El documento resume la construcción del estado moderno bajo los Reyes Católicos Isabel y Fernando. Detalla 1) la unión dinástica de Castilla y Aragón a través de su matrimonio, 2) la conquista de Granada y la incorporación de Navarra a sus reinos, y 3) su política internacional enfocada en alianzas, la lucha contra Francia por el control de Italia, y la expansión en África y las Islas Canarias.
1. 5. Los Reyes CatóLiCos: La
ConstRuCCión deL estado
ModeRno.
1.Unión dinástica: la integración de las
coronas de Castilla y Aragón.
2.La conquista de Granada y la
incorporación de Navarra.
3.Política internacional.
4.Organización política e instituciones.
Profesores:Oscar González García
Ricardo Chao Prieto
2. INTRODUCCIÓN
El título de Rey Católico, se lo otorgó a Fernando de Aragón el Papa Alejandro VI en 1496,
por su lucha contra el rey francés en Italia. Ese título se hizo extensivo a la reina Isabel.
Su matrimonio permitió iniciar un proceso de mando conjunto de los territorios de
ambos reyes, que con el tiempo daría lugar a la unidad de España. Más que de
integración de los reino en general, habría que analizar el proceso político de algunos
aspectos en particular, entre los que cabe destacar el religioso o el territorial, el primero
con las medidas de unificación religiosa del territorio, y el segundo con la conquista del
reino de Granada, la incorporación de Navarra y la integración de las Canarias.
Su obra destaca tanto en la política interior, con el afianzamiento y creación de
instituciones de gobierno, como en la política exterior con la creación de un sistema de
alianzas que les acercaba a Portugal, Inglaterra y la casa de Austria, con el principal
objetivo de aislar a Francia. Su política exterior tuvo una vocación expansionista que se
manifestó en su interés por Italia, el Norte de África y la expedición por el Atlántico que
daría como fruto el descubrimiento de América.
4. 1. 1. La guerra civil en Castilla (1474-1479).
El rey Enrique IV de Trastámara (1455-1474), hijo
de Juan II, se enfrentó a partir de 1461 con una
rebelión de la nobleza. Le acusaban de tiranía y
además se oponían al ascenso al trono de su
heredera, su hija Juana, de la que se rumoreaba
que era en realidad hija de Beltrán de la Cueva, un
consejero real. Por aquella razón fue apodada La
Beltraneja.
El enfrentamiento llegó a tal punto que el rey fue
depuesto por los nobles mediante una ceremonia
llamada La Farsa de Ávila, en 1464. Los nobles
quisieron darle el trono a Isabel de Castilla,
hermana de Enrique IV, pero esta se negó a
tomarlo mientras el rey viviera, por lo que logró que
aquel la nombrara sucesora en 1468 mediante la
llamada Concordia de los Toros de Guisando. A
partir de entonces Enrique IV prepararía varios
proyectos matrimoniales para ella quien, sin
embargo, contrajo matrimonio en secreto en
1469 con el príncipe Fernando de Aragón.
5. Fernando de Aragón, hijo de Juan II, en un
principio no tenía derecho al trono, pues tenía un
hermano mayor, Carlos de Viana, que murió antes
de fallecer su padre el rey de Aragón (1461).
El matrimonio molestó a Enrique IV, quien
devolvió a su hija Juana los derechos
sucesorios. Poco a poco, se fueron formando dos
bandos en torno a las dos candidatas.
Muerto el rey en 1474, Isabel se autoproclamó
reina de Castilla, logrando el respaldo de algunos
nobles influyentes y de muchas ciudades de los
valles del Duero y del Tajo.
En el otro bando, se acordó el matrimonio de
Juana con Alfonso V de Portugal, quien a su vez
estableció una alianza con Francia: la guerra de
sucesión al trono se convertía en un asunto
internacional.
