ QUIERES QUE HAGA?
PROGRAMA DE ESTUDIOS EN FRANCISCANISMO
Este es el principal Programa que desarrolla cada año la E.S.E.F.: tiene una duración de seis meses y se
imparte entre enero y junio. Puede cursarse de manera completa o parcial (algunas semanas, módulos).
Las inscripciones deben formalizarse antes del 20 de diciembre. Está pensado como una experiencia
integral de vida franciscana que combina los aspectos académico, fraterno, espiritual, social e
intercultural. Y aspira a ser un tiempo significativo en el propio itinerario vital de los participantes
(ideal para un tiempo sabático, por ejemplo). Una experiencia que ayude a formar personas con
conocimiento de la tradición franciscana (fuentes, historia, filosofía, teología, actualidad, arte…),
comprometidas respecto a los problemas de la sociedad contemporánea y que aportan al mundo, en sus
debidos contextos socioculturales, los valores propios del franciscanismo.
Taller Semi-Presencial
“Una lectura franciscana de la Laudato Si: Ecología y Economía
La publicación, hace algo más de un año, de la encíclica del Papa Francisco Laudato Si, nos ofrece una
oportunidad estupenda para caminar en esa dirección. Por eso, la E.S.E.F. ofrece al movimiento
franciscano del Sur un Curso-taller que hace -Una lectura franciscana de la Laudato Si-. Se trataría de
releer algunos de los temas transversales de LS’ desde una óptica franciscana, agrupándolos en dos
ámbitos: los temas ecológicos y los de índole más económica y social. Partiendo de lo que dice en cada
tema la LS’ se conectaría con la espiritualidad franciscana ahondando en una espiritualidad para hoy.
El itinerario deseable sería: LS’ ? textos franciscanos ? espiritualidad franciscana ? cambio de vida. El
taller tendrá lugar en Sevilla, un sábado al mes de octubre a mayo, siendo la primera sesión el 15 de
octubre (inscripciones antes del 4 de octubre). Será acompañado por Margarita Suárez, Fidel Aizpurúa
y Vicente Felipe.
Taller Semi-Presencial
“Redescubrir a Francisco y Clara de Asís a través de sus escritos y biografías"
13. Los últimos dos años hemos realizado este taller por tierras del sur: Badajoz y Sevilla. Este año lo
retomamos en Madrid. Ofrecemos este “Taller semipresencial” en relación con los Escritos y Biografías
de Francisco y Clara de Asís. Un cauce para aprender a beber más de cerca y mejor de las fuentes
franciscanas y clarianas. Con la dinámica propia de un taller: en el que es importante lo presencial
(ocho sábados durante el curso) y el trabajo de una sesión a otra; así como el estudio personal y el
ambiente de Familia y el diálogo. Para el 22 de octubre está prevista la primera sesión; las
inscripciones antes del 10 de octubre. Será acompañado por Julio Herranz y Jesús Torrecilla.
IIIª Jornadas de Estudios Franciscanos
La tercera edición de estas JORNADAS tendrá lugar el 23-24 de noviembre. Como en las ediciones
anteriores, este encuentro de estudio está pensado para profesores de la E.S.E.F., del I.T.M. de Murcia,
para personas que han estudiado franciscanismo, y para quien esté muy interesado y motivado en
cualquier rama de los estudios franciscanos. Este año nos acompañara un investigador muy conocido
en el mundo franciscano, FILIPPO SEDA, que ha publicado recientemente la obra "FRANCISCUS
LITURGICUS"; es decir, las fuentes litúrgicas que nos permiten un conocimiento de san Francisco muy
particular. Además abordará el tema del estado de los estudios franciscanos en su vertiente histórica,
destacando las líneas actuales de investigación en el campo de la historia de la orden franciscana.
VIIº Congreso de Estudios
El año 2017 recuerda el aniversario de la Bula ITE VOS (1517): una Bula que quiso favorecer la unión
y terminó generando una mayor separación. Queremos detenernos en esta temática. Se dice que el
Papa Francisco preguntó a los ministros generales en Asís: “¿Qué hacéis que todavía no estáis
unidos…?”. No cabe duda de que el tiempo actual favorece todo lo interfranciscano; el espíritu de
familia franciscana está cada vez más vivo; cada vez surgen más iniciativas que miran en esa dirección.
¿Cómo recuperar el espíritu que no pudo ser; cómo compartir más creativamente nuestra rica
espiritualidad? El Congreso que estamos preparando quiere aportar reflexión espiritual a esta
realidad y dar soporte a las aspiraciones de tantos de nuestros grupos franciscanos. Esperamos la
presencia conjunta y simbólica de los ministros generales Marco Tasca, Michael Perry y Mauro Jöhri
en medio de la Familia Franciscana de la Península Ibérica. Ellos fijarán la fecha de este Congreso.
Colaboraciones
Además de esta Programación propia, llevaremos adelante distintas colaboraciones. Con el ITM de
Murcia y la AHEF queremos desarrollar un Congreso de contenido histórico también a partir del
aniversario de la bula ITE VOS. Seguiremos adelante con la Programación de Formación Permanente a
iniciativa de las Federaciones de Clarisas y Clarisas Capuchinas. Y gestionaremos la organización del
Curso de verano para formandos (Junioras/es) que tradicionalmente promueve la Federación
Interfranciscana de España.
http://escuelafranciscana.org/
14. SEÑOR, ¿QUÉ QUIERES QUE HAGA?
17 DE NOVIEMBRE
DÍA DEL FRANCISCANO SEGLAR
http://www.ordenfranciscanaseglar.es/
15. INSTRUMENTO DE TU PAZ
LOTERIA DE NAVIDAD
EL DÉCIMO DEL AMOR FRANCISCANO
PRECIO: 20 euros o lo que uno quiera
FECHA: Hasta 30/01/ 2017 (No hay día del Sorteo y éste siempre toca)
CUENTA: LA CAIXA ES47 2100 1820 1102 0003 6167
TITULAR: ORDEN FRANCISCANA SEGLAR
CONCEPTO: LOTERÍA SOLIDARIA
DESTINO DEL DINERO: DELEGACIÓN DE MIGRACIONES. DIÓCESIS DE TÁNGER
¡¡¡ES UNA SUERTE PARTICIPAR!!!
16. OREMOS HERMANOS
Canción: “Como te veré, Señor”
Disco:“FRANCISCO DE ASÍS”
Letra y Música: “Las Bienaventuranzas”, 1986
Oración.- Leer despacio y en voz alta
Heme aquí, Señor, envíame.
No te olvides de tu pueblo,
derrama en él tu compasión.
Quiebra el brazo del impío,
si menosprecia tu perdón.
Da atención a los deseos de los humildes.
Al gemido de los pobres,
siempre haces tuyo su dolor.
Pon tu luz en mi camino,
protégeme del tentador.
Da buen fin a mi destino,
realiza en mí tu salvación.
Y en los momentos de flaqueza,
haz que recuerde tu infinito amor
Que me lleve por tu senda,
para entregarte el corazón.
Lecturas Bíblicas.- Leer y medita
Sal 23 (22); Mt 21, 28-32; 1 Ts 5, 16-24.
Reflexión (Papa Francisco)
Si la fe no sale a la calle, no sirve, y que la fe salga a la calle no significa solamente hacer una procesión.
Que la fe salga a la calle significa que yo me muestro como cristiano.
PAZ Y BIEN.