El documento describe la técnica de solarización, que consiste en cubrir el suelo húmedo con una lámina de plástico transparente para calentarlo con la radiación solar entre julio y agosto. Esto pasteuriza el suelo al elevar la temperatura por encima de 50 grados centígrados, matando los patógenos del suelo. Además, la fermentación de la materia orgánica bajo el plástico libera gases como amoniaco con efecto biofumigante.