El conflicto terminó en 1479 con el Tratado de
Alcaçovas-Toledo, mediante el cual el rey
portugués reconocía a Isabel como reina de
Fernando de Aragón y Castilla.
Tratado de Alcaçovas
6. 1. 2. La unión dinástica.
Enero de 1475 – Concordia de Segovia – se
fijaba el sistema de gobierno de Castilla y
Aragón:
En Castilla, donde parte de la nobleza no quería
que gobernara una mujer, ambos tendrían la
misma capacidad de decisión política y firmarían
conjuntamente las órdenes reales. Fernando
sería sólo consorte, por lo que Isabel retenía los
derechos sucesorios.
En Aragón, cuya corona heredó Fernando en
1479, las leyes sólo le permitían ser rey a él,
pero firmó en 1481 un decreto que concedía a
su esposa la corregencia.
Aragón y Castilla mantendrían sus fronteras, sus
leyes y sus respectivas instituciones. No hubo
fusión de los reinos y Castilla, por su mayor
tamaño, población y auge económico,
desempeñó un papel hegemónico.
9. 2. 1. La guerra de Granada (1481 – 1492)
El reino nazarita de Granada, nacido en 1246 por
el pacto entre Muhammad I y Fernando III, era
objetivo político de Castilla desde hacía tiempo.
Durante dos siglos y medio, a pesar de
enfrentamientos y guerras, se habían forjado
formas de relación y coexistencia entre las
gentes de un lado y otro de la frontera.
Las relaciones se fueron deteriorando a lo largo del
S. XV, cuando era evidente la situación de
debilidad de los reyes nazaríes: población
excesiva difícil de abastecer, pérdida del espíritu
islámico y luchas entre las grandes familias que
minaban la capacidad militar (abencerrajes y
zegríes).
A pesar de la inferioridad islámica, la guerra
supondría un esfuerzo enorme para los Reyes
Católicos, que movilizaron un enorme ejército de
50000 infantes y 15000 jinetes, incorporaron
innovaciones técnicas y utilizaron la flota para la
guerra. El propio Fernando dirigiría las campañas.
Sala de los Abencerrajes - La Alhambra
10. En 1480, cuando ya se había terminado la guerra con Juana la Beltraneja, y el poder de los
Reyes Católicos parecía afianzado, los reyes comenzaron la tarea de conquista del reino
nazarita de Granada, aunque no sería hasta dos años después cuando comenzaran las
operaciones militares.
En efecto, fue en 1482, tras la toma de Zahara por los musulmanes, cuando comenzó el
asalto definitivo al reino granadino, comenzando por la toma de una plaza tan central como
Alhama.
11. Las tropas castellanas sitiaron la capital
granadina, que capituló en 1491. Los Reyes
Católicos entraron en ella el 2 de enero de
1492; con este hecho, terminaba la presencia
de reinos islámicos en la península Ibérica.
La capitulación, pactada con Boabdil, el
último rey nazarí, garantizaba la libertad, los
bienes y la conservación de la religión y las
costumbres a los musulmanes.
El trato no fue el mismo en todas partes. La
población de Málaga, que se resistió con
ardor, fue esclavizada.
La guerra y el exilio significaría la pérdida de
la mitad de la población del reino, sólo
apaciguada por la llegada de unos 40000
colonos castellanos.
La importancia de la plaza de Granada se
refleja en que los Reyes Católicos decidieran
enterrarse allí.
12. 2. 2. La incorporación de Navarra.
El interés por controlar el reino de Navarra no fue
una novedad del reinado de Isabel y Fernando. Ya
Juan II, el padre de Fernando, había reinado en
Navarra. Casado con Blanca de Navarra, fue padre
del príncipe heredero, Carlos de Viana, que
falleció antes de llegar a reinar.
Desde 1479, al morir Juan II, los Reyes Católicos
tuvieron puestas sus miras en Navarra, que
durante unos años sería gobernada por dinastías
francesas.
