3. El paciente y el psiquiatra se encontraban frente a frente
por primera vez.
4. Julio, caminaba con paso cansino, desganado y los hombros
agobiados, venía acarreando una profunda depresión desde hacía
nueve años y asistió a la consulta impulsado por su esposa.
5. La sesión se extendió más de lo acostumbrado.
El médico, un hombre bastante campechano, indagó
meticulosamente en la personalidad del paciente mediante una
charla casi amistosa llegando a la siguiente conclusión:
6. "Mire mi amigo, yo quisiera que conozca al payaso del
pueblo, un hombre excepcional, poseedor de una alegría
contagiosa, muy dicharachero y gracioso, que con sus chistes
alocados, sus piruetas y malabares, es capaz de dibujar sonrisas
donde nunca existieron y de hacer reír a carcajadas a la persona
más triste….
7. Esto es algo que les recomiendo a mis pacientes como primera
instancia, un tratamiento paralelo a las sesiones. Es un método
poco convencional el que utilizo, lo sé... pero me ha dado muy
buenos resultados"
8. El hombre, un poco incómodo, se movió de lado en la silla y
respondió:
-Yo soy el payaso del circo, por favor doctor, cámbieme la
receta...