1. ¿Qué efecto ha tenido la Biblia en América del Sur?
Autor: Paulo Arieu
“La conquista y evangelización católica de América constituyen dos de los hechos
más singulares de la cultura occidental y de la historia de la humanidad. Los errores y aciertos de
esta conquista, tuvieron su génesis en los primeros decenios de la colonización. La
evangelización católica de América fue lenta y desigual, quedando grandes masas de población
sin evangelizar o evangelizadas de manera superficial. En la actualidad se calcula que los
protestantes son ya el 16% de la población de Hispanoamérica. En países como Guatemala o El
Salvador el número asciende al 20%. Latinoamérica es el resultado de una serie de
transformaciones sociales, políticas y culturales. El protestantismo, como movimiento religioso
minoritario, influyó en mayor o menor medida en la formación de esa realidad, pero su
espectacular crecimiento en los últimos treinta años, le consolida como una fuerza a tomar
en cuenta en el futuro próximo de la mayor parte de los países latinoamericanos.Un cambio tan
rápido y general ha producido un gran número de tensiones. Queremos acercarnos brevemente a
la mayor transformación religiosa del siglo XX y, con toda probabilidad, del siglo XXI.” [0]
“No fue hasta casi cinco siglos después que los europeos llegaron allí tras el “descubrimiento” de
Cristóbal Colón cuando se crearon colonias permanentes e incluso ciudades como San Juan en
Puerto Rico (la primera ciudad fundada por europeos en el Nuevo Mundo), o San Agustín en la
Florida (primera ciudad europea en lo que hoy es Estados Unidos). El propio Cristóbal Colón
aunque tenía un objetivo claramente comercial (llegar a las Indias, navegando hacía el Oeste), y
que por ello fue respaldado por los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón,
tenía en su mente también el llevar la fe de Cristo a estos nuevos pueblos y por ello daba gracias
al Señor. Leemos en una carta que envió a los Reyes (Epístola de Insulis Nuper Inventis)
2. tras llegar por primera vez al Nuevo Mundo: que toda la Cristiandad dé gracias al Salvador,
nuestro Señor Jesucristo, que nos ha concedido tan grande victoria y recompensa… que Cristo se
regocije en la tierra así como lo hace en el Cielo al anticipar que tantas almas de estos pueblos
perdidos van a ser salvadas. Regocijémonos también nosotros, tanto por la exaltación de nuestra
fe como por el incremento de bienes temporales en los que no tan sólo España sino toda
la Cristiandad va a compartir. Posteriormente y en diversas oleadas muchos misioneros fueron
enviados a todas partes de América, en especial del Centro y del Sur para evangelizar
aquellas gentes y tierras. En cuanto a la América del Norte las influencias más importantes serían
de protestantes europeos (ingleses, holandeses, franceses, etc.) que fueron llegando aunque en
fechas más tardías. España y Portugal fueron las dos naciones protagonistas de la inicial
cristianización misionera del resto del mundo, en especial a partir de la época de los Reyes
Católicos. El cristianismo se hallaba prácticamente centrado en Europa a finales del siglo XV, y
en aquellos tiempos se podía hablar de “la Cristiandad” como sinónimo de Europa. Dos hechos
de alcance mundial modificarían para siempre el panorama religioso del mundo:
a) El descubrimiento de América (1492), y
b) La Reforma Protestante (1517)
Tras la caída del poder mogol en Asia, que era tolerante con los extranjeros y permitía un tránsito
pacífico de las caravanas europeas, se incrementó enormemente la dificultad de los viajes hacia
Asia para buscar especies, seda y otros bienes apreciados por los europeos. La animadversión de
los musulmanes (justificada por el comportamiento de los mal llamados cristianos de las
Cruzadas), y la poca simpatía hacía los extranjeros de las nuevas dinastías chinas
plantearon como alternativa el viaje por mar. Los portugueses hicieron grandes progresos en la
navegación hacia las Indias circunnavegando África. Los españoles, y más tarde franceses e
3. ingleses, se decantaron por ir hacia el Oeste. Tras el “descubrimiento” España y Portugal que
eran, por entonces, las dos mayores potencias mundiales decidieron repartirse el mundo.