Fernando el Católico, iría imponiendo condiciones
a Navarra en tratados firmados con los franceses
entre 1488 y 1495, que convertían a Pamplona en
un auténtico protectorado de los reinos hispánicos.
Años más tarde, en 1512, Navarra se anexionaría
definitivamente a Aragón, para poco después, en
1515 pasar a formar parte de la corona de Castilla,
si bien se mantuvieron sus instituciones propias y
sus fueros.
13. 3. POLÍTICA INTERNACIONAL
La política exterior de los Reyes Católicos tuvo varios ejes de interés. Tras los
problemas iniciales durante la guerra entre Isabel y Juana, los Reyes Católicos
iniciaron un proceso de acercamiento a Portugal e Inglaterra. Las alianzas
matrimoniales eran la muestra de la dirección que seguía la política exterior, y esa
dirección llevaba también a la casa de Austria.
Los objetivos de su política exterior fueron claros: por un lado, les interesaba tener
buenas relaciones con todos los países europeos que les permitieran mantener
una política de aislamiento a Francia con quien estaba enemistada por los
intereses que ambos tenían en Italia; por otro, se mantiene la línea de política
exterior de expansión que había tenido Aragón en los siglos anteriores.
Además, se pone de manifiesto que en asuntos de política exterior ambas coronas
actuaban conjuntamente. Fue Fernando quien se encargó principalmente de los
asuntos de política exterior, centrados en dos áreas de interés: la Mediterránea
y la Atlántica. En el área mediterránea hay que contemplar las guerras de Italia y
las conquistas en el Norte de África, en tanto que en el área atlántica las
grandes hazañas fueron el entendimiento con Portugal y el descubrimiento de
América.
14. 3. 1. La integración de las Canarias y la aproximación a Portugal
Portugal renunció al archipiélago canario en una de las cláusulas del Tratado de
Alcaçovas-Toledo (1479), que significaba el reconocimiento como reina de
Castilla de Isabel I, y la unión con Aragón. A cambio Castilla renunciaba a las
Azores, Madeira y a la costa africana al sur del cabo Bojador.
Los acuerdos marítimos entre ambas potencias se renovaron tras el
descubrimiento de América en el Tratado de Tordesillas (1494), que servía para
pactar un reparto de los derechos de conquista sobre las nuevas tierras.
El proceso de conquista de las islas aún no colonizadas comenzó en 1477, siendo
dominadas una a una hasta la rendición de los guanches de Tenerife en 1496.
Primera batalla de Acentejo 1494 – derrota castellana
15.
16. El gobierno de las islas Canarias se
integró plenamente en la corona de
Castilla. Los colonizadores se
comportaron de manera similar a como
luego lo harían los de América: la
evangelización fue paralela a la
explotación, esclavización y
desaparición de grupos indígenas,
especialmente durante las luchas de
conquista.
Las Canarias se convirtieron en punto
económico y estratégico importante.
Económico porque, por el azúcar
principalmente, entraron a formar parte
del sistema mercantil de los reinos
hispánicos, Portugal, Italia y Flandes.
Por otra parte, se convirtieron en puntos
estratégicos del intenso comercio entre
Europa y el Oeste de África y, a partir de
1492, escala obligada hacia América.
Imagen de Canarias y escena de la rendición guanche
tras la 2ª batalla de Acentejo
17. 3. 2. La política italiana y la lucha con Francia
Francia sería el país rival de Castilla-Aragón
por la hegemonía en la zona occidental de
Europa. La unión dinástica había hecho saltar
la alarma en el país vecino y, desde entonces,
aquel aprovecharía cualquier oportunidad de
limitar el poder de los Reyes Católicos, a lo
que estos respondieron con una serie de
alianzas matrimoniales con otros Estados.
Mediante el Tratado de Barcelona de 1493,
Francia restituiría a Aragón los condados de
Rosellón y Cerdaña, anexionados durante la
guerra civil catalana de 1462-72, a cambio de
que los reyes católicos renunciaran a los
matrimonios previstos con Borgoña e
Inglaterra y no interviniesen en Italia.
