La dehesa del valle de los pedroches.
¿Qué es y donde se encuentra?
Este ecosistema típico del suroeste de la Península Ibérica es el soporte de
nuestra ganadería y la base de la calidad de nuestros productos.
Con una densidad media superior de los 50 árboles por hectárea, los
encinares de nuestros socios constituyen el hábitat ideal para el cerdo
ibérico que sacrificamos tras la montanera, periodo que abarca desde el
mes de octubre hasta el de febrero. Nuestras fincas se encuentran
situadas en los valles de Los Pedroches y Guadiato a una altitud meda de
650 metros y en ellos se desarrolla todo el ciclo vital de los animales que
sacrificamos, desde el nacimiento hasta la matanza.
¿Qué pueblos la constituyen?
En la actualidad está formada por 17 municipios Alcaracejos, Añora,
Belalcazar, Cardeña, Venta del Charco, Azuel, Conquista, Dos Torres, El
Guijo, El Viso, Fuente la Lancha, Hinojosa del Duque, Pedroche, Pozoblanco,
Santa Eufemia, Torrecampo, Villanueva del Duque, Villaralto y Villanueva de
Córdoba.
El cerdo ibérico en el valle de los pedroches:
El cerdo de raza ibérica, es el único capaz de realizar adecuadamente la
transformación de la bellota, pelándola y consumiéndola junto con la hierba
que cada otoño crece forma natural en nuestras dehesas y transformándola
en carne y grasa de forma eficiente, dando lugar a productos inigualables,
imposibles de obtener de otro modo.
El cerdo ibérico del Valle de los Pedroches se alimenta de la bellota que
brindan las encinas centenarias, dotando a nuestros jamones y paletas
ibéricas de aromas, colores y sabores delicados e inigualables para nuestros
sentidos.
El cerdo ibérico del valle de los Pedroches presenta unas magníficas
expectativas, que consolida la raza como productora de la mejor materia
prima para la elaboración de jamones y paletas de alta calidad. En la
actualidad se utilizan estirpes de raza retinta o colorada y estirpes negras,
entre las que destaca el Negro de los Pedroches, variante casi en extinción
que hoy empieza a recuperarse, precisamente gracias a la labor que está
realizando la Denominación de Origen “Los Pedroches”.
La crianza del cerdo ibérico se realiza siguiendo métodos tradicionales en
régimen extensivo. Su privilegiada vida en libertad pone en juego todos los
recursos de la dehesa; hierva en primavera, rastrojos de cereales en verano
y los pastos y sobre todo bellota en otoño e invierno durante el cebo en
montanera
La encina en el valle de los pedroches:
Es un árbol de talla media, alcanzando los 16 hasta los 25 metros de altura
como máximo; en estado natural es de copa ovalada al principio que después
va ensanchándose y queda finalmente con forma redondeado-aplastada. De
joven suele formar matas arbustivas que se confunden con la
coscoja (Quercus coccifera) y en ocasiones se queda en ese estado de
arbusto por las condiciones climáticas o edáficas del lugar.
Las hojas, que son perennes (permanecen en el árbol entre dos y cuatro
años, con una media de 2,7 años), coriáceas y de un color verde oscuro por el
haz y más claro por el envés, están provistas de fuertes espinas en su
contorno cuando la planta es joven y, en los adultos, en las ramas más bajas,
careciendo de ellas las hojas de las ramas altas. Esto la hace parecerse,
cuando es arbusto, al acebo. El envés de las hojas está cubierto de una
borra grisácea que se desprende al frotarlas y por la que se puede
distinguir fácilmente las encinas jóvenes de las coscojas, cuyas hojas
carecen de ese vello y son de un verde vivo por el envés. Estas hojas, muy
duras y coriáceas, evitan la excesiva transpiración de la planta, lo que le
permite vivir en lugares secos y con gran exposición al sol, como la ribera
mediterránea.
La corteza es lisa y de color verde grisáceo en los tallos; se va oscureciendo
a medida que crecen y, alrededor de los 15 a 20 años, se agrieta en todas
direcciones, quedando un tronco muy oscuro, prácticamente negro.
¿Qué problemas hay en la dehesa del valle de los pedroches?
• 1_ Sobre pastoreo. Este problema afecta a los árboles y al terreno
porque los pastores han sido sustituidos por vallas y el ganado vacuno
ha ido sustituyendo al ganado ovino y caprino.
• 2_ Laboreo. Para sembrar cultivos herbáceos (principalmente para
producir cultivos forrajeros) y, al mismo tiempo, limpiar la maleza
tiene el efecto de frenar o impedir la regeneración.
• 3_ La seca. La seca del encinar es una enfermedad que provoca un
decaimiento progresivo en encinas y alcornoques y que lleva en poco
años a la muerte de estos árboles
• 4_ La caza. El crecimiento de la caza afecta a la calidad del hábitat,
impidiendo, por ejemplo, la regeneración del arbolado.
¿Cómo podemos reducir los problemas y la contaminación?
*Realizando podas y descorches adecuados con herramientas adecuadas y
afiladas. No podar arboles debilitados, evitar la poda en dias humedos y
quemar la madera extraida de los arboles para evitar la propagacion de
hongos.
*Evitar la limpieza sistemática de arbustos y matas. Estas plantas protegen
el suelo para evitar la erosion y la perdida de nutrientes.
*Evitar el máximo uso de insecticidas para asi no debilitar y matar poco a
poco a los animales y plantas.
*Evitar el pastoreo excesivo y utilizar el pastoreo preventivo, el pastoreo
debilita la vegetación y el terreno.
*Utilizar maquinaria adecuada, se recomienda el uso de maquinaria ligera
para asi no aplastar a la vegetación ni dañar el terreno.
*Evitar la sobreexplotación del suelo, contra mas explotemos el suelo menos
nutrientes tienen los arboles para su alimentación y se aconseja enriquecer
el suelo con superfosfatos etc..
Realizado por Álvaro Tardáguila Hidalgo.