Durante la Guerra Civil en Castilla-La Mancha, la mayor parte de la región estuvo bajo control republicano excepto algunas áreas como Toledo y Albacete. En Campo de Criptana hubo violencia significativa contra aquellos asociados con partidos de derecha y la iglesia católica, resultando en el asesinato de 82 personas. La iglesia local fue destruida. Tras la guerra, el nuevo régimen franquista también perpetró ejecuciones contra republicanos.
2. Soldados republicanos en el frente de
Guadalajara
El Alcázar de Toledo tras el levantamiento del sitio
Durante la Guerra Civil la mayor parte del actual
territorio de Castilla-La Mancha perteneció a la
zona republicana hasta el final del conflicto. La
sublevación militar sólo tuvo éxito en Albacete y
Guadalajara en los primeros días de la guerra y
en Toledo capital, donde un grupo de rebeldes
liderado por el general Moscardó se atrincheró
en el Alcázar y resistió hasta que fueron liberados
por las tropas de Franco en septiembre de 1936.
La principal batalla en la región tuvo lugar en
Guadalajara a comienzos de 1937. En marzo los
rebeldes, ayudados por las tropas italianas,
lanzaron una ofensiva al Norte de Madrid con el
objetivo de cortar su comunicación con Valencia.
Pero esta operación fue un completo fracaso y las
tropas italianas se vieron obligadas a retirarse.
3. Cuartel de las Brigadas Internacionales en Albacete
Colectivización en Albacete
Albacete fue el cuartel general y centro de
entrenamiento de las Brigadas Internacionales. En los
últimos meses de la guerra esta provincia fue también
escenario de algunos acontecimientos importantes para
el fin del conflicto. Tras la caída de Cataluña el
presidente Negrín regresó a España y celebró una
reunión con oficiales de alta graduación en Los Llanos.
Los militares le dijeron abiertamente que estaban en
contra de su estrategia de resistencia y algunos de ellos
participaron después en la conspiración para derribar al
gobierno y firmar la paz con Franco. Tras el golpe de
Estado de Casado Negrín abandonó España el 6 de
marzo. Las tropas franquistas entraron en Madrid el 28
de marzo y ocuparon Albacete y el resto de la región el
día 29 de marzo.
Durante la guerra, la región también sufrió violencia:
hubo unos 8.000 asesinados, 769 de los cuales eran
miembros de la Iglesia (casi el 10%). También hubo
numerosas colectivizaciones en la región (452, el mayor
número de toda España).
4. Campo de Criptana tenía unos 15.000
habitantes en 1936 (13.482 según la
Iglesia). Entre el 19 y el 20 de julio de
1936 fueron detenidas unas 250
personas.
Este grafiti contra José Giral,
presidente del gobierno entre julio y
septiembre de 1936, todavía es visible
en la pared de una casa de la Calle
Convento.
LA GUERRA EN CAMPO DE CRIPTANA
5. - La primera persona asesinada fue Gregorio
Villafranca Pedroche, un panadero que pertenecía a la
Falange, el 25 de julio de 1936. Fue asesinado en la
carretera de Alcázar.
- Los primeros asesinatos masivos tuvieron lugar una
semana después del comienzo de la guerra: un
sacerdote y tres falangistas, coincidiendo con el
retorno de los milicianos que habían ido a
Villarrobledo a sofocar la sublevación.
- Los acontecimientos más sangrientos coincidieron
con el retorno de los milicianos de Extremadura, tras
la pérdida de Cáceres. El 18 de agosto destruyeron la
iglesia y la ermita de San Sebastián y ejecutaron a 11
prisioneros en las carreteras del pueblo.
La mayor parte del terror caliente tuvo lugar durante los primeros meses de la guerra:
Carretera a Alcázar
Dos falangistas fueron asesinados el 27 de
julio en la Cañamona. José Mª Ortega era
un militar de 25 años y Ángel Morales era
un albañil de 41 años.
6. - El 22 de agosto las autoridades decidieron
trasladar a los 25 prisioneros restantes a
Ciudad Real, probablemente para detener las
ejecuciones. Pero 23 de los prisioneros
enviados a Ciudad Real fueron ejecutados el 23
de agosto, con la colaboración de 6 habitantes
de Criptana. Sólo dos sobrevivieron.
- También durante los meses de agosto y
septiembre milicianos de Criptana se
desplazaron a Madrid a buscar a personas
destacadas de Criptana y matarlos. Dos
miembros de la familia del Conde de las
Cabezuelas fueron ejecutados en la checa de la
Calle Marqués de Riscal.
