Ectópico deriva del griego, y quiere decir “fuera de lugar”. Es la implantación del huevo fuera de la cavidad uterina. Mejor decir: EMBARAZO EXTRAUTERINO. Ya que la placenta previa es una implantación ectópica, y no es extrauterina
ETIOLOGÍA El factor común de la etiología es el atraso en el transporte del óvulo, este atraso puede deberse principalmente a anomalías de la trompa uterina tales como enfermedades inflamatorias pélvicas crónicas que causan adherencias en el oviducto de la trompa de falopio y que trastornan la motilidad de los cilios por lo que reducen la motilidad del óvulo, el óvulo es fecundado en el oviducto y permanece aquí. Otras anomalías de la trompa pueden ser la causada por gonorrea que causa enfermedad pélvica crónica, pacientes con salpingitis por tuberculosis aunque esta ultima es poco frecuente pero tienen un riesgo del 33% de desarrollar embarazo ectópico. Las enfermedades por endometriosis severas tienen adherencias en la trompa que cierran el oviducto, además pacientes con apendicitis perforadas y plastrones apendiculares . La esterilización quirúrgica puede permitir una recanalización de las trompas y causar RCE. Las tuboplastías tienen riesgo también, el 5% de estas desarrollan embarazo ectópico y es secundaria a la manipulación de la trompa. Otros factores de riesgo son los que están asociados al cigoto o huevo, aquellos que tienen trastornos en la zona pelúcida disminuye su transporte y causa embarazo ectópico. Las endocrinopatías como deficiencia del cuerpo lúteo pueden estar predispuestas, además las que usan los DIU por lo que de cada 1000 de estas pacientes 2 desarrollan embarazo ectópico porque reduce la motilidad de la trompa y predispone a infecciones inflamatorias pélvicas. Hay mayor incidencia de embarazo ectopico en pacientes que usan anticonceptivos a base solo de progestágenos porque reduce la motilidad de la trompa. Los anticonceptivos orales combinados protegen contra embarazo ectópico, al contrario de los que solo son de progestágenos. Los anticonceptivos de altas dosis postcoitales pueden predisponer, estos son los anticonceptivos de emergencia y tienen altas dosis de estrógenos y progestágenos. Las pacientes con antecedentes de embarazos extrauterinos previos están en riesgo especial. Resumen: 1. lesión tubaria: inflamación infecciosa o quirúrgica. 2. divertículos tubáricos 3. < en la actividad mioelectrica: estrógenos, progesterona, envejecimiento. 4. EPIAS 5. embarazos tubáricos previos 6. DIU 7. Operaciones tubáricas previa por infertilidad
EVOLUCIÓN DEL EMBARAZO ECTÓPICO Reabsorción: se observa antes del primer mes. El huevo se reabsorbe y la trompa se recanaliza: curación completa espontánea. v Hematosalpinx o mola tubaria: si ha interesado vasos pequeños, se constituye el hematosalpinx y la trompa se obtura. No implica necesariamente la muerte del huevo, ya que si quedan vellosidades coriónicas adheridas a la trompa y el sangrado no es importante, el huevo puede persistir. v Aborto tubario: es raro. El embarazo desaparece en la cavidad abdominal o en la cavidad uterina. En la cavidad abdominal puede seguir desarrollándose si aun está vivo, y constituye el embarazo abdominal secundario. v Hemorragia: por rotura de la zona de implantación, con compromiso de los vasos de la misma. Puede ser cataclísmica, depende del calibre del vaso que comprometió en su implantación v Rotura de la trompa: es una evolución grave. Se produce por la acción histolítica de las vellosidades coriónicas, favorecida por el adelgazamiento que produce la distensión. Se acompaña de una hemorragia interna profusa, de sangre venosa y arterial, que puede ser mortal si no se actúa con urgencia Pocos fetos alcanzan la viabilidad en el desarrollo extrauterino. Lo más común es la muerte y absorción fetal. Pero a veces, si es mayor de 12 semanas, el feto muerto intraabdominal, puede evolucionar a: · Esqueletización · Saponificación · Momificación · Calcificación (lithopedion) Algunos embarazos abdominales pueden alcanzar la viabilidad. Los embarazos OVÁRICOS Y CERVICALES causan profundas hemorragias tempranamente.
EVOLUCIÓN DEL EMBARAZO ECTÓPICO Reabsorción: se observa antes del primer mes. El huevo se reabsorbe y la trompa se recanaliza: curación completa espontánea. v Hematosalpinx o mola tubaria: si ha interesado vasos pequeños, se constituye el hematosalpinx y la trompa se obtura. No implica necesariamente la muerte del huevo, ya que si quedan vellosidades coriónicas adheridas a la trompa y el sangrado no es importante, el huevo puede persistir. v Aborto tubario: es raro. El embarazo desaparece en la cavidad abdominal o en la cavidad uterina. En la cavidad abdominal puede seguir desarrollándose si aun está vivo, y constituye el embarazo abdominal secundario. v Hemorragia: por rotura de la zona de implantación, con compromiso de los vasos de la misma. Puede ser cataclísmica, depende del calibre del vaso que comprometió en su implantación v Rotura de la trompa: es una evolución grave. Se produce por la acción histolítica de las vellosidades coriónicas, favorecida por el adelgazamiento que produce la distensión. Se acompaña de una hemorragia interna profusa, de sangre venosa y arterial, que puede ser mortal si no se actúa con urgencia Pocos fetos alcanzan la viabilidad en el desarrollo extrauterino. Lo más común es la muerte y absorción fetal. Pero a veces, si es mayor de 12 semanas, el feto muerto intraabdominal, puede evolucionar a: · Esqueletización · Saponificación · Momificación · Calcificación (lithopedion) Algunos embarazos abdominales pueden alcanzar la viabilidad. Los embarazos OVÁRICOS Y CERVICALES causan profundas hemorragias tempranamente.
