Un televisor con pies fue de compras y se encontró con un platillo volante con un extraterrestre dentro. El extraterrestre le dijo al televisor que no le haría daño. El televisor le ofreció compartir unas chuches y compraron dos paquetes cada uno. Al día siguiente, el extraterrestre volvió para jugar con su nuevo amigo, el televisor, en el parque.