- El último asesinado fue Juan Ferrán Huertas, un
estudiante que pertenecía a la Juventud
Católica y fue asesinado en la puerta de su casa
el 22 de junio de 1937, aunque las ejecuciones
masivas habían terminado en septiembre de
1936 (4 personas ejecutadas el 23 de
septiembre)
Carretera a Arenales
Gabriel Mínguez tenía 46 años, pertenecía a
Renovación Española y era agricultor. Joaquín
González tenía 36 años, era farmacéutico y
pertenecía a la Falange. Federico Moratalla tenía 47
años, era agricultor y pertenecía a Acción Popular.
Los tres fueron asesinados en la carretera a
Arenales el 18 de agosto de 1936, un mes después
del comienzo de la guerra
7. Primer miembro del clero asesinado en Campo de Criptana el 26 de
julio de 1936. Fue asesinado a la puerta de la cárcel
A principios de la guerra, había
siete miembros del clero en la
parroquia de la La Asunción.
Cuatro de ellos fueron
asesinados y otro sacerdote de
Criptana fue ejecutado en
Madrid. Además, otros dos
curas fueron asesinados en el
pueblo.
Victoriano
Beamud Franco NietoEspecioso
Perucho
Manuel Antonio
Muñoz Pedrero
Avelino
Ortiz
Carrasco
Antonio
Moraleda
González
Evaristo Quirós
Quirós, asesinado en
Madrid
8. EDAD IDEOLOGÍA PLACE OF KILLING DATE OF KILLING
Victoriano Beamud Sañoso 43 Desconocida Puerta de la cárcel 26 julio 1936
Especioso Perucho Granero 41 Desconocida Carretera de Pedro Muñoz 18 agosto 1936
Manuel Antonio Muñoz Pedrero 62 Tradicionalista Carretera de Pedro Muñoz 18 agosto1936
Antonio Moraleda González 29 Acción Popular Carretera de Pedro Muñoz 18agosto 1936
Evaristo Quirós Quirós 59 Tradicionalista Madrid 15septiembre
Franco Nieto Gallego 60 Desconocida Cementerio 19 septiembre
Avelino Ortiz Carrasco 56 Desconocida Cementerio 23 septiembre
MIEMBROS DEL CLERO ASESINADOS EN CRIPTANA
9. LUGAR DONDE
FUERON
ASESINADOS
HOMBRES MUJERES TOTAL
CRIPTANA 30 4 34
CIUDAD
REAL
29 1 30
MADRID 15 3 18
Los asesinos eran un pequeño grupo de
personas, sin el consentimiento de las
autoridades. No fueron muertes improvisadas,
porque las personas asesinadas eran
miembros de partidos de derechas, de la
Iglesia y grandes terratenientes.
La ideología de los asesinados era diversa: el
67% pertenecían a partidos de derechas: 26
eran miembros de Acción Popular, 25
falangistas y 4 tradicionalistas.
Ejercían distintas profesiones, pero había un
predominio de personas acomodadas: 26
terratenientes y agricultores (32%), 9
estudiantes (11%), 8 de profesiones liberales
(10%) y 7 sacerdotes (8%)
Emérito Ortiz era un agricultor de 52 años, era
conservador y fue asesinado a la puerta de su casa
el 30 de agosto de 1936
10. Monumento construido para rendir homenaje a los asesinados por los republicanos
durante la guerra
El número de personas asesinadas como consecuencia de la violencia republicana
durante la guerra fueron 82(incluyendo a los asesinados en Criptana y los
originarios de Criptana asesinados en otros lugares )
11. La destrucción de la iglesia fue otra consecuencia de la violencia anticlerical
La iglesia antes de la guerra
Calle SANTA ANA
13. Cristo de Villajos Retablo Asunción
San Andrés Capilla del Rosario y Capilla del Cristo
Capilla de San Antonio
14. 18 de agosto de 1936
La iglesia fue quemada el 18 de agosto de 1936, el mismo día que 11 personas
fueron asesinadas en la localidad.
15.
16.
17. La iglesia en 1939. Tras la guerra la iglesia fue destruida por completo y las piedras
fueron utilizadas para construir el campo de fútbol
18. Monumento en el cementerio dedicado a 6 socialistas y comunistas asesinados el 1 de abril de 1939.
Fueron ejecutados en el cementerio. Durante la Transición sus restos fueron exhumados y sus familias
decidieron enterrarlos juntos y construir un memorial.
Tras la guerra 52 personas de Criptana fueron ejecutadas entre 1939 y 1943, entre ellos 10 concejales
socialistas y comunistas del ayuntamiento. La mayor parte de los ejecutados eran jornaleros.
19. Tras la guerra se levantó un monumento a los caídos
en el Pozo Hondo con la cruz, el yugo y las flechas y la
inscripción “Caídos por Dios y por España
!Presentes!” en un lado y las fechas del 2 de mayo de
1808 y del 18 de julio de 1936. La gente mayor
recuerda que estaban obligados a hacer el saludo
fascista cuando pasaban por delante del memorial.