SlideShare une entreprise Scribd logo
1  sur  462
Télécharger pour lire hors ligne
1
Historia Gráfica de Durango
Tomo II
De la República restaurada al
Porfirismo
Antonio Avitia Hernández
México, 2013
2
3
V. Los actores de la producción
Hacendados y capitalistas
Durante el periodo presidencial de Sebastián Lerdo de Tejada, la modificación
de la propiedad territorial se agilizó con la Ley General del 31 de mayo de
1875, misma que otorgó autorización al Ejecutivo Federal para deslindar los
terrenos nacionales en toda la República, por medio de particulares o
compañías que se organizaran con esta finalidad1
y, merced a diversos
decretos posteriores, las compañías deslindadoras adquirieron la tierra y
especularon con ella obteniendo en recompensa, la tercera parte de lo
negociado.
El deslinde se efectuó con el mayor brío en los sectores de terreno que
garantizaban las mejores ganancias con el menor esfuerzo. Así, al momento en
que por la Región Lagunera se litigaba por la propiedad territorial, la inaccesible
zona de las quebradas no era objeto de discordia. Sin embargo, el ejercicio del
deslinde, despojó a numerosos poblados de la sierra de sus bosques y sus
pastizales.
En este proceso de acumulación de riqueza participaron, principalmente
quienes podían disponer del dinero y las relaciones para hacerlo y en Durango,
los que tradicionalmente contaban con fondos suficientes o excedentes eran
casi siempre miembros del bando conservador; por lo cual hicieron a un lado
su, en apariencia, rígida ideología conservadora, ante la oferta de terrenos por
parte del gobierno de la dictadura liberal. “En Durango se propició un proceso
de consolidación del liberalismo económico y de conservadurismo político y
moral en el que los intereses de la burguesía empresarial que dominaba el
país, se identifican plenamente.” 2
La acumulación terrateniente se concentró de la siguiente manera:
48% en propiedades mayores de 50,000 hectáreas, siendo la más grande la
1
VILLA GUERRERO, GUADALUPE. Durango en la era de la paz y del progreso, México, Tesis
de Maestría en Historia de México, FF y L/UNAM, 1993, p. 77.
2
YEN FERNÁNDEZ, MAURICIO. “La Industria y el Comercio en Durango, durante el
Porfiriato”, en: Transición, números 14 y 15, Durango. IIH, UJED, 1993, p. 27.
4
Hacienda de Santa Catalina del Álamo y Anexas con un total de 412.477
hectáreas.
21% en 42 propiedades de entre 20,000 y 50,000 hectáreas.
15% en 73 propiedades de entre 10,000 y 20,000 hectáreas.
Por último, un 16% dividido en 257 propiedades menos de 10,000 hectáreas. 3
Según Pastor Rouaix: “A principios del siglo XX, treinta personas eran dueñas
de tres millones de hectáreas (…) el que fue feudo de los Condes de San
Pedro del Álamo, en tiempos de la Colonia y que subsistía casi íntegro antes
de la Revolución, contaba con cuatrocientos cuarenta mil hectáreas, siendo
mayor, en consecuencia que el estado de Tlaxcala y poco menos que Morelos.”
4
O dos veces el territorio de Belice.
La burguesía establecida en Durango tuvo dos polos principales de
concentración, uno en la capital del estado y el otro en la Región Lagunera,
mientras que los terrenos de la sierra quedaban rezagados al desarrollo del
capital y las inversiones.
Durante la treintena porfirista, el entendimiento de facto entre el Clero y el
Estado desactivó la pugna legal entre liberales y conservadores. Así, el 23 de
junio de 1891, el Papa León XIII elevaba la Diócesis de Durango a la categoría
de Arzobispado, con la Diócesis de Sonora, Sinaloa y Chihuahua y el Vicariato
Apostólico de Baja California como sufragáneas.
La paulatina recuperación económica de la Iglesia se configuró mediante las
obvenciones parroquiales o pago por conceptos sacramentales, el diezmo
voluntario (la décima parte, o menos, de la producción agrícola y ganadera o de
cualquier otro tipo de producto o ingreso que algunos católicos, de manera
voluntaria, entregan a la Iglesia para su mantenimiento), donaciones, herencias
y contentas. Este último concepto consistía en una cuota que, con el objeto de
obtener el perdón de su pecado de avaricia, daban aquellas personas que,
aprovechando la Ley de Desamortización de Bienes del Clero, habían
adquirido, a bajo costo, tierras que habían sido propiedad de la Iglesia. 5
3
ARREOLA VALENZUELA, ANTONIO. Et. Al. Summa Duranguense, Durango, Gobierno del
Estado de Durango, 1979-1980, dos vols. pp. 10 a 14.
4
ROUAIX, PASTOR. La Revolución Maderista y Constitucionalista en Durango, México, De.
Cultura, 1931, p. 7.
5
MÁRQUEZ PADILLA, PAZ CONSUELO. “La oposición católica”, en: Así fue la Revolución
mexicana. Tomo I. Crisis del porfiriato, México, Senado de la República / SEP / INAH /
CONAFE, 1985, p. 84.
5
Por su parte, los indígenas del estado, sin sacerdotes católicos, desarrollaban
sus ritos sincréticos, a su manera, en sus oratorios y lugares sagrados lejos de
la burocracia eclesiástica del Vaticano.
Con respecto a la evolución del Gobierno Estatal, Guadalupe Villa nos aclara
que: “En cada toma y daca por la silla presidencial, aparecían en
correspondencia levantamientos en adhesión al pretendiente en turno.
Después de la Guerra de Intervención y hasta el triunfo de Tuxtepec, la práctica
en la entidad siguió siendo la misma. Finalmente el general Donato Guerra
designó gobernador al coronel Juan Manuel Flores, quien desde 1871, durante
la Revuelta de La Noria en Durango, había tomado las armas en favor de Díaz.
Cuando en febrero de 1877, los generales Naranjo y Jerónimo Treviño
ocuparon la ciudad de Durango, Flores asumió el gobierno provisionalmente y
electo después para el periodo que terminaría en 1880. De ahí en adelante la
suerte de Flores siguió el mismo derrotero que la de Porfirio Díaz. Las reformas
constitucionales que permitieron las sucesivas reelecciones del presidente,
fueron las mismas que en Durango permitieron las de Flores, con la sola
excepción de Manuel González en el Ejecutivo y de Francisco Gómez Palacio
en la gubernatura estatal. Sólo la muerte separó a Flores del poder6
En las postrimerías del siglo XIX sólo el bandidaje social de Heraclio Bernal e
Ignacio Parra cuestionó la legitimidad del Gobierno Estatal. Los litigios entre
terratenientes; por tierra o por aguas se multiplicaron.
Las familias oligárquicas que se constituyeron en los grupos inversionistas
predominantes de la ciudad de Durango ostentaban los apellidos de: Asúnsolo,
Bracho, Damm, Drünert, Flores, González Saravia, Gurza, Hildebrand, López
Negrete, Manzanera y Stahlknecht, entre otros; mientras que, en la Región
Lagunera, destacaban los apellidos Lavín, Brittingham, Hernández, Siller,
Torres, Martínez, Araura y Colvian y Feliciano Colvian, los De la Peña y los
Sariñana.
Es de notar que hubo una afluencia de capitalistas extranjeros que se
establecieron en Durango, procedentes de países como: Alemania, Estados
Unidos, Francia, Inglaterra, China, España y el Imperio Otomano.
6
VILLA GUERRERO, GUADALUPE. Durango en la era de la paz y el progreso, México, Tesis
de Maestría en Historia de México, Facultad de Filosofía y Letras, UNAM, 1993, p. 130.
6
Granos, textiles, jabones, dinamita, cebo, lana, harinas, vid, ganado, minerales
y productos forestales fueron algunos de los productos que, desde los últimos
años del siglo XIX, comenzaron a salir al mercado en los vagones de ferrocarril.
Algunos negocios agrícolas, minerales e industriales, tenían tal capacidad de
producción que el tendido de vías férreas hasta el interior mismo de los centros
de trabajo era costeable. Sin embargo, el desarrollo se centró en enclaves bien
determinados y grandes extensiones del territorio, sobre todo del serrano
estatal quedaron fuera de los planes contratados del tendido de vías.
7
Sentado, el hacendado y gobernador de Durango, Juan Nepomuceno
Francisco Flores Alcalde, rodeado de su familia en 1866 (circa)
El hacendado y gobernador de Durango, Juan Nepomuceno Francisco Flores
Alcalde, en los 1900’s
8
Busto del hacendado Juan Nepomuceno Flores y Alcalde, 1860’s
9
Dos imágenes de casas del empresario Juan Nepomuceno Flores
10
Portada de los títulos de propiedad de una casa del hacendado Juan
Nepomuceno Flores, en la ciudad de Durango, 1865
11
Empresario y cónsul alemán Maximiliano Damm, en su juventud, 1870’s
El mismo Maximiliano Damm, en su vejez, 1890’s
12
La señora Josefa Palacio de Damm, 1870’s
Santiago Lavín Cuadra, capitalista y terrateniente lagunero, 1870’s
13
Otra imagen de Santiago Lavín Cuadra, 1900 (circa)
Gilberto Lavín, hacendado y empresario de La Laguna, 1900 (circa)
14
Empresarios españoles en la Hacienda de Pamplona, Tlahualilo, Durango,
1893
John F. Brittingham, capitalista estadounidense radicado en La Región
Lagunera, propietario de la Jabonera La Esperanza, 1900 (circa)
15
Firma y foto del empresario Ventura González Sarabia y Murua, 1905
Hermanos González Saravia y Murua, 1900’s
16
Familia de Enrique González Sarabia y Murua, 1900’s
Roberto Windish socio fundador de la Fábrica de hilados y Tejidos de La
Constancia, 1903
17
Luis Carlos Bosé, propietario de la Ferretería Alemana, 1900’s
Familia Bracho Zuloaga, 1900’s
18
Otra imagen de la Familia Bracho Zuloaga, 1900’s
Otra imagen de la Familia Bracho Zuloaga
19
Julio Curbelo terrateniente durangueño, 1900 (circa)
Cipriano Guerrero, propietario de la planta de energía eléctrica de la ciudad de
Durango, 1900’s
20
Pedro Torres Saldaña, jefe de una poderosa familia durangueña, 1900’s
Empresario Felipe Pérez Gavilán, 1900’s
21
Familia Pérez Gavilán, 1900’s
Familia Martínez del Río, 1900’s
22
Miembros de la Colonia Francesa en Durango
Familia Jurado en la Hacienda de Canutillo
23
Policarpo Martínez, sentado, 1900’s
Tertulia en la casa del Sr, Jackson, 1900’s
24
Damas durangueñas en corrida de toros de beneficencia, 1890’s
Día de campo en la Hacienda de La Tinaja, 1900’s
25
Libro sobre las familias de empresarios durangueños del porfirismo
26
Empresas y concesiones mineras durangueñas en el porfirismo
Mapa de las Haciendas de Beneficio y Fundiciones en el Estado, 1910
27
20 acciones de la Nuestra Señora de Guadalupe Silver Co.
Acción de la Mapimí Mining Company emitida en 1882
28
29
Tres imágenes de la mina La Valenciana, en el Mineral de Mapimí, operado por
la Semelting Works of The Durango Mapimí Mining Company, 1876 y 1880
(circa)
Cerro de La Bufa, en Mapimí
30
Mapimí y el Cerro de La Bufa
31
32
33
Seis imágenes de la American Smelting and Refining Company, ASARCO, de
Velardeña, municipio de Cuencamé, en las postrimerías del siglo XIX y
principios del XX
Ruinas del Mineral de Velardeña, municipio de Cuencamé
34
35
36
37
38
39
Ocho imágenes del mineral de Ojuela, con su famoso puente y dos de su
fundición, concesionado a The Peñoles Mining Company at Mapimí, en las
postrimerías del siglo XIX y principios del XX
Ruinas del Mineral de Molinos, municipio de Topia
40
Plano alemán del Cerro de Mercado, 1878
Cerro de Mercado a principios del siglo XX
41
Presa adyacente a la fundición de La Ferrería de Flores, 1900’s
Presa de la Ferrería de Piedras Azules, 1900’s
42
Ruinas de la fundición de La Ferrería de Piedras Azules
43
44
Cinco imágenes The Mexican Iron Mountain. Fundición del Cerro de Mercado
45
Mapa de concesionarios del Cerro de Mercado en 1905
Portada de libro sobre el Cerro de Mercado
46
Plano de la mina La Candelaria en San Dimas, 1900’s
Dibujo de la Hacienda de Guamúchiles, San Dimas, Durango, 1873
47
Dos imágenes del poblado de San Dimas, a principios del siglo XX
48
Lingote de metal extraído del Mineral de San Dimas
Hecatombe en el mineral de San Dimas, Durango, grabado de José Guadalupe
Posada, 1900’s (circa)
49
Acción financiera del Mineral de Avino, 1897
Mineral de Avino, municipio de Topia, en su momento, el tajo abierto más
grande del mundo, 1900’s
50
Mineral de Promontorio en el municipio de El Oro, 1900’s
Estatutos de la Compañía Minera de San Andrés de la Sierra, 1893
51
Acción de la Compañía Minera Washington, del Mineral de Ocampo, municipio
de San Juan del Río
Membrete de Hacienda de Beneficio de Metales El Cazador, en San Juan de
Guadalupe, 1900’s
52
Industrias en los llamados tiempos de la paz y el progreso
La Industrial del Nazas, Departamento de Telares, 1900’s
Edifico de la Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia de El Tunal, 1900’s
53
Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia de El Tunal, 1900’s
54
Dos imágenes del Río Tunal, como fuerza motriz de la Fábrica de Hilados y
Tejidos La Providencia
Panorámica de la Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia, de El Tunal, por
Leon Trousset, 1884
55
Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia de El Tunal, vista desde El
Pueblito, por León Trousset, 1884
Publicidad de Fábrica del Tunal, 1900’s
56
Primera máquina generadora de energía eléctrica en la ciudad de Durango,
1900's
Mapa de la Región Lagunera 1893
57
Mapa de las Haciendas Laguneras, 1890
Fábrica de Hilados y Tejidos La Amistad, de Prince, Torres and Prince, en
Lerdo,
58
Fábrica de Hilados y Tejidos La Amistad, en Gómez Palacio, propiedad de la
familia Torres Saldaña, 1900’s
Oficina de la Fábrica La Amistad, en Gómez Palacio, 1900’s
59
Fábrica de Hilados y Tejidos La Constancia, en el municipio de Nombre de
Dios, 1890’s
Despepitadora de algodón en Santa Clara, municipio de Gómez Palacio, 1900’s
60
Compañía Industrial Jabonera La Esperanza de La Laguna, 1900’s
Entrada principal a la Jabonera La Esperanza de La Laguna, 1900’s
61
Membrete de la fábrica de jabones La Esperanza, 1900’s
Interior de La Jabonera La Esperanza, en Gómez Palacio, 1900’s
62
Acción financiera de La Jabonera La Esperanza
Casa principal a la Jabonera La Esperanza, 1900’s
63
Panorámica de la Jabonera La Esperanza de Gómez Palacio
Molino el Brillante en Gómez Palacio, 1900’s
64
Fábrica de explosivos de Dinamita, municipio de Gómez Palacio, fundada por
John Brittingham, 1900’s
Fábrica de glicerina en el poblado Dinamita, municipio de Gómez Palacio,
1900’s
65
Planta de energía eléctrica en Gómez Palacio, 1900’s
Publicidad de Vinícola Noé, municipio de Gómez Palacio, 1906
66
Membrete de la Tlahualilo Company, 1900’s
Mapa de la Hacienda de San Fernando, de la Compañía Agrícola de Tlahualilo,
1904 1904
67
Mapa de los Terrenos de la Tlahualilo Company, 1896
68
Croquis de la ubicación de las presas sobre la corriente de Río Nazas en
Tlahualilo, 1909
Ruinas de las primeras guayuleras de Gómez Palacio, 1900’s
69
Transporte de madera de los aserraderos de la Sierra, 1900’s
Membrete de la Compañía Mantequera de Gómez Palacio, 1900’s
70
Membrete de empresa ganadera Torres Hermanos, 1900’s
Membrete de Gilberto Lavín en Noé, municipio de Gómez Palacio, 1900’s
71
Publicidad de la compañía Vinícola de Noé. 1900’s
Lista de precios de la Compañía Vinícola Noé, 1900’s
72
Corralón de la Compañía Vinícola El Vergel en Gómez Palacio, 1900’s
Una calle entre viñedos y platanar de la Compañía Vinícola El Vergel en
Gómez Palacio, 1900’s
73
Publicidad de la empresa de Oscar Francke, en Gómez Palacio, 1897
Libro sobre las empresas durangueñas en el siglo XIX y principios del XX
74
Las haciendas de los conservadores liberales
Plano de un denuncio de terreno baldío, en el municipio de Cuencamé, 1907
75
Plano de terrenos de Melchor, municipio de Santiago Papasquiaro, en litigio,
1904
Haciendas con más de 250 hectáreas irrigables en el estado de Durango
76
Haciendas con más de 250 hectáreas irrigables en la cuenca del Río Tunal
Haciendas laguneras más productivas
77
Mapa de la Hacienda de Santa Catalina del Álamo y Anexas, 1900’s
78
Hacienda de La Sauceda en el municipio de Canatlán
Hacienda de La Sauceda en el municipio de Canatlán, 1890
79
Hacienda de San Francisco Javier de Lajas, municipio de Coneto de Comonfort
Hacienda de Pedriceña, municipio de Cuencamé
80
Ex Hacienda de La Ferrería, municipio de Durango
81
Tres imágenes de la Hacienda de El Mortero, municipio de Súchil
82
Capilla de la Hacienda de El Mortero, municipio de Súchil
83
Dos imágenes de las ruinas de la Ex Hacienda de La Concepción, en el
municipio de Súchil
Región algodonera de La Laguna, 1876
84
Hacienda de la Compañía Agrícola Tlahualilo
85
Foto y acuarela de la Casa de la Compañía Colonizadora de Tlahualilo,
Durango, 1897, en Torreón, Coahuila
Canal de la Compañía Agrícola Tlahualilo, 1907
86
Acueducto en la Región Lagunera, 1900’s
Las compuertas de canal cambian el curso de la corriente del Río Nazas en
Tlahualilo, 1900’s
87
Canal de irrigación en Tlahualilo
Campos de algodón de La Región Lagunera, 1900’s
88
Ruinas de la Hacienda de Tlahualilo
Casco de la Hacienda de Tlahualilo en los años setentas del siglo XX
89
Hacienda de Palmitos de Arriba, municipio de Rodeo
Hacienda de San Salvador de la Horta, municipio de Rodeo
90
91
Tres imágenes del casco de la Hacienda de San José de Ramos, municipio de
El Oro
92
Dos imágenes de la Hacienda de Santa Catalina del Álamo
Hacienda de Zaragoza en La Laguna
93
94
Tres imágenes de la Hacienda de La Flor en el municipio de Nazas
Fortín de la Hacienda de La Flor, municipio de Nazas
95
Dos imágenes de las ruinas de la Hacienda del Sobaco, municipio de Nazas
96
Dos imágenes de la Hacienda del Conejo, municipio de Nazas
97
Escudo de la Hacienda del Conejo, municipio de Nazas
Acueducto de la Ex Hacienda de El Palmito
98
Ruinas de la Hacienda de La Bolsa de Fierro, municipio de Nombre de Dios
Templo de la Ex Hacienda de La Bolsa de Fierro, municipio de Nombre de Dios
99
Acueducto de la Ex Hacienda de La Ochoa, municipio de Poanas
Ruinas de la Hacienda de Juana Guerra, en el municipio de Nombre de Dios
100
101
Tres imágenes del Templo de San Miguel Arcángel, en la Ex Hacienda de
Guatimapé, municipio de Nuevo Ideal
Hacienda de Guatimapé, municipio de Canatlán, acuarela por Paul Fisher,
1893
102
Hacienda de Dolores, municipio de Durango
Hacienda de Dolores, municipio de Durango. Acuarela de José Antonio Treviño
103
Hacienda de San Diego de Navacoyán, municipio de Durango. Acuarela de
José Antonio Treviño Fuentes, 1782
Casco de la Hacienda de San Lorenzo del Aire, municipio de Durango
104
Casco de la Hacienda de La Ferrería, municipio de Durango
Hacienda de La Ferrería, municipio de Durango (restaurada)
105
Entrada principal de la Hacienda de La Ferrería, municipio de Durango
Patio de la Hacienda La Mimbrera, municipio de Hidalgo
106
Interior de la Hacienda de Navacoyán, municipio de Durango
Hacienda de Navacoyán, municipio de Durango
107
Puente del diablo en Navacoyán, municipio de Durango, 1900’s
Interior de la Casa Grande La Floreña, hoy derruida, de la Hacienda de Aviléz,
hoy Ciudad Juárez
108
Dos imágenes de la Hacienda de San Isidro de la Punta, municipio de Nombre
de Dios
109
Casa grande de la Hacienda de La Punta, municipio de Nombre de Dios
Capilla de la Hacienda de La Punta, municipio de Nombre de Dios
110
Dos imágenes de la Hacienda de El Saucillo, municipio de Guadalupe Victoria
111
Publicidad de la Hacienda de El Saucillo, municipio de Guadalupe Victoria
Ruinas de la Ex Hacienda Villahermosa, municipio de Nuevo Ideal
112
Ruinas de la Hacienda de Torreón de Cañas, municipio de Ocampo
Capilla de la Ex Hacienda de Guadalupe, municipio de Peñón Blanco
113
Ex Hacienda de Guadalupe, municipio de Peñón Blanco
Ruinas de la Hacienda de Belén, municipio de Peñón Blanco
114
Capilla de la Ex Hacienda de Labor de Guadalupe, municipio de Durango
Entrada a la Ex Hacienda Labor de Guadalupe, municipio de Durango
115
Dos imágenes de la Hacienda de San Mateo de La Zarca, municipio de Hidalgo
116
Hacienda de Santa Lucía, municipio de Canatlán
Hacienda de San Lorenzo y Santiago de Tetillas, hoy Santiago Bayacora,
municipio de Durango
117
Hacienda de Huichapa, municipio de Rodeo
Hacienda de Menores de Abajo del Palmito, municipio de San Juan del Río,
1890’s
118
Templo de la Ex Hacienda de Menores de abajo, municipio de San Juan del
Río
Ruinas del la Ex Hacienda de Menores, municipio de San Juan del Río
119
Ex Hacienda de Menores, municipio de San Juan del Río
120
Los casi invisibles peones durangueños
El proyecto de colonización afroamericana en Tlahualilo, en 1895
Promovido espiritualmente por el obispo Henry M. Turner de la Iglesia Metodista
Episcopal Africana quien, en sus prédicas, azuzaba a la colonización de los
afroamericanos estadounidenses recién liberados a otras partes de la tierra, en
diciembre de 1894, William H. Ellis, un agente contratista afroamericano estableció
contacto y trato con la Agricultural, Industrial and Colonization of Tlahualilo Company
Limited, de Durango, para el envío de varios convoyes con remesas de familias de
afroamericanas para trabajar en los campos de algodón de la Tlahualilo Company.
Hechos todos los arreglos previos, en febrero de 1895, 100 familias viajaban de
Alabama y Georgia a Tlahualilo con las promesas de $20 dólares, implementos
agrícolas, casa y comida, así como $6 dólares por familia, en los primeros tres
meses. El compromiso de los negros era sembrar sesenta acres de tierra; 40 de
algodón, 15 de maíz y 5 como hortaliza. La compañía se quedaría con el 40% del
algodón, los afroamericanos con el 50 y Ellis con el 10. Algo similar sucedería con el
maíz, aunque la hortaliza sería en su totalidad sería para los colonos. El contrato
tendría una duración de 5 años.
817 fueron los colonos; hombres, mujeres y niños afroamericanos, que llegaron a un
lugar cerca de Mapimí, alejado de la vía del ferrocarril y de toda civilización. Al llegar
a su nuevo hogar se encontraron con que nevaba y las pocas pequeñas casas de
adobe no tenían puertas y muchas, tampoco techo.
Entre los hambrientos y cansados colonos, pronto se declaró la epidemia de viruela,
mientras eran asaltados por los bandidos y soldados mexicanos y oprimidos por las
guardias blancas de la Tlahualilo Company.
Dos colonos escaparon y lograron llegar a Chihuahua, en donde se pusieron en
contacto con las autoridades consulares estadounidenses. Se inició una
