EXISTENCIALISMO: MOVIMIENTO FILOSÓFICO QUE RESALTA EL PAPEL DE LA EXISTENCIA Y LA LIBERTAD INDIVIDUAL
1. 5.7. EXISTENCIALISMO (XX d.c.):
Se entiende por Existencialismo el movimiento filosófico y humanístico europeo,
que se popularizo a partir de una crisis o crítica social y moral a raíz de los
estragos y dramas socio-filosóficos ocasionadas por las grandes guerras europeas
del siglo XX, especialmente, la segunda guerra mundial.
Al existencialismo se le ha atribuido un carácter realista, ligado a los dilemas,
estragos, contradicciones y estupidez humanos. Esta corriente filosófica discute y
propone soluciones a los problemas más propiamente inherentes a la condición
humana, como el absurdo de vivir, la significancia e insignificancia del ser, el
dilema de la guerra, el eterno tema del tiempo, la libertad, ya sea física o
metafísica, la relación Dios-hombre, el ateismo, la naturaleza del hombre.
El término existencialismo se ha oscurecido y disuelto en una pluralidad de
sentidos vagos y difusos debido al abuso que se ha ejercido sobre él. Así, se
habla de una literatura existencialista (Kafka, Musil) o de una actitud existencialista
ante la vida que llegó, con el tiempo, a convertirse en una moda, aquella en la que
primaban el anticonvencionalismo y cierta estética en el vestir contraria al "buen
parecer".
“MOVIMIENTO FILOSÓFICO QUE RESALTA EL PAPEL CRUCIAL DE LA
EXISTENCIA, DE LA LIBERTAD Y DE LA ELECCIÓN INDIVIDUAL, Y QUE
GOZÓ DE GRAN INFLUENCIA EN DISTINTOS PENSADORES Y ESCRITORES
DE LOS SIGLOS XIX Y XX”.
En sentido amplio, el concepto de existencialismo es confuso y oscuro. No hay
una definición teórica clara y unánime. Sin embargo, la concepción más
compartida apunta hacia un movimiento filosófico, cuyo postulado fundamental es
que son los seres humanos, en forma individual, los que crean el significado y la
esencia de sus vidas.
La corriente, de manera general, destaca el hecho de la libertad y la temporalidad
del hombre, de su existencia en el mundo más que de su supuesta esencia
profunda. Las cuestiones filosóficas del existencialismo tienden a escudriñar en lo
profundo de la condición humana.
El existencialismo es una corriente, movimiento o serie de doctrinas filosóficas y
culturales que tiene por objetivo y disciplina, el análisis y la descripción del sentido
individual de la vida humana en cuanto “existe”.
Sostiene que el existente humano piensa, actúa, se refiere y relaciona consigo
mismo, con su propia trascendencia, con sus contradicciones y sus angustias.
Para el pensamiento existencialista el individuo no es una porción mecánica o
“parte” de un todo, sino que el hombre es en sí una “integridad” libre por sí.
Esta doctrina filosófica considera qué es la existencia del ser humano libre y qué
es lo que define su esencia, en lugar de entender que su esencia o condición
humana determina su existencia. Para esta corriente del pensamiento la existencia
del ser humano no es nunca un “objeto” sino que, desde el momento que el ser
humano es capaz de generar pensamiento “existe”; en consecuencia el
reconocimiento de esa existencia tiene primacía y precedencia sobre la esencia.
El existencialismo implica que el individuo es libre y, por ende, totalmente
responsable de sus actos. Esto incita en el ser humano la creación de una ética de
la responsabilidad individual.
5.7.1. Sören Aabye Kierkegaard (1813 – 1855 d.c.):
2. Nació en Copenhague el5 de mayo de 1813y murió en la misma ciudad el11 de
noviembre de 1855,Filósofo, teólogo danésy considerado padre del
existencialismo, crítico literario,sicólogo y poeta, cuyo interés por la existencia, la
elección y el compromiso individuales tuvo gran influencia en la teología y en la
filosofía occidental modernas, sobre todo en el ámbito del existencialismo, cuyas
posturas profundizan en el subjetivismo moral y la fe cristiana.
