Las primeras tres terrazas del Purgatorio representan pecados relacionados con el amor propio, como el orgullo. En la primera terraza, las almas orgullosas ven esculturas que muestran ejemplos de humildad como María y Trajano. La cuarta terraza representa la pereza, donde las almas trabajan sin descanso. La terraza de la lujuria tiene una pared de llamas que las almas deben cruzar mientras cantan himnos.