El acuerdo se rompería dos años después,
cuando Carlos VIII de Francia amenazara el
trono de Nápoles donde reinaba un primo de
Fernando.
Carlos VIII, rey de Francia
el gran rival de los RR. CC.
18. Nápoles, fue conquistada por Alfonso V el
magnánimo, hermano de Juan II, quien había
dejado como rey a su hijo Fernando.
A su muerte en 1494, a pesar de que tenía
descendientes, se hicieron patentes las
pretensiones de aragoneses y franceses de
hacerse con el reino. Francia, apoyada por
varios estados italianos invadió Nápoles
proclamándose rey Carlos VIII en 1495.
La reacción de Fernando no se hizo esperar,
pues de inmediato creó una Liga Santa en la
que participaron junto a él el Papa, el emperador
alemán, Milán y Venecia. El rey de Francia tuvo
que abandonar el territorio napolitano.
En 1499, el nuevo rey de Francia, Luis XII, volvió
a intentar recobrar Nápoles. Estallando una
nueva guerra en la que Francia se vio superada
por las tropas del Gran Capitán, Gonzalo
Fernández de Córdoba. En 1504 terminaría la
guerra con el abandono del territorio por parte de
Francia. Estatua del Gran Capitán
Madrid
19. 3. 3. La política en el norte de África
Los monarcas castellanos, desde el
siglo XIII, habían puesto sus miras
en la costa norteafricana como
futura área de expansión, por
motivos estratégico-militares,
económicos y religiosos.
Tras la conquista del reino de
Granada, la vigilancia de la costa
norteafricana se hacía más
necesaria por las incursiones de los
piratas turcos y berberiscos.
Una vez conquistadas las Canarias, los Reyes animaron a la conquista de plazas en
el Norte de África. La primera conquista fue Melilla (1497), y continuaron hasta que,
en 1510, se ocuparon las ciudades de Bugía y Trípoli.
Las conquistas no consiguieron el objetivo inicial, pues la actividad de los piratas
continuó durante décadas. Además, la reanudación de las guerras en Italia y el mayor
interés hacia la colonización de América, frenaron la expansión en África.
20. 3. 4. Política matrimonial y crisis sucesoria
Los RR. CC. Negociaron una serie de matrimonios para
sus hijos con las principales casas reinante de Europa.
DOBLE OBJETIVO:
• Asegurar la permanencia de la herencia de las
Coronas en la familia.
• Establecer una red de alianzas con Estados
dispuestos al aislamiento de Francia.
• La infanta Catalina se convirtió en la primera de las seis esposas del inglés Enrique
VIII.
• La infanta Isabel contrajo matrimonio con el príncipe portugués don Alfonso y, al
enviudar, con su heredero, don Manuel el Afortunado (1495), Manuel I de Portugal.
• Alianza con la monarquía austro-borgoñona: en 1496 se pacta un doble matrimonio:
• Juan, heredero de los reyes, casó en 1497 con Margarita de Austria, hija del
emperador Maximiliano I y María de Borgoña.
• Juana (futura reina, más conocida como Juana la Loca) contrajo matrimonio en
1496 con el archiduque Felipe de Austria (el Hermoso), también hijo de aquel.
21. Las muertes de sus hermanos Juan e Isabel colocaron
a Juana como heredera legítima de Castilla, a pesar
de sus síntomas de desequilibrio mental.
En 1504 moría Isabel la Católica quien, en su
testamento, confirmaba a Juana como su sucesora.
Su padre la proclamó reina, pero tomaba las riendas
del Estado castellano, lo que no gustó a Felipe el
Hermoso.