Muchos de sus ensayos fueron, al principio, publicados bajo seudónimos. Aplicó el
término existencial a su filosofía porque consideraba a ésta como “LA
EXPRESIÓN DE LA VIDA INDIVIDUAL EXAMINADA CON INTENSIDAD” y no
como la construcción de un sistema monolítico como el que realizara Hegel, cuyo
trabajo criticó en Notas concluyentes no científicas.
Mientras que Hegel afirmaba haber conseguido un absoluto entendimiento
racional de la vida humana y de la historia, Kierkegaard, por el contrario, resaltó la
ambigüedad y la paradójica naturaleza de la situación de los hombres.
Afirmaba que los problemas fundamentales de la existencia desafían una
explicación racional y objetiva; la mayor verdad es subjetiva.
Ha ganado reconocimiento general como el primer filósofo precursor
existencialista, aunque él mismo nunca se clasificara como tal y estrictamente
hablando no lo es. El hace un puente entre la filosofía Hegeliana y lo que vino a
ser el existencialismo. Kierkegaard rechazó tajantemente tanto la filosofía
hegeliana de su tiempo y lo que él llamó las formalidades vacías de la iglesia
danesa.
Gran parte de su obra trata de cuestiones religiosas como la naturaleza de la fe, la
institución de la iglesia cristiana, la ética cristiana y las emociones y sentimientos
de los individuos cuando se enfrentan a las elecciones que plantea la vida.
Los modos fundamentales por los cuales atraviesa la vida humana son tres: el
estadio estético (El placer que experimenta la desesperación), el ético (el deber
ser) y el religioso (La fe).
Dos de sus ideas más conocidas son la «subjetividad» y el «salto de fe». El salto
de fe es su concepción de cómo un individuo cree en Dios, o cómo una persona
actúa en el amor. No es una decisión racional, ya que trasciende la racionalidad
en favor de algo más extraordinario: la fe.
Además consideraba que tener fe era al mismo tiempo tener dudas. La duda es un
elemento esencial de la fe, un fundamento.
Kierkegaard también resaltó la importancia del yo, así como la relación entre el yo
y el mundo, fundamentado en la reflexión y la introspección del yo. Esto tiene que
ver con la distinción entre lo que es objetivamente cierto y la relación subjetiva de
un individuo con esa verdad.
En cualquier caso, Kierkegaard discute principalmente la subjetividad en relación
con los asuntos religiosos.
Lo máximo que uno puede esperar sería la conclusión de que es probable que las
doctrinas religiosas sean ciertas, pero si una persona creyera estas doctrinas sólo
en el grado en que es probable que sean ciertas, él o ella en absoluto sería
verdaderamente religioso.
La fe consiste en la relación subjetiva de total compromiso con tales doctrinas.
3.7.2. Martin Heidegger (1889 – 1976 d.c.):
3. Nació en Messkirch, Alemania el 26 de septiembre de 1889y murió en Friburgo de
Brisgovia el26 de mayo de 1976, fue un filósofoalemán. Fundador de la
denominada “FENOMENOLOGÍA EXISTENCIAL”, está considerado uno de los
pensadores más originales del siglo XX.
Al igual que en el caso de Husserl, el pensamiento de Heidegger recibió las
influencias de la filosofía griega presocrática, del filósofo danés Sören Kierkegaard
y del filósofo alemán Friedrich Nietzsche.
La obra de Heidegger aborda problemas ontológicos y también problemas de tipo
semiótico; es de este modo que influye directamente en los hermenéuticos: Paul
Ricoeur, Rüdiger Bubner y Hans-Georg Gadamer.
¿Qué es el ser? y ¿Qué es la verdad? He ahí los dos constitutivos fundamentales
de la ontología Heideggeliana: ser y verdad y la metafísica como tal es autentico
nihilismo, en tanto que el ser mismo es impensado en ella; y a la pregunta ¿Qué
es el ser? responde que “el ser es lo que es”.
