1. Efesios – Lección 2
Texto: Efesios 1:15-23
Tema principal: La primera oración de Pablo por los creyentes efesios
Bosquejo de la lección:
A. Gracias al Señor por la fe y el amor de los efesios (1:15,16)
B. Oración para que tengan entendimiento espiritual y pleno conocimiento de Dios
(1:17)
C. Oración para que sepan cuál es la esperanza a que Él les ha llamado (1:18a)
D. Oración para que sepan cuáles son las riquezas de la gloria de la herencia de Dios en
los santos (1:18b)
E. Oración para que puedan comprender la supereminente grandeza del poder de Dios
para con todos los creyentes (1:19-20)
F. La posición exaltada del Señor Jesucristo (1:21-23)
Repase las preguntas de la lección1.
Exposición del bosquejo
A. Gracias al Señor por la fe y el amor de los efesios
Lea 1:15,16. Pablo dio gracias y alabanza al Señor porque había escuchado que los
creyentes de Éfeso seguían siendo fieles y fuertes en su fe y dependencia en el Señor
Jesucristo.
La fe es muy importante para el hijo de Dios. Es una gran maldad no confiar en Dios y
Sus promesas. Si una persona niega creerle a Dios, lo está tratando como si fuera un
mentiroso. Fue por medio de la fe en el Evangelio que llegamos a ser hijos de Dios, y es por
fe en el Señor y las promesas dadas en Su Palabra que debemos vivir día a día.
Pablo también alabó y dio gracias al Señor porque los creyentes efesios amaban a todos
los santos – los hijos de Dios que Él había separado del pecado para vivir solamente para Él.
Los efesios se amaban unos a otros con el amor de Dios. El amor de Dios es muy distinto
al amor común. Dios ama a las personas aunque a Él no le amen y aun cuando digan y hagan
maldades contra Él. ¿Por qué podían los creyentes de Éfeso amarse unos a otros de esta
manera? Porque permitían que Dios controlara sus vidas por medio del Espíritu Santo que
moraba en ellos.
Maestro: El amor mencionado aquí es el “ágape”. Es el amor divino que se produce en los
corazones de los creyentes por el Espíritu Santo al cederle el control a Él. (Gálatas 5:22)
2. B. Oración para que tengan entendimiento espiritual y pleno conocimiento de
Dios
Lea 1:17. Aunque los creyentes efesios estaban firmes en la fe y mostraban amor unos
por otros, Pablo oró para que su Dios y Padre les enseñara a conocerle, a entender Sus
caminos, y a saber cuál era la voluntad de Dios para ellos.
Mientras estemos en este mundo, el Señor quiere que sigamos creciendo en conocimiento.
Al nacer en la familia de Dios, nos dio la posición de hijos adultos y también nos dio todas
las bendiciones espirituales porque estamos unidos con el Señor Jesucristo. Pero aunque Dios
nos dio todas estas cosas en el momento que nacimos en la familia de Él, éramos incapaces
de comenzar a vivir de una vez como adultos espirituales y disfrutar de todas las cosas que
Él nos había dado porque éramos como pequeños bebés en nuestro entendimiento espiritual.
Para que sus hijos pequeños entiendan cómo hacer las cosas que ustedes los adultos hacen,
¿qué tiene que suceder? Sí, su entendimiento tiene que crecer. A menos que aprendan a
entender como adultos, no podrán hacer lo que ustedes hacen.
Nosotros, también, sólo podemos tomar el lugar de adultos en la familia de Dios a medida
que Él, por medio del Espíritu Santo, nos enseñe a entender Sus caminos, y a medida que nos
dé entendimiento espiritual acerca de todo lo que Él quiere que seamos y hagamos de acuerdo
con Su voluntad. Aunque estudiemos la Palabra de Dios, no creceremos en nuestro
entendimiento de nuestro Padre celestial y de Su voluntad a no ser que nos enseñe el Espíritu
Santo. Por eso el Señor Jesús envió al Espíritu Santo para morar en nosotros. Lea Juan
14:16,17,26, 16:12-14. Por esta razón, debemos pedirle al Señor que nos enseñe por medio
del Espíritu Santo las cosas que Pablo pidió para los creyentes de Éfeso.