SÍNTOMAS El embarazo tubario no complicado NO determina ningún síntoma subjetivo que permita sospecharlo. En el embarazo tubario complicado existen los síntomas de gestación y los síntomas de la complicación: v Dolor : es lo más prominente. Del lado de la trompa afectada (fosa ilíaca derecha o izquierda). Primero es un dolor agudo, luego se hace más difuso, con molestias rectales, dolor a la movilización del cérvix (signo de Frenkel), dolor lumbar, omalgia (por la irritación que produce la sangre en el peritoneo diafragmático). Cuando se rompe la trompa, el dolor aumenta bruscamente (emergencia abdominal aguda). v Lipotimia : acompaña o sigue a la acentuación del dolor abdominal. Puede repetirse a intervalos variables LA TRIADA SINTOMÁTICA (METRORRAGIA, DOLOR Y LIPOTIMIA), CON SIGNOS DE GESTACIÓN O SIN ELLOS EN UNA MUJER JOVEN, DEBE HACER SOSPECHAR UN EMBARAZO TUBARIO COMPLICADO v Metrorragia : escasa (menor que una menstruación normal) y oscura (como borra de café), e irregular. Es debida al desprendimiento de la decidua uterina. v Hemorragia interna : por rotura tubaria. El dolor es brusco, agudísimo, angustioso. Hay hipovolemia y shock, si es aguda. v Metrorragia abundante sin dolor, si el embarazo es cervical.
SÍNTOMAS El embarazo tubario no complicado NO determina ningún síntoma subjetivo que permita sospecharlo. En el embarazo tubario complicado existen los síntomas de gestación y los síntomas de la complicación: v Dolor : es lo más prominente. Del lado de la trompa afectada (fosa ilíaca derecha o izquierda). Primero es un dolor agudo, luego se hace más difuso, con molestias rectales, dolor a la movilización del cérvix (signo de Frenkel), dolor lumbar, omalgia (por la irritación que produce la sangre en el peritoneo diafragmático). Cuando se rompe la trompa, el dolor aumenta bruscamente (emergencia abdominal aguda). v Lipotimia : acompaña o sigue a la acentuación del dolor abdominal. Puede repetirse a intervalos variables LA TRIADA SINTOMÁTICA (METRORRAGIA, DOLOR Y LIPOTIMIA), CON SIGNOS DE GESTACIÓN O SIN ELLOS EN UNA MUJER JOVEN, DEBE HACER SOSPECHAR UN EMBARAZO TUBARIO COMPLICADO v Metrorragia : escasa (menor que una menstruación normal) y oscura (como borra de café), e irregular. Es debida al desprendimiento de la decidua uterina. v Hemorragia interna : por rotura tubaria. El dolor es brusco, agudísimo, angustioso. Hay hipovolemia y shock, si es aguda. v Metrorragia abundante sin dolor, si el embarazo es cervical.
SÍNTOMAS El embarazo tubario no complicado NO determina ningún síntoma subjetivo que permita sospecharlo. En el embarazo tubario complicado existen los síntomas de gestación y los síntomas de la complicación: v Dolor : es lo más prominente. Del lado de la trompa afectada (fosa ilíaca derecha o izquierda). Primero es un dolor agudo, luego se hace más difuso, con molestias rectales, dolor a la movilización del cérvix (signo de Frenkel), dolor lumbar, omalgia (por la irritación que produce la sangre en el peritoneo diafragmático). Cuando se rompe la trompa, el dolor aumenta bruscamente (emergencia abdominal aguda). v Lipotimia : acompaña o sigue a la acentuación del dolor abdominal. Puede repetirse a intervalos variables LA TRIADA SINTOMÁTICA (METRORRAGIA, DOLOR Y LIPOTIMIA), CON SIGNOS DE GESTACIÓN O SIN ELLOS EN UNA MUJER JOVEN, DEBE HACER SOSPECHAR UN EMBARAZO TUBARIO COMPLICADO v Metrorragia : escasa (menor que una menstruación normal) y oscura (como borra de café), e irregular. Es debida al desprendimiento de la decidua uterina. v Hemorragia interna : por rotura tubaria. El dolor es brusco, agudísimo, angustioso. Hay hipovolemia y shock, si es aguda. v Metrorragia abundante sin dolor, si el embarazo es cervical.