Es una de la figuras protagónicas de la filosofía contemporánea: influyó en toda la
filosofía del existencialismo del siglo XX, fue uno de los primeros pensadores en
apuntar hacia la «destrucción de la metafísica», en «quebrar las estructuras del
pensamiento erigidas por la Metafísica», que planteó que «el problema de la
filosofía no es la verdad sino el lenguaje», con lo que hizo un aporte decisivo al
denominado giro lingüístico, problema que ha revolucionado la filosofía.
La obra de Heidegger suele entenderse como separada en dos períodos distintos
cuya ruptura se encontraría en el viraje experimentado por su enfoque filosófico,
por lo que es habitual hablar de dos etapas o momentos en su pensamiento.
Digamos que esta escisión señalada por estudiosos y críticos de su obra, el
filósofo nunca la aceptó:Momento en que se sirve de la analítica existencial como
instrumento o «prolegómeno» para replantear la pregunta tradicional de la
metafísica, la pregunta por el «ser», como pregunta por el «sentido del ser»
(claramente desde los primeros párrafos de Ser y tiempo). En esta etapa se
concluye que el sentido del ser es íntimamente dependiente del tiempo, por esto
podemos considerar la primera etapa como marcada por una búsqueda del «ser
del tiempo». Un segundo periodo en el que, como el propio autor señala, concibe
su pensamiento como el desarrollo de una «historia del ser». El objetivo
fundamental de esta «historia del ser» radica en la comprensión de los vínculos
entre el desarrollo de la cuestión del ser en la filosofía y la historia de Occidente
(aunque no señalado por muchos encarar este momento según este enfoque, nos
lleva a reminiscencias hegelianas). Esta segunda etapa ya no pretende abordar el
«ser del tiempo» sino que se encara frente a los «tiempos del ser», en este
sentido puede ser comprendido en viraje que se produce en su filosofía. Sin
embargo, en ambos períodos hay un mismo objetivo unificador: la elaboración y
consiguiente respuesta a la pregunta por el sentido del ser.
De esta época son especialmente interesantes las obras en que revisa la historia
de la filosofía, a través de las que irá aflorando una «nueva metafísica» cuyo
germen ya estaba presente en su obra Ser y tiempo, sólo que allí permaneció
oculta entre los diversos y penetrantes análisis sobre el hombre entendido como
Dasein —ser-ahí—, que llevó a cabo.
5.7.3. Karl Theodor Jaspers (1883 – 1969 d.c.):
4. Nació el 23 de febrero de 1883 en Oldenburg,Alemania, de padre jurista y madre
perteneciente a una comunidad agrícola local, murió el26 de febrero de 1969 en
Basilea. Filósofo y psiquiatra alemán, uno de los fundadores del existencialismo.
Su obra, que integran más de 30 libros, influyó de forma determinante en la
teología, la psiquiatría y la filosofía del siglo XX.
“LA CONCIENCIA Y LA EXISTENCIA SON LAS DOS FORMAS BÁSICAS DE
REPRESENTACIÓN DEL SER – YO PUES EL CONCEPTO DE
TRASCENDENCIA HACE REFERENCIA A LA BÚSQUEDA DEL SENTIDO DEL
SER FUERA DE SI”.
En Filosofía da su visión de la historia de la filosofía e introduce sus temas más
importantes. Comenzando por la ciencia moderna y el empirismo, señala que al
cuestionar la realidad enfrentamos los límites que un método científico (o
empírico) simplemente no puede traspasar. En este punto, el individuo enfrenta
opciones: hundirse en la resignación o dar un salto a lo que llama la
'Trascendencia'. Al dar este paso, los individuos confrontan su propia libertad
ilimitada, que llama Existenz, y pueden finalmente experimentar la auténtica
existencia.
La Trascendencia es lo que existe más allá del mundo del tiempo y el espacio. La
formulación de la Trascendencia como la expresión máxima de la no-objetividad
ha llevado a muchos filósofos a argumentar que se transformó en monista, aunque
el mismo continuamente destacó la necesidad de reconocer tanto los conceptos
de subjetividad como objetividad.
