2. Dos hombres, ambos muy enfermos,
ocupaban un cuarto en un hospital.
A uno de ellos, se le permitía todas las tardes
levantarse por una hora para drenar sus
pulmones.
Su cama estaba al lado de la única ventana.
El otro paciente tenía que estar siempre
acostado en su cama.
3. Ambos pacientes conversaban
por horas.
Hablaban de esposas y familias
de sus casas, sus trabajos, sus
amigos, los lugares a los que
habían ido de vacaciones, etc...
4. Todas las tardes, cuando el
hombre de la cama junto a
la ventana se levantaba, se
pasaba todo el tiempo
describiéndole a su
compañero todas las cosas
que desde la ventana se
veían.
5. El compañero entonces comenzaba a
disfrutar esa hora diaria cuando su
imaginación se ampliaba y enriquecía con
la vida, la actividad y los colores
maravillosos del mundo de afuera.
6. La ventana daba hacia un parque con
un hermoso lago.
Cisnes y patos nadaban en sus
cristalinas aguas mientras los niños
jubagan con botes de juguete.
Jóvenes enamorados caminaban
tomados de las manos entre flores de
todos los colores y una vista de los
edificios de la ciudad se apreciaba a la
distancia.
7. A medida que el hombre
junto a la ventana describía
todo en sus más exquisitos
detalles, el hombre del otro
lado del cuarto cerraba sus
ojos y su mente comenzaba a
imaginar y contemplar las
pintorescas escenas que el
otro le contaba..
8. Una cálida tarde, el hombre junto a la
ventana describía un grandioso desfile que
pasaba por la calle.
Aunque el otro hombre no podía oir los
sonidos de la banda, en su mente el podía ver
como en un retrato mental , el desfile que su
compañero de la ventana le describía.
Así pasaron los días, las semanas y los meses.
9. Una mañana, cuando traía agua y toallas
para los baños, la enfermera se eoncontró
conque el hombre de la ventana había
fallecido tranquilamente mientras
dormía.
Con mucha tristeza, tuvo que llamar a
los asistentes del hospital para que
retiraran el cadaver.
10. Tan pronto como le pareció
apropiado, el otro enfermo le
preguntó si a el lo podrían mover al
lugar junto a la ventana.
La enfermera le dió el gusto y le
movió al lugar y luego de asegurarse
de que estaba cómodo, salió de la
habitación.
11. Una vez solo, con mucho esfuerzo y dolor,
logró apoyarse en un codo y doblarse despacio
para tratar de dar su primera mirada a través de
la ventana, al maravilloso mundo real que
transcurría en el exterior.
Dándose la vuelta poco a poco, lentamente,
alcanzó a ver por la ventana
13. El hombre quedó sorprendido. Luego le
pregúntó a la enfermera por qué su
cumpañero fallecido se había puesto a
describirle tantas cosas maravillosas que el le
decía que se veían desde la ventana?
La enfermera contestó que el hombre nunca
pudo ver esa pared... !porque era ciego!
Y agregó ‘ Quizás solo quería que usted se
sintiera bien.'
14. Epílogo:
Hay una tremenda felicidad en hacer
felices a otros, en cualquier circunstancia.
Las penas y el dolor se reducen cuando se
comparten, pero la felicidad cuando es
compartida, se multiplica.
15. .
Vivir este día ya es un regalo, por eso
decimos que es El Presente
16. !Hagamos que nuestra felicidad se multiplique...
La fuente de este mensaje es desconocida, pero sin duda que
trae buena suerte al que lo comparte.
No te lo guardes
Re envíalo a tus amistades.
17. Deseándote que seas, siempre,
inménsamente feliz…
Yo lo compartí porque
eres importante para mí