Para evitar el conflicto armado, Fernando y su yerno
pactaron una regencia compartida en la Concordia de
Salamanca de 1505. Sin embargo, como Felipe
recibía cada vez mas apoyos de una nobleza resentida
con el rey católico, éste regresaría a Aragón en 1506,
mientras aquel era proclamado rey de Castilla.
La muerte prematura del nuevo rey propició la
incapacidad total de Juana y la vuelta de su padre, que
la encerró en Tordesillas en 1509. Al morir el rey
católico en 1516, el Cardenal Cisneros gobernaría
Castilla hasta la llegada del príncipe Carlos de
Habsburgo, hijo de Juana y Felipe, que inició la
dinastía de los Austrias españoles.
Carlos I de España y V de Alemania
Retratado por Tiziano
22. 4. ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES
4. 1. Instituciones de gobierno
La ampliación de territorios fue acompañada desde el primer momento por una
organización de las instituciones de gobierno que iban afianzando el estado autoritario
y que significaba en buena medida la culminación del proceso de autoritarismo
iniciado por Alfonso XI.
Se mantenían las instituciones existentes al subir al trono los monarcas, que en
algunas introdujeron modificaciones.
Consejo Real, Audiencia y Chancillería eran las tres más importantes, perdiendo
fuerza las Cortes a favor del Consejo Real, en el que los reyes tendieron a dar
entrada a letrados antes que a nobles. Irían tomando decisiones por delegación de los
reyes, y pronto se creó un Consejo de Aragón, abriéndose el camino al sistema de
gobierno por consejos que sería característico de los Austrias.
Las Cortes tuvieron gran importancia hasta 1480, mientras los reyes necesitaron el
apoyo de las ciudades y su dinero. Una vez saneadas las arcas del Estado, dejaron de
convocar cortes, salvo en ocasiones protocolarias. El aumento de los ingresos fiscales
posibilitó la creación de un ejército permanente, potente, rápido, moderno y bien
dirigido.
23. Junto a estas instituciones del poder central, los reyes introdujeron o modificaron otras
que les ayudaran a controlar a sus súbditos:
• Poder municipal: consolidaron la ya existente figura de un oficial que les
representara en los gobiernos locales, el corregidor. Su presencia se había instaurado
en ciudades o villas en las que había problemas de difícil solución por los oficiales
municipales, a donde eran enviados por los reyes para poner paz. Acabarían
permitiendo a los reyes entrometerse en la política local.
• Poder policíal: La política encaminada a poner orden en el reino llevó a los reyes a
crear la Santa Hermandad que, nacida para luchar contra la delincuencia que asolaba
Castilla durante la guerra entre Isabel y Juana, se convirtió en un ejército real privado,
pagado por las ciudades, que en ocasiones protestaban de los altos costos que
suponía. Su objetivo fue perseguir y acabar con los asaltos de caminos, robos y
homicidios.
• Poder religioso: En lo referente a la política religiosa, la gran institución introducida
en Castilla por los RR. CC., fue el tribunal de la Santa Inquisición desde 1478. En
Aragón había venido actuando la Inquisición pontificia desde el siglo XIII, pero los
reyes castellanos no la habían aceptado. Los RR. CC., en su proceso de unificación
del catolicismo, instauraron la Inquisición con un sentido diferente al de la pontificia: si
ésta se dedicaba a castigar herejes, la nueva se ocupaba de los falsos conversos.
Los judíos o musulmanes que practicaban abiertamente su religión no eran
perseguidos, lo eran quienes, habiéndose hecho cristianos practicaban otra religión en
secreto.
24. 4. 2. Política de unidad religiosa y racial
Evidentemente muy relacionada con el Tribunal de la Inquisición, esta política llevaría a
dos hechos muy característicos: la expulsión de los judíos y la opresión sobre los
musulmanes.
1480 Los RR. CC. aceptan la propuesta de las
Cortes de dictar medidas contra los judíos
Sin embargo, hasta 1491, los RR. CC. protegieron
a las comunidades judías, que continuaron
viviendo con cierta seguridad en sus barrios y
pagando puntualmente sus tributos.