Aun cuando él rechazó doctrinas religiosas explícitas, incluida la noción de un Dios
personal, influenció la teología moderna a través de su filosofía de trascendencia y
los límites de la experiencia humana. Las tradiciones del Cristianismo místico
influenciaron a Jaspers de forma considerable, particularmente Meister Eckhart y
Nicolás de Cusa. También mostró interés activo en las religiones de Oriente,
particularmente el budismo.
También escribió extensamente sobre la amenaza que representa para la libertad
humana la ciencia moderna y las instituciones políticas y económicas modernas.
Los comentaristas frecuentemente comparan la filosofía de Jaspers con la de su
contemporáneo Martin Heidegger. De hecho, ambos buscaron explorar el
significado del ser y la existencia.
Otro trabajo importante apareció en Filosofía y existencia. Para Jaspers, el término
"existencia" (Existenz) denominaba la experiencia indefinible de libertad y
posibilidad; una experiencia que constituye el auténtico ser de los individuos que
están conscientes de "las situaciones límite" al confrontar el sufrimiento, los
conflictos, la culpa, el azar y la muerte.
La filosofía está interesada en los tres aspectos correspondientes al ser
Estar ahí: esto refiere al mundo objetivo, conocido mediante la observación y el
experimento
Ser uno mismo: remite a la existencia personal del que tiene libertad asumiendo
la historicidad afirmando en la decisión y la elección
El ser en sí: hace alusión a la trascendencia del mundo, manifestada en el
mundo e inseparable de él
5.7.4. Jean Paul Charles Sastre (1905 – 1980 d.c.): Humanismo ateo
5. Nació en París el21 de junio de 1905y murió en la misma ciudad el15 de abril de
1980, fue un filósofo, novelista, periodista, escritor, político y
dramaturgofrancés,uno de los principales representantes del existencialismoy del
marxismo humanista.Sartre Fue pareja de la también filósofa Simone de
Beauvoirse volvieron compañeros inseparables durante el resto de la vida de
Sartre, en una relación no-monógama,juntos combatieron las suposiciones y
expectativas de la formación burguesa.Las obras filosóficas de Sartre conjugan la
fenomenología del filósofo alemán Edmund Husserl, la metafísica de los filósofos
alemanes Georg Wilhelm Friedrich Hegel y Martin Heidegger, y la teoría social de
Karl Marx en una visión única llamada existencialismo. Este enfoque, que
relaciona la teoría filosófica con la vida, la literatura, la psicología y la acción
política suscitó un amplio interés popular que hizo del existencialismo un
movimiento mundial.
“ESTOY ENTERAMENTE CONDENADO A SER LIBRE”.
Sostiene la intencionalidad y la pura trascendencia de la conciencia y la
percepción intenciona el objeto puesto como trascendente.
La conciencia intenciona un objeto que es trascendente: este objeto es el
fenómeno, es ser de algo existente, su apariencia y en esto consistiría la
ontología.
El conflicto entre la opresiva y destructiva conformidad espiritual (mala fe) y un
«auténtico» estado de existencia, se convirtió en el tema central del trabajo de
Sartre, un tema desarrollado en su principal trabajo filosófico El ser y la nada.
La introducción más conocida a la filosofía de Sartre es su trabajo El
existencialismo es un humanismo. En este trabajo, Sartre defiende el
existencialismo de sus críticos.
Sartre considera que el ser humano está "condenado a ser libre", es decir,
arrojado a la acción y responsable plenamente de la misma, y sin excusas.
A su vez, Sartre, concibe a la existencia humana como existencia consciente. El
ser del hombre se distingue del ser de la cosa por ser consciente. La existencia
humana es un fenómeno subjetivo, en el sentido de que es conciencia del mundo
y conciencia de sí.