DIAGNÓSTICO )LABORATORIO: la hemoglobina y el hematocrito pueden ser de utilidad para el seguimiento de la paciente. Estos valores pueden no alterarse precozmente ante una hemorragia.La leucocitosis puede estar presente en el 50% de los casos mientras que el otro 50% permanece con valores normales.La gonadotrofina coriónica humana puede investigarse en suero o en orina. Las pruebas urinarias son de poca sensibilidad en esta patología. Con la prueba de ß HCG en suero se puede detectar todo tipo de embarazos. Los niveles de la ßHCG se correlacionan con la edad gestacional. Durante las primeras 6 semanas de gestación los niveles séricos se incrementan en forma exponencial ( la duplicación del valor de la ßHCG es constante), después de las 6 semanas (nivel de la ßHCG de 6000 a 10000 mUI/ml) el ascenso se hace más lento y menos constante. Cundo los niveles de ßHCG son bajos (por debajo de 1000 mUI/ml) el valor absoluto es menos útil para diferenciar un embarazo normal de uno extrauterino. 2) ECOGRAFÍA TRANSABDOMINAL A) ÚTERO VACÍO B) MASA ANEXIAL C) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Con este método no es posible diagnosticar embarazos pequeños de 5 a 7 semanas. 3) ECOGRAFÍA TRANSVAGINAL A) ANILLO TUBÁRICO: un anillo ecogénico alrededor de un centro hipoecogénico como estructura encontrada fuera del útero. B) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Este método permite un diagnóstico precoz del embarazo ectópico 4) CULDOCENTESIS: se realiza cuando se detecta una colección líquida en el saco de Douglas. 5) LAPAROSCOPÍA: permite establecer el diagnóstico definitivo.
DIAGNÓSTICO )LABORATORIO: la hemoglobina y el hematocrito pueden ser de utilidad para el seguimiento de la paciente. Estos valores pueden no alterarse precozmente ante una hemorragia.La leucocitosis puede estar presente en el 50% de los casos mientras que el otro 50% permanece con valores normales.La gonadotrofina coriónica humana puede investigarse en suero o en orina. Las pruebas urinarias son de poca sensibilidad en esta patología. Con la prueba de ß HCG en suero se puede detectar todo tipo de embarazos. Los niveles de la ßHCG se correlacionan con la edad gestacional. Durante las primeras 6 semanas de gestación los niveles séricos se incrementan en forma exponencial ( la duplicación del valor de la ßHCG es constante), después de las 6 semanas (nivel de la ßHCG de 6000 a 10000 mUI/ml) el ascenso se hace más lento y menos constante. Cundo los niveles de ßHCG son bajos (por debajo de 1000 mUI/ml) el valor absoluto es menos útil para diferenciar un embarazo normal de uno extrauterino. 2) ECOGRAFÍA TRANSABDOMINAL A) ÚTERO VACÍO B) MASA ANEXIAL C) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Con este método no es posible diagnosticar embarazos pequeños de 5 a 7 semanas. 3) ECOGRAFÍA TRANSVAGINAL A) ANILLO TUBÁRICO: un anillo ecogénico alrededor de un centro hipoecogénico como estructura encontrada fuera del útero. B) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Este método permite un diagnóstico precoz del embarazo ectópico 4) CULDOCENTESIS: se realiza cuando se detecta una colección líquida en el saco de Douglas. 5) LAPAROSCOPÍA: permite establecer el diagnóstico definitivo.
DIAGNÓSTICO )LABORATORIO: la hemoglobina y el hematocrito pueden ser de utilidad para el seguimiento de la paciente. Estos valores pueden no alterarse precozmente ante una hemorragia.La leucocitosis puede estar presente en el 50% de los casos mientras que el otro 50% permanece con valores normales.La gonadotrofina coriónica humana puede investigarse en suero o en orina. Las pruebas urinarias son de poca sensibilidad en esta patología. Con la prueba de ß HCG en suero se puede detectar todo tipo de embarazos. Los niveles de la ßHCG se correlacionan con la edad gestacional. Durante las primeras 6 semanas de gestación los niveles séricos se incrementan en forma exponencial ( la duplicación del valor de la ßHCG es constante), después de las 6 semanas (nivel de la ßHCG de 6000 a 10000 mUI/ml) el ascenso se hace más lento y menos constante. Cundo los niveles de ßHCG son bajos (por debajo de 1000 mUI/ml) el valor absoluto es menos útil para diferenciar un embarazo normal de uno extrauterino. 2) ECOGRAFÍA TRANSABDOMINAL A) ÚTERO VACÍO B) MASA ANEXIAL C) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Con este método no es posible diagnosticar embarazos pequeños de 5 a 7 semanas. 3) ECOGRAFÍA TRANSVAGINAL A) ANILLO TUBÁRICO: un anillo ecogénico alrededor de un centro hipoecogénico como estructura encontrada fuera del útero. B) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Este método permite un diagnóstico precoz del embarazo ectópico 4) CULDOCENTESIS: se realiza cuando se detecta una colección líquida en el saco de Douglas. 5) LAPAROSCOPÍA: permite establecer el diagnóstico definitivo.