investigación que involucró a los gobiernos mexicano y estadounidense y finalmente
para septiembre y octubre de 1895, los últimos colonos del fallido proyecto
retornaban a su tierra en el Ferrocarril Internacional Mexicano.
121
Esta terrible historia ha sido mayormente documentada y narrada por los
investigadores afroamericanos estadounidenses.
Recorte de periódico estadounidense sobre El proyecto de colonización negro
en Tlahualilo, en 1895
122
Obispo Henry M. Turner, de la Iglesia Metodista Episcopal Africana, promotor
de la colonización de los afroamericanos a otras latitudes del planeta
123
Los peones laguneros
Peones laguneros haciendo pacas de algodón, 1900’s
Las pacas de algodón listas para ser embarcadas en el ferrocarril, 1900’s
124
Bullicio de la gente durante las bonanzas, o temporadas de pizcas de algodón,
en La Laguna, 1900’s
En promedio, cada peón recogía 150 kilos de algodón
125
Cuevas que habitaban los pizcadores de algodón en la época de los latifundios
en la Región Lagunera, 1900’s
Hombres, mujeres y niños en la pizca de algodón de La Laguna, durante la
bonanza, 1900’s
126
Pizcadores de viñedos en la Región Lagunera
Transporte de las uvas en vitivinícola de la Región Lagunera
127
Peones abriendo canal de irrigación de Tlahualilo, sobre el Nazas, 1900’s
Tractor de vapor utilizado para abrir un canal de irrigación en Tlahualilo, sobre
el Río Nazas, 1900’s
128
Habitaciones para los peones bonanceros y sus familias en La Laguna, 1900’s
Guardias blancas de los hacendados de La Laguna, 1900’s
129
Otro contingente de guardias blancas de los hacendados de La Laguna, 1900’s
Libro sobre la producción del algodón en la Región Lagunera durante la
segunda mitad del siglo XIX y principios del XX
130
Las espinas del guayule
El más famoso de los litigios de comuneros contra latifundistas, fue el que
protagonizaron los pobladores de San Pedro y Santiago Ocuila, en el municipio
de Cuencamé.
Los ocuilas se ganaban la vida labrando la tierra y, dadas sus necesidades de
terreno, se extendieron hacia unos parajes con manantiales y pequeños
regadíos heredados por sus ancestros. Desde la época colonial el rey Carlos V
había reconocido la propiedad de los territorios a los ocuilas, y los miembros de
la comunidad guardaban con mucho cuidado los documentos que legalizaban
su propiedad. Sin embargo, gracias a la oferta de territorios baldíos que suscitó
la aplicación de las Leyes de Reforma durante el porfirismo, por parte de las
Compañías deslindadoras, la familia López Negrete logró que los terrenos
ocuilas en cuestión le fueran adjudicados como porción de su gran hacienda de
Sombreretillo de Campa. Durante algún tiempo no hubo fricciones entre los
campesinos ocuilas y los latifundistas López Negrete.
A principios del siglo XX la invención del automóvil abrió la demanda mundial
de materias primas para las fábricas del nuevo y rápidamente desarrollado
medio de transporte. El hule, como materia prima indispensable para la
fabricación de neumáticos, inició la explotación industrial de los vegetales
huleros, como el caucho y el guayule y éstos vertiginosamente adquirieron
precios de mercado que hacían costeable su explotación.
El guayule, cuyo nombre científico es Parthenium argentatum, era usado por
los indígenas para manufacturar pelotas de hule macizo, las que a su vez eran
usadas en sus originales juegos rituales y los niños masticaban los tallos de
guayule a manera de goma de mascar. En el este del estado de Durango se
localizaron grandes cantidades de guayule silvestre en los municipios de Ma-
pimí, Cuencamé y San Juan de Guadalupe; en algunos lugares el arbustillo
guayulero alcanzaba entre 70 centímetros y un metro de altura y su color
variaba de acuerdo con la región, aunque se debe mencionar el caso de que el
131
guayule azuloso y azul es el que produce mayor cantidad de hule. De manera
coincidente, el guayule azul crecía más en la zona guayulera de Sombreretillo,
Terreno, Pasaje y la Cuesta de la Culebra, cerca de Pedriceña, abarcando la
parte de la tierra de cultivo de los ocuilas.
Desde 1887 se inició la explotación del guayule en la industria de los
neumáticos y, a principios del siglo XX, en la ciudad de Torreón, Coahuila, se
había establecido una planta beneficiadora de guayule cuya razón social era
Continental Rubber Company, misma que comenzó a tratar en sus prensas el
guayule del semidesierto y los llanos de los ocuilas.
Así, los López Negrete, en especial don Laureano López Negrete y doña Petra
Salcido viuda de López Negrete, en el año de 1905 iniciaron los autos judiciales
para la legalización del despojo de los terrenos de los ocuilas, contando con el
apoyo de la fuerza pública, proporcionada por el Gobierno del Estado.
Al intentar recuperar sus labores, los ocuilas fueron arrojados de su
propiedad de manera inmisericorde, por medio del uso de la fuerza;
en la acción, las casas de los campesinos fueron quemadas y sus
escasos bienes pasaron violentamente a cambiar de propietario.
Para aplacar la posible resistencia, un destacamento de fuerzas
federales fue acantonado en el lugar como salvaguarda de los López
Negrete.
A pesar del laudo oficial a favor de la viuda de López Negrete, los ocuilas
continuaron el litigio, incluso ante el presidente de la República don Porfirio
Díaz Mori, demandando la restitución de sus terrenos. Sin embargo, sólo
recibieron el silencio como única respuesta a sus peticiones, mientras que en la
ciudad de Torreón, el capitalista John D. Rockefeller adquiría la Continental
Rubber, con la promesa oficial y de los hacendados de recibir constantemente
el surtido indispensable de materia prima para las prensas de las guayuleras.
Para calmar los ánimos y en aparente actitud conciliadora, don Laureano López
Negrete invitó a los representantes de los ocuilas a tener una plática con él, el
20 de enero de 1909, a la conferencia acudieron los vecinos Ramón Saldaña
Hernández, Jesús Ávila, Francisco Saldaña Hernández y Martín Martínez,
todos ellos desarmados, como lo había condicionado el hacendado.
Al llegar al lugar de la cita, la traición personificada en las carabinas de la
Acordada de Octaviano Meraz segó la vida de los dirigentes ocuilas, echándole
132
más leña verde a una lumbre que apenas soltaba el humo blanco del odio y la
indignación popular, haciendo de los ocuileños, los mejores guerreros de la
Revolución, con su jefe Calixto Contreras.
En 1910, el corte y procesamiento del guayule daba empleo a 11 mil
trabajadores, cuya labor y salario dependían del estado general de los
negocios industriales de Torreón y Gómez Palacio.
El litigio del guayule sobrevivió a la Revolución, y las bonanzas de la
Continental Rubber, se evidenciaron con los altos índices de producción como
el de 1937 con 19, 743,517 toneladas y el de 1942 con 55, 727,554 toneladas.
Durante la Segunda Guerra Mundial, el cambio de materia prima de las plantas
hulíferas por los hidrocarburos, para la fabricación de los neumáticos, no
terminó con el litigio judicial por una fracción del territorio ocuileño y el pleito en
los tribunales se prolongaría hasta la novena década del silgo XX. En las
últimas décadas del siglo XX, la Revolución sexual produjo una nueva alza en
la demanda del guayule, esta vez para la producción de látex, materia prima de
los condones para prevenir las enfermedades de Transmisión sexual y el VIH-
SIDA.
133
Tres imágenes de plantas de guayule
134
Un peón haciendo pacas de guayule, 1900’s
Pila de pacas de guayule, 1900’s
135
Transporte de pacas de guayule, 1900’s
Carta abierta de los agraviados ocuiltecos a Porfirio Díaz, 1901
136
Sello de los pueblos unidos de Santiago y San Pedro Ocuila
137
Peones de los aserraderos y de las haciendas agrícolas
138
Tres imágenes de los primeros transportes de madera en El Salto, Pueblo
Nuevo, 1900’s
Peones de hacienda en labores del campo, 1900’s
139
Algunas monedas, fichas y billetes internos de las empresas
durangueñas
Para efectuar los pagos a los trabajadores y controlar el consumo, deudas e
ingresos de los peones, mediante las tiendas de raya, o como vales para
transferir fondos y pagos a proveedores, algunas empresas: agrícolas,
industriales, madereras y mineras, acuñaron moneda propia e imprimieron
papel moneda, práctica muy común en la época, que incrementaba las
ganancias de los capitalistas al recibir lo que pagaban a sus trabajadores, en
sus propios comercios, a los precios que ellos mismos imponían.
Tlacos, pilones y vales interiores de diversas empresas durangueñas
140
Vales por un real de la Negociación de Minas de Topia
141
Anverso y reverso de un peso en papel moneda de La Fábrica del Tunal, sin
fecha
Anverso de billete de veinticinco centavos de La Fábrica del Tunal, 1884
142
Anverso de billete de diez centavos de La Fábrica del Tunal 1884
143
Anverso y reverso de billete de cincuenta centavos de La Fábrica del Tunal,
1884
144
145
VI. Gobierno, poder y represión
El Estado de Durango
Mapografía estatal
Carta geográfica del estado de Durango, 1897
146
Mapa de la división política del estado en partidos, 1898
147
Carta geográfica del Estado de Durango, 1899
148
Mapa del Estado de Durango, 1900 (circa)
149
Mapa de la hidrografía del estado de Durango, 1900
150
Mapa de la división política del Estado de Durango en el porfirismo, 1900’s
151
Mapa de la división política del Estado de Durango, 1905
152
153
Gobernadores de Durango
Lista de gobernadores de 1868 a 1911
1867 a 1868, 1880 a 1882, 1883. Francisco Gómez Palacio
1868 a 1869. Manuel Balda
1869. José María Pereyra
1868 a 1871, 1872 a 1874, 1874 a 1875, 1875 a 1876. Juan Hernández y Marín
1871 a 1872. Tomás Borrego
1872. Florentino Carrillo
1874. José de la Bárcena
1875. Carlos Bravo
1876 a 1877. Carlos Fuero
1877 a 1897. Gobernador constitucional, con varios sustitutos interinos. Juan
Manuel Flores
1882 a 1897, varias veces interino. Juan Ignacio Zubiría del Campo
1883 a 1884. Abel Pereyra
1884 a 1897, varias veces interino. Leonardo de la Parra
1897 a 1911, varias veces interino. Cipriano Guerrero
1897 a 1900. Leandro Fernández
1900 a 1905. Juan Santa Marina
1905 a 1911. Esteban Fernández
154
Dos imágenes de Francisco Gómez Palacio, gobernador de Durango de 1867 a
1868
155
Caricatura de Francisco Gómez Palacio, aparecida en un periódico durangueño
de la época
Libro sobre Francisco Gómez Palacio
156
Juan Hernández y Martín, gobernador de Durango de 1868 a 1871
Monumento a Juan Hernández y Marín en la Escuela Normal del Estado
157
José María Pereyra. Republicano y gobernador en 1869
Manuel Balda García. Gobernador interino entre 1868 y 1869
158
Dos imágenes de Tomás Borrego, gobernador de 1871 a 1872
159
José de la Bárcena, gobernador en 1874
Carlos Bravo. Gobernador interino en 1875
160
General Carlos Fuero. Gobernador de 1876 a 1877
161
Dos imágenes de Juan Manuel Flores. Gobernó de manera interina en 1880 y
en propiedad de 1884 a 1897
Juan Ignacio Zubiría del Campo, gobernador de 1882 a 1883
162
Leonardo de la Parra. Gobernador interino en varias ocasiones, entre 1884 y
1997
Leandro Fernández, gobernador de 1897 a 190
163
Arco triunfal de bienvenida al gobernador Leandro Fernández en la ciudad de
Durango, 1900 (circa)
Juan Santa Marina, gobernador de 1900 a 1905
164
Esteban Fernández, gobernador de 1905 a 1911
165
Los cuerpos de seguridad y represión
Cuerpo de Rurales o Acordada de Gómez Palacio
Cuartel de la gendarmería montada de Santiago Papasquiaro, 1910
166
167
168
Cinco imágenes del Cuartel Juárez de Caballería del Ejército Federal en la
ciudad de Durango
Sello de la Inspección de Vigilancia de Mujeres Públicas de Durango, 1880’s
169
Bernardo Saldaña
En los meses de septiembre y diciembre de 1858, el entonces Gobernador de
Coahuila y Nuevo León, General Santiago Vidaurri, ordenó al ejército de esa
entidad (en aquel entonces Coahuila y Nuevo León formaban un solo estado)
que se apoderaran de la población de San Juan de Guadalupe, para anexarla
al territorio de su jurisdicción.
Bernardo, nativo de esa población y entonces jefe político del partido que tenía
la cabecera en ese lugar, y en base a su condición de autoridad, al frente de un
grupo de vecinos armados, rechazó pretendida invasión del Gobierno del
Estado de Zacatecas que con diversos pretextos intento apoderarse de la
ciudad y territorios del partido de San Juan de Guadalupe.
No solamente se manifestó como un valiente duranguense, defensor de la
soberanía del estado, sino fue también un gran impulsor del desarrollo cultural
de su pueblo ya que, siendo un rico minero que explotó con buena suerte las
minas de la Sierra de Ramírez en ese partido, había acumulado una gran
fortuna, lo cual le permitió de su peculio propio fundar a mediados del siglo XIX,
la primera escuela primaria que se estableció en San Juan de Guadalupe,
contrató maestros de la ciudad de Durango, construyó un edificio escolar y
puso a funcionar la escuela de primeras letras que por primera vez abrió sus
puertas en 1859.
Saldaña también defendió a su municipio del ataque de los bandidos Tulises,
comandados por el jefe conservador Domingo Cajén, en 1859.
Como minero, Saldaña progresó con la explotación de minerales en la Sierra
de Ramírez y es recordado como héroe municipal en San Juan de Guadalupe.
En medio de intrigas políticas municipales, Saldaña falleció en 29 de abril de
1903.
170
1890's. Bernardo Saldaña. Jefe del Partido de San Juan de Guadalupe, 1890’s
Membrete de Hacienda de Beneficio de Metales. el Cazador, en San Juan de
Guadalupe, propiedad de Bernardo Saldaña, 1900’s
171
Funerales de Bernardo Saldaña. Jefe del Partido de San Juan de Guadalupe,
1903
172
Los bandidos de la Sierra
Heraclio Bernal Zazueta, también conocido como El Rayo de Sinaloa, de
acuerdo con Nicole Girón nació en el año de 1855, en el rancho de El Chaco,
municipio de San Ignacio, Sinaloa, aunque otras fuentes afirman que fue
oriundo de Santiago Papasquiaro, Durango. Durante la infancia de Heraclio, la
familia Bernal recorrió los minerales de la zona limítrofe de los estados de
Durango y Sinaloa. En ese contexto, el niño Heraclio pudo tomar estudios
elementales con el profesor Bonilla, en Guadalupe de los Reyes, Sinaloa.
Cuando Heraclio Bernal contaba los dieciséis años de edad, él y su familia se
vieron involucrados, a favor de Benito Juárez, contra los adictos al Plan de la
Noria y, por defender los intereses de los trabajadores de las minas, Heraclio
Bernal fue acusado del robo de unas barras de hierro, por lo que fue
perseguido atendiendo las demandas de los propietarios de los reales de
minas, quienes propiciaron que el jefe político Epifanio Lomelí, ordenara que la
Policía Rural o acordada actuara en contra de Bernal.
Ante el asedio, Heraclio Bernal inició su carrera de bandido y, en el año de
1876, el mineral de San Vicente, de capital estadounidense, fue el blanco del
asalto del nuevo bandolero. Después de esta acción, Bernal fue aprehendido y
encarcelado en el Cuartel de Artillería de Mazatlán, Sinaloa.
En noviembre de 1876, el general Jesús Ramírez Terrón se levantó en armas
apoyando al Plan de Tuxtepec, adherido a la facción de José María Iglesias.
Sin embargo, en el mes de diciembre, Ramírez Terrón defeccionó y se pasó al
bando de los porfiristas y su tropa se transformó en la fuerza militar de Porfirio
Díaz en Sinaloa.
Al entrar al puerto de Mazatlán, Ramírez Terrón ordenó la liberación de
Heraclio Bernal y le dio el grado de teniente. Sin mayores compromisos con
Ramírez Terrón, el liberado Bernal volvió a su vida de asaltante, atacando los
minerales, diligencias y casas de funcionarios públicos y hombres ricos de la
región de Guadalupe de los Reyes, en donde su principal apoyo logístico
173
fueron los trabajadores mineros, a quienes, de vez en cuando, daba parte de
los botines obtenidos en las correrías. Aunque el principal objetivo de los
asaltos de Bernal era la obtención de armas, parque y dinero.
Los hombres que conformaban la banda de Bernal eran en su mayoría nativos
de la Sierra Madre Occidental de los estados de Durango y Sinaloa. Ellos, al
participar por periodos en la gavilla de Bernal, encontraban la manera de suplir
la falta de trabajo y la miseria. Para esa época, Bernal estableció su cuartel en
El Maguey, municipio de San Dimas, Durango, lugar encubierto por las
inaccesibles quebradas de la sierra.
En 1879, Heraclio Bernal apoyó la rebelión antiporfirista del general Jesús
Ramírez Terrón quien, el 2 de noviembre de 1879, lanzó el Plan de Copala, en
el que se exigía la aplicación estricta de la Constitución de 1857 y se
desconocía el gobierno de Porfirio Díaz. Durante la rebelión de Ramírez
Terrón, Bernal y su gente ocuparon la ciudad de Mazatlán, en junio de 1880, al
tiempo que el general Bernardo Reyes era comisionado para combatir a los
seguidores del Plan de Copala. En los siguientes meses, Bernal siguió
ocupando importantes plazas de Sinaloa, las que posteriormente serían
perdidas por las tropas de Ramírez Terrón, quien murió combatiendo el 22 de
septiembre de 1880, en El Salto, Sinaloa.
Tras la muerte de Ramírez Terrón, Bernal extendió sus movimientos de
bandolero, desde Nayarit hasta la Sierra Tarahumara, trashumando entre los
estados de Durango, Nayarit, Sinaloa y parte de Chihuahua, siguiendo siempre
la extensa línea de la Sierra Madre Occidental, haciendo objeto de sus asaltos
sobre todo a las conductas, diligencias y minerales. Ante la creciente fuerza y
fama de Bernal y sus seguidores, el gobernador de Sinaloa, Francisco Cañedo
Belmonte, organizó varias acordadas para combatir vanamente a la gavilla,
mientras que la guerra contra los yaquis de Sonora distrajo las tropas federales
y Bernal tuvo poca resistencia durante los años de 1882 a 1885.
En 1885, Heraclio Bernal Zazueta expidió el Plan de La Rastra, Sinaloa, en el
que justificaba e intentaba legitimar sus acciones con base en los postulados
del Plan de Copala. En ese momento la fama de El Rayo de Sinaloa es tal que,
en el informe presidencial de abril de 1886, Porfirio Díaz mencionó las acciones
que el gobierno federal emprendió contra el pronunciado bandido de la Sierra
de Durango y Sinaloa.
174
A partir del año de 1886, el peligro más poderoso para la gente de Bernal fue
la acordada durangueña bajo las órdenes del jefe Octaviano Meraz quien, a
pesar de seguir muy de cerca los movimientos y desarrollar ataques constantes
a la tropilla de Bernal, nunca pudo someterlo ni vencerlo totalmente. Al
momento de la fallida rebelión antiporfirista del general Trinidad García de la
Cadena, en Zacatecas, Bernal de adhirió a su Plan de Cañitas, aunque sin
llegar a tener contacto personal con García de la Cadena, toda vez que la
efímera acción de los cadenistas obligó a Bernal a retornar a sus territorios de
origen. La fuerza numérica de la guerrilla de Bernal variaba, dependiendo de
las circunstancias y de la acción política del movimiento. Así, El Rayo de
Sinaloa, en diversas épocas contó con 10, 40, 100 y hasta 200 hombres.
Sin base política, tras la muerte de García de la Cadena, en enero de 1887,
Heraclio Bernal lanzó el Plan de Conitaca, firmado en Conitaca, municipio de
San Ignacio, Sinaloa. El texto del Plan de Conitaca supera en conceptos al de
La Rastra, toda vez que, además del desconocimiento del gobierno de Porfirio
Díaz y la exigencia de la aplicación de la Constitución de 1857, Bernal incluyó
diversos puntos regionales como el de la erección de los estados del Valle de
México, Cantón de Tepic y Laguna de Tlahualilo, procurando incluir entre sus
simpatizantes a los demás rebeldes antiporfiristas. El Plan de Conitaca fue
publicado y firmado por Heraclio Bernal Zazueta como Jefe del Movimiento
Restaurador de la Constitución de 1857. Ante la rebeldía de Bernal, en 1887, el
gobernador Cañedo Belmonte ofreció diez mil pesos de recompensa por la
cabeza del Rayo de Sinaloa y, para no quedarse atrás, el gobernador de
Durango, Juan Manuel Flores, ofreció la mitad de la recompensa.
Las historias y mitologías en torno a la muerte de Bernal son múltiples. En ellas
se cuenta que en la cueva que era su guarida, enfermo de gravedad, Bernal dio
a Crispín García, su segundo, la orden de que, una vez muerto, lo baleara para
fingir una muerte violenta y así pudiera cobrar la recompensa que se ofrecía
por su cabeza. García cumplió la orden al pie de la letra, por lo que, todavía
después de muerto, Bernal cobraba botín. Por su parte, Nicole Girón apunta
que Bernal: “Denunciado, fue cercado en una montaña próxima a las minas de
Nuestra Señora, Sinaloa y falleció el 5 de enero de 1888”.
Según Francisco Castillo Nájera: “Los oprimidos miraban, en el bandolero, a
una reivindicación con tendencias redentoras. La simpatía por Heraclio Bernal
175
fue tanta, que, muchos años después de muerto, su tragedia sólo se cantaba
en la intimidad: en mi niñez supe que estaba prohibida por el Gobierno; ignoro
la veracidad sobre la prohibición, pero, repito, nadie se atrevía a cantarla
públicamente.” 7
Ignacio Parra, oriundo de La Cañada, municipio de Canatlán, Durango se inició
como bandido en la gavilla de Heraclio Bernal y, a la muerte de su mentor,
continuó sus correrías en la región de la Sierra Madre Occidental, en los
actuales municipios de Santiago Papasquiaro, Canatlán y San Juan del Río.
Los principales compinches de Ignacio Parra fueron: Federico Arreola, Refugio
Alvarado y los hermanos de Ignacio: Matías y Vicente Parra.
La importancia de Ignacio Parra, más que política, es con respecto a la relación
que Doroteo Arango, quien posteriormente sería conocido como Francisco
Villa, tuvo con la banda de Ignacio Parra. Por el hecho de que Doroteo Arango,
a la edad de 17 años, huyendo de la injusticia del Estado porfirista, se
incorporó a la gavilla de Ignacio Parra y permaneció en la misma por espacio
de tres años aproximadamente.
En noviembre de 1898, Octaviano Meraz, comandante de la Policía Rural o
Acordada del estado de Durango, organizó una batida contra los bandoleros de
