1. Resumen de la Charla: La Dimensión Ética de la Vida y Obra de
Wernher von Braun – 23 de Febrero de 2013
"Es bastante llamativo el hecho en las biografías de grandes
ingenieros e inventores como Jerónimo de Ayanz y Beaumont, Jorge
Juan y Santacilia e Isaac Peral y Caballero, por mencionar unos
cuantos del mundo hispano, que lograron compaginar su labor
científica y profesional con un hacer ético a pesar de las limitaciones
inherentes tanto a la naturaleza humana como a las sociedades en las
que les tocó desenvolverse. Por el estilo, cabe apreciar esto en las
biografías de varias de las figuras involucradas en la historia de la
astronáutica, como son los casos de Wernher von Braun y Sergei
Pavlovich Korolev, dos genios de primer orden.
Wernher Von Braun en la Oficina
Ahora bien, en el caso especial de Wernher von Braun, el hombre
que nos dio la Luna para decirlo sin ambages, sorprende sobremanera

2. la existencia de juicios en su contra tendientes a presentarlo como un
criminal nazi y un enemigo de la Humanidad. No obstante esto, la
revisión detenida y juiciosa de biografías serias acerca del conspicuo
ingeniero germano-estadounidense demuestra con claridad que, a
pesar de ciertos procesos judiciales emprendidos por los gobiernos de
Estados Unidos, Reino Unido y Alemania Federal en su contra, jamás
se le pudo hallar culpable de nada.
Por ejemplo, la explotación ignominiosa de prisioneros de guerra en la
factoría de Mittelwerk, para la fabricación de los cohetes V2, fue fruto
de las órdenes del general Kammler y no de von Braun. Además,
nuestro ingeniero discrepaba sobremanera en lo ideológico de la
jerarquía nazi, con la cual tuvo inconvenientes por estar interesado en
el sueño de poder viajar al espacio en vez de bombardear a Londres al
final de la Segunda Guerra Mundial.
Hoy por hoy, se sabe bien que buena parte de la animadversión de
la que fue objeto en los Estados Unidos, incluida la NASA, lo fue a
causa de la envidia, esa madre de la estupidez humana, que suscitaba
su indiscutible talla como ingeniero y administrador, su carisma y
calidad humana, amén de sus conexiones a granel con políticos,
industriales y editores y su fama entre el gran público. Tal
animadversión llegó al extremo de arrebatarle a él y al
equipo Peenemünde los méritos por los grandes aportes que hicieron
para forjar el programa espacial estadounidense. Cosa curiosa, en el
año de 1969, justo el año que debía haber sido glorioso para von
Braun con motivo de la llegada del hombre a la Luna, tronaron los
ataques contra von Braun, ataques que trataban de basarse en sus
antecedentes por haber sido miembro del Partido Nacionalsocialista y
oficial de las Waffen SS.

3. Supuesta Foto de Wernher Von Braun con el uniforme del la
Waffen SS.
Sin embargo, como se dijo líneas más arriba, en el plano ideológico, el
gran ingeniero no congeniaba con la ideología nacionalsocialista y su
racismo a ultranza, pues, ¿de qué otro modo cabría explicar que von
Braun, mientras fue Director del Centro Marshall de la NASA,
promoviera las oportunidades en el programa espacial para las
personas de raza negra?
En suma, la historia de la astronáutica no se sustrae a ciertas
miserias humanas, como cabe apreciar en los casos de persecución
contra Wernher von Braun, Arthur Rudolph y otros ingenieros
alemanes del equipo de Peenemünde radicados en los Estados
Unidos con motivo de la Operación Paperclip. Entretanto, todos a los
que nos ofenden estas injusticias, hemos de poner los puntos sobre
las íes en materia del rigor histórico concomitante. En fin, la NASA
tiene sus pecados inocultables.
No lo olvidemos: sin sustraerse a su condición como ser humano,
Wernher von Braun fue un gran ingeniero que supo mantenerse a flote
desde el punto de vista ético, máxime que también hizo gala de una
honda formación humanista y artística, algo atípico en su profesión.
Un saludo cordial. Carlos Eduardo Sierra C.