Ambas naciones que eran rígidamente católicas querían evitar un nuevo enfrentamiento y
buscaron un árbitro en el Papa, por aquel entonces era Alejandro VI, que era español de
nacimiento. Los Reyes Católicos le solicitaron que legislase en esa materia y así en mayo de
1.493 el Papa trazó una línea desde el Polo Norte hasta el Polo Sur, que pasaba a unos
160 kilómetros de las islas de Cabo Verde. Las tierras que estuviesen al Oeste de esta línea (el
Nuevo Mundo) pertenecían a España, lo que quedara al Este sería para Portugal. Un año más
tarde, en junio de 1494 y en virtud del Tratado de Tordesillas esa línea se modificaría y se
desplazaría unos 1.100 kilómetros al Oeste (meridiano 46° de longitud Oeste) por petición de
Portugal. Esta nueva línea, aún sin tal vez saberlo entonces, pasaba sobre Brasil y gracias a ello
Portugal tuvo la posibilidad de llegar, legalmente, al Nuevo Mundo.[2]
La historia de la Iglesia en América Latina ha pasado por dramáticos acontecimientos, desde la
época de la primera evangelización y luego en los siglos posteriores. Grandes virtudes, santidad,
martirio, manifestaciones de fe hasta el heroísmo y también enormes pecados. Todo como parte
de un itinerario pascual de transformación, desde situaciones de muerte hacia realidades de
Vida.[3]
Todavía no ha sido valorado suficientemente el papel que ha jugado la Biblia en la difusión del
protestantismo desde el siglo XVI. La historia de esta rama del cristianismo es inconcebible sin
la Biblia, la cual ha llegado a ser un distintivo por el papel que juega en la vida personal y
comunitaria en la mayoría de estas Iglesias. En este sentido, no es extraño encontrar que la
difusión de la Biblia en lengua popular fue la primera actividad en ese proceso que hemos
llamado aquí “la evangelización protestante en Latinoamérica”. Y que la lectura de ese libro
4. haya traído como consecuencia una actitud crítica hacia las prácticas de la Iglesia romana por
parte de sacerdotes y laicos católicos con inquietudes espirituales que no pocas veces los hizo
más receptivos hacia las doctrinas protestantes. Casi en todos los países latinoamericanos hay ex
sacerdotes en los orígenes de los protestantismos nacionales, para los cuales la lectura directa de
la Biblia revolucionó su manera de pensar y comprender la fe cristiana.[4]
A la América Latina llegaron primero los protestantes antes que el protestantismo y sus Iglesias.
De la misma manera que las ideas protestantes antecedieron muchas veces a los misioneros
profesionales de estas Iglesias. La diversidad de experiencias históricas que se dio en cada país
sobre cómo llegaron y se difundieron las ideas protestantes hace difícil cualquier generalización.
Nos proponemos aquí dar algunos ejemplos de la diversidad histórica que se dio en la difusión de
las ideas protestantes en el subcontinente latinoamericano… Los protestantes europeos se
hicieron presentes en el Nuevo Mundo desde el siglo XVI, poco tiempo después de iniciado
el movimiento de Reforma. Junto a los individuos que llegaban a América y que se habían
adherido o eran simpatizantes de alguno de los movimientos de la Reforma, y la literatura
protestante que lograba introducirse a las colonias, el protestantismo hizo también acto de
presencia como un imaginario temido por la Corona española y la Iglesia católica.[5]
Congregaciones protestantes en México, 1875-1910 [6]
Año 1875 1882 1888 1892 1897 1903 1910
Número 125 239 393 469 600 550 700
Iglesias y organismos misioneros protestantes en el Caribe, siglo XVII-XIX [7]
1623-35 Anglicanos Caribe Oriental
1655 Anglicanos Jamaica
1667 Iglesia Reformada Surinam
5. 1732 hermanos moravos Saint Thomas
1735 hermanos moravos Surinam
1735 Moravos Guyana Holandesa
1783 bautistas Jamaica
1776 anglicanos Belice
1797 anglicanos Trinidad
1822 bautistas Belice
1824 metodistas Belice
1874 anglicanos Puerto Rico
1883 metodistas Cuba
En Cuba, por ejemplo, dónde el régimen se ha vuelto algo más tolerante desde la visita del Papa,
218.000 Biblias fueron distribuidas [8]
El investigador estadounidense David Stoll en su libro “¿América Latina se vuelve protestante?”,
pronosticó que Al finalizar el siglo XXI los evangélicos constituirán 30% de la población de la
región. [9]
Ese fenómeno ya está ocurriendo en Guatemala, donde 31% de la población es evangélica, y
empieza a alcanzar dimensiones importantes en países como Chile (25%) y Brasil (15,4%). [10]
La campaña efectuada en América Central por iglesias de origen norteamericano se tradujo en
una modificación de la relación de fuerzas que existía tradicionalmente en la región: en la
actualidad, Guatemala es -proporcionalmente el país de América Latina donde los evangélicos
tienen mayor influencia.