El hombre es el único que no sólo es tal como él se concibe, sino tal como él se
quiere, y como se concibe después de la existencia, como se quiere después de
este impulso hacia la existencia; el hombre no es otra cosa que lo que él se hace.
Éste es el primer principio del existencialismo.
Sartre escribe que en el ser humano «la existencia precede a la esencia»,
contrariamente a lo que se había creído en la filosofía precedente. ¿Qué quiere
decir esto? Sartre da un famoso ejemplo: si un artesano quiere realizar una obra,
primero «la» piensa, la construye en su cabeza: esa prefiguración será la esencia
de lo que se construirá, que luego tendrá existencia. Pero nosotros, los seres
humanos, no fuimos diseñados por alguien, y no tenemos dentro de nosotros algo
que nos haga «malos por naturaleza», o «tendientes al bien». «Nuestra esencia,
aquello que nos definirá, es lo que construiremos nosotros mismos mediante
nuestros actos», que son ineludibles: no actuar es un acto en sí mismo, puesto
que nuestra libertad no es algo que pueda ser dejado de lado: ser es ser libres en
situación, ser es ser-para, ser como proyecto.
5.7.5. Gabriel Marcel (1889 – 1973 d.c.):
6. Nacido el 7 de diciembre de 1889 en París y murió el 8 de octubre de
1973,Filósofo católico, dramaturgo y crítico francés que mantenía que “LOS
INDIVIDUOS TAN SÓLO PUEDEN SER COMPRENDIDOS EN LAS
SITUACIONES ESPECÍFICAS EN QUE SE VEN IMPLICADOS Y
COMPROMETIDOS”.
Esta afirmación constituye el eje de su pensamiento, calificado como
existencialismo cristiano o personalismo.
Su pensamiento filosófico es influenciado por su vida.
La preocupación fundamental es su intento de superar el racionalismo idealista,
objetivante y abstracto, y afirmar la existencia como realidad particular y singular.
El análisis y comprensión de la existencia es el supuesto necesario de la exigencia
antológica, pues si Dios es la relación mayor de la existencia, esta debe ser el
punto de parita y aquel el punto de llegada.
En su primer libro, Diario metafísico, abogaba por una filosofía de lo concreto que
reconociera que la encarnación del sujeto en un cuerpo y la situación histórica del
individuo condicionan en esencia lo que se es en realidad.
Distinguió la reflexión primaria, que tiene que ver con los objetos y las
abstracciones.
Esta reflexión alcanza su forma más elevada en la ciencia y la tecnología.
La reflexión secundaria -usada por él como método- se ocupa de aquellos
aspectos de la existencia humana, como el cuerpo y la situación de cada persona,
en los que se participa de forma tan completa que el individuo no puede
abstraerse de los mismos.
La reflexión secundaria contempla los misterios y proporciona una especie de
verdad (filosófica, moral y religiosa) que no puede ser verificada mediante
procedimientos científicos, pero que es confirmada mientras ilumina la vida de
cada uno.
A diferencia de otros existencialistas, hizo hincapié en la participación en una
comunidad en vez de denunciar el ontológico aislamiento humano.
No sólo expresó estas ideas en sus libros, sino también en sus obras de teatro,
que presentaban situaciones complejas donde las personas se veían atrapadas y
conducidas hacia la soledad y la desesperación, o bien establecían una relación
satisfactoria con las demás personas y con Dios.
Como se ha mencionado los textos de su Journal Metaphysique reflejan tanto sus
estudios de filósofos y corrientes de pensamiento, —escrito eso sí a modo de
diario— como sus experiencias personales.
Así la segunda parte del Journal trata de su experiencia de la guerra y evoca su
idea de la trascendencia de la existencia encarnada por medio de un análisis
fenomenológico propio.
Esta metodología fue desarrollada ulteriormente cuando oponía la «fenomenología
del tener» a la «fenomenología del ser» que lo pone en las puertas de la
metafísica.
Defensor de los sublevados durante la Guerra Civil Española, Albert Camus
polemizó con él en varias cartas públicas donde denunció las contradicciones
éticas de su reflexión filosófica humanista.