DIAGNÓSTICO )LABORATORIO: la hemoglobina y el hematocrito pueden ser de utilidad para el seguimiento de la paciente. Estos valores pueden no alterarse precozmente ante una hemorragia.La leucocitosis puede estar presente en el 50% de los casos mientras que el otro 50% permanece con valores normales.La gonadotrofina coriónica humana puede investigarse en suero o en orina. Las pruebas urinarias son de poca sensibilidad en esta patología. Con la prueba de ß HCG en suero se puede detectar todo tipo de embarazos. Los niveles de la ßHCG se correlacionan con la edad gestacional. Durante las primeras 6 semanas de gestación los niveles séricos se incrementan en forma exponencial ( la duplicación del valor de la ßHCG es constante), después de las 6 semanas (nivel de la ßHCG de 6000 a 10000 mUI/ml) el ascenso se hace más lento y menos constante. Cundo los niveles de ßHCG son bajos (por debajo de 1000 mUI/ml) el valor absoluto es menos útil para diferenciar un embarazo normal de uno extrauterino. 2) ECOGRAFÍA TRANSABDOMINAL A) ÚTERO VACÍO B) MASA ANEXIAL C) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Con este método no es posible diagnosticar embarazos pequeños de 5 a 7 semanas. 3) ECOGRAFÍA TRANSVAGINAL A) ANILLO TUBÁRICO: un anillo ecogénico alrededor de un centro hipoecogénico como estructura encontrada fuera del útero. B) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Este método permite un diagnóstico precoz del embarazo ectópico 4) CULDOCENTESIS: se realiza cuando se detecta una colección líquida en el saco de Douglas. 5) LAPAROSCOPÍA: permite establecer el diagnóstico definitivo.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL SALPINGITIS AGUDA -ABORTO DE EMBARAZO INTRAUTERINO -ROTURA DE UN CUERPO AMARILLO O UN QUISTE FOLICULAR -TORSIÓN DE UN QUISTE -APENDICITIS -DISPOSITIVOS INTRAUTERINOS -Mola hidatiforme Tumores
COMPLICACIONES
COMPLICACIONES
COMPLICACIONES
COMPLICACIONES
DIAGNÓSTICO )LABORATORIO: la hemoglobina y el hematocrito pueden ser de utilidad para el seguimiento de la paciente. Estos valores pueden no alterarse precozmente ante una hemorragia.La leucocitosis puede estar presente en el 50% de los casos mientras que el otro 50% permanece con valores normales.La gonadotrofina coriónica humana puede investigarse en suero o en orina. Las pruebas urinarias son de poca sensibilidad en esta patología. Con la prueba de ß HCG en suero se puede detectar todo tipo de embarazos. Los niveles de la ßHCG se correlacionan con la edad gestacional. Durante las primeras 6 semanas de gestación los niveles séricos se incrementan en forma exponencial ( la duplicación del valor de la ßHCG es constante), después de las 6 semanas (nivel de la ßHCG de 6000 a 10000 mUI/ml) el ascenso se hace más lento y menos constante. Cundo los niveles de ßHCG son bajos (por debajo de 1000 mUI/ml) el valor absoluto es menos útil para diferenciar un embarazo normal de uno extrauterino. 2) ECOGRAFÍA TRANSABDOMINAL A) ÚTERO VACÍO B) MASA ANEXIAL C) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Con este método no es posible diagnosticar embarazos pequeños de 5 a 7 semanas. 3) ECOGRAFÍA TRANSVAGINAL A) ANILLO TUBÁRICO: un anillo ecogénico alrededor de un centro hipoecogénico como estructura encontrada fuera del útero. B) LÍQUIDO EN EL FONDO DE SACO Este método permite un diagnóstico precoz del embarazo ectópico 4) CULDOCENTESIS: se realiza cuando se detecta una colección líquida en el saco de Douglas. 5) LAPAROSCOPÍA: permite establecer el diagnóstico definitivo.
TRTAMIENTO QUIRÚRGICO La laparotomía exploradora fue introducida en 1884 por Robert Lawson Taif (Taif RL. 5 cases of extra uterine pregnancy operated upon of the time of rupture. Br Med J). El tratamiento operatorio es el que con más frecuencia se utiliza en el embarazo ectópico. Shapiro y Adlen describieron el tratamiento del ectópico por laparoscopia. Con el advenimiento de la cirugía laparoscópica con mínimo acceso, nuevas tendencias se han incluido en la cirugía del embarazo ectópico (figura 1). En el pasado el tratamiento siempre era quirúrgico y destinado a eliminar el anejo y órgano afectado. Actualmente se puede considerar 2 tendencias: la cirugía por laparoscopia y la cirugía por laparotomía. Es necesario considerar muchos factores al evaluar el éxito o fracaso de un intento de embarazo posterior al tratamiento de un embarazo ectópico.4 Estos factores incluyen la edad, los partos anteriores, la enfermedad tubaria bilateral y la ruptura previa de la trompa de Falopio. En Cuba el profesor Nelson Rodríguez 12 plantea que en el momento de seleccionar la técnica quirúrgica, laparoscopia o si es necesaria una laparatomía, se debe tener en cuenta el estado de la trompa (rota o no), la localización del embarazo: intersticial, ístmico, ampular; el tamaño del tumor (varía entre 3 y 8 cm); accesibilidad operatoria (presencia y caractéres de las adherencias); las dificultades para lograr la hemostasia y los deseos de mantener la fertilidad por parte de la mujer. Con el uso de técnicas diagnósticas y procedimientos quirúrgicos novedosos para conservar las trompas dañadas se tiene la esperanza de poder lograr embarazos posteriores.13 En un estudio sobre la relación costo-efectividad