6. Estimamos que somos como 3,5 millones de los 11,2 millones” de habitantes, lo que equivaldría
a 31%, dijo Manuel Dionicio, secretario ejecutivo de la Conferencia de Iglesias Evangélicas de
Guatemala, que aglutina a los feligreses de 18.000 templos. [11]
Pero la mayor potencia protestante del continente es -por evidentes razones demográficas- Brasil.
En ese país, que también suele ser definido como el “gigante católico”, los evangélicos son unos
25 millones, según reveló el censo de 2000. Esa radiografía poblacional demostró que, en
la última década, la población que se confiesa evangélica aumentó de 9% a 15,4% de los 169,6
millones de habitantes de Brasil. La expansión se produjo en detrimento de los católicos, que en
ese mismo período se redujeron de 83,8% a 73,8% del total de la población. La disminución es
más notoria si se considera que sólo 12% de los católicos se declaran practicantes… “El
pluralismo y la competencia dominan hoy el escenario religioso de América Latina y nada
hace suponer que esa tendencia revierta en los próximos años”, afirma el teólogo
luterano brasileño Walter Altmann…
Latinoamérica ya no es un continente homogéneo desde el punto de vista religioso, o sea,
católico romano”, precisó. Desde 1960 los evangélicos también duplicaron su presencia
porcentual en Paraguay, Venezuela, Panamá y Haití, triplicaron su proporción en
Argentina, Nicaragua y República Dominicana y la cuadriplicaron en Brasil y Puerto Rico. En
Colombia y Ecuador se sextuplicaron; y en Guatemala, se septuplicaron…
Entre las iglesias cristianas en auge destacan las llamadas pentecostales, identificadas así
porque subrayan la acción directa del Espíritu Santo y sus dones mencionados en el Nuevo
Testamento (sanación, profecía, don de lenguas), que muchas veces se hacen tangibles en fuertes
emociones… Las iglesias pentecostales son la rama evangélica con más crecimiento en América
7. Latina y, en ciertos casos, llegan a constituir entre 80 y 85% de los protestantes, según cifras de
un informe católico…El desarrollo de los pentecostales se debe a que, en su mayoría, propugnan
una mejora de las condiciones económicas de sus seguidores en la tierra, aplicando la llamada
“teología de la prosperidad”, una noción acuñada en Estados Unidos, explicó el antropólogo
guatemalteco.
Estuardo Zapeta, estudioso del tema… Según el investigador, Guatemala se ha convertido en el
primer país exportador de misioneros evangélicos de la región. “El principal mercado es Estados
Unidos por los emigrantes económicos -estimados en 1,3 millones y luego viajan a España, Chile
y Argentina”, aseguró…
Estas iglesias están abriendo la posibilidad de que ciertos cuerpos sociales puedan asumir por
sí mismos, por primera vez en mucho tiempo, la administración de su propia fe, en contraste con
lo que ocurre en confesiones estructuradas jerárquicamente y centralistas”, dijo Rubén Ruiz, del
Centro Coordinador y Difusor de Estudios Latinoamericanos de la Universidad
Nacional Autónoma de México…No se trata de un fenómeno exclusivo del continente. “La
tendencia en general de la práctica de la fe en el tercer milenio es la de una individualización”,
señala Ruiz, historiador y autor de varios estudios sobre la difusión del protestantismo en
América…”
La gente está tratando de regresar a la satisfacción de lo religioso por vías alternativas y eso
produce la tremenda explosión de nuevas iglesias y credos”, agregó. Esto no ocurre sólo con los
llamados movimientos pentecostales, también se refleja en los números de otras creencias como
los Testigos de Jehová, cuyo número de fieles casi iguala al de los católicos en Cuba, según las
cifras oficiales, y de la Iglesia de Jesucristo de Todos los Santos de los Últimos Días
(llamados comúnmente mormones), que recientemente ha inaugurado lujosos templos en varias
8. ciudades como México y Bogotá…. Mientras la iglesia Católica mantiene su credibilidad, líderes
de otras iglesias irrumpen con fuerza en el panorama político de muchos países, un fenómeno
creciente en las últimas dos décadas…En Brasil, el número de evangélicos en el parlamento
llegó a 60 en las últimas elecciones de 2002. El voto de los electores protestantes fue decisivo
para que el ex obrero metalúrgico Luiz Ignacio Lula da Silva accediera a la presidencia…En
Guatemala, dos fieles de iglesias protestantes llegaron al poder: el ex dictador Efraín Ríos Montt
(1982-83) y Jorge Serrano Elías (1991-93)…En Paraguay, en agosto asumirá la presidencia
Nicanor Duarte, electo por el Partido Colorado que desde 1947 gobierna el país, y que será el
primer gobernante cristiano no católico de ese país.
