El documento compara las consecuencias de cruzar ilegalmente las fronteras de varios países como Corea del Norte, Irán, Afganistán, Arabia Saudita, China, Venezuela y Cuba, donde las personas se enfrentan a años de trabajos forzados, detención indefinida, disparos o cadena perpetua, con cruzar ilegalmente la frontera de España, donde las personas reciben beneficios como certificados de empadronamiento, trabajo, educación para sus hijos y protección a pesar de actuar de forma ilegal.