Ante la ardua batalla contra las tendencias delictivas a nivel mundial, actos antisociales y la misma esencia que compone el delito, las sociedades no sólo se han visto en la necesidad de crear leyes o sistemas de estrictas normativas cuales llevan a consecuencias penales, sino que –ante la rapidez evolutiva de la conducta transgresora y a consecuencia que estos comportamientos continúan desenvolviéndose en las etapas más tempranas de los individuos– la comunidad experta científica se ha dado la tarea de desarrollar programas, estrategia y modelos que respondan a una prevención funcional, aplicable y efectiva. De allí nace la prevención comunitaria, una estrategia de prevención utilizada a nivel internacional con países como: México, España, Francia e Italia y hasta Portugal. Desde esta perspectiva se analiza y discute la importancia de implementar esta estrategia como parte de los modelos preventivos en Puerto Rico. Además, se analiza la posibilidad de implementar un marco preventivo propio en base a la crisis delictiva en la cual se encuentra nuestro país sumergido. También se mencionan las deficiencias que se encuentran en la política pública del Estado Libre Asociado y se recomiendan las modificaciones o enmiendas necesarias para implementar cualquier proyecto de prevención considerando las medidas presupuestarias del país.