Confinación en
guetos
Su presencia y la práctica de los ritos
judíos eran un ejemplo pernicioso que
provocaba que muchos conversos
judaizaran.
1492 Decretos del 31 de
marzo
La mayoría optó por
el exilio – 150000.
En 3 meses los judíos
debían optar por la
conversión o el abandono
del país. Podían llevarse
sus bienes muebles y
debían vender sus bienes
raíces.
Atmósfera de triunfo
por la toma de Granada.
25. Musulmanes Quedaban unos 200.000 en Granada Se les permitió mantener
sus costumbre y ritos.
1499 – el cardenal
Cisneros se convierte
en inquisidor general
También son conminados a
la conversión.
Se desencadenó una
rebelión que fue reprimida
duramente y puso fin a los
acuerdos adquiridos con la
toma de Granada. La
mayor parte de los
musulmanes se convirtió
al catolicismo, pasando a
ser denominados
moriscos. Mantuvieron en
muchos casos sus
costumbres, lengua y
vestimenta.
Los musulmanes de Granada
son confinados a las
Alpujarras y el Albaicín.
En la corona de
Aragón fueron
respetados y
protegidos, pues allí
eran muchos, y eran
trabajadores agrícolas
protegidos por sus
propios señores.
Bautismo de moriscos en Sevilla
26. 4. 3. La política social de los Reyes Católicos.
a) Política de la Corona respecto a la nobleza.
Recortes a
los poderes
de la nobleza.
Apartaron del gobierno a los grandes señores que podían
hacerles sombra.
Recortaron algunos de los ingresos que algunas familias nobles
disfrutaban desde las Mercedes Enriqueñas.
Sin embargo,
consolidaron el
poder de la
nobleza frente a
otros sectores de
la población.
Recuperaron la jurisdicción sobre algunas ciudades.
Consiguieron del papa los maestrazgos de las órdenes militares.
Regulaban de forma estable el derecho a
constituir mayorazgos, eliminando la necesidad
de autoridad real. Este derecho se extendió a
todas las categorías de la nobleza e incluso a
sectores plebeyos acomodados.
Leyes de Toro de 1505.
27. b) Política eclesiástica: relaciones con Roma y reforma eclesiástica.
Lucha por la
independencia
de la Iglesia
respecto a
Roma.
Contribuciones voluntarias: que pagaba el clero castellano con
la excusa de financiar la guerra de Granada. Aprobadas por el
Papa.
1486: el papa otorga a la Corona española el patronato regio –
derecho a proponer a los titulares de los obispados de sus
reinos.
Evidentemente, estas
concesiones papales
eran a cambio de
algo.
Abundaban los comportamientos inmorales. Se intenta
que el estamento sea más serio y que sus ministros
cumplan sus preceptos. Cisneros promovió las visitas de
inspección e impulsó la reforma de las órdenes monásticas.
Universidad de Alcalá: mejora significativa de la formación
teológica y dogmática del clero castellano.
Reforma de la Iglesia
28. c) Clases urbanas y campesinos.
Clases urbanas
Apoyaron generalmente los intereses de las oligarquías urbanas. Los
grandes comerciantes laneros y financieros, de las principales
ciudades mercantiles y puertos, se vieron beneficiados por el impulso
de la Mesta, de la que se obtenían grandes ingresos.
Los artesanos reclamaron medidas de protección para su
producción y límites a la importación de telas y objetos de lujo
procedentes del norte.
Eran quienes pagaban la mayor parte de los impuestos que
sostenían a la monarquía. Su situación económica y social fue
siempre precaria en Castilla.
En Cataluña, en 1486, tras una revuelta, Fernando el Católico
comprendió la utilidad de abolir los malos usos mediante la
Sentencia Arbitral de Guadalupe. El sistema feudal seguiría vigente.
Campesinos