Parra y, en el Puerto del Alacrán, cercano a la Hacienda de Santa Isabel de los
Berros, municipio de Canatlán, la Acordada de Meraz trabó combate contra la
tropilla de Parra. En la acción murieron: Ignacio Parra, Refugio Alvarado y
Federico Arreola.
7
CASTILLO NÁJERA, FRANCISCO. Corridos y canciones del siglo XIX. Glosa al programa de
Concha Michel (Palacio de Bellas Artes) 25 de mayo de 1946, Durango, Dgo. Editorial del
Supremo Tribunal de Justicia, 1987, pp. 22 y 23.
176
Heraclio Bernal Zazueta. El Rayo de Sinaloa
Cadáver de Heraclio Bernal
177
Libro sobre Heraclio Bernal
178
Hoja suelta con el corrido de Heraclio Bernal
179
Dos historietas dedicadas a Heraclio Bernal
180
Imagen de Ignacio Parra, según Gilberto Jiménez Carrillo
Doroteo Arango (Francisco Villa) a los 16 años, según Enrique Krauze
181
Hoja suelta con el corrido de Ignacio Parra
182
Dos imágenes de Octaviano Meraz, El León de la Sierra, jefe de la acordada
que persiguió a las bandas de Heraclio Bernal e Ignacio Parra
183
Libro sobre Ignacio Parra
184
Los sangrientos sucesos de Velardeña
El 13 de abril de 1908, la Mina de Terneras, del Real de Velardeña, municipio
de Cuencamé, que entonces era propiedad de la Compañía Velardeña Mining
and Smelting Company, del capitalista estadounidense Guggenheim, y de la
cual se extraía cobre, fue el escenario de un incendio. Algunos de los deudos
de las noventa víctimas del siniestro fueron pobremente indemnizados, otros
fueron reprimidos y no pocos desterrados hacía el sur del país.
Un año después del incendio, los pobladores de Velardeña, dirigidos por el
sacerdote católico Ramón Valenzuela, organizaron una peregrinación con la
finalidad de festejar el día de La Pasión y la quema de los Judas. Esta
peregrinación religiosa fue realizada sin permiso oficial y únicamente contó con
la anuencia de los directivos extranjeros de la compañía minera.
El jefe político de Velardeña, José Antonio Fabián, consideró el ritual católico
como un acto de protesta por los acontecimientos del año anterior, sobre todo
que coincidía con la fecha del incendio, 13 de abril. Por otro lado, las
manifestaciones religiosas en la época porfirista eran consideradas como
violaciones a la Ley de Culto Externo.
Con estos antecedentes, José Antonio Fabián se apresuró a disolver a los
peregrinos y, con la ayuda de cuatro policías locales, se enfrentó a la multitud,
detuvo al sacerdote Valenzuela y lo encerró en el interior de la jefatura de
Velardeña. Los más de mil manifestantes-peregrinos católicos, enardecidos por
la acción del jefe político, se dirigieron a la jefatura y liberaron al padre
Valenzuela. Enseguida los policías de Velardeña, armados con fusiles atacaron
a los peregrinos, armados con piedras. La superioridad numérica de los
católicos obligó a los gendarmes a refugiarse en las propiedades de la
compañía minera mientras que la multitud velardeñense se ocupaba de
saquear las pocas tiendas del lugar.
Sin pérdida de tiempo, Fabián telegrafió a Durango pidiendo auxilio y el
gobernador del estado licenciado Esteban Fernández, decidió imponer un
castigo ejemplar a los amotinados de Velardeña. Para lograr su cometido,
185
Fernández juntó a los 30 rurales de la Acordada de Octaviano Meraz, quienes
pocos días antes habían tenido acción en Avino. Para incrementar la fuerza,
Fernández pidió al Ejército Federal 60 soldados y de inmediato, el jefe político
estatal se ofreció para coordinar los movimientos de las fuerzas del Gobierno.
Al momento del arribo de la Acordada y el Ejército a Velardeña, muchos de los
amotinados habían huido, otros fueron aprehendidos y, de entre estos, los
esbirros porfiristas escogieron a 48 hombres al azar, a los que, sin formación
de causa, los pasaron por las armas, no sin antes obligarlos a cavar sus
propias tumbas en el lugar mismo de la masacre.
La matanza de Velardeña provocó un gran escándalo en la prensa nacional y el
Gobierno aseguró que se haría justicia y aunque los esbirros porfiristas, entre
ellos Antonio Calvillo y Octaviano Meraz, fueron consignados y sentenciados a
prisión y a la pena capital, poco después dejarían de ser huéspedes de la
Penitenciaria del Estado; merced a sus influencias y complicidades con las
autoridades estatales. En el cínico ejercicio de la impunidad, al inicio de la
guerra revolucionaria, la mayoría de los rurales de Durango fueron parte
integrante del Ejército Federal. 8
8
PARRA DURÁN, LORENZO. Cómo empezó la Revolución en Durango, Mérida, Yucatán,
Talleres de la Compañía Tipográfica Yucateca, 1930, p. 58. Ver también: ALTAMIRANO
COZZI, GRAZIELLA. Los años de la Revolución en Durango, 1910-1920, México, tesis de
maestría en Historia de México, Facultad de Filosofía y Letras, UNAM, 1993, pp. 44 a 46.
VANDERWOOD, PAUL J. Los Rurales mexicanos, México, Fondo de Cultura Económica,
1982, pp. 136 a 138.
186
Texto y gráfica sobre los sucesos de Velardeña publicado en el periódico El
imparcial, de la ciudad de México, el 16 de junio de 1909
Texto y gráfica sobre los sucesos de Velardeña publicado en el periódico El
imparcial, de la ciudad de México, el 17 de junio de 1909
187
Texto y gráfica sobre los sucesos de Velardeña publicado en el periódico El
imparcial, de la ciudad de México, el 6 de julio de 1909
Ruinas de la mina de Terneras
188
Cartón de Xavier Gómez sobre los sangrientos sucesos de Velardeña
189
VII. El sector financiero
Casa de moneda de Durango. Última sede, de 1881 a 1895
Edificio de la última sede de la Casa de Moneda de Durango
Un centavo de cobre. Durango, 1880
190
Cincuenta centavos de plata. Durango, 1884
Diez centavos de plata. Durango, 1888
Cinco centavos de plata. Durango, 1890
191
Ocho reales de plata. Durango. 1983
192
El Banco de Durango
Con el antecedente de que la iglesia Católica era la opción financiera casi
única, durante toda la época colonial, y ese mismo papel jugaron algunos
particulares, sobre todo alemanes, en los primeros tiempos republicanos.
Inaugurado el 9 de junio de 1891, el Banco de Durango tenía como objetivo
primordial el manejo de recursos financieros para facilitar la inversión en la
minería, la industria, la agricultura, la ganadería y la extracción de la madera,
entre otros. Como sociedad anónima el banco funcionó de buena manera e
incrementó varias veces su capital, al tiempo que cambió de sede en dos
ocasiones, para finalmente establecerse, a partir del primer día de enero de
1904, en la esquina de Calle Mayor (hoy 20 de noviembre) y Constitución, en el
edificio que se muestra. El banco emitía su propio papel moneda respaldado en
los depósitos de sus asociados, la mayoría de los capitalistas locales de
Durango.
Luego de apoyar los negocios de los dueños del dinero, después de sortear
múltiples descalabros financieros y de falta de circulante, con las limitaciones
legales del Gobierno Constitucionalista, el Banco de Durango dejó de ser la
institución financiera más importante de la entidad y para 1927, dejó de
funcionar definitivamente.
En su mejor momento el Banco de Durango tuvo a Carlos Bracho como su
presidente y a Francisco Asúnsolo como su cajero.9
9
RODRÍGUEZ LÓPEZ, MA. GUADALUPE. “Préstamo y progreso”, en: VILLA GUERRERO,
GUADALUPE Y FRANCISCO DURÁN (Coord.) Durango. Tierra de retos, Tomo I, México,
Milenio / La Opinión / Multimedios /Gobierno del Estado de Durango / Gobierno Municipal de
Durango 2007-2010 / PEÑOLES / ¡Vamos! Gómez Palacio / LXIV Legislatura del Estado de
Durango 2007-2010, 2009, pp. 141 a 162.
193
Banco en Ciudad Lerdo, ubicado en el Edificio de los Hermanos Luengas,
municipio de Lerdo, inaugurado en 1897
194
Dos imágenes de la última sede del Banco de Durango, inaugurado el primer
día de enero de 1904
Interior del Banco de Durango, 1906
195
Membrete del Banco de Durango
196
Una acción del Banco de Durango, 1904
197
Cartón de Xavier Gómez sobre una anécdota sucedida en el Banco de
Durango en 1912
Carlos Bracho. Presidente del Banco de Durango
198
Francisco Asúnsolo, cajero del Banco de Durango
199
Billete de cincuenta centavos. Banco de Durango, 1882
Billete de un peso. Banco de Durango, 1882
200
Billete de un peso. Banco de Durango, 1892
Cheque del Banco de Durango, 1900
201
Anverso y reverso de billete de cinco pesos del Banco de Durango, 1914
Billete de cinco pesos del Banco de Durango, 1891
202
Anverso y reverso de billete de diez pesos, del Banco de Durango, 1914
Anverso y reverso del billete de cincuenta pesos del Banco de Durango, 1914
203
Anverso de billete e diez pesos del Banco de Durango, 1914
Anverso de billete de veinte pesos del Banco de Durango, 1914
204
Anverso y reverso de billete de cien pesos. Banco de Durango, 1914
Anverso de billete de quinientos pesos. Banco de Durango, sin fecha
205
Otros bancos en Durango
Membrete de Banco de Londres y México, 1900’s
Membrete de Banco Minero Chihuahua, sucursal de Gómez Palacio, 1900’s
206
Acción de la Mapimí Mining Company emitida en 1882
Acción de la Compañía Minera La Purísima y Anexas del municipio de
Guanaceví, emitida en 1895
207
Acción de la Tenería y Fábrica de calzado La unión de Gómez Palacio y
Mapimí, emitida en 1902
Acción de la Compañía Minera El Duraznito de Tejamen, municipio de
Canatlán, emitida en 1906
208
Dos imágenes de una Acción de la Compañía Maderera de Durango, emitida
en 1912
209
210
211
También el Gobierno del Estado participaba de la actividad financiera. Tres
Bono del Estado de Durango, 1907, 1910 y 1910
212
Libro sobre la producción y la actividad financiera en Durango
213
VIII. Los medios de transporte
Arrieros, conductas, recuas y diligencias
Hasta el presente aún hay lugares en el estado a los que solamente se puede
acceder mediante el uso de cabalgaduras, remudas, bestias de carga, o
acémilas, transitando por los llamados caminos de herradura.
A finales del siglo XIX arribaron a Durango los primeros ferrocarriles
franqueando los llanos pero dejando aisladas a las zonas serranas. Antes del
ferrocarril, los viajes largos se hacían en las diligencias o acompañando a las
conductas o conjuntos de arrieros que, con escolta armada, transportaban los
metales, desde los minerales hasta las ciudades.
Antiguo escudo del municipio de Vicente Guerrero
214
Fotografía de una diligencia de Durango en 1898
215
Cartón de Xavier Gómez sobre los viajes en diligencia de Durango a la ciudad
de México
Carretas de la Hacienda de La Punta
216
Conductores de plata del mineral de Bacís, dirigida por Braulio Meraz Quintero,
1900’s
Preparando la conducta de plata del mineral de Bacis, dirigida por Braulio
Meraz Quintero, 1900’s
217
Acarreo de algodón en la región Lagunera, a principios del siglo XX
218
Ferrocarriles
Los Tramos del Ferrocarril Central Mexicano en Durango
Durante el primer periodo de gobierno del general Porfirio Díaz (1876-1881), se
otorgó a la compañía Ferrocarril Central Mexicano, organizada en Boston,
Massachusetts, la concesión y subvenciones para construir el ferrocarril de vía
ancha entre la ciudad de México y Ciudad Juárez, (antes Paso del Norte)
Chihuahua. Según los historiadores durangueños*
, el primer trazo del
ferrocarril Central incluía el paso por las ciudades de México, Querétaro,
Celaya, Salamanca, Irapuato, Guanajuato, León, Aguascalientes, Zacatecas,
Durango, Chihuahua y Paso del Norte. El gobernador de Durango, Francisco
Gómez Palacio, ya estaba pensando en celebrar la llegada del Ferrocarril
Central a la ciudad de Durango, cuando de pronto se enteró de que el trazo de
la vía cambiaba y excluía a la capital del estado, esto significaba postergarla de
la comunicación con el centro del país y la frontera con los Estados Unidos.
De nada sirvieron las gestiones de Gómez Palacio, ante el presidente de la
República, Manuel González y ante la compañía del Ferrocarril Central. El tren
no pasaría por la ciudad de Durango. Las razones que alegaron para hacer el
cambio de la ruta fueron muy variadas: se habló de que don Francisco Gómez
Palacio no quiso pagar una cantidad exagerada, por la gracia de que el
ferrocarril pasara por Durango, otro argumento fue que algunos capitalistas que
tenían inversiones en la entonces inhóspita Región Lagunera, presionaron por
el cambio de la ruta; se llegó también a correr el rumor de que el gobernador no
dejó pasar el tren por Durango porque traía consigo enfermedades, microbios y
moscos. Sin embargo, la razón más creíble de la desviación del Central fue la
del ahorro de costos de construcción de la subvención otorgada al hacer pasar
la vía por la sólida y árida planicie del Bolsón de Mapimí, región con mayores
posibilidades de desarrollo minero que el centro del estado.
*
José Ignacio Gallegos, Everardo Gámiz y Arnulfo Reyna.
219
El 10 de abril de 1884 se inauguró el Ferrocarril Central Mexicano que, en
tierras durangueñas tiene tres tramos; uno en el municipio de San Juan de
Guadalupe, al extremo este del estado en los límites semidesérticos con
Zacatecas y Coahuila, con tres estaciones que siguen el curso del Río
Aguanaval, San Isidro, Symón y Acacia. El segundo tramo, el más pequeño,
incluye las estaciones de Picardías y Nazareno en el municipio de Lerdo, al
este de Durango y en los límites con el suroeste de Coahuila. El último tramo
del Central en territorio durangueño se tiende, luego de la ciudad de Torreón,
Coahuila, por los municipio de Gómez Palacio y Mapimí, con estaciones en:
Gómez Palacio, Vergel, Noé, Brittingham, Santa Clara, Bermejillo, Peronal,
Conejos, Yermo y Zavalza, de allí la vía continúa su ruta por el estado de
Chihuahua.
Los trenes de vapor que comenzaron a cruzar la Región Lagunera propiciaron
en la zona un gran movimiento de capitales y de atracción de población, sobre
todo de peones acasillados y bonanceros. De esta manera, en 1886, la
estación Lerdo, situada en la hacienda de Santa Rosa, cercana a la población
de Lerdo, Durango, fue llamada Gómez Palacio y su rápido desarrollo industrial
dio lugar a la formación del municipal de Gómez Palacio, segregado del de
Lerdo.
Establecida la línea trocal de Ciudad Juárez a México, la ruta se trazó, tal como
está, para sacar plata, plomo, oro, cobre y mármol de Mapimí, Bermejillo, San
Juan de Guadalupe y Dinamita (antes La Tinaja). A los metales se añadieron
algunos productos como vinos, jabones, calzado, harinas; cultivos como
algodón y trigo. Otros productos que empezaron a ser trabajados en la Región
Lagunera con los capitales de los Lavín, Brittingham, Sánchez, Prince, Torres,
Siller, Rockefeller y la Tlahualilo Company, entre otros, fueron la candelilla y el
guayule. Para el mejor funcionamiento de la industria se tendieron múltiples
líneas ferroviarias ramales en la Región Lagunera.
220
Carta del Ferrocarril Central Mexicano, 1892
221
El Ferrocarril Central Mexicano nunca llegaría a la ciudad de Durango
(caricatura de Xavier Gómez)
Tren del Ferrocarril Central Mexicano cruzando el puente sobre el Río Nazas,
1883
222
Mapa de terrenos cedidos al Ferrocarril Central Mexicano por el gobierno del
Estado de Durango en Gómez Palacio
Casa redonda de la antigua estación ferrocarril Gómez Palacio
223
Estación Gómez Palacio del Ferrocarril Central Mexicano
Otro ángulo de la estación Gómez Palacio
224
Vista de Gómez Palacio con vías de ferrocarril y cables de electricidad
Actual Estación Gómez Palacio
225
Antigua Estación Noé del Ferrocarril Central
Actual Estación Noé, en la Región Lagunera
226
Dos imágenes de ferrocarril de cremallera de la Mina de Ojuela, perteneciente
a la Compañía Minera Peñoles en Mapimí
227
Locomotora de la Compañía Minera Peñoles
Tren de vía angosta en Tlahualilo, Durango
228
Vía de acceso a la fábrica y pueblo de Dinamita, Durango
Ferrocarril de mulitas, también llamado de sangre, en Tlahualilo
229
Ferrocarril Urbano de Durango
En 1884 John B. Olagaray formó una sociedad con 21 firmas accionistas de la
localidad para construir los ferrocarriles urbanos de la ciudad de Durango; la
razón social de los inversionistas fue Compañía Limitada de Tranvías de
Durango.
Los tranvías de Durango fueron de tracción animal (ferrocarril de sangre) y
fueron conocidos como “de mulitas”. La compañía de tranvías puso en servicio
tres líneas: 1.- Plaza de Armas – Panteón de Oriente. 2.- Plaza de Armas –
Santuario de Guadalupe. (Cuando el Ferrocarril Internacional llegó a la ciudad
de Durango (1892) esta línea dio servicio a la estación del ferrocarril). 3.- Plaza
de Armas – Baños de Canoas. La línea llegaba hasta el puente Fugeman,
sobre la Acequia Grande, conocido después como puente de El Ariel, que fue
demolido al ser entubada la Acequia Grande de la década de 1980 del siglo
XX. Los tranvías de la ciudad de Durango nunca tuvieron energía eléctrica.
230
Tres imágenes de unidades de servicio de la Compañía Limitada de Tranvías
de Durango
231
Estación de tranvías en la ciudad de Durango
Calles de Durango con carretas y tranvía, 1900’s
232
Caricaturas de Xavier Gómez sobre los ferrocarriles urbanos de Durango
Una acción financiera de la Compañía Limitada de Tranvías de Durango
233
Ferrocarril Internacional Mexicano
Obedeciendo más a las órdenes e intereses de las inversiones de capital, que
a las pasiones políticas regionales, durante el periodo presidencial de Manuel
González (1880-1884), el 7 de febrero de 1881 se autorizó la concesión del
Ferrocarril Internacional Mexicano a la Southern Pacific Railroad. Esta
empresa se comprometió a trabajar sin subsidios federales, pero con plazos
mayores de construcción. El trazo de Internacional incluía a las ciudades de
Piedras Negras (antes Porfirio Díaz) y Torreón, con extensión hacia la ciudad
de Durango.
El gobierno duranguense del general Juan Nepomuceno Flores firmó, el 27 de
abril de 1886, el contrato de construcción y explotación del Ferrocarril
Internacional, en su tramo Durango-Torreón. Para el primer día de marzo de
1888 el Internacional entroncó en Torreón con el Central y de manera muy
lenta se comenzó a introducir en el estado de Durango. En 1889 se incluyeron
en el contrato del Durango-Torreón, los intereses de la Steel and Iron Co.,
Septimus Hedges, H. Huntington y un sindicato inglés.
Tres años después se fundieron los clavos de plata para clavar el último trozo
de vía del Torreón-Durango y el 16 de octubre de 1892, se inició la gran fiesta
por la llegada del primer tren a la Perla del Guadiana, y por la inauguración de
los talleres de reparación de máquinas, conocidos como Casa Redonda.
Los trenes que van de Durango a Torreón pasan por las estaciones de Labor
de Guadalupe, General Carlos Real, Villa Montemorelos y estación El Chorro,
en el municipio de Durango; Francisco I. Madero (antes Avilés y hoy Ciudad
Juárez) y San Carlos, en el municipio de Lerdo. De allí el ferrocarril se dirige a
la ciudad de Torreón y se interna en el estado de Coahuila. La longitud del
Ferrocarril Internacional en territorio durangueño es de 253 kilómetros.
El Internacional, además de comunicar a la ciudad de Durango con la ciudad
de México y la frontera con los Estados Unidos, facilitó la transportación de los
minerales de la región de Cuencamé, Velardeña, Pedriceña y la ciudad de
234
Durango (Cerro del Mercado), así como los productos agrícolas de las
haciendas del este y el centro del estado.
Las boletas de los fletes del Internacional comenzaron a llenarse con los
nombres de los Asúnsolo, Escárcega, Cincúnegui, Fernández, Harzer, Weber,
Windisn, Torres, Curbelo, Gómez Palacio, Damm Drünert, Flores, González,
Sarabia, Gurza, Hildebrand, López Negrete, Manzanera, Mendarozqueta y
Rodríguez Cristóbal, entre otros nacionales e internacionales.
Los vagones de carga que mayormente salen de Durango son los que
transportan ganado, grano o minerales y son pocos los que llegan con
combustible o cargados con enseres domésticos destinados a las mansiones
de las familias pudientes de la ciudad o con productos y maquinaria industrial o
minera.
El Ferrocarril Internacional aceleró el movimiento de población a la Región
Lagunera en sus épocas bonancibles de las pizcas de algodón, así como el
traslado directo de los coterráneos a los Estados Unidos iniciando la migración
de durangueños a lugares como la ciudad de Chicago, Illinois.
Con el troncal ya funcionando fue costeable, para la Velardeña Mining
Company, la construcción del ramal de Pedriceña a Velardeña y de allí a la
Mina The Cooper Queen. El contrato entre el gobierno del estado y la
Velardeña Mining para el tendido de la vía se firmó el 16 de diciembre de 1902,
este es el único ramal con que cuenta el ferrocarril de Durango a Torreón. El
mismo ferrocarril propició la construcción de la fundidora de Pedriceña, misma
que fue terminada por la ASARCO (American Smelting And Refining Company)
en 1906.
La mexicanización de los ferrocarriles y la creación de la compañía
Ferrocarriles Nacionales de México, en 1908, incluyó el cambio de propiedad y
concesión del Ferrocarril Internacional, del que fue necesario comprar acciones
que estaban en poder de la Southern Pacific Railroad.
235
El cruce de las vías del Ferrocarril Central Mexicano y del Ferrocarril
Internacional Mexicano, en la ciudad de Torreón, Coahuila, significó la
posibilidad técnica de que las cintas de acero llegaran a Durango
Plano general del arribo del primer tren a la ciudad de Durango, el 16 de
octubre de 1892
236
Imagen de la Estación en el momento en que se reportó la primera llegada del
Ferrocarril Internacional Mexicano a Durango
Plano general de la Estación del Ferrocarril Internacional Mexicano en Durango
237
Locomotora del Ferrocarril Internacional Mexicano en Durango
Fotograma de la película Train hour in Durango, 1897, filmada por los enviados
de Thomas Alva Edison
238
Ruinas de la Estación del Ferrocarril Internacional Mexicano en la ciudad de
Durango
Otra imagen de la Estación del Ferrocarril internacional Mexicano en Durango
239
Estación Pasaje del Ferrocarril internacional Mexicano
Talleres de la antigua estación del ferrocarril en la ciudad de Durango