Incluso en Cuba, dos pastores evangélicos integran la Asamblea Nacional, órgano en el cual no
participa ningún católico…En 2003, cinco siglos después de la llegada de los primeros
misioneros, el vasto territorio descubierto por Colón dejó de ser un feudo inexpugnable del
catolicismo…Para un observador imparcial, América Latina es el escenario de una verdadera
guerra de religiones entre una iglesia mayoritaria que trata de mantener su supremacía y una
multitud de doctrinas, sectas y prácticas sincréticas que pugnan por un mercado de casi 500
millones de almas. [12]
David Stoll opina que «con excepción de algunas contribuciones que provienen de otros países,
principalmente del noroeste de Europa y de la Comunidad Británica, la misión evangélica
mundial es una empresa norteamericana. Esto es particularmente cierto en América Latina,
donde la mayor parte de los misioneros protestantes son norteamericanos. En un tiempo, la
mayoría estuvo comisionada por las denominaciones principales afiliadas al Consejo Mundial de
Iglesias (CMI).
9. Pero a medida que el CMI empezó a preocuparse por la justicia social, muchos de sus misioneros
dejaron el campo a las iglesias nacionales. Su retiro fue más que compensado por los
evangélicos, para quienes la justicia social es menos importante que ofrecer la única escalera de
escape a la condena eterna… Cambiar el corazón del hombre es la única manera de cambiar el
medio». Gracias en parte a una confraternidad de empresarios, el Ministro sandinista del Interior
dio su aprobación a la distribución masiva de biblias [13]
El teólogo C. René Padilla, en una nota para la revista Iglesia y Misión, titulado “Todo el
Evangelio para todos los pueblos desde América Latina”, escribió que Los últimos años han
visto un crecimiento inusitado del interés en la obra misionera en círculos evangélicos en
América Latina. Ya a mediados de la década de los años setenta se realizó en Curitiba el primer
congreso misionero evangélico a nivel latinoamericano, organizado por la Alianza Bíblica
Universitaria del Brasil. Desde ese entonces la visión de llevar el Evangelio a todo el mundo
se ha extendido ampliamente. De ello dan testimonio los congresos misioneros realizados
(comenzando con COMIBAM, en noviembre de 1987), la literatura publicada y los cursos de
misionología que se ofrecen (¡por primera vez!) en muchas instituciones teológicas en todo el
continente. Como muestra su lema, CLADE III quiere hacer de esa preocupación por llevar el
Evangelio a “todos los pueblos” un tema fundamental de su reflexión. [14]
Estamos en presencia del pluralismo en el campo religioso latinoamericano.América Latina ya
no es católica en el sentido tradicional del término…. A fines de la década de 1980, América
Latina se estaba volviendo protestante. En la primera década del siglo XXI, el crecimiento de
esas iglesias alternativas se ha detenido o su ritmo se ha hecho lento. Por el contrario, lo que no
se puede poner en duda es que las tasas de crecimiento del catolicismo se han estado
revirtiendo sistemáticamente en los últimos cien años… Estamos ahora en presencia de un claro
10. pluralismo en el campo religioso de América Latina. ¿Qué sentido tiene afirmar que la región ya
no es católica, cuando la Iglesia Católica todavía goza de un espacio privilegiado y su influencia
es notoria en la sociedad? ¿Está el catolicismo en declive en América Latina?
América Latina ha dejado de ser católica en el sentido tradicional del término. Las alternativas al
catolicismo no han provenido (salvo las excepciones históricas de Cuba y Uruguay) del
crecimiento de la no creencia y mucho menos del ateísmo. Por otra parte, América Latina es
más católica sólo en forma relativa. Los países de América Latina siguen teniendo un espacio
privilegiado (y de hecho conforman una notable proporción) en el marco del catolicismo
mundial. La totalidad de la población católica de sus 19 países alcanza a 447 millones de
personas, lo que representa el 47,98% de los 932 millones y medio de católicos de los cien países
más católicos a nivel mundial (ver Anexo, Tabla I).