C. Oración para que sepan cuál es la esperanza a que Él les ha llamado
Pablo continuó su oración por los creyentes efesios en el versículo 18. Él oró:
“Alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a
que Él os ha llamado”. Los hijos de Dios en Éfeso tenían esperanza, o la confianza en sus
corazones, de que Dios iba a hacer cosas grandes y maravillosas para ellos, pero Pablo oró
que el Señor les enseñara a conocer y entender más y más acerca de las cosas que Dios había
planeado para ellos en el futuro cuando el Señor Jesús regresara para llevarlos al cielo con
Él.
Cuando ustedes confiaron en el Señor Jesús como su Salvador, a ustedes se les dio
esperanza, y una confianza en el corazón, que el Señor les había dado vida eterna y que los
llevaría al cielo. Pero todos necesitamos entender mucho más acerca de las cosas que Dios
ha prometido hacer para nosotros para que la esperanza de nuestros corazones llegue a ser
fuerte y de mucha importancia para nosotros.
Maestro: piense en un ejemplo relevante a sus discípulos que ilustre la esperanza.
Así es con nosotros los creyentes. Hemos aprendido de la palabra de Dios acerca del Señor
Jesús, hemos confiado en Él como nuestro Libertador, y queremos estar con Él en el cielo.
Pero cuanto más aprendamos de Él y de los planes de Dios para Él y nosotros, más fuerte
crecerá el anhelo de nuestros corazones de la llegada del Señor, porque entonces estaremos
con Él y seremos como Él para siempre.
3. Maestro: Note Hebreos 6:18-20; I Juan 3:2,3; Filipenses 3:12-14
D. Oración para que sepan cuáles son las riquezas de la gloria de la herencia
de Dios en los santos
Lea 1:18. Leímos anteriormente en el versículo 11 de este mismo capítulo que hemos
recibido una herencia en el Señor Jesús. Compartimos todo lo que le pertenece al Señor Jesús
porque hemos sido unidos con Él. Pero aquí en el versículo 18, Pablo dijo que somos la
herencia del Señor Jesús. El Señor Jesús vino a este mundo, y pagó por nosotros con Su
propia sangre. Ahora somos Su herencia y muy valiosos para Él. Por esta razón, Pablo oró
que los creyentes llegaran a apreciar cuán preciosos eran para el Señor como Su herencia.
A menos que el Espíritu Santo nos enseñe cuán maravilloso es que seamos la herencia del
Señor, no comprenderemos cuán importante es. Nuestra mente y nuestros pensamientos
fácilmente se llenan de las cosas que vemos cada día, cosas que queremos para nuestros
cuerpos. El resultado es que dejamos a un lado las cosas que Dios nos ha mandado hacer y
dejan de tener primer lugar en nuestras vidas. Por esta razón, nosotros también debemos
pedirle al Señor que nos enseñe a entender que no nos pertenecemos a nosotros mismos, sino
que somos Su herencia y debemos vivir solamente para Él.
E. Oración para que puedancomprender la supereminente grandezadel poder
de Dios para con todos los creyentes
La última cosa que Pablo pidió para estos creyentes en esta ocasión fue que el Señor les
ayudara a entender la grandeza de Su poder que estaba obrando en ellos por medio del
Espíritu Santo. Lea 1:19-20.
Si ustedes nunca hubieran visto un avión volar en el aire sino que sólo lo hubieran visto
estacionado en la tierra, tal vez sería difícil para ustedes creer que en verdad es capaz de
elevarse encima de los árboles, encima de los edificios y aun arriba de las nubes. Sin embargo,
como ya han observado lo que puede hacer el poder del motor de un avión, saben y creen que
puede volar en el cielo y que, si se suben en él, pueden volar también.
Para los que no creen, nosotros los creyentes parecemos muy necios cuando decimos que,
aunque mueran nuestros cuerpos, Dios los levantará de los muertos y los cambiará para que
no tengan pecado, enfermedades o muerte. Y piensan que somos absurdos cuando decimos
que el Señor Jesús nos llevará al cielo con Él y Satanás jamás podrá volver a tentarnos o
preocuparnos.
