El documento argumenta que los valores, la solidaridad y la paz son fundamentales para que las personas vivan en armonía. Específicamente, señala que los valores permiten la convivencia pacífica, la solidaridad no debe limitarse a las desgracias sino apoyar a diario, y debemos oponernos a la guerra pensando en las vidas que podrían perderse. Finalmente, concluye que para ser íntegros y vivir en armonía, las personas deben tener un plan de vida basado en valores.