No puede afirmarse que América Latina haya dejado de ser católica y que se haya vuelto
protestante. Pero tampoco puede sostenerse que América Latina siga siendo católica con las
características, el sentido y la significación que lo fuera hacia principios de siglo XX cuando los
católicos representaban el 92,3% de la población o, más recientemente, cuando los católicos
seguían manteniendo un porcentaje que se elevaba al 89,7% de la población (1970). Las
estimaciones para el año 2000 llevan este porcentaje al 85,06%, correspondiendo a Meso
América y el Caribe hispano un 82,3% y a Sudamérica un 87,5%
Otra fuente, la Enciclopedia Online Nationmaster.com, estima un 81,01% de católicos hacia el
año 2000. Como se observa, los datos del World Value Survey y de la World Christian Database
coinciden en elevar la tasa de no católicos por encima del 12% en los países analizados. La
Enciclopedia Nationmaster, por su parte, lo eleva a más del 16%. Las cifras a nivel mundial que
11. entrega la Enciclopedia Británica en 1999 indica que los protestantes de América Latina son un
número considerablemente menor que aquellos de Europa, África y Norteamérica; y son casi
tantos como en Asia. Los clasificados como donde presumiblemente se encuentran los
pentecostales tampoco son mayoría en relación a otros continentes: hay muchos más en Asia,
África y Norteamérica. Por último, los ortodoxos y anglicanos de América Latina constituyen
una ínfima minoría en relación con sus comunidades en el mundo. Lejos está América Latina de
haberse convertido en un continente protestante. Si se analizan los datos por subregiones, se
distinguen al menos tres grupos:
a) Países en los cuales hay una cifra más elevada de adhesiones a alternativas evangélicas
(Brasil, Guatemala, Chile, Honduras, El Salvador, Panamá, Costa Rica, República Dominicana,
Bolivia).
b) Países en los cuales hay una elevada presencia de católicos pero cuyos campos religiosos
comienzan a pluralizarse (México, Nicaragua, Ecuador, Perú, Argentina,Venezuela, Colombia,
Paraguay).
c) Países en los cuales la menor presencia de adhesiones al catolicismo se debe al incremento del
fenómeno de la no creencia (Cuba, Uruguay).
Los datos de la World Value Survey ponen en evidencia que la situación de América Latina dista
mucho todavía de un panorama de abierto y claro pluralismo religioso como el que se observa en
la vecina Norteamérica pero, al mismo tiempo, está en una situación clara de mayor pluralismo
que el caso español. [15]
Stoll atribuye la expansión de las doctrinas protestantes a una intensa campaña de penetración
lanzada por varias iglesias de Estados Unidos, con el apoyo del gobierno de Washington, y que
se intensificó en América Central en la década de los ochenta. El objetivo de esa ofensiva era
12. frenar el avance de la Teología de la Liberación, una reflexión de sacerdotes católicos que
priorizaban la llamada opción preferencial por los pobres y la acción política.
Washington consideraba esa posición como peligrosamente cercana al comunismo.[16]
Respecto a la errónea apreciación de David Stoll, podemos citar esta nota de un portal de Internet
que nos muestra que “Con el tiempo –contradiciendo a la falsa teoría del control norteamericano-
han surgido iglesias de carácter nacional, totalmente desconectadas de las de Estados Unidos, e
incluso, existen iglesias “híbridas”, que integran elementos religiosos tomados del cristianismo
protestante, católico e incluso de otras religiones no cristianas como la Iglesia Universal
del Reino de Dios (IURD), nacida en Brasil.[17]
Notas:
[1] http://historiaparaeldebate.blogcindario.com/2007/11/00005-america-latina-i.html
[2] http://historiaparaeldebate.blogcindario.com/2007/11/00006-america-latina-ii.html
[3] http://www.comboni.org/index.php?Lingua=ES&ca=10239&CodNews=101386&s=1
[4] http://www.cenpromex.org.mx/revista_ftl/ftl/textos/carlos_mondragon.htm
[5] http://www.cenpromex.org.mx/revista_ftl/ftl/textos/carlos_mondragon.htm
[6]http://www.cenpromex.org.mx/revista_ftl/ftl/textos/carlos_mondragon.htm
[7] Jean-Pierre Bastian, Los disidentes: Sociedades protestantes y revolución en México, 1872-
1911, México, Fondo de Cultura Económica, 1991, p.
320., http://www.cenpromex.org.mx/revista_ftl/ftl/textos/carlos_mondragon.htm
[8] http://www.elportalcristiano.com/pressto/pressto.php3?acciondoc=doc&id_doc=571&seccio
n=36
[9] http://www.geocities.com/Heartland/Acres/1142/Noticias/noticias_05_abr.htm
[10] http://www.geocities.com/Heartland/Acres/1142/Noticias/noticias_05_abr.htm