240
Dos caricaturas de Xavier Gómez sobre el Ferrocarril Internacional Mexicano
241
El Ferrocarril Internacional Mexicano conectó a Durango con los rieles de la red
ferroviaria nacional
242
Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
En 1889, como comunicación vecinal, se tendieron 5 kilómetros de vías de un
“ferrocarril de sangre”, es decir, de un tranvía de tracción animal, entre Lerdo y
Gómez Palacio. En 1897 la misma compañía lerdense extendió el tranvía
tirado por mulas 5 kilómetros más, hasta la entonces villa de Torreón, y para
1901 este tranvía fue transformado en el Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a
Torreón, S. A.
La planta de energía eléctrica que movió el Lerdo-Torreón se instaló en Lerdo,
Durango, además cubrió las necesidades de alumbrado público tanto de
Gómez Palacio como de Lerdo.
El Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón fue el signo de toda una época de
transporte vecinal en el triángulo de Torreón-Gómez Palacio y Lerdo, hasta
que, a principios de la década de 1950 fue substituido por el transporte de
vehículos de motor de combustión interna.
Membrete del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
243
Plano del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
Primera planta eléctrica que alimentó el Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
244
Dos imágenes Tranvía del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón cruzando el
puente sobre el Río Nazas
245
Tres puentes sobre el Río Nazas
246
247
248
Ocho imágenes del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
249
Una acción del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
250
Ferrocarril de Parral a Durango
En 1899, el Gobierno del estado de Durango firmó sendos contratos con las
compañías, Ferrocarril Internacional y Ferrocarril Central Mexicano para la
construcción de dos vías: una de Durango a Tepehuanes con prolongación al
mineral de Guanaceví y la otra de Parral, Chihuahua hasta Guanaceví,
respectivamente, para conectarse entre sí y conformar la línea de Parral a
Durango. Luego de cubrir el difícil tramo de Chinacates, la vía de Durango a
Guanaceví avanzó relativamente rápido y para el 12 de mayo de 1902 el tren
llegó a la población de Tepehuanes:
El Ferrocarril de Durango a Guanaceví, nunca avanzó más allá de Tepehuanes
y tradicionalmente el tramo fue considerado como un ramal del Ferrocarril
Internacional, de Durango a Piedras Negras.
El tramo Durango-Tepehuanes incluye las siguientes estaciones: Durango,
Casa Blanca y Carpintero en el municipio de la capital; Cacaría (hoy Nicolás
Bravo), Canatlán, Pinos (hoy Francisco Zarco, Sauces (hoy General Maclovio
Herrera), Laguna de Santiaguillo (hoy Arnulfo R. Gómez), las Olas, Guatimapé
y Alisos en los municipios de Canatlán y Nuevo Ideal; Chinacates, estación
Huizaches, Santiago Papasquiaro; y Corrales, Sandías, Presidio y Tepehuanes
en el municipio de Tepehuanes. El total de la extensión del Durango-
Tepehuanes es de 218 kilómetros.
Por otro lado, el tramo Parral-Guanaceví comenzó a ser construido con vía
angosta y se introdujo en territorio durangueño por el norte del municipio de
Ocampo con un recorrido de 34 kilómetros y con estaciones en Ojitos, Llano
Blanco, Ornelas, Mesa de Sandías, Palomas y Rosario, todas ellas en el
municipio de Ocampo.
251
Tramo del Ferrocarril de Durango a Tepehuanes
Locomotora del Ferrocarril de Durango a Tepehuanes
252
Tren transitando en el tramo de Parral a Mesa de Sandías en el Ferrocarril de
Parral a Durango
Estación del Ferrocarril de Tepehuanes, Durango
253
Estación del Ferrocarril en Santiago Papasquiaro, Durango, 1900’s
Locomotora del Ferrocarril Parral – Durango
254
Estación Rosario del Ferrocarril. Durango-Parral, 1900’s
Estación Canatlán
255
Estación Guatimapé
Estación Chinacates
256
Rieleros tendiendo vía entre Chinacates y Santiago Papasquiaro, 1900
Trabajadores ferrocarrileros cortando leña para surtir la caldera del tren, 1900’s
257
Rieleros tendiendo la vía de Santiago Papasquiaro a Tepehuanes, 1900
Mapa de alturas Ferrocarril de Durango a Tepehuanes
258
Itinerario del ramal de Ferrocarril de Durango a Tepehuanes, 1902
259
Transporte de pasajeros de la población a la Estación de ferrocarril en Santiago
Papasquiaro
Vías de ferrocarril en el Estado de Durango hasta 1910
260
Sistema ferroviario de Durango hasta 1910
261
Libro sobre el Ferrocarril de Durango a Tepehuanes
262
IX. Ciencia, artes, cultura, academia y
diversiones
Científicos y académicos
Carlos Santamarina, primer director del Instituto de Niñas, 1870 y director del
Instituto Juárez de 1872 a 1877 y de 1895 a 1900
263
Ingeniero Carlos Patoni y su familia, 1902
Vicenta Saracho Arce. Inspectora del Instituto de Niñas, 1874
264
Dos imágenes del pedagogo Bruno Martínez, 1880’s
265
Juana Villalobos, directora de la Escuela Primaria anexa a la Normal y de la
Escuela Normal del Estado
Leandro Fernández, ingeniero, académico, funcionario federal y gobernador.
Fue secretario de obras públicas del gobierno porfirista
266
Logo del Instituto Juárez desde los 1880’s
El Instituto Juárez a fines del siglo XIX
267
Exterior del Instituto Juárez a finales del siglo XIX
Antiguo edificio del Instituto Juárez
268
Rafael Pescador. Director del Instituto Juárez, 1880’s
Esteban Fernández. Director de Instituto Juárez, 1890’s
269
Juan Santa Marina. Director de Instituto Juárez, 1890’s
Diploma del Instituto Juárez, 1899
270
Sociedad de Alumnos del Instituto Juárez, 1900
Alumnos de la materia de Física. Instituto Juárez, 1904
271
Alumnos de Física del Instituto Juárez, 1906
Guadalupe Gracia García, alumno del Instituto Juárez, 190
272
Geólogo José Guadalupe Aguilera, 1900’s
273
Dos imágenes del cirujano Rafael Lavista, 1890’s
Cartón de Xavier Gómez en honor al cirujano durangueño Rafael Lavista
274
Fernando Zárraga. Médico, 1900’s
Clase de pintura en Escuela de Niñas de Durango, 1900
275
Artistas e intelectuales
En las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del XX, la ciudad de
Durango fue lugar de residencia de las familias de los latifundistas,
concesionarios mineros, comerciantes y demás capitalistas que desarrollaron
sus negocios en el enclave económico del territorio estatal, vinculado con el
corredor que unió a la entidad con la Región Lagunera y a la ciudad de
Monterrey, Nuevo León, merced a la comunicación que ofreció el Ferrocarril
Internacional Mexicano, con sus múltiples ramales.
En este contexto la ciudad tuvo, a su vez, la oportunidad de recibir a múltiples
compañías artísticas, de teatro, música sinfónica, conciertos, recitales, ópera,
de títeres, de funciones de cine silente y zarzuela, entre otras, al tiempo que
algunos de los miembros de las familias acomodadas podían, sin
preocupaciones económicas, dedicarse al solaz de las actividades culturales y
desarrollar diversas expresiones artísticas, con los lineamientos estéticos
europeos, como en los casos de compositores como: Luis Baca, Alberto
Amaya, Gustavo E. Campa, Ricardo Castro y Alberto M. Alvarado, entre otros,
que dieron a una buena cantidad de sus partituras de óperas, operetas,
canciones, valses y sinfonías, entre otras composiciones, sonidos que
recordaban a los que salían de las orquestas, compositores y cantantes
europeos.
Es innegable que los compositores de la élite económica de la época aportaron
su creatividad al acervo de la cultura nacional y muchas de sus piezas siguen
siendo números obligados en el repertorio de las diversas orquestas de música
sinfónica mexicana, como es el caso del Vals Capricho, de Ricardo Castro.
De esta época y generación fue el compositor Alberto M. Alvarado nació en
Durango, el primer día de diciembre de 1864, y falleció en la misma ciudad, el
18 de julio de 1939, además de ser empresario teatral en su ciudad natal, su
música destacó nacional e internacionalmente. Una de sus composiciones más
famosas fue el vals Recuerdo, que se sigue interpretando en sus versiones
276
instrumental y cantada. En 1966, durante los festejos del IV Centenario de la
fundación de la ciudad de Durango, el vals Recuerdo fue declarado como
himno regional de la ciudad.
Ricardo Castro, compositor, nació el 7 de febrero de 1864, en la Hacienda de
Santa Bárbara, Municipio de Nazas, Durango, falleció en la ciudad de México –
el 28 de noviembre de 1907
277
Otra imagen de Ricardo Castro
Placa conmemorativa en la casa donde nació Ricardo Castro
278
Casa de la calle de Negrete, en la ciudad de Durango, donde vivió el
compositor Ricardo Castro
Los compositores Ricardo Castro y Gustavo G. Campa, 1883
279
Diploma de curso impartido por Ricardo Castro 1897
280
281
282
283
284
285
286
287
288
Partituras de algunas obras de Ricardo Castro
289
Programas de conciertos de Ricardo Castro
Monumento a Ricardo Castro afuera del teatro que lleva su nombre (antiguo
Teatro Principal)
290
291
292
Libros sobre Ricardo Castro
293
Alberto M. Alvarado, el compositor en su juventud
El compositor Alberto M. Alvarado, adulto mayor
294
Partitura del Vals Recuerdo, de Alberto M. Alvarado, himno de la ciudad de
Durango
Partitura del Vals Río Rosa, de Alberto M. Alvarado
295
Otras partituras de Alberto M. Alvarado
296
Monumento a Alberto M. Alvarado, en el Parque Guadiana de la ciudad de
Durango
Monumento a Alberto M. Alvarado en el Teatro que lleva su nombre en la
ciudad de Gómez Palacio
297
Manuel Herrera Álvarez, compositor
Alberto Amaya, compositor
298
Dos imágenes de Francisco Fournier Salas, compositor
299
Quinteto Fournier
Conjunto musical escolar durangueño de principios del siglo XX
300
Orquesta Típica de Durango, 1908
Orquesta del maestro Arturo Lugo, 1900’s
301
Banda actuando en Gómez Palacio en 1911
Orquesta Femenil de Santa Clara, municipio del mismo nombre, 1904
302
Rafael Ceniceros y Villarreal
El político, dramaturgo, cuentista, novelista, abogado y moralista Rafael
Ceniceros y Villarreal nació en la ciudad de Durango el 11 de julio de 1855.
Durante algunos años, Ceniceros estudió en el Seminario Conciliar de
Durango, pero abandonó la carrera clerical para estudiar jurisprudencia en el
Instituto Juárez de la ciudad de Durango. Desde joven Ceniceros se inició
como escritor de piezas teatrales, especialmente melodramáticas. Al recibir su
grado académico de abogado, Rafael Ceniceros trasladó su residencia a la
ciudad de Zacatecas en donde continuó escribiendo obras dramáticas, novelas,
cuentos, poesías, artículos periodísticos y catecismos, entre otras cosas.
Hombre interesado en los problemas sociales de su tiempo, Ceniceros se
dedicó a una intensa actividad política, participando como miembro de la Orden
de los Caballeros de Colón y desde el bando conservador y por el Partido
Católico Nacional, PCN, ocupó en dos ocasiones el poder ejecutivo del estado
de Zacatecas.
La obra narrativa de Ceniceros y Villarreal consta de dos novelas: La Siega,
publicada en 1905 y El Hombre Nuevo, que se puso a la venta en 1908. Los
relatos de Ceniceros incluyen una colección de 48 cuentos cortos que se dieron
a conocer en 1909.
En sus relatos, Ceniceros y Villarreal, apegándose al género de realismo
costumbrista, recrea un sistema de ideas conservador de la clase media y la
clase alta de la provincia mexicana de su tiempo. Consecuente con su
pensamiento conservador, Ceniceros actuó como opositor político de los
primeros gobiernos de la Revolución por lo que, entre 1914 y 1926, estuvo en
prisión en catorce ocasiones. Fungió como presidente del Partido Nacional
Republicano, PNR, y en 1926, al momento de la Primera Rebelión Cristera, el
para entonces ya anciano novelista, tuvo el papel protagónico de presidente de
la Liga Nacional Defensora de la Libertad Religiosa, LNDRL, organización
urbana de extrema derecha que tuvo una parcial relación con la instigación de
la rebeldía cristera.
303
El 27 de diciembre de 1931, en la ciudad de México, con su fortuna y sus
luchas perdidas, el empobrecido y senil Rafael Ceniceros y Villarreal dejó de
vivir.
Rafael Ceniceros y Villarreal, escritor
Obras de Rafael Ceniceros y Villarreal
304
Primeros antropólogos en Durango
Carl Lumholtz y Conrad Theodor Preuss fueron los primeros investigadores
extranjeros que se ocuparon del estudio de los pueblos indígenas de Durango,
en las postrimerías del siglo XIX y los principios del XX. Los textos: México
desconocido, de Carl Lumholtz y Mitos y Cuentos Nahuas de la Sierra Madre
Occidental de Konrad Theodor Preuss, son dos de las principales aportaciones
y fuentes de la cultura de los pueblos primigenios de México. Por otra parte, los
trabajos de Lumholtz y Preuss incluyeron fotografía, audiotranscripción musical,
grabaciones sonoras y narrativa etnográfica.
Carl Lumholtz, imagen y firma
305
Altar de Mitote Cora, por Carl Lumholtz, 1904
Patio sagrado de los coras, con arco musical al centro. Lumholtz, 1900’s
306
Mitote Cora, Lumholtz, 1904
Poblado mexicanero de San Pedro Xícoras, Lumholtz, 1904
307
Semana Santa Cora, 1904
Troje tepehuana cerca de Lajas. Lumholtz, 1900’s
308
Una edición de El México desconocido de Carl Lumholtz
309
La sierra del Nayar por Konrad Theodor Preuss, 1904
310
Konrad Theodor Preuss, 1904
Libro de Konrad Theodor Preuss
311
Carlos Hernández, autor del libro Durango Gráfico, 1908
Portada de Durango Gráfico de Carlos Hernández
312
Juan B. Barney. Fotógrafo. Durango (1850-1918). Muchas de las placas que
integran este libro son de la autoría de Barney
313
Los inicios del cine en Durango
En 1896, Thomas Alva Edison designó en su Departamento de Kinematógrafo
a James White, para que se encargara de realizar la producción de películas de
cine silente. A mediados de 1897, James White y el camarógrafo británico
Frederick Blechynden, iniciaron un viaje de filmaciones, con la ventaja de que
las compañías ferroviarias, para obtener publicidad, les ofrecían a los
cinematografistas los viajes con todos los gastos pagados. Después de recorrer
los Estados Unidos, White y Blechynden llegaron a México, por la vía del
Ferrocarril Internacional Mexicano y por el Ferrocarril Nacional Mexicano.
En agosto 1897, la entonces última terminal del Ferrocarril Internacional Mexicano era
la ciudad de Durango y luego de su arribo, los enviados de Edison rodaron las cinco
primeras películas filmadas en Durango: Wash Day in México, Train Hour in Durango,
Bull Fight # 1, Bull Fight # 2 y Bull Fight # 3.
En la primera película filmada en Durango, Wash Day in México, Día de lavado en
México, o Lavanderas, se observa a un grupo de mujeres que lavan su ropa en la
rivera de la Acequia Grande, a un costado del Paseo de las Alamedas. Al fondo e
izquierda, está el puente de Analco. En primer plano se ve a un niño desnudo jugando
a un lado de una lavandera. Todas usan rebozo como tocado sobre sus cabezas, a la
usanza tradicional de las mujeres durangueñas de los siglos XIX y hasta mediados del
XX. Durante el transcurso de la película una de las mujeres se levanta y sacude una
prenda de vestir. Una pareja y un perro cruzan al fondo. Un paisano está recargado en
un árbol y, en la ribera izquierda de la acequia, una alta mujer está de pie, mientras
que otra mujer lava en medio de la corriente.
Otro filmador que rodó cine silente en Durango, antes de 1910 fue Julio
Kemenydy.
314
Fotograma de Wash day in México, primer filme dorado en Durango, 1897
Fotograma de Train hour in Durango, 1897
315
Fotograma de la película Bull fight 1, 1897
Fotograma de Bull fight 2, 1897
316
Secuencia de la película Bull fight 3, 1897
Joaquín Navarro Quinito, primer torero filmado el Durango, 1897
317
James White, al centro, primer productor de películas en Durango, 1897
Julio Kemenydy, filmando en Durango, 1908
318
Cartón de Xavier Gómez sobre las primeras proyecciones de cine en Durango
319
Libro sobre Historia del cine silente en Durango
320
Las diversiones
Extraño cartel taurino, 1877
321
Cartel de corrida de toros, 1896
Otra corrida, 1903
322
Imágenes de dos corridas en la Plaza de toros, de adobe y piedra, de la ciudad
de Durango, 1890’s. La plaza fue demolida a principios del siglo XX
323
324
Tres imágenes de las gradas del Hipódromo de la ciudad de Durango, 1900’s
325
Programas de teatro de la ciudad de Durango, 1895
326
Dos imágenes de actores en funión en el interior del Teatro Coliseo, 1900’s
327
Dos programas del Teatro Unión de Gómez Palacio
328
329
Tres imágenes del Teatro Unión de Gómez Palacio, 1900’s
Programa de Teatro de títeres de Rosete Aranda en Gómez Palacio, 1900’s
330
Excursión al Pueblito, municipio de Durango
Cancionero con grabado de José Guadalupe Posada. De Torreón a Lerdo,
1907
331
Cartón de Xavier Gómez sobre las diversiones en el Durango de las
postrimerías del siglo XIX
332
Periódicos
La luz, apareció en 1870
El nivel, apareció en 1870
333
El obrero constitucional, apareció en 1874
El eco religioso, apareció en 1874
334
El caniculario, apareció en 1875
La enseñanza civil, apareció en 1875
335
La sombra de la guerra, apareció en 1877
Semanario de avisos y variedades, apareció en 1877
336
El eco popular, apareció en 1877
La brocha, apareció en 1881
337
El domingo, apareció en 1883
La Época, apareció en 1884
338
La revista de policía, apareció en 1898
La idea, apareció en 1899
339
El comercio de Durango, apareció en 1892
La República, apareció en 1892
340
La bandera roja, apareció en 1896
El repórter, apareció en 1901
341
El correo de Durango, apareció en 1902
La estrella, apareció en 1904
342
Boletín de la Sociedad Cooperativa de Auxilios Mutuos, apareció en 1909
Arlequín, apareció en 1910
343
X. Los ámbitos urbanos
Desde la restauración de la República y durante todo el periodo porfirista la
ciudad de Durango se engalanó con la construcción de una gran cantidad de
edificios y casas de lujo de los capitalistas locales. Algo similar sucedió en
algunos de los partidos del interior del estado. De hecho, este periodo marcó el
centro de la ciudad de Durango con su estilo arquitectónico que, como se verá,
posteriormente fue parcialmente destruido.
La ciudad de Durango
Plano hidrográfico y topográfico de la ciudad de Durango, 1888
344
Plano de la ciudad de Durango, 1890
Plano de la ciudad de Durango, 1900
345
Plano del Partido de Durango, 1902
346
Plano de la ciudad de Durango, 1909
Plano topográfico de la ciudad de Durango, 1909
347
Plano topográfico de la ciudad de Durango, 1909
Plano de la ciudad de Durango, 1909
348
Croquis de una bomba para combatir incendios ofrecida en presupuesto al
Ayuntamiento de Durango, 1870’s
Primer edificio del Ayuntamiento de la ciudad de Durango, 1870’s
349
Palacio Municipal de Durango, 1890
Panorámica de la ciudad de Durango, pintura de León Trusset, 1884
350
Tarjeta postal con panorámica de la ciudad de Durango, 1900’s (circa)
.
Plaza de armas del la ciudad de Durango, 1884
351
Calle del Comercio antes de 1894
Calle del comercio después de 1894
352
Calle Principal en 1890
Calle de Constitución esquina con Principal en 1898
353
Plaza de Armas, en las actuales calles de 20 de noviembre y Juárez, 1900’s
Otro ángulo de la anterior
354
Sitio de carros de alquiler de tracción animal frente a la Catedral, 1900's
Actual calle principal 20 de noviembre, en los 1900’s
355
Entrada del Mercado Francisco Gómez Palacio, 1890’s
Calle de 5 de febrero, 1890’s
356
Casa de las lágrimas. Acuarela de José Antonio Treviño Fuentes, 1894
Inauguración del Jardín Hidalgo, 1896
357
Calle de Durango con alumbrado público, 1900’s
Calle Principal de Durango, 1900’s
358
Calle Mayor en 1902
Actual calle de 5 de febrero, lado oriente, en los años 1900’s
359
Actual calle de 5 de febrero, lado poniente, en los años 1900’s
Plaza de armas, 1890’s
360
Proyecto de entubación del agua potable en la ciudad de Durango, 1895
Canalización de la Acequia grande, 1899
361
Estanque de los Patos, 1900’s
Calle de 5 de Febrero, 1900’s
362
Casa de Bruno Hartzer, 1900’s
Tarjeta postal con el Jardín Patoni
363
Tarjeta postal con el Jardín Juárez, 1900’s
Cerro de Los Remedios, 1900’s
364
Hospicio San Carlos, 1900’s
Barrio de Analco, 1880’s (circa)
365
La Acequia Grande, 1890’
El Portal de Palomas en la ciudad de Durango, 1900’s
366
Plaza de Armas, 1900’s
Otro ángulo de la Plaza de Armas, 1900’s
367
Calle del Mesón, 1900’s
Calle Constitución con postes de energía eléctrica, 1900's circa
368
Chalet en la huerta del Sabino, 1990’s
En perspectiva El Cerro de los Remedios, 1900’s
369
Paseo de Las Moreras, 1900’s
Calle Mayor de Durango
370
Calle de Teresas, un 16 de septiembre, en la ciudad de Durango, 1900’s
Parque Ortiz der Zárate, Durango, 1900’s
371
Casa de Roberto Windish 1900’s
Consulado Alemán en Durango, 1900's
372
Kiosco de la Plaza de Armas, 1900’s
Palacio de Zambrano transformado en Palacio de Gobierno
373
Paseo de Las Alamedas
Lago de los Patos en el Parque Guadiana, 1900’s
374
Otra imagen del Lago del Parque Guadiana
Teatro Coliseo, hoy Teatro Victoria, 1900’s
375
Puente de Analco, sobre la Acequia Grande1900’s
La Acequia Grande, 1900’s (circa)
376
377
Tres imágenes de la entrada a la antigua Penitenciaría, 1904 (circa)
Vista de un pabellón de la Penitenciaría, 1904
378
Teatro Principal en construcción, 1902
Panorámica de Durango y el Cerro de Mercado, 1901
379
Panorámica de la ciudad de Durango, 1907
380
Comercios y hoteles en la ciudad de Durango
Primer edificio de la Ferretería Alemana, 1900’s
381
Dos imágenes del edificio El Palomar o Ferretería Alemana, 1900
Interior de la Ferretería Alemana
382
Dos imágenes de publicidad de la Ferretería Alemana
383
Señor y señora Bose, propietarios de la Ferretería Alemana
Grandes almacenes o El Gran N° 11, en su primer sede
384
El Palacio del conde de Súchil, transformado en almacén de Maximiliano
Damm, llamado El Gran Número 11
Interior de Casa del Conde de Súchil. Tienda El Gran Número 11
385
Publicidad del El Gran Número 11, en 1903
Casa Daesslé, 1900’s
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf
Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf

Contenu connexe

Similaire à Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf

Similaire à Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf (20)

Unidad 5
Unidad 5Unidad 5
Unidad 5
 
La sociedad venezolana
La sociedad venezolanaLa sociedad venezolana
La sociedad venezolana
 
Historia de México II
Historia de México IIHistoria de México II
Historia de México II
 
EA _ENSAYOMET _GMAA
EA _ENSAYOMET _GMAAEA _ENSAYOMET _GMAA
EA _ENSAYOMET _GMAA
 
MSocEcon.ppt
MSocEcon.pptMSocEcon.ppt
MSocEcon.ppt
 
Historia de mexico
Historia de mexicoHistoria de mexico
Historia de mexico
 
Guías y Guiones del Museo de la Revolución en Durango Domingo Arrieta León.pdf
Guías y Guiones del Museo de la Revolución en Durango Domingo Arrieta León.pdfGuías y Guiones del Museo de la Revolución en Durango Domingo Arrieta León.pdf
Guías y Guiones del Museo de la Revolución en Durango Domingo Arrieta León.pdf
 
HISTORIA DE NICARAGUA
HISTORIA DE NICARAGUAHISTORIA DE NICARAGUA
HISTORIA DE NICARAGUA
 
México
MéxicoMéxico
México
 
Independencia
IndependenciaIndependencia
Independencia
 
Breve resumen de la historia de argentina
Breve resumen de la historia de argentinaBreve resumen de la historia de argentina
Breve resumen de la historia de argentina
 
04 kap2
04 kap204 kap2
04 kap2
 
Síntesis de la historia argentina
Síntesis de la historia argentinaSíntesis de la historia argentina
Síntesis de la historia argentina
 
Actividad 1.6
Actividad 1.6Actividad 1.6
Actividad 1.6
 
La pepa
La pepaLa pepa
La pepa
 
Extencionismo
ExtencionismoExtencionismo
Extencionismo
 
Guia tercer 2018
Guia tercer 2018Guia tercer 2018
Guia tercer 2018
 
Situación problema, independencia
Situación problema, independenciaSituación problema, independencia
Situación problema, independencia
 
Aurelio 2
Aurelio 2Aurelio 2
Aurelio 2
 
Historia del perú 4º
Historia del perú 4ºHistoria del perú 4º
Historia del perú 4º
 

Plus de AntonioAvitiaHernnde

María Chuy. de Aurelio Robles Castillo. Novela sobre una docente en en tiemñp...
María Chuy. de Aurelio Robles Castillo. Novela sobre una docente en en tiemñp...María Chuy. de Aurelio Robles Castillo. Novela sobre una docente en en tiemñp...
María Chuy. de Aurelio Robles Castillo. Novela sobre una docente en en tiemñp...AntonioAvitiaHernnde
 
Cancionero histórico republicano.pdf
Cancionero histórico republicano.pdfCancionero histórico republicano.pdf
Cancionero histórico republicano.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Revista ISSSTE. El ISSSTE eres tú.pdf
Revista ISSSTE. El ISSSTE eres tú.pdfRevista ISSSTE. El ISSSTE eres tú.pdf
Revista ISSSTE. El ISSSTE eres tú.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.pdf
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.pdfCiudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.pdf
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.docx
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.docxCiudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.docx
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.docxAntonioAvitiaHernnde
 
La muerte no mata a nadie. Antonio Avitia .pdf
La muerte no mata a nadie. Antonio Avitia .pdfLa muerte no mata a nadie. Antonio Avitia .pdf
La muerte no mata a nadie. Antonio Avitia .pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdfCancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdfCancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Canciones de a mentiritas a las que hicieron de a deveras.pdf
Canciones de a mentiritas a las que hicieron de a deveras.pdfCanciones de a mentiritas a las que hicieron de a deveras.pdf
Canciones de a mentiritas a las que hicieron de a deveras.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdfCancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdfCancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Historieta Los Resistentes #23. La Resistencia Femenina
Historieta Los Resistentes #23. La Resistencia FemeninaHistorieta Los Resistentes #23. La Resistencia Femenina
Historieta Los Resistentes #23. La Resistencia FemeninaAntonioAvitiaHernnde
 
Wingate. El soldado invencible.pdf
Wingate. El soldado invencible.pdfWingate. El soldado invencible.pdf
Wingate. El soldado invencible.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Vlad Dracul. La verdadera Historia de Drácula.pdf
Vlad Dracul. La verdadera Historia de Drácula.pdfVlad Dracul. La verdadera Historia de Drácula.pdf
Vlad Dracul. La verdadera Historia de Drácula.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Victorio. Los apaches de Chihuahua.pdf
Victorio. Los apaches de Chihuahua.pdfVictorio. Los apaches de Chihuahua.pdf
Victorio. Los apaches de Chihuahua.pdfAntonioAvitiaHernnde
 
Thompson y el misterio del Cenote Sagrado.pdf
Thompson y el misterio del Cenote Sagrado.pdfThompson y el misterio del Cenote Sagrado.pdf
Thompson y el misterio del Cenote Sagrado.pdfAntonioAvitiaHernnde
 

Plus de AntonioAvitiaHernnde (20)

María Chuy. de Aurelio Robles Castillo. Novela sobre una docente en en tiemñp...
María Chuy. de Aurelio Robles Castillo. Novela sobre una docente en en tiemñp...María Chuy. de Aurelio Robles Castillo. Novela sobre una docente en en tiemñp...
María Chuy. de Aurelio Robles Castillo. Novela sobre una docente en en tiemñp...
 
Cancionero histórico republicano.pdf
Cancionero histórico republicano.pdfCancionero histórico republicano.pdf
Cancionero histórico republicano.pdf
 
Revista ISSSTE. El ISSSTE eres tú.pdf
Revista ISSSTE. El ISSSTE eres tú.pdfRevista ISSSTE. El ISSSTE eres tú.pdf
Revista ISSSTE. El ISSSTE eres tú.pdf
 
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.pdf
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.pdfCiudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.pdf
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.pdf
 
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.docx
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.docxCiudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.docx
Ciudadanos Libres en Resistencia 2006-2020.docx
 
La muerte no mata a nadie. Antonio Avitia .pdf
La muerte no mata a nadie. Antonio Avitia .pdfLa muerte no mata a nadie. Antonio Avitia .pdf
La muerte no mata a nadie. Antonio Avitia .pdf
 
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdfCancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
 
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdfCancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
Cancionero de la violencia política de Estado en Mèxico.pdf
 
Toponimia Durangueñ1.pdf
Toponimia Durangueñ1.pdfToponimia Durangueñ1.pdf
Toponimia Durangueñ1.pdf
 
Canciones de a mentiritas a las que hicieron de a deveras.pdf
Canciones de a mentiritas a las que hicieron de a deveras.pdfCanciones de a mentiritas a las que hicieron de a deveras.pdf
Canciones de a mentiritas a las que hicieron de a deveras.pdf
 
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdfCancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
 
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdfCancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
Cancionero histórico del periodo Cardenista.pdf
 
Historieta Los Resistentes #23. La Resistencia Femenina
Historieta Los Resistentes #23. La Resistencia FemeninaHistorieta Los Resistentes #23. La Resistencia Femenina
Historieta Los Resistentes #23. La Resistencia Femenina
 
Wingate. El soldado invencible.pdf
Wingate. El soldado invencible.pdfWingate. El soldado invencible.pdf
Wingate. El soldado invencible.pdf
 
Vlad Dracul. La verdadera Historia de Drácula.pdf
Vlad Dracul. La verdadera Historia de Drácula.pdfVlad Dracul. La verdadera Historia de Drácula.pdf
Vlad Dracul. La verdadera Historia de Drácula.pdf
 
Villon poeta y delincuente.pdf
Villon poeta y delincuente.pdfVillon poeta y delincuente.pdf
Villon poeta y delincuente.pdf
 
Victorio. Los apaches de Chihuahua.pdf
Victorio. Los apaches de Chihuahua.pdfVictorio. Los apaches de Chihuahua.pdf
Victorio. Los apaches de Chihuahua.pdf
 
Valentín de La Sierra.pdf
Valentín de La Sierra.pdfValentín de La Sierra.pdf
Valentín de La Sierra.pdf
 
Tito. La Batalla del Neretva.pdf
Tito. La Batalla del Neretva.pdfTito. La Batalla del Neretva.pdf
Tito. La Batalla del Neretva.pdf
 
Thompson y el misterio del Cenote Sagrado.pdf
Thompson y el misterio del Cenote Sagrado.pdfThompson y el misterio del Cenote Sagrado.pdf
Thompson y el misterio del Cenote Sagrado.pdf
 

Dernier

TRABAJO FINAL TOPOGRAFÍA COMPLETO DE LA UPC
TRABAJO FINAL TOPOGRAFÍA COMPLETO DE LA UPCTRABAJO FINAL TOPOGRAFÍA COMPLETO DE LA UPC
TRABAJO FINAL TOPOGRAFÍA COMPLETO DE LA UPCCarlosEduardoSosa2
 
TALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docx
TALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docxTALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docx
TALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docxNadiaMartnez11
 
origen y desarrollo del ensayo literario
origen y desarrollo del ensayo literarioorigen y desarrollo del ensayo literario
origen y desarrollo del ensayo literarioELIASAURELIOCHAVEZCA1
 
Plan-de-la-Patria-2019-2025- TERCER PLAN SOCIALISTA DE LA NACIÓN.pdf
Plan-de-la-Patria-2019-2025- TERCER PLAN SOCIALISTA DE LA NACIÓN.pdfPlan-de-la-Patria-2019-2025- TERCER PLAN SOCIALISTA DE LA NACIÓN.pdf
Plan-de-la-Patria-2019-2025- TERCER PLAN SOCIALISTA DE LA NACIÓN.pdfcarolinamartinezsev
 
TIENDAS MASS MINIMARKET ESTUDIO DE MERCADO
TIENDAS MASS MINIMARKET ESTUDIO DE MERCADOTIENDAS MASS MINIMARKET ESTUDIO DE MERCADO
TIENDAS MASS MINIMARKET ESTUDIO DE MERCADOPsicoterapia Holística
 
