La sociedad romana estaba dividida en dos grupos desiguales: los patricios, que constituían la clase privilegiada y controlaban la política y la tierra, y los plebeyos, que formaban la mayoría de la población pero no tenían poder político. También había esclavos, que no tenían derechos, y clientes, que dependían de los patricios a cambio de su protección. Las mujeres vivían sometidas y su principal labor era el hogar, mientras que la cultura griega influyó en el arte y la cultura romana y el latín se