de la laparoscopia versus laparatomía para embarazos tubarios, se llegó a la conclusión de que la laparascopia se asocia a resultados similares de la laparatomia, pero con menor costo.1 Técnicas conservadoras. Salpingostomía, también llamada salpingostomía lineal. Se utiliza para eliminar un embarazo pequeño menor de 2 cm de longitud (no complicado) y en el tercio distal de la trompa. Se realiza una incisión lineal en el borde antimesentérico, los sitios de hemorragias son controlados por puntos de aguja electroagulador o láser. La salpingotomía fue descrita por primera vez por Stromme en 1953. Se realiza incisión longitudinal sobre el borde antisementerico de la trompa de Falopio (figura 2). El producto es aspirado o eliminado y se irriga la trompa con soluciones para identificar los sitios de hemorragias y poder controlarlos. El cierre es recomendado en un plano (De Cherney y Jones 1985). La resección segmentaria con anastomosis es recomendable para un embarazo ístmico sin rotura. Una vez expuesto el segmento de la trompa se hace una incisión en el mesosalpinx y se reseca el istmo tubárico que contiene el ectópico. Se sutura el mesosalpinx de manera de reaproximar los muñones tubarios. Los segmentos de la trompa son anastomosados unos al otro en planos a puntos separados. Se utilizan 3 suturas en la muscular y 3 en la serosa. El plano seroso fortalece el primer plano. Evacuación por las fimbrias: se puede realizar en los éctopicos fímbricos por ordeño o aspiración. Actualmente no es recomendado porque se asocia con una tasa 2 veces mayor de recurrencia de éctopicos y de reexploración quirúrgica por hemorragia recurrente del trofoblasto persistente.14 El tratamiento quiruúrgico se hace en pacientes con embarazo ectópico roto, existe la salpingostomía donde hay una incisión lineal en la trompa extrayéndose el embarazo ectópico, luego se sutura la mucosa de la trompa. Otro método es la salpingectomia , donde se corta la trompa y se hace en casos donde hay embarazo ectópico roto y hay adherencia que no permite salvar la trompa. Otro método es la resección parcial donde se quita el pedazo donde estaba el embarazo ectópico y luego se ligan ambos extremos. Además se puede hacer un ordeñamiento de la trompa cuando este no está roto y esta localizado en las fimbrias, deja intacta la trompa. El último y más radical método quirúrgico es la histerectomía total que se hace en embarazos intersticiales porque causan mucho sangrado. El embarazo ectópico intersticial es indicación de histerectomía total. La salpingostomía no se sutura si mide menos de 2cm.
TRTAMIENTO QUIRÚRGICO La laparotomía exploradora fue introducida en 1884 por Robert Lawson Taif (Taif RL. 5 cases of extra uterine pregnancy operated upon of the time of rupture. Br Med J). El tratamiento operatorio es el que con más frecuencia se utiliza en el embarazo ectópico. Shapiro y Adlen describieron el tratamiento del ectópico por laparoscopia. Con el advenimiento de la cirugía laparoscópica con mínimo acceso, nuevas tendencias se han incluido en la cirugía del embarazo ectópico (figura 1). En el pasado el tratamiento siempre era quirúrgico y destinado a eliminar el anejo y órgano afectado. Actualmente se puede considerar 2 tendencias: la cirugía por laparoscopia y la cirugía por laparotomía. Es necesario considerar muchos factores al evaluar el éxito o fracaso de un intento de embarazo posterior al tratamiento de un embarazo ectópico.4 Estos factores incluyen la edad, los partos anteriores, la enfermedad tubaria bilateral y la ruptura previa de la trompa de Falopio. En Cuba el profesor Nelson Rodríguez 12 plantea que en el momento de seleccionar la técnica quirúrgica, laparoscopia o si es necesaria una laparatomía, se debe tener en cuenta el estado de la trompa (rota o no), la localización del embarazo: intersticial, ístmico, ampular; el tamaño del tumor (varía entre 3 y 8 cm); accesibilidad operatoria (presencia y caractéres de las adherencias); las dificultades para lograr la hemostasia y los deseos de mantener la fertilidad por parte de la mujer. Con el uso de técnicas diagnósticas y procedimientos quirúrgicos novedosos para conservar las trompas dañadas se tiene la esperanza de poder lograr embarazos posteriores.13 En un estudio sobre la relación costo-efectividad de la laparoscopia versus laparatomía para embarazos tubarios, se llegó a la conclusión de que la laparascopia se asocia a resultados similares de la laparatomia, pero con menor costo.1 Técnicas conservadoras. Salpingostomía, también llamada salpingostomía lineal. Se utiliza para eliminar un embarazo pequeño menor de 2 cm de longitud (no complicado) y en el tercio distal de la trompa. Se realiza una incisión lineal en el borde antimesentérico, los sitios de hemorragias son controlados por puntos de aguja electroagulador o láser. La salpingotomía fue descrita por primera vez por Stromme en 1953. Se realiza incisión longitudinal sobre el borde antisementerico de la trompa de Falopio (figura 2). El producto es aspirado o eliminado y se irriga la trompa con soluciones para identificar los sitios de hemorragias y poder controlarlos. El cierre es recomendado en un plano (De Cherney y Jones 1985). La resección segmentaria con anastomosis es recomendable para un embarazo ístmico sin rotura. Una vez expuesto el segmento de la trompa se hace una incisión en el mesosalpinx y se reseca el istmo tubárico que contiene el ectópico. Se sutura el mesosalpinx de manera de reaproximar los muñones tubarios. Los segmentos de la trompa son anastomosados unos al otro en planos a puntos separados. Se utilizan 3 suturas en la muscular y 3 en la serosa. El plano seroso fortalece el primer plano. Evacuación por las fimbrias: se puede realizar en los éctopicos fímbricos por ordeño o aspiración. Actualmente no es recomendado porque se asocia con una tasa 2 veces mayor de recurrencia de éctopicos y de reexploración quirúrgica por hemorragia recurrente del trofoblasto persistente.14
TRTAMIENTO QUIRÚRGICO La laparotomía exploradora fue introducida en 1884 por Robert Lawson Taif (Taif RL. 5 cases of extra uterine pregnancy operated upon of the time of rupture. Br Med J). El tratamiento operatorio es el que con más frecuencia se utiliza en el embarazo ectópico. Shapiro y Adlen describieron el tratamiento del ectópico por laparoscopia. Con el advenimiento de la cirugía laparoscópica con mínimo acceso, nuevas tendencias se han incluido en la cirugía del embarazo ectópico (figura 1). En el pasado el tratamiento siempre era quirúrgico y destinado a eliminar el anejo y órgano afectado. Actualmente se puede considerar 2 tendencias: la cirugía por laparoscopia y la cirugía por laparotomía. Es necesario considerar muchos factores al evaluar el éxito o fracaso de un intento de embarazo posterior al tratamiento de un embarazo ectópico.4 Estos factores incluyen la edad, los partos anteriores, la enfermedad tubaria bilateral y la ruptura previa de la trompa de Falopio. En Cuba el profesor Nelson Rodríguez 12 plantea que en el momento de seleccionar la técnica quirúrgica, laparoscopia o si es necesaria una laparatomía, se debe tener en cuenta el estado de la trompa (rota o no), la localización del embarazo: intersticial, ístmico, ampular; el tamaño del tumor (varía entre 3 y 8 cm); accesibilidad operatoria (presencia y caractéres de las adherencias); las dificultades para lograr la hemostasia y los deseos de mantener la fertilidad por parte de la mujer. Con el uso de técnicas diagnósticas y procedimientos quirúrgicos novedosos para conservar las trompas dañadas se tiene la esperanza de poder lograr embarazos posteriores.13 En un estudio sobre la relación costo-efectividad de la laparoscopia versus laparatomía para embarazos tubarios, se llegó a la conclusión de que la laparascopia se asocia a resultados similares de la laparatomia, pero con menor costo.1 Técnicas conservadoras. Salpingostomía, también llamada salpingostomía lineal. Se utiliza para eliminar un embarazo pequeño menor de 2 cm de longitud (no complicado) y en el tercio distal de la trompa. Se realiza una incisión lineal en el borde antimesentérico, los sitios de hemorragias son controlados por puntos de aguja electroagulador o láser. La salpingotomía fue descrita por primera vez por Stromme en 1953. Se realiza incisión longitudinal sobre el borde antisementerico de la trompa de Falopio (figura 2). El producto es aspirado o eliminado y se irriga la trompa con soluciones para identificar los sitios de hemorragias y poder controlarlos. El cierre es recomendado en un plano (De Cherney y Jones 1985). La resección segmentaria con anastomosis es recomendable para un embarazo ístmico sin rotura. Una vez expuesto el segmento de la trompa se hace una incisión en el mesosalpinx y se reseca el istmo tubárico que contiene el ectópico. Se sutura el mesosalpinx de manera de reaproximar los muñones tubarios. Los segmentos de la trompa son anastomosados unos al otro en planos a puntos separados. Se utilizan 3 suturas en la muscular y 3 en la serosa. El plano seroso fortalece el primer plano. Evacuación por las fimbrias: se puede realizar en los éctopicos fímbricos por ordeño o aspiración. Actualmente no es recomendado porque se asocia con una tasa 2 veces mayor de recurrencia de éctopicos y de reexploración quirúrgica por hemorragia recurrente del trofoblasto persistente.14
TRTAMIENTO QUIRÚRGICO La laparotomía exploradora fue introducida en 1884 por Robert Lawson Taif (Taif RL. 5 cases of extra uterine pregnancy operated upon of the time of rupture. Br Med J). El tratamiento operatorio es el que con más frecuencia se utiliza en el embarazo ectópico. Shapiro y Adlen describieron el tratamiento del ectópico por laparoscopia. Con el advenimiento de la cirugía laparoscópica con mínimo acceso, nuevas tendencias se han incluido en la cirugía del embarazo ectópico (figura 1). En el pasado el tratamiento siempre era quirúrgico y destinado a eliminar el anejo y órgano afectado. Actualmente se puede considerar 2 tendencias: la cirugía por laparoscopia y la cirugía por laparotomía. Es necesario considerar muchos factores al evaluar el éxito o fracaso de un intento de embarazo posterior al tratamiento de un embarazo ectópico.4 Estos factores incluyen la edad, los partos anteriores, la enfermedad tubaria bilateral y la ruptura previa de la trompa de Falopio. En Cuba el profesor Nelson Rodríguez 12 plantea que en el momento de seleccionar la técnica quirúrgica, laparoscopia o si es necesaria una laparatomía, se debe tener en cuenta el estado de la trompa (rota o no), la localización del embarazo: intersticial, ístmico, ampular; el tamaño del tumor (varía entre 3 y 8 cm); accesibilidad operatoria (presencia y caractéres de las adherencias); las dificultades para lograr la hemostasia y los deseos de mantener la fertilidad por parte de la mujer. Con el uso de técnicas diagnósticas y procedimientos quirúrgicos novedosos para conservar las trompas dañadas se tiene la esperanza de poder lograr embarazos posteriores.13 En un estudio sobre la relación costo-efectividad de la laparoscopia versus laparatomía para embarazos tubarios, se llegó a la conclusión de que la laparascopia se asocia a resultados similares de la laparatomia, pero con menor costo.1 Técnicas conservadoras. Salpingostomía, también llamada salpingostomía lineal. Se utiliza para eliminar un embarazo pequeño menor de 2 cm de longitud (no complicado) y en el tercio distal de la trompa. Se realiza una incisión lineal en el borde antimesentérico, los sitios de hemorragias son controlados por puntos de aguja electroagulador o láser. La salpingotomía fue descrita por primera vez por Stromme en 1953. Se realiza incisión longitudinal sobre el borde antisementerico de la trompa de Falopio (figura 2). El producto es aspirado o eliminado y se irriga la trompa con soluciones para identificar los sitios de hemorragias y poder controlarlos. El cierre es recomendado en un plano (De Cherney y Jones 1985). La resección segmentaria con anastomosis es recomendable para un embarazo ístmico sin rotura. Una vez expuesto el segmento de la trompa se hace una incisión en el mesosalpinx y se reseca el istmo tubárico que contiene el ectópico. Se sutura el mesosalpinx de manera de reaproximar los muñones tubarios. Los segmentos de la trompa son anastomosados unos al otro en planos a puntos separados. Se utilizan 3 suturas en la muscular y 3 en la serosa. El plano seroso fortalece el primer plano. Evacuación por las fimbrias: se puede realizar en los éctopicos fímbricos por ordeño o aspiración. Actualmente no es recomendado porque se asocia con una tasa 2 veces mayor de recurrencia de éctopicos y de reexploración quirúrgica por hemorragia recurrente del trofoblasto persistente.14
TRTAMIENTO QUIRÚRGICO La laparotomía exploradora fue introducida en 1884 por Robert Lawson Taif (Taif RL. 5 cases of extra uterine pregnancy operated upon of the time of rupture. Br Med J). El tratamiento operatorio es el que con más frecuencia se utiliza en el embarazo ectópico. Shapiro y Adlen describieron el tratamiento del ectópico por laparoscopia. Con el advenimiento de la cirugía laparoscópica con mínimo acceso, nuevas tendencias se han incluido en la cirugía del embarazo ectópico (figura 1). En el pasado el tratamiento siempre era quirúrgico y destinado a eliminar el anejo y órgano afectado. Actualmente se puede considerar 2 tendencias: la cirugía por laparoscopia y la cirugía por laparotomía. Es necesario considerar muchos factores al evaluar el éxito o fracaso de un intento de embarazo posterior al tratamiento de un embarazo ectópico.4 Estos factores incluyen la edad, los partos anteriores, la enfermedad tubaria bilateral y la ruptura previa de la trompa de Falopio. En Cuba el profesor Nelson Rodríguez 12 plantea que en el momento de seleccionar la técnica quirúrgica, laparoscopia o si es necesaria una laparatomía, se debe tener en cuenta el estado de la trompa (rota o no), la localización del embarazo: intersticial, ístmico, ampular; el tamaño del tumor (varía entre 3 y 8 cm); accesibilidad operatoria (presencia y caractéres de las adherencias); las dificultades para lograr la hemostasia y los deseos de mantener la fertilidad por parte de la mujer. Con el uso de técnicas diagnósticas y procedimientos quirúrgicos novedosos para conservar las trompas dañadas se tiene la esperanza de poder lograr embarazos posteriores.13 En un estudio sobre la relación costo-efectividad de la laparoscopia versus laparatomía para embarazos tubarios, se llegó a la conclusión de que la laparascopia se asocia a resultados similares de la laparatomia, pero con menor costo.1 Técnicas conservadoras. Salpingostomía, también llamada salpingostomía lineal. Se utiliza para eliminar un embarazo pequeño menor de 2 cm de longitud (no complicado) y en el tercio distal de la trompa. Se realiza una incisión lineal en el borde antimesentérico, los sitios de hemorragias son controlados por puntos de aguja electroagulador o láser. La salpingotomía fue descrita por primera vez por Stromme en 1953. Se realiza incisión longitudinal sobre el borde antisementerico de la trompa de Falopio (figura 2). El producto es aspirado o eliminado y se irriga la trompa con soluciones para identificar los sitios de hemorragias y poder controlarlos. El cierre es recomendado en un plano (De Cherney y Jones 1985). La resección segmentaria con anastomosis es recomendable para un embarazo ístmico sin rotura. Una vez expuesto el segmento de la trompa se hace una incisión en el mesosalpinx y se reseca el istmo tubárico que contiene el ectópico. Se sutura el mesosalpinx de manera de reaproximar los muñones tubarios. Los segmentos de la trompa son anastomosados unos al otro en planos a puntos separados. Se utilizan 3 suturas en la muscular y 3 en la serosa. El plano seroso fortalece el primer plano. Evacuación por las fimbrias: se puede realizar en los éctopicos fímbricos por ordeño o aspiración. Actualmente no es recomendado porque se asocia con una tasa 2 veces mayor de recurrencia de éctopicos y de reexploración quirúrgica por hemorragia recurrente del trofoblasto persistente.14
TRTAMIENTO QUIRÚRGICO La laparotomía exploradora fue introducida en 1884 por Robert Lawson Taif (Taif RL. 5 cases of extra uterine pregnancy operated upon of the time of rupture. Br Med J). El tratamiento operatorio es el que con más frecuencia se utiliza en el embarazo ectópico. Shapiro y Adlen describieron el tratamiento del ectópico por laparoscopia. Con el advenimiento de la cirugía laparoscópica con mínimo acceso, nuevas tendencias se han incluido en la cirugía del embarazo ectópico (figura 1). En el pasado el tratamiento siempre era quirúrgico y destinado a eliminar el anejo y órgano afectado. Actualmente se puede considerar 2 tendencias: la cirugía por laparoscopia y la cirugía por laparotomía. Es necesario considerar muchos factores al evaluar el éxito o fracaso de un intento de embarazo posterior al tratamiento de un embarazo ectópico.4 Estos factores incluyen la edad, los partos anteriores, la enfermedad tubaria bilateral y la ruptura previa de la trompa de Falopio. En Cuba el profesor Nelson Rodríguez 12 plantea que en el momento de seleccionar la técnica quirúrgica, laparoscopia o si es necesaria una laparatomía, se debe tener en cuenta el estado de la trompa (rota o no), la localización del embarazo: intersticial, ístmico, ampular; el tamaño del tumor (varía entre 3 y 8 cm); accesibilidad operatoria (presencia y caractéres de las adherencias); las dificultades para lograr la hemostasia y los deseos de mantener la fertilidad por parte de la mujer. Con el uso de técnicas diagnósticas y procedimientos quirúrgicos novedosos para conservar las trompas dañadas se tiene la esperanza de poder lograr embarazos posteriores.13 En un estudio sobre la relación costo-efectividad de la laparoscopia versus laparatomía para embarazos tubarios, se llegó a la conclusión de que la laparascopia se asocia a resultados similares de la laparatomia, pero con menor costo.1 Técnicas conservadoras. Salpingostomía, también llamada salpingostomía lineal. Se utiliza para eliminar un embarazo pequeño menor de 2 cm de longitud (no complicado) y en el tercio distal de la trompa. Se realiza una incisión lineal en el borde antimesentérico, los sitios de hemorragias son controlados por puntos de aguja electroagulador o láser. La salpingotomía fue descrita por primera vez por Stromme en 1953. Se realiza incisión longitudinal sobre el borde antisementerico de la trompa de Falopio (figura 2). El producto es aspirado o eliminado y se irriga la trompa con soluciones para identificar los sitios de hemorragias y poder controlarlos. El cierre es recomendado en un plano (De Cherney y Jones 1985). La resección segmentaria con anastomosis es recomendable para un embarazo ístmico sin rotura. Una vez expuesto el segmento de la trompa se hace una incisión en el mesosalpinx y se reseca el istmo tubárico que contiene el ectópico. Se sutura el mesosalpinx de manera de reaproximar los muñones tubarios. Los segmentos de la trompa son anastomosados unos al otro en planos a puntos separados. Se utilizan 3 suturas en la muscular y 3 en la serosa. El plano seroso fortalece el primer plano. Evacuación por las fimbrias: se puede realizar en los éctopicos fímbricos por ordeño o aspiración. Actualmente no es recomendado porque se asocia con una tasa 2 veces mayor de recurrencia de éctopicos y de reexploración quirúrgica por hemorragia recurrente del trofoblasto persistente.14
Cuando el feto ha llegado a término y está vivo, eventualidad excepcional, se impone la extracción del mismo por vía abdominal. Respecto de la conducta a seguir con la placenta, es variable: si se la puede desprender con mucha facilidad y sin peligro de hemorragia se procederá a su remoción; pero generalmente las íntimas adherencias que adquiere con el intestino y otros órganos obligan a dejarla en su sitio, pues todo intento de extracción daría lugar a una copiosísima hemorragia casi imposible de cohibir y que pondría en peligro la vida de la paciente. En esos casos se secciona el cordón próximo a la placenta y se cierra el abdomen sin drenaje, o se procede a su marsupialización. El postoperatorio se acompaña de antibióticoterapia. Las complicaciones son excepcionales y la placenta se reabsorbe por completo, sin secuelas para la paciente. Si se ha marsupializado la placenta se eliminará secundariamente. Si el feto está muerto y no existe complicación alguna, es mejor esperar un tiempo para la intervención a fin de que disminuya la vascularización y desaparezcan las íntimas adherencias de la placenta con los órganos vecinos y ésta pueda ser desprendida con mayor facilidad. La sangre que se colecciona en el abdomen, tan frecuentemente hallada en estas pacientes, ha de ser evacuada para prevenir infecciones.