RESULTADOS DE LA EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA 2024 - ACTUALIZADA.pptx
RESULTADOS DE LA EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA 2024 - ACTUALIZADA.pptxRESULTADOS DE LA EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA 2024 - ACTUALIZADA.pptx
RESULTADOS DE LA EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA 2024 - ACTUALIZADA.pptxpvtablets2023
 
TEMA 14.DERIVACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS DEL PROCESO DE INTEGRAC...
TEMA 14.DERIVACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS DEL PROCESO DE INTEGRAC...TEMA 14.DERIVACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS DEL PROCESO DE INTEGRAC...
TEMA 14.DERIVACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS DEL PROCESO DE INTEGRAC...jlorentemartos
 
LA LITERATURA DEL BARROCO 2023-2024pptx.pptx
LA LITERATURA DEL BARROCO 2023-2024pptx.pptxLA LITERATURA DEL BARROCO 2023-2024pptx.pptx
LA LITERATURA DEL BARROCO 2023-2024pptx.pptxlclcarmen
 
Proyecto de aprendizaje dia de la madre MINT.pdf
Proyecto de aprendizaje dia de la madre MINT.pdfProyecto de aprendizaje dia de la madre MINT.pdf
Proyecto de aprendizaje dia de la madre MINT.pdfpatriciaines1993
 
semana 4 9NO Estudios sociales.pptxnnnn
semana 4  9NO Estudios sociales.pptxnnnnsemana 4  9NO Estudios sociales.pptxnnnn
semana 4 9NO Estudios sociales.pptxnnnnlitzyleovaldivieso
 
Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024
Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024
Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024Juan Martín Martín
 
Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024
Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024
Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024IES Vicent Andres Estelles
 
activ4-bloque4 transversal doctorado.pdf
activ4-bloque4 transversal doctorado.pdfactiv4-bloque4 transversal doctorado.pdf
activ4-bloque4 transversal doctorado.pdfRosabel UA
 
Análisis de los Factores Externos de la Organización.
Análisis de los Factores Externos de la Organización.Análisis de los Factores Externos de la Organización.
Análisis de los Factores Externos de la Organización.JonathanCovena1
 
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024IES Vicent Andres Estelles
 
Posición astronómica y geográfica de Europa.pptx
Posición astronómica y geográfica de Europa.pptxPosición astronómica y geográfica de Europa.pptx
Posición astronómica y geográfica de Europa.pptxBeatrizQuijano2
 
Infografía EE con pie del 2023 (3)-1.pdf
Infografía EE con pie del 2023 (3)-1.pdfInfografía EE con pie del 2023 (3)-1.pdf
Infografía EE con pie del 2023 (3)-1.pdfAlfaresbilingual
 

Dernier (20)

Lecciones 06 Esc. Sabática. Los dos testigos
Lecciones 06 Esc. Sabática. Los dos testigosLecciones 06 Esc. Sabática. Los dos testigos
Lecciones 06 Esc. Sabática. Los dos testigos
 
TRABAJO FINAL TOPOGRAFÍA COMPLETO DE LA UPC
TRABAJO FINAL TOPOGRAFÍA COMPLETO DE LA UPCTRABAJO FINAL TOPOGRAFÍA COMPLETO DE LA UPC
TRABAJO FINAL TOPOGRAFÍA COMPLETO DE LA UPC
 
TALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docx
TALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docxTALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docx
TALLER DE DEMOCRACIA Y GOBIERNO ESCOLAR-COMPETENCIAS N°3.docx
 
Tema 11. Dinámica de la hidrosfera 2024
Tema 11.  Dinámica de la hidrosfera 2024Tema 11.  Dinámica de la hidrosfera 2024
Tema 11. Dinámica de la hidrosfera 2024
 
origen y desarrollo del ensayo literario
origen y desarrollo del ensayo literarioorigen y desarrollo del ensayo literario
origen y desarrollo del ensayo literario
 
Plan-de-la-Patria-2019-2025- TERCER PLAN SOCIALISTA DE LA NACIÓN.pdf
Plan-de-la-Patria-2019-2025- TERCER PLAN SOCIALISTA DE LA NACIÓN.pdfPlan-de-la-Patria-2019-2025- TERCER PLAN SOCIALISTA DE LA NACIÓN.pdf
Plan-de-la-Patria-2019-2025- TERCER PLAN SOCIALISTA DE LA NACIÓN.pdf
 
TIENDAS MASS MINIMARKET ESTUDIO DE MERCADO
TIENDAS MASS MINIMARKET ESTUDIO DE MERCADOTIENDAS MASS MINIMARKET ESTUDIO DE MERCADO
TIENDAS MASS MINIMARKET ESTUDIO DE MERCADO
 
RESULTADOS DE LA EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA 2024 - ACTUALIZADA.pptx
RESULTADOS DE LA EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA 2024 - ACTUALIZADA.pptxRESULTADOS DE LA EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA 2024 - ACTUALIZADA.pptx
RESULTADOS DE LA EVALUACIÓN DIAGNÓSTICA 2024 - ACTUALIZADA.pptx
 
TEMA 14.DERIVACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS DEL PROCESO DE INTEGRAC...
TEMA 14.DERIVACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS DEL PROCESO DE INTEGRAC...TEMA 14.DERIVACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS DEL PROCESO DE INTEGRAC...
TEMA 14.DERIVACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS DEL PROCESO DE INTEGRAC...
 
LA LITERATURA DEL BARROCO 2023-2024pptx.pptx
LA LITERATURA DEL BARROCO 2023-2024pptx.pptxLA LITERATURA DEL BARROCO 2023-2024pptx.pptx
LA LITERATURA DEL BARROCO 2023-2024pptx.pptx
 
Proyecto de aprendizaje dia de la madre MINT.pdf
Proyecto de aprendizaje dia de la madre MINT.pdfProyecto de aprendizaje dia de la madre MINT.pdf
Proyecto de aprendizaje dia de la madre MINT.pdf
 
semana 4 9NO Estudios sociales.pptxnnnn
semana 4  9NO Estudios sociales.pptxnnnnsemana 4  9NO Estudios sociales.pptxnnnn
semana 4 9NO Estudios sociales.pptxnnnn
 
Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024
Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024
Prueba libre de Geografía para obtención título Bachillerato - 2024
 
Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024
Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024
Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024
 
Power Point E. S.: Los dos testigos.pptx
Power Point E. S.: Los dos testigos.pptxPower Point E. S.: Los dos testigos.pptx
Power Point E. S.: Los dos testigos.pptx
 
activ4-bloque4 transversal doctorado.pdf
activ4-bloque4 transversal doctorado.pdfactiv4-bloque4 transversal doctorado.pdf
activ4-bloque4 transversal doctorado.pdf
 
Análisis de los Factores Externos de la Organización.
Análisis de los Factores Externos de la Organización.Análisis de los Factores Externos de la Organización.
Análisis de los Factores Externos de la Organización.
 
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
 
Posición astronómica y geográfica de Europa.pptx
Posición astronómica y geográfica de Europa.pptxPosición astronómica y geográfica de Europa.pptx
Posición astronómica y geográfica de Europa.pptx
 
Infografía EE con pie del 2023 (3)-1.pdf
Infografía EE con pie del 2023 (3)-1.pdfInfografía EE con pie del 2023 (3)-1.pdf
Infografía EE con pie del 2023 (3)-1.pdf
 

Historia Grafica de Durango. Tomo II. De la República Restaurada al Porfirismo .pdf