Aunque estas cosas que esperamos parecen ser absurdas a los incrédulos, no nos parecen
necias a nosotros que somos hijos de Dios. ¿Por qué no? Porque sabemos que, aunque el
Señor Jesús murió y fue sepultado, después de tres días, Dios el Padre, por el gran poder de
Su Espíritu, levantó al Señor Jesús de los muertos y cambió Su cuerpo de tal manera que
ahora tiene un cuerpo que nunca morirá. También sabemos que nuestro gran Dios llevó al
Señor Jesús hasta el cielo y le dio toda autoridad en el cielo y en la tierra.
Ahora, si estamos convencidos en nuestros corazones que Dios hizo estas cosas para el
Señor Jesús, entonces nunca dudaremos de que Dios, por medio del gran poder de Su Espíritu
que vive en nosotros, hará lo mismo para nosotros. Estaremos absolutamente convencidos
que, aunque muramos, Dios, con el gran poder de Su Espíritu Santo, también nos levantará
de los muertos, y cambiará nuestros cuerpos para que sean como el maravilloso cuerpo del
4. Señor Jesús. Estaremos confiados de que Él nos llevará también al cielo, y sabremos que
compartiremos la posición de autoridad del Señor Jesús con Él.
Por tanto, nosotros, también, debemos pedirle a nuestro Padre celestial que nos enseñe a
conocer y comprender la magnitud del poder de Su Espíritu Santo que obra en nosotros ahora
mismo y seguirá obrando hasta que estemos con el Señor Jesús en el cielo. Lea Romanos
8:11.
F. La posición exaltada del Señor Jesucristo
Pablo siguió en los últimos versículos del capítulo uno hablando de la posición exaltada
que Dios le dio al Señor Jesús después de levantarlo de los muertos. Lea 1:21.
Dios exaltó al Señor Jesús por encima de todos los ángeles buenos, sobre Satanás y sus
demonios y sobre toda persona, para siempre.
Dios también le dio al Señor Jesús la posición de Cabeza de Su Iglesia, que es Su Cuerpo.
Lea 1:22,23. La Iglesia nació en el día de Pentecostés cuando el Espíritu Santo vino a vivir
permanentemente en todos los hijos de Dios. Desde entonces todos los creyentes han sido
miembros de la Iglesia. Somos miembros de Su Cuerpo, y Él es la Cabeza. Esto quiere decir
que el Señor Jesús es el Líder y la autoridad absoluta sobre Su Iglesia.
Preguntas
1. ¿Qué había escuchado Pablo acerca de los creyentes de Éfeso que le hizo dar gracias
constantemente a Dios?
Pablo había escuchado de su fe en el Señor Jesús y de su amor para con todos los
hijos de Dios. Lea 1:15,16.
2. ¿Qué necesitamos para poder vivir como hijos adultos en la familia de Dios y poder
disfrutar de todas las bendiciones espirituales que Él nos dio en el Señor Jesucristo?
Necesitamos que Dios nos enseñe a entender Sus caminos y que nos dé entendimiento
espiritual de todo lo que Él quiere que seamos y hagamos. Lea 1:17.
3. ¿Cuál es la gran esperanza de todos los creyentes que debemos pedirle a Dios que
fortalezca en nuestros corazones?
Que el Señor Jesús volverá y que estaremos con Él y seremos como Él para siempre.
4. ¿En qué consiste la herencia del Señor Jesús?
Consiste en Sus hijos a quienes compró con Su propia sangre. Lea 1:18.
5. ¿Cuál enorme poder está obrando en cada hijo de Dios?
El gran poder del Espíritu Santo que levantó al Señor Jesús de los muertos y le dio Su
posición a la diestra de Dios como la autoridad sobre Satanás, sus demonios, todos los
ángeles, la gente y la Iglesia. Lea 1:19-23.
6. ¿Qué quiere decir que el Señor Jesús es la Cabeza de Su Iglesia, Su Cuerpo?
Esto quiere decir que el Señor Jesús es el Amo, el Líder y la autoridad absoluta sobre
todos los creyentes.