  • 1. 1 Historia Gráfica de Durango Tomo II De la República restaurada al Porfirismo Antonio Avitia Hernández México, 2013
  • 2. 2
  • 3. 3 V. Los actores de la producción Hacendados y capitalistas Durante el periodo presidencial de Sebastián Lerdo de Tejada, la modificación de la propiedad territorial se agilizó con la Ley General del 31 de mayo de 1875, misma que otorgó autorización al Ejecutivo Federal para deslindar los terrenos nacionales en toda la República, por medio de particulares o compañías que se organizaran con esta finalidad1 y, merced a diversos decretos posteriores, las compañías deslindadoras adquirieron la tierra y especularon con ella obteniendo en recompensa, la tercera parte de lo negociado. El deslinde se efectuó con el mayor brío en los sectores de terreno que garantizaban las mejores ganancias con el menor esfuerzo. Así, al momento en que por la Región Lagunera se litigaba por la propiedad territorial, la inaccesible zona de las quebradas no era objeto de discordia. Sin embargo, el ejercicio del deslinde, despojó a numerosos poblados de la sierra de sus bosques y sus pastizales. En este proceso de acumulación de riqueza participaron, principalmente quienes podían disponer del dinero y las relaciones para hacerlo y en Durango, los que tradicionalmente contaban con fondos suficientes o excedentes eran casi siempre miembros del bando conservador; por lo cual hicieron a un lado su, en apariencia, rígida ideología conservadora, ante la oferta de terrenos por parte del gobierno de la dictadura liberal. “En Durango se propició un proceso de consolidación del liberalismo económico y de conservadurismo político y moral en el que los intereses de la burguesía empresarial que dominaba el país, se identifican plenamente.” 2 La acumulación terrateniente se concentró de la siguiente manera: 48% en propiedades mayores de 50,000 hectáreas, siendo la más grande la 1 VILLA GUERRERO, GUADALUPE. Durango en la era de la paz y del progreso, México, Tesis de Maestría en Historia de México, FF y L/UNAM, 1993, p. 77. 2 YEN FERNÁNDEZ, MAURICIO. “La Industria y el Comercio en Durango, durante el Porfiriato”, en: Transición, números 14 y 15, Durango. IIH, UJED, 1993, p. 27.
  • 4. 4 Hacienda de Santa Catalina del Álamo y Anexas con un total de 412.477 hectáreas. 21% en 42 propiedades de entre 20,000 y 50,000 hectáreas. 15% en 73 propiedades de entre 10,000 y 20,000 hectáreas. Por último, un 16% dividido en 257 propiedades menos de 10,000 hectáreas. 3 Según Pastor Rouaix: “A principios del siglo XX, treinta personas eran dueñas de tres millones de hectáreas (…) el que fue feudo de los Condes de San Pedro del Álamo, en tiempos de la Colonia y que subsistía casi íntegro antes de la Revolución, contaba con cuatrocientos cuarenta mil hectáreas, siendo mayor, en consecuencia que el estado de Tlaxcala y poco menos que Morelos.” 4 O dos veces el territorio de Belice. La burguesía establecida en Durango tuvo dos polos principales de concentración, uno en la capital del estado y el otro en la Región Lagunera, mientras que los terrenos de la sierra quedaban rezagados al desarrollo del capital y las inversiones. Durante la treintena porfirista, el entendimiento de facto entre el Clero y el Estado desactivó la pugna legal entre liberales y conservadores. Así, el 23 de junio de 1891, el Papa León XIII elevaba la Diócesis de Durango a la categoría de Arzobispado, con la Diócesis de Sonora, Sinaloa y Chihuahua y el Vicariato Apostólico de Baja California como sufragáneas. La paulatina recuperación económica de la Iglesia se configuró mediante las obvenciones parroquiales o pago por conceptos sacramentales, el diezmo voluntario (la décima parte, o menos, de la producción agrícola y ganadera o de cualquier otro tipo de producto o ingreso que algunos católicos, de manera voluntaria, entregan a la Iglesia para su mantenimiento), donaciones, herencias y contentas. Este último concepto consistía en una cuota que, con el objeto de obtener el perdón de su pecado de avaricia, daban aquellas personas que, aprovechando la Ley de Desamortización de Bienes del Clero, habían adquirido, a bajo costo, tierras que habían sido propiedad de la Iglesia. 5 3 ARREOLA VALENZUELA, ANTONIO. Et. Al. Summa Duranguense, Durango, Gobierno del Estado de Durango, 1979-1980, dos vols. pp. 10 a 14. 4 ROUAIX, PASTOR. La Revolución Maderista y Constitucionalista en Durango, México, De. Cultura, 1931, p. 7. 5 MÁRQUEZ PADILLA, PAZ CONSUELO. “La oposición católica”, en: Así fue la Revolución mexicana. Tomo I. Crisis del porfiriato, México, Senado de la República / SEP / INAH / CONAFE, 1985, p. 84.
  • 5. 5 Por su parte, los indígenas del estado, sin sacerdotes católicos, desarrollaban sus ritos sincréticos, a su manera, en sus oratorios y lugares sagrados lejos de la burocracia eclesiástica del Vaticano. Con respecto a la evolución del Gobierno Estatal, Guadalupe Villa nos aclara que: “En cada toma y daca por la silla presidencial, aparecían en correspondencia levantamientos en adhesión al pretendiente en turno. Después de la Guerra de Intervención y hasta el triunfo de Tuxtepec, la práctica en la entidad siguió siendo la misma. Finalmente el general Donato Guerra designó gobernador al coronel Juan Manuel Flores, quien desde 1871, durante la Revuelta de La Noria en Durango, había tomado las armas en favor de Díaz. Cuando en febrero de 1877, los generales Naranjo y Jerónimo Treviño ocuparon la ciudad de Durango, Flores asumió el gobierno provisionalmente y electo después para el periodo que terminaría en 1880. De ahí en adelante la suerte de Flores siguió el mismo derrotero que la de Porfirio Díaz. Las reformas constitucionales que permitieron las sucesivas reelecciones del presidente, fueron las mismas que en Durango permitieron las de Flores, con la sola excepción de Manuel González en el Ejecutivo y de Francisco Gómez Palacio en la gubernatura estatal. Sólo la muerte separó a Flores del poder6 En las postrimerías del siglo XIX sólo el bandidaje social de Heraclio Bernal e Ignacio Parra cuestionó la legitimidad del Gobierno Estatal. Los litigios entre terratenientes; por tierra o por aguas se multiplicaron. Las familias oligárquicas que se constituyeron en los grupos inversionistas predominantes de la ciudad de Durango ostentaban los apellidos de: Asúnsolo, Bracho, Damm, Drünert, Flores, González Saravia, Gurza, Hildebrand, López Negrete, Manzanera y Stahlknecht, entre otros; mientras que, en la Región Lagunera, destacaban los apellidos Lavín, Brittingham, Hernández, Siller, Torres, Martínez, Araura y Colvian y Feliciano Colvian, los De la Peña y los Sariñana. Es de notar que hubo una afluencia de capitalistas extranjeros que se establecieron en Durango, procedentes de países como: Alemania, Estados Unidos, Francia, Inglaterra, China, España y el Imperio Otomano. 6 VILLA GUERRERO, GUADALUPE. Durango en la era de la paz y el progreso, México, Tesis de Maestría en Historia de México, Facultad de Filosofía y Letras, UNAM, 1993, p. 130.
  • 6. 6 Granos, textiles, jabones, dinamita, cebo, lana, harinas, vid, ganado, minerales y productos forestales fueron algunos de los productos que, desde los últimos años del siglo XIX, comenzaron a salir al mercado en los vagones de ferrocarril. Algunos negocios agrícolas, minerales e industriales, tenían tal capacidad de producción que el tendido de vías férreas hasta el interior mismo de los centros de trabajo era costeable. Sin embargo, el desarrollo se centró en enclaves bien determinados y grandes extensiones del territorio, sobre todo del serrano estatal quedaron fuera de los planes contratados del tendido de vías.
  • 7. 7 Sentado, el hacendado y gobernador de Durango, Juan Nepomuceno Francisco Flores Alcalde, rodeado de su familia en 1866 (circa) El hacendado y gobernador de Durango, Juan Nepomuceno Francisco Flores Alcalde, en los 1900’s
  • 8. 8 Busto del hacendado Juan Nepomuceno Flores y Alcalde, 1860’s
  • 9. 9 Dos imágenes de casas del empresario Juan Nepomuceno Flores
  • 10. 10 Portada de los títulos de propiedad de una casa del hacendado Juan Nepomuceno Flores, en la ciudad de Durango, 1865
  • 11. 11 Empresario y cónsul alemán Maximiliano Damm, en su juventud, 1870’s El mismo Maximiliano Damm, en su vejez, 1890’s
  • 12. 12 La señora Josefa Palacio de Damm, 1870’s Santiago Lavín Cuadra, capitalista y terrateniente lagunero, 1870’s
  • 13. 13 Otra imagen de Santiago Lavín Cuadra, 1900 (circa) Gilberto Lavín, hacendado y empresario de La Laguna, 1900 (circa)
  • 14. 14 Empresarios españoles en la Hacienda de Pamplona, Tlahualilo, Durango, 1893 John F. Brittingham, capitalista estadounidense radicado en La Región Lagunera, propietario de la Jabonera La Esperanza, 1900 (circa)
  • 15. 15 Firma y foto del empresario Ventura González Sarabia y Murua, 1905 Hermanos González Saravia y Murua, 1900’s
  • 16. 16 Familia de Enrique González Sarabia y Murua, 1900’s Roberto Windish socio fundador de la Fábrica de hilados y Tejidos de La Constancia, 1903
  • 17. 17 Luis Carlos Bosé, propietario de la Ferretería Alemana, 1900’s Familia Bracho Zuloaga, 1900’s
  • 18. 18 Otra imagen de la Familia Bracho Zuloaga, 1900’s Otra imagen de la Familia Bracho Zuloaga
  • 19. 19 Julio Curbelo terrateniente durangueño, 1900 (circa) Cipriano Guerrero, propietario de la planta de energía eléctrica de la ciudad de Durango, 1900’s
  • 20. 20 Pedro Torres Saldaña, jefe de una poderosa familia durangueña, 1900’s Empresario Felipe Pérez Gavilán, 1900’s
  • 21. 21 Familia Pérez Gavilán, 1900’s Familia Martínez del Río, 1900’s
  • 22. 22 Miembros de la Colonia Francesa en Durango Familia Jurado en la Hacienda de Canutillo
  • 23. 23 Policarpo Martínez, sentado, 1900’s Tertulia en la casa del Sr, Jackson, 1900’s
  • 24. 24 Damas durangueñas en corrida de toros de beneficencia, 1890’s Día de campo en la Hacienda de La Tinaja, 1900’s
  • 25. 25 Libro sobre las familias de empresarios durangueños del porfirismo
  • 26. 26 Empresas y concesiones mineras durangueñas en el porfirismo Mapa de las Haciendas de Beneficio y Fundiciones en el Estado, 1910
  • 27. 27 20 acciones de la Nuestra Señora de Guadalupe Silver Co. Acción de la Mapimí Mining Company emitida en 1882
  • 28. 28
  • 29. 29 Tres imágenes de la mina La Valenciana, en el Mineral de Mapimí, operado por la Semelting Works of The Durango Mapimí Mining Company, 1876 y 1880 (circa) Cerro de La Bufa, en Mapimí
  • 30. 30 Mapimí y el Cerro de La Bufa
  • 31. 31
  • 32. 32
  • 33. 33 Seis imágenes de la American Smelting and Refining Company, ASARCO, de Velardeña, municipio de Cuencamé, en las postrimerías del siglo XIX y principios del XX Ruinas del Mineral de Velardeña, municipio de Cuencamé
  • 34. 34
  • 35. 35
  • 36. 36
  • 37. 37
  • 38. 38
  • 39. 39 Ocho imágenes del mineral de Ojuela, con su famoso puente y dos de su fundición, concesionado a The Peñoles Mining Company at Mapimí, en las postrimerías del siglo XIX y principios del XX Ruinas del Mineral de Molinos, municipio de Topia
  • 40. 40 Plano alemán del Cerro de Mercado, 1878 Cerro de Mercado a principios del siglo XX
  • 41. 41 Presa adyacente a la fundición de La Ferrería de Flores, 1900’s Presa de la Ferrería de Piedras Azules, 1900’s
  • 42. 42 Ruinas de la fundición de La Ferrería de Piedras Azules
  • 43. 43
  • 44. 44 Cinco imágenes The Mexican Iron Mountain. Fundición del Cerro de Mercado
  • 45. 45 Mapa de concesionarios del Cerro de Mercado en 1905 Portada de libro sobre el Cerro de Mercado
  • 46. 46 Plano de la mina La Candelaria en San Dimas, 1900’s Dibujo de la Hacienda de Guamúchiles, San Dimas, Durango, 1873
  • 47. 47 Dos imágenes del poblado de San Dimas, a principios del siglo XX
  • 48. 48 Lingote de metal extraído del Mineral de San Dimas Hecatombe en el mineral de San Dimas, Durango, grabado de José Guadalupe Posada, 1900’s (circa)
  • 49. 49 Acción financiera del Mineral de Avino, 1897 Mineral de Avino, municipio de Topia, en su momento, el tajo abierto más grande del mundo, 1900’s
  • 50. 50 Mineral de Promontorio en el municipio de El Oro, 1900’s Estatutos de la Compañía Minera de San Andrés de la Sierra, 1893
  • 51. 51 Acción de la Compañía Minera Washington, del Mineral de Ocampo, municipio de San Juan del Río Membrete de Hacienda de Beneficio de Metales El Cazador, en San Juan de Guadalupe, 1900’s
  • 52. 52 Industrias en los llamados tiempos de la paz y el progreso La Industrial del Nazas, Departamento de Telares, 1900’s Edifico de la Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia de El Tunal, 1900’s
  • 53. 53 Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia de El Tunal, 1900’s
  • 54. 54 Dos imágenes del Río Tunal, como fuerza motriz de la Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia Panorámica de la Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia, de El Tunal, por Leon Trousset, 1884
  • 55. 55 Fábrica de Hilados y Tejidos La Providencia de El Tunal, vista desde El Pueblito, por León Trousset, 1884 Publicidad de Fábrica del Tunal, 1900’s
  • 56. 56 Primera máquina generadora de energía eléctrica en la ciudad de Durango, 1900's Mapa de la Región Lagunera 1893
  • 57. 57 Mapa de las Haciendas Laguneras, 1890 Fábrica de Hilados y Tejidos La Amistad, de Prince, Torres and Prince, en Lerdo,
  • 58. 58 Fábrica de Hilados y Tejidos La Amistad, en Gómez Palacio, propiedad de la familia Torres Saldaña, 1900’s Oficina de la Fábrica La Amistad, en Gómez Palacio, 1900’s
  • 59. 59 Fábrica de Hilados y Tejidos La Constancia, en el municipio de Nombre de Dios, 1890’s Despepitadora de algodón en Santa Clara, municipio de Gómez Palacio, 1900’s
  • 60. 60 Compañía Industrial Jabonera La Esperanza de La Laguna, 1900’s Entrada principal a la Jabonera La Esperanza de La Laguna, 1900’s
  • 61. 61 Membrete de la fábrica de jabones La Esperanza, 1900’s Interior de La Jabonera La Esperanza, en Gómez Palacio, 1900’s
  • 62. 62 Acción financiera de La Jabonera La Esperanza Casa principal a la Jabonera La Esperanza, 1900’s
  • 63. 63 Panorámica de la Jabonera La Esperanza de Gómez Palacio Molino el Brillante en Gómez Palacio, 1900’s
  • 64. 64 Fábrica de explosivos de Dinamita, municipio de Gómez Palacio, fundada por John Brittingham, 1900’s Fábrica de glicerina en el poblado Dinamita, municipio de Gómez Palacio, 1900’s
  • 65. 65 Planta de energía eléctrica en Gómez Palacio, 1900’s Publicidad de Vinícola Noé, municipio de Gómez Palacio, 1906
  • 66. 66 Membrete de la Tlahualilo Company, 1900’s Mapa de la Hacienda de San Fernando, de la Compañía Agrícola de Tlahualilo, 1904 1904
  • 67. 67 Mapa de los Terrenos de la Tlahualilo Company, 1896
  • 68. 68 Croquis de la ubicación de las presas sobre la corriente de Río Nazas en Tlahualilo, 1909 Ruinas de las primeras guayuleras de Gómez Palacio, 1900’s
  • 69. 69 Transporte de madera de los aserraderos de la Sierra, 1900’s Membrete de la Compañía Mantequera de Gómez Palacio, 1900’s
  • 70. 70 Membrete de empresa ganadera Torres Hermanos, 1900’s Membrete de Gilberto Lavín en Noé, municipio de Gómez Palacio, 1900’s
  • 71. 71 Publicidad de la compañía Vinícola de Noé. 1900’s Lista de precios de la Compañía Vinícola Noé, 1900’s
  • 72. 72 Corralón de la Compañía Vinícola El Vergel en Gómez Palacio, 1900’s Una calle entre viñedos y platanar de la Compañía Vinícola El Vergel en Gómez Palacio, 1900’s
  • 73. 73 Publicidad de la empresa de Oscar Francke, en Gómez Palacio, 1897 Libro sobre las empresas durangueñas en el siglo XIX y principios del XX
  • 74. 74 Las haciendas de los conservadores liberales Plano de un denuncio de terreno baldío, en el municipio de Cuencamé, 1907
  • 75. 75 Plano de terrenos de Melchor, municipio de Santiago Papasquiaro, en litigio, 1904 Haciendas con más de 250 hectáreas irrigables en el estado de Durango
  • 76. 76 Haciendas con más de 250 hectáreas irrigables en la cuenca del Río Tunal Haciendas laguneras más productivas
  • 77. 77 Mapa de la Hacienda de Santa Catalina del Álamo y Anexas, 1900’s
  • 78. 78 Hacienda de La Sauceda en el municipio de Canatlán Hacienda de La Sauceda en el municipio de Canatlán, 1890
  • 79. 79 Hacienda de San Francisco Javier de Lajas, municipio de Coneto de Comonfort Hacienda de Pedriceña, municipio de Cuencamé
  • 80. 80 Ex Hacienda de La Ferrería, municipio de Durango
  • 81. 81 Tres imágenes de la Hacienda de El Mortero, municipio de Súchil
  • 82. 82 Capilla de la Hacienda de El Mortero, municipio de Súchil
  • 83. 83 Dos imágenes de las ruinas de la Ex Hacienda de La Concepción, en el municipio de Súchil Región algodonera de La Laguna, 1876
  • 84. 84 Hacienda de la Compañía Agrícola Tlahualilo
  • 85. 85 Foto y acuarela de la Casa de la Compañía Colonizadora de Tlahualilo, Durango, 1897, en Torreón, Coahuila Canal de la Compañía Agrícola Tlahualilo, 1907
  • 86. 86 Acueducto en la Región Lagunera, 1900’s Las compuertas de canal cambian el curso de la corriente del Río Nazas en Tlahualilo, 1900’s
  • 87. 87 Canal de irrigación en Tlahualilo Campos de algodón de La Región Lagunera, 1900’s
  • 88. 88 Ruinas de la Hacienda de Tlahualilo Casco de la Hacienda de Tlahualilo en los años setentas del siglo XX
  • 89. 89 Hacienda de Palmitos de Arriba, municipio de Rodeo Hacienda de San Salvador de la Horta, municipio de Rodeo
  • 90. 90
  • 91. 91 Tres imágenes del casco de la Hacienda de San José de Ramos, municipio de El Oro
  • 92. 92 Dos imágenes de la Hacienda de Santa Catalina del Álamo Hacienda de Zaragoza en La Laguna
  • 93. 93
  • 94. 94 Tres imágenes de la Hacienda de La Flor en el municipio de Nazas Fortín de la Hacienda de La Flor, municipio de Nazas
  • 95. 95 Dos imágenes de las ruinas de la Hacienda del Sobaco, municipio de Nazas
  • 96. 96 Dos imágenes de la Hacienda del Conejo, municipio de Nazas
  • 97. 97 Escudo de la Hacienda del Conejo, municipio de Nazas Acueducto de la Ex Hacienda de El Palmito
  • 98. 98 Ruinas de la Hacienda de La Bolsa de Fierro, municipio de Nombre de Dios Templo de la Ex Hacienda de La Bolsa de Fierro, municipio de Nombre de Dios
  • 99. 99 Acueducto de la Ex Hacienda de La Ochoa, municipio de Poanas Ruinas de la Hacienda de Juana Guerra, en el municipio de Nombre de Dios
  • 100. 100
  • 101. 101 Tres imágenes del Templo de San Miguel Arcángel, en la Ex Hacienda de Guatimapé, municipio de Nuevo Ideal Hacienda de Guatimapé, municipio de Canatlán, acuarela por Paul Fisher, 1893
  • 102. 102 Hacienda de Dolores, municipio de Durango Hacienda de Dolores, municipio de Durango. Acuarela de José Antonio Treviño
  • 103. 103 Hacienda de San Diego de Navacoyán, municipio de Durango. Acuarela de José Antonio Treviño Fuentes, 1782 Casco de la Hacienda de San Lorenzo del Aire, municipio de Durango
  • 104. 104 Casco de la Hacienda de La Ferrería, municipio de Durango Hacienda de La Ferrería, municipio de Durango (restaurada)
  • 105. 105 Entrada principal de la Hacienda de La Ferrería, municipio de Durango Patio de la Hacienda La Mimbrera, municipio de Hidalgo
  • 106. 106 Interior de la Hacienda de Navacoyán, municipio de Durango Hacienda de Navacoyán, municipio de Durango
  • 107. 107 Puente del diablo en Navacoyán, municipio de Durango, 1900’s Interior de la Casa Grande La Floreña, hoy derruida, de la Hacienda de Aviléz, hoy Ciudad Juárez
  • 108. 108 Dos imágenes de la Hacienda de San Isidro de la Punta, municipio de Nombre de Dios
  • 109. 109 Casa grande de la Hacienda de La Punta, municipio de Nombre de Dios Capilla de la Hacienda de La Punta, municipio de Nombre de Dios
  • 110. 110 Dos imágenes de la Hacienda de El Saucillo, municipio de Guadalupe Victoria
  • 111. 111 Publicidad de la Hacienda de El Saucillo, municipio de Guadalupe Victoria Ruinas de la Ex Hacienda Villahermosa, municipio de Nuevo Ideal
  • 112. 112 Ruinas de la Hacienda de Torreón de Cañas, municipio de Ocampo Capilla de la Ex Hacienda de Guadalupe, municipio de Peñón Blanco
  • 113. 113 Ex Hacienda de Guadalupe, municipio de Peñón Blanco Ruinas de la Hacienda de Belén, municipio de Peñón Blanco
  • 114. 114 Capilla de la Ex Hacienda de Labor de Guadalupe, municipio de Durango Entrada a la Ex Hacienda Labor de Guadalupe, municipio de Durango
  • 115. 115 Dos imágenes de la Hacienda de San Mateo de La Zarca, municipio de Hidalgo
  • 116. 116 Hacienda de Santa Lucía, municipio de Canatlán Hacienda de San Lorenzo y Santiago de Tetillas, hoy Santiago Bayacora, municipio de Durango
  • 117. 117 Hacienda de Huichapa, municipio de Rodeo Hacienda de Menores de Abajo del Palmito, municipio de San Juan del Río, 1890’s
  • 118. 118 Templo de la Ex Hacienda de Menores de abajo, municipio de San Juan del Río Ruinas del la Ex Hacienda de Menores, municipio de San Juan del Río
  • 119. 119 Ex Hacienda de Menores, municipio de San Juan del Río
  • 120. 120 Los casi invisibles peones durangueños El proyecto de colonización afroamericana en Tlahualilo, en 1895 Promovido espiritualmente por el obispo Henry M. Turner de la Iglesia Metodista Episcopal Africana quien, en sus prédicas, azuzaba a la colonización de los afroamericanos estadounidenses recién liberados a otras partes de la tierra, en diciembre de 1894, William H. Ellis, un agente contratista afroamericano estableció contacto y trato con la Agricultural, Industrial and Colonization of Tlahualilo Company Limited, de Durango, para el envío de varios convoyes con remesas de familias de afroamericanas para trabajar en los campos de algodón de la Tlahualilo Company. Hechos todos los arreglos previos, en febrero de 1895, 100 familias viajaban de Alabama y Georgia a Tlahualilo con las promesas de $20 dólares, implementos agrícolas, casa y comida, así como $6 dólares por familia, en los primeros tres meses. El compromiso de los negros era sembrar sesenta acres de tierra; 40 de algodón, 15 de maíz y 5 como hortaliza. La compañía se quedaría con el 40% del algodón, los afroamericanos con el 50 y Ellis con el 10. Algo similar sucedería con el maíz, aunque la hortaliza sería en su totalidad sería para los colonos. El contrato tendría una duración de 5 años. 817 fueron los colonos; hombres, mujeres y niños afroamericanos, que llegaron a un lugar cerca de Mapimí, alejado de la vía del ferrocarril y de toda civilización. Al llegar a su nuevo hogar se encontraron con que nevaba y las pocas pequeñas casas de adobe no tenían puertas y muchas, tampoco techo. Entre los hambrientos y cansados colonos, pronto se declaró la epidemia de viruela, mientras eran asaltados por los bandidos y soldados mexicanos y oprimidos por las guardias blancas de la Tlahualilo Company. Dos colonos escaparon y lograron llegar a Chihuahua, en donde se pusieron en contacto con las autoridades consulares estadounidenses. Se inició una investigación que involucró a los gobiernos mexicano y estadounidense y finalmente para septiembre y octubre de 1895, los últimos colonos del fallido proyecto retornaban a su tierra en el Ferrocarril Internacional Mexicano.
  • 121. 121 Esta terrible historia ha sido mayormente documentada y narrada por los investigadores afroamericanos estadounidenses. Recorte de periódico estadounidense sobre El proyecto de colonización negro en Tlahualilo, en 1895
  • 122. 122 Obispo Henry M. Turner, de la Iglesia Metodista Episcopal Africana, promotor de la colonización de los afroamericanos a otras latitudes del planeta
  • 123. 123 Los peones laguneros Peones laguneros haciendo pacas de algodón, 1900’s Las pacas de algodón listas para ser embarcadas en el ferrocarril, 1900’s
  • 124. 124 Bullicio de la gente durante las bonanzas, o temporadas de pizcas de algodón, en La Laguna, 1900’s En promedio, cada peón recogía 150 kilos de algodón
  • 125. 125 Cuevas que habitaban los pizcadores de algodón en la época de los latifundios en la Región Lagunera, 1900’s Hombres, mujeres y niños en la pizca de algodón de La Laguna, durante la bonanza, 1900’s
  • 126. 126 Pizcadores de viñedos en la Región Lagunera Transporte de las uvas en vitivinícola de la Región Lagunera
  • 127. 127 Peones abriendo canal de irrigación de Tlahualilo, sobre el Nazas, 1900’s Tractor de vapor utilizado para abrir un canal de irrigación en Tlahualilo, sobre el Río Nazas, 1900’s
  • 128. 128 Habitaciones para los peones bonanceros y sus familias en La Laguna, 1900’s Guardias blancas de los hacendados de La Laguna, 1900’s
  • 129. 129 Otro contingente de guardias blancas de los hacendados de La Laguna, 1900’s Libro sobre la producción del algodón en la Región Lagunera durante la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX
  • 130. 130 Las espinas del guayule El más famoso de los litigios de comuneros contra latifundistas, fue el que protagonizaron los pobladores de San Pedro y Santiago Ocuila, en el municipio de Cuencamé. Los ocuilas se ganaban la vida labrando la tierra y, dadas sus necesidades de terreno, se extendieron hacia unos parajes con manantiales y pequeños regadíos heredados por sus ancestros. Desde la época colonial el rey Carlos V había reconocido la propiedad de los territorios a los ocuilas, y los miembros de la comunidad guardaban con mucho cuidado los documentos que legalizaban su propiedad. Sin embargo, gracias a la oferta de territorios baldíos que suscitó la aplicación de las Leyes de Reforma durante el porfirismo, por parte de las Compañías deslindadoras, la familia López Negrete logró que los terrenos ocuilas en cuestión le fueran adjudicados como porción de su gran hacienda de Sombreretillo de Campa. Durante algún tiempo no hubo fricciones entre los campesinos ocuilas y los latifundistas López Negrete. A principios del siglo XX la invención del automóvil abrió la demanda mundial de materias primas para las fábricas del nuevo y rápidamente desarrollado medio de transporte. El hule, como materia prima indispensable para la fabricación de neumáticos, inició la explotación industrial de los vegetales huleros, como el caucho y el guayule y éstos vertiginosamente adquirieron precios de mercado que hacían costeable su explotación. El guayule, cuyo nombre científico es Parthenium argentatum, era usado por los indígenas para manufacturar pelotas de hule macizo, las que a su vez eran usadas en sus originales juegos rituales y los niños masticaban los tallos de guayule a manera de goma de mascar. En el este del estado de Durango se localizaron grandes cantidades de guayule silvestre en los municipios de Ma- pimí, Cuencamé y San Juan de Guadalupe; en algunos lugares el arbustillo guayulero alcanzaba entre 70 centímetros y un metro de altura y su color variaba de acuerdo con la región, aunque se debe mencionar el caso de que el
  • 131. 131 guayule azuloso y azul es el que produce mayor cantidad de hule. De manera coincidente, el guayule azul crecía más en la zona guayulera de Sombreretillo, Terreno, Pasaje y la Cuesta de la Culebra, cerca de Pedriceña, abarcando la parte de la tierra de cultivo de los ocuilas. Desde 1887 se inició la explotación del guayule en la industria de los neumáticos y, a principios del siglo XX, en la ciudad de Torreón, Coahuila, se había establecido una planta beneficiadora de guayule cuya razón social era Continental Rubber Company, misma que comenzó a tratar en sus prensas el guayule del semidesierto y los llanos de los ocuilas. Así, los López Negrete, en especial don Laureano López Negrete y doña Petra Salcido viuda de López Negrete, en el año de 1905 iniciaron los autos judiciales para la legalización del despojo de los terrenos de los ocuilas, contando con el apoyo de la fuerza pública, proporcionada por el Gobierno del Estado. Al intentar recuperar sus labores, los ocuilas fueron arrojados de su propiedad de manera inmisericorde, por medio del uso de la fuerza; en la acción, las casas de los campesinos fueron quemadas y sus escasos bienes pasaron violentamente a cambiar de propietario. Para aplacar la posible resistencia, un destacamento de fuerzas federales fue acantonado en el lugar como salvaguarda de los López Negrete. A pesar del laudo oficial a favor de la viuda de López Negrete, los ocuilas continuaron el litigio, incluso ante el presidente de la República don Porfirio Díaz Mori, demandando la restitución de sus terrenos. Sin embargo, sólo recibieron el silencio como única respuesta a sus peticiones, mientras que en la ciudad de Torreón, el capitalista John D. Rockefeller adquiría la Continental Rubber, con la promesa oficial y de los hacendados de recibir constantemente el surtido indispensable de materia prima para las prensas de las guayuleras. Para calmar los ánimos y en aparente actitud conciliadora, don Laureano López Negrete invitó a los representantes de los ocuilas a tener una plática con él, el 20 de enero de 1909, a la conferencia acudieron los vecinos Ramón Saldaña Hernández, Jesús Ávila, Francisco Saldaña Hernández y Martín Martínez, todos ellos desarmados, como lo había condicionado el hacendado. Al llegar al lugar de la cita, la traición personificada en las carabinas de la Acordada de Octaviano Meraz segó la vida de los dirigentes ocuilas, echándole
  • 132. 132 más leña verde a una lumbre que apenas soltaba el humo blanco del odio y la indignación popular, haciendo de los ocuileños, los mejores guerreros de la Revolución, con su jefe Calixto Contreras. En 1910, el corte y procesamiento del guayule daba empleo a 11 mil trabajadores, cuya labor y salario dependían del estado general de los negocios industriales de Torreón y Gómez Palacio. El litigio del guayule sobrevivió a la Revolución, y las bonanzas de la Continental Rubber, se evidenciaron con los altos índices de producción como el de 1937 con 19, 743,517 toneladas y el de 1942 con 55, 727,554 toneladas. Durante la Segunda Guerra Mundial, el cambio de materia prima de las plantas hulíferas por los hidrocarburos, para la fabricación de los neumáticos, no terminó con el litigio judicial por una fracción del territorio ocuileño y el pleito en los tribunales se prolongaría hasta la novena década del silgo XX. En las últimas décadas del siglo XX, la Revolución sexual produjo una nueva alza en la demanda del guayule, esta vez para la producción de látex, materia prima de los condones para prevenir las enfermedades de Transmisión sexual y el VIH- SIDA.
  • 133. 133 Tres imágenes de plantas de guayule
  • 134. 134 Un peón haciendo pacas de guayule, 1900’s Pila de pacas de guayule, 1900’s
  • 135. 135 Transporte de pacas de guayule, 1900’s Carta abierta de los agraviados ocuiltecos a Porfirio Díaz, 1901
  • 136. 136 Sello de los pueblos unidos de Santiago y San Pedro Ocuila
  • 137. 137 Peones de los aserraderos y de las haciendas agrícolas
  • 138. 138 Tres imágenes de los primeros transportes de madera en El Salto, Pueblo Nuevo, 1900’s Peones de hacienda en labores del campo, 1900’s
  • 139. 139 Algunas monedas, fichas y billetes internos de las empresas durangueñas Para efectuar los pagos a los trabajadores y controlar el consumo, deudas e ingresos de los peones, mediante las tiendas de raya, o como vales para transferir fondos y pagos a proveedores, algunas empresas: agrícolas, industriales, madereras y mineras, acuñaron moneda propia e imprimieron papel moneda, práctica muy común en la época, que incrementaba las ganancias de los capitalistas al recibir lo que pagaban a sus trabajadores, en sus propios comercios, a los precios que ellos mismos imponían. Tlacos, pilones y vales interiores de diversas empresas durangueñas
  • 140. 140 Vales por un real de la Negociación de Minas de Topia
  • 141. 141 Anverso y reverso de un peso en papel moneda de La Fábrica del Tunal, sin fecha Anverso de billete de veinticinco centavos de La Fábrica del Tunal, 1884
  • 142. 142 Anverso de billete de diez centavos de La Fábrica del Tunal 1884
  • 143. 143 Anverso y reverso de billete de cincuenta centavos de La Fábrica del Tunal, 1884
  • 144. 144
  • 145. 145 VI. Gobierno, poder y represión El Estado de Durango Mapografía estatal Carta geográfica del estado de Durango, 1897
  • 146. 146 Mapa de la división política del estado en partidos, 1898
  • 147. 147 Carta geográfica del Estado de Durango, 1899
  • 148. 148 Mapa del Estado de Durango, 1900 (circa)
  • 149. 149 Mapa de la hidrografía del estado de Durango, 1900
  • 150. 150 Mapa de la división política del Estado de Durango en el porfirismo, 1900’s
  • 151. 151 Mapa de la división política del Estado de Durango, 1905
  • 152. 152
  • 153. 153 Gobernadores de Durango Lista de gobernadores de 1868 a 1911 1867 a 1868, 1880 a 1882, 1883. Francisco Gómez Palacio 1868 a 1869. Manuel Balda 1869. José María Pereyra 1868 a 1871, 1872 a 1874, 1874 a 1875, 1875 a 1876. Juan Hernández y Marín 1871 a 1872. Tomás Borrego 1872. Florentino Carrillo 1874. José de la Bárcena 1875. Carlos Bravo 1876 a 1877. Carlos Fuero 1877 a 1897. Gobernador constitucional, con varios sustitutos interinos. Juan Manuel Flores 1882 a 1897, varias veces interino. Juan Ignacio Zubiría del Campo 1883 a 1884. Abel Pereyra 1884 a 1897, varias veces interino. Leonardo de la Parra 1897 a 1911, varias veces interino. Cipriano Guerrero 1897 a 1900. Leandro Fernández 1900 a 1905. Juan Santa Marina 1905 a 1911. Esteban Fernández
  • 154. 154 Dos imágenes de Francisco Gómez Palacio, gobernador de Durango de 1867 a 1868
  • 155. 155 Caricatura de Francisco Gómez Palacio, aparecida en un periódico durangueño de la época Libro sobre Francisco Gómez Palacio
  • 156. 156 Juan Hernández y Martín, gobernador de Durango de 1868 a 1871 Monumento a Juan Hernández y Marín en la Escuela Normal del Estado
  • 157. 157 José María Pereyra. Republicano y gobernador en 1869 Manuel Balda García. Gobernador interino entre 1868 y 1869
  • 158. 158 Dos imágenes de Tomás Borrego, gobernador de 1871 a 1872
  • 159. 159 José de la Bárcena, gobernador en 1874 Carlos Bravo. Gobernador interino en 1875
  • 160. 160 General Carlos Fuero. Gobernador de 1876 a 1877
  • 161. 161 Dos imágenes de Juan Manuel Flores. Gobernó de manera interina en 1880 y en propiedad de 1884 a 1897 Juan Ignacio Zubiría del Campo, gobernador de 1882 a 1883
  • 162. 162 Leonardo de la Parra. Gobernador interino en varias ocasiones, entre 1884 y 1997 Leandro Fernández, gobernador de 1897 a 190
  • 163. 163 Arco triunfal de bienvenida al gobernador Leandro Fernández en la ciudad de Durango, 1900 (circa) Juan Santa Marina, gobernador de 1900 a 1905
  • 165. 165 Los cuerpos de seguridad y represión Cuerpo de Rurales o Acordada de Gómez Palacio Cuartel de la gendarmería montada de Santiago Papasquiaro, 1910
  • 166. 166
  • 167. 167
  • 168. 168 Cinco imágenes del Cuartel Juárez de Caballería del Ejército Federal en la ciudad de Durango Sello de la Inspección de Vigilancia de Mujeres Públicas de Durango, 1880’s
  • 169. 169 Bernardo Saldaña En los meses de septiembre y diciembre de 1858, el entonces Gobernador de Coahuila y Nuevo León, General Santiago Vidaurri, ordenó al ejército de esa entidad (en aquel entonces Coahuila y Nuevo León formaban un solo estado) que se apoderaran de la población de San Juan de Guadalupe, para anexarla al territorio de su jurisdicción. Bernardo, nativo de esa población y entonces jefe político del partido que tenía la cabecera en ese lugar, y en base a su condición de autoridad, al frente de un grupo de vecinos armados, rechazó pretendida invasión del Gobierno del Estado de Zacatecas que con diversos pretextos intento apoderarse de la ciudad y territorios del partido de San Juan de Guadalupe. No solamente se manifestó como un valiente duranguense, defensor de la soberanía del estado, sino fue también un gran impulsor del desarrollo cultural de su pueblo ya que, siendo un rico minero que explotó con buena suerte las minas de la Sierra de Ramírez en ese partido, había acumulado una gran fortuna, lo cual le permitió de su peculio propio fundar a mediados del siglo XIX, la primera escuela primaria que se estableció en San Juan de Guadalupe, contrató maestros de la ciudad de Durango, construyó un edificio escolar y puso a funcionar la escuela de primeras letras que por primera vez abrió sus puertas en 1859. Saldaña también defendió a su municipio del ataque de los bandidos Tulises, comandados por el jefe conservador Domingo Cajén, en 1859. Como minero, Saldaña progresó con la explotación de minerales en la Sierra de Ramírez y es recordado como héroe municipal en San Juan de Guadalupe. En medio de intrigas políticas municipales, Saldaña falleció en 29 de abril de 1903.
  • 170. 170 1890's. Bernardo Saldaña. Jefe del Partido de San Juan de Guadalupe, 1890’s Membrete de Hacienda de Beneficio de Metales. el Cazador, en San Juan de Guadalupe, propiedad de Bernardo Saldaña, 1900’s
  • 171. 171 Funerales de Bernardo Saldaña. Jefe del Partido de San Juan de Guadalupe, 1903
  • 172. 172 Los bandidos de la Sierra Heraclio Bernal Zazueta, también conocido como El Rayo de Sinaloa, de acuerdo con Nicole Girón nació en el año de 1855, en el rancho de El Chaco, municipio de San Ignacio, Sinaloa, aunque otras fuentes afirman que fue oriundo de Santiago Papasquiaro, Durango. Durante la infancia de Heraclio, la familia Bernal recorrió los minerales de la zona limítrofe de los estados de Durango y Sinaloa. En ese contexto, el niño Heraclio pudo tomar estudios elementales con el profesor Bonilla, en Guadalupe de los Reyes, Sinaloa. Cuando Heraclio Bernal contaba los dieciséis años de edad, él y su familia se vieron involucrados, a favor de Benito Juárez, contra los adictos al Plan de la Noria y, por defender los intereses de los trabajadores de las minas, Heraclio Bernal fue acusado del robo de unas barras de hierro, por lo que fue perseguido atendiendo las demandas de los propietarios de los reales de minas, quienes propiciaron que el jefe político Epifanio Lomelí, ordenara que la Policía Rural o acordada actuara en contra de Bernal. Ante el asedio, Heraclio Bernal inició su carrera de bandido y, en el año de 1876, el mineral de San Vicente, de capital estadounidense, fue el blanco del asalto del nuevo bandolero. Después de esta acción, Bernal fue aprehendido y encarcelado en el Cuartel de Artillería de Mazatlán, Sinaloa. En noviembre de 1876, el general Jesús Ramírez Terrón se levantó en armas apoyando al Plan de Tuxtepec, adherido a la facción de José María Iglesias. Sin embargo, en el mes de diciembre, Ramírez Terrón defeccionó y se pasó al bando de los porfiristas y su tropa se transformó en la fuerza militar de Porfirio Díaz en Sinaloa. Al entrar al puerto de Mazatlán, Ramírez Terrón ordenó la liberación de Heraclio Bernal y le dio el grado de teniente. Sin mayores compromisos con Ramírez Terrón, el liberado Bernal volvió a su vida de asaltante, atacando los minerales, diligencias y casas de funcionarios públicos y hombres ricos de la región de Guadalupe de los Reyes, en donde su principal apoyo logístico
  • 173. 173 fueron los trabajadores mineros, a quienes, de vez en cuando, daba parte de los botines obtenidos en las correrías. Aunque el principal objetivo de los asaltos de Bernal era la obtención de armas, parque y dinero. Los hombres que conformaban la banda de Bernal eran en su mayoría nativos de la Sierra Madre Occidental de los estados de Durango y Sinaloa. Ellos, al participar por periodos en la gavilla de Bernal, encontraban la manera de suplir la falta de trabajo y la miseria. Para esa época, Bernal estableció su cuartel en El Maguey, municipio de San Dimas, Durango, lugar encubierto por las inaccesibles quebradas de la sierra. En 1879, Heraclio Bernal apoyó la rebelión antiporfirista del general Jesús Ramírez Terrón quien, el 2 de noviembre de 1879, lanzó el Plan de Copala, en el que se exigía la aplicación estricta de la Constitución de 1857 y se desconocía el gobierno de Porfirio Díaz. Durante la rebelión de Ramírez Terrón, Bernal y su gente ocuparon la ciudad de Mazatlán, en junio de 1880, al tiempo que el general Bernardo Reyes era comisionado para combatir a los seguidores del Plan de Copala. En los siguientes meses, Bernal siguió ocupando importantes plazas de Sinaloa, las que posteriormente serían perdidas por las tropas de Ramírez Terrón, quien murió combatiendo el 22 de septiembre de 1880, en El Salto, Sinaloa. Tras la muerte de Ramírez Terrón, Bernal extendió sus movimientos de bandolero, desde Nayarit hasta la Sierra Tarahumara, trashumando entre los estados de Durango, Nayarit, Sinaloa y parte de Chihuahua, siguiendo siempre la extensa línea de la Sierra Madre Occidental, haciendo objeto de sus asaltos sobre todo a las conductas, diligencias y minerales. Ante la creciente fuerza y fama de Bernal y sus seguidores, el gobernador de Sinaloa, Francisco Cañedo Belmonte, organizó varias acordadas para combatir vanamente a la gavilla, mientras que la guerra contra los yaquis de Sonora distrajo las tropas federales y Bernal tuvo poca resistencia durante los años de 1882 a 1885. En 1885, Heraclio Bernal Zazueta expidió el Plan de La Rastra, Sinaloa, en el que justificaba e intentaba legitimar sus acciones con base en los postulados del Plan de Copala. En ese momento la fama de El Rayo de Sinaloa es tal que, en el informe presidencial de abril de 1886, Porfirio Díaz mencionó las acciones que el gobierno federal emprendió contra el pronunciado bandido de la Sierra de Durango y Sinaloa.
  • 174. 174 A partir del año de 1886, el peligro más poderoso para la gente de Bernal fue la acordada durangueña bajo las órdenes del jefe Octaviano Meraz quien, a pesar de seguir muy de cerca los movimientos y desarrollar ataques constantes a la tropilla de Bernal, nunca pudo someterlo ni vencerlo totalmente. Al momento de la fallida rebelión antiporfirista del general Trinidad García de la Cadena, en Zacatecas, Bernal de adhirió a su Plan de Cañitas, aunque sin llegar a tener contacto personal con García de la Cadena, toda vez que la efímera acción de los cadenistas obligó a Bernal a retornar a sus territorios de origen. La fuerza numérica de la guerrilla de Bernal variaba, dependiendo de las circunstancias y de la acción política del movimiento. Así, El Rayo de Sinaloa, en diversas épocas contó con 10, 40, 100 y hasta 200 hombres. Sin base política, tras la muerte de García de la Cadena, en enero de 1887, Heraclio Bernal lanzó el Plan de Conitaca, firmado en Conitaca, municipio de San Ignacio, Sinaloa. El texto del Plan de Conitaca supera en conceptos al de La Rastra, toda vez que, además del desconocimiento del gobierno de Porfirio Díaz y la exigencia de la aplicación de la Constitución de 1857, Bernal incluyó diversos puntos regionales como el de la erección de los estados del Valle de México, Cantón de Tepic y Laguna de Tlahualilo, procurando incluir entre sus simpatizantes a los demás rebeldes antiporfiristas. El Plan de Conitaca fue publicado y firmado por Heraclio Bernal Zazueta como Jefe del Movimiento Restaurador de la Constitución de 1857. Ante la rebeldía de Bernal, en 1887, el gobernador Cañedo Belmonte ofreció diez mil pesos de recompensa por la cabeza del Rayo de Sinaloa y, para no quedarse atrás, el gobernador de Durango, Juan Manuel Flores, ofreció la mitad de la recompensa. Las historias y mitologías en torno a la muerte de Bernal son múltiples. En ellas se cuenta que en la cueva que era su guarida, enfermo de gravedad, Bernal dio a Crispín García, su segundo, la orden de que, una vez muerto, lo baleara para fingir una muerte violenta y así pudiera cobrar la recompensa que se ofrecía por su cabeza. García cumplió la orden al pie de la letra, por lo que, todavía después de muerto, Bernal cobraba botín. Por su parte, Nicole Girón apunta que Bernal: “Denunciado, fue cercado en una montaña próxima a las minas de Nuestra Señora, Sinaloa y falleció el 5 de enero de 1888”. Según Francisco Castillo Nájera: “Los oprimidos miraban, en el bandolero, a una reivindicación con tendencias redentoras. La simpatía por Heraclio Bernal
  • 175. 175 fue tanta, que, muchos años después de muerto, su tragedia sólo se cantaba en la intimidad: en mi niñez supe que estaba prohibida por el Gobierno; ignoro la veracidad sobre la prohibición, pero, repito, nadie se atrevía a cantarla públicamente.” 7 Ignacio Parra, oriundo de La Cañada, municipio de Canatlán, Durango se inició como bandido en la gavilla de Heraclio Bernal y, a la muerte de su mentor, continuó sus correrías en la región de la Sierra Madre Occidental, en los actuales municipios de Santiago Papasquiaro, Canatlán y San Juan del Río. Los principales compinches de Ignacio Parra fueron: Federico Arreola, Refugio Alvarado y los hermanos de Ignacio: Matías y Vicente Parra. La importancia de Ignacio Parra, más que política, es con respecto a la relación que Doroteo Arango, quien posteriormente sería conocido como Francisco Villa, tuvo con la banda de Ignacio Parra. Por el hecho de que Doroteo Arango, a la edad de 17 años, huyendo de la injusticia del Estado porfirista, se incorporó a la gavilla de Ignacio Parra y permaneció en la misma por espacio de tres años aproximadamente. En noviembre de 1898, Octaviano Meraz, comandante de la Policía Rural o Acordada del estado de Durango, organizó una batida contra los bandoleros de Parra y, en el Puerto del Alacrán, cercano a la Hacienda de Santa Isabel de los Berros, municipio de Canatlán, la Acordada de Meraz trabó combate contra la tropilla de Parra. En la acción murieron: Ignacio Parra, Refugio Alvarado y Federico Arreola. 7 CASTILLO NÁJERA, FRANCISCO. Corridos y canciones del siglo XIX. Glosa al programa de Concha Michel (Palacio de Bellas Artes) 25 de mayo de 1946, Durango, Dgo. Editorial del Supremo Tribunal de Justicia, 1987, pp. 22 y 23.
  • 176. 176 Heraclio Bernal Zazueta. El Rayo de Sinaloa Cadáver de Heraclio Bernal
  • 178. 178 Hoja suelta con el corrido de Heraclio Bernal
  • 179. 179 Dos historietas dedicadas a Heraclio Bernal
  • 180. 180 Imagen de Ignacio Parra, según Gilberto Jiménez Carrillo Doroteo Arango (Francisco Villa) a los 16 años, según Enrique Krauze
  • 181. 181 Hoja suelta con el corrido de Ignacio Parra
  • 182. 182 Dos imágenes de Octaviano Meraz, El León de la Sierra, jefe de la acordada que persiguió a las bandas de Heraclio Bernal e Ignacio Parra
  • 184. 184 Los sangrientos sucesos de Velardeña El 13 de abril de 1908, la Mina de Terneras, del Real de Velardeña, municipio de Cuencamé, que entonces era propiedad de la Compañía Velardeña Mining and Smelting Company, del capitalista estadounidense Guggenheim, y de la cual se extraía cobre, fue el escenario de un incendio. Algunos de los deudos de las noventa víctimas del siniestro fueron pobremente indemnizados, otros fueron reprimidos y no pocos desterrados hacía el sur del país. Un año después del incendio, los pobladores de Velardeña, dirigidos por el sacerdote católico Ramón Valenzuela, organizaron una peregrinación con la finalidad de festejar el día de La Pasión y la quema de los Judas. Esta peregrinación religiosa fue realizada sin permiso oficial y únicamente contó con la anuencia de los directivos extranjeros de la compañía minera. El jefe político de Velardeña, José Antonio Fabián, consideró el ritual católico como un acto de protesta por los acontecimientos del año anterior, sobre todo que coincidía con la fecha del incendio, 13 de abril. Por otro lado, las manifestaciones religiosas en la época porfirista eran consideradas como violaciones a la Ley de Culto Externo. Con estos antecedentes, José Antonio Fabián se apresuró a disolver a los peregrinos y, con la ayuda de cuatro policías locales, se enfrentó a la multitud, detuvo al sacerdote Valenzuela y lo encerró en el interior de la jefatura de Velardeña. Los más de mil manifestantes-peregrinos católicos, enardecidos por la acción del jefe político, se dirigieron a la jefatura y liberaron al padre Valenzuela. Enseguida los policías de Velardeña, armados con fusiles atacaron a los peregrinos, armados con piedras. La superioridad numérica de los católicos obligó a los gendarmes a refugiarse en las propiedades de la compañía minera mientras que la multitud velardeñense se ocupaba de saquear las pocas tiendas del lugar. Sin pérdida de tiempo, Fabián telegrafió a Durango pidiendo auxilio y el gobernador del estado licenciado Esteban Fernández, decidió imponer un castigo ejemplar a los amotinados de Velardeña. Para lograr su cometido,
  • 185. 185 Fernández juntó a los 30 rurales de la Acordada de Octaviano Meraz, quienes pocos días antes habían tenido acción en Avino. Para incrementar la fuerza, Fernández pidió al Ejército Federal 60 soldados y de inmediato, el jefe político estatal se ofreció para coordinar los movimientos de las fuerzas del Gobierno. Al momento del arribo de la Acordada y el Ejército a Velardeña, muchos de los amotinados habían huido, otros fueron aprehendidos y, de entre estos, los esbirros porfiristas escogieron a 48 hombres al azar, a los que, sin formación de causa, los pasaron por las armas, no sin antes obligarlos a cavar sus propias tumbas en el lugar mismo de la masacre. La matanza de Velardeña provocó un gran escándalo en la prensa nacional y el Gobierno aseguró que se haría justicia y aunque los esbirros porfiristas, entre ellos Antonio Calvillo y Octaviano Meraz, fueron consignados y sentenciados a prisión y a la pena capital, poco después dejarían de ser huéspedes de la Penitenciaria del Estado; merced a sus influencias y complicidades con las autoridades estatales. En el cínico ejercicio de la impunidad, al inicio de la guerra revolucionaria, la mayoría de los rurales de Durango fueron parte integrante del Ejército Federal. 8 8 PARRA DURÁN, LORENZO. Cómo empezó la Revolución en Durango, Mérida, Yucatán, Talleres de la Compañía Tipográfica Yucateca, 1930, p. 58. Ver también: ALTAMIRANO COZZI, GRAZIELLA. Los años de la Revolución en Durango, 1910-1920, México, tesis de maestría en Historia de México, Facultad de Filosofía y Letras, UNAM, 1993, pp. 44 a 46. VANDERWOOD, PAUL J. Los Rurales mexicanos, México, Fondo de Cultura Económica, 1982, pp. 136 a 138.
  • 186. 186 Texto y gráfica sobre los sucesos de Velardeña publicado en el periódico El imparcial, de la ciudad de México, el 16 de junio de 1909 Texto y gráfica sobre los sucesos de Velardeña publicado en el periódico El imparcial, de la ciudad de México, el 17 de junio de 1909
  • 187. 187 Texto y gráfica sobre los sucesos de Velardeña publicado en el periódico El imparcial, de la ciudad de México, el 6 de julio de 1909 Ruinas de la mina de Terneras
  • 188. 188 Cartón de Xavier Gómez sobre los sangrientos sucesos de Velardeña
  • 189. 189 VII. El sector financiero Casa de moneda de Durango. Última sede, de 1881 a 1895 Edificio de la última sede de la Casa de Moneda de Durango Un centavo de cobre. Durango, 1880
  • 190. 190 Cincuenta centavos de plata. Durango, 1884 Diez centavos de plata. Durango, 1888 Cinco centavos de plata. Durango, 1890
  • 191. 191 Ocho reales de plata. Durango. 1983
  • 192. 192 El Banco de Durango Con el antecedente de que la iglesia Católica era la opción financiera casi única, durante toda la época colonial, y ese mismo papel jugaron algunos particulares, sobre todo alemanes, en los primeros tiempos republicanos. Inaugurado el 9 de junio de 1891, el Banco de Durango tenía como objetivo primordial el manejo de recursos financieros para facilitar la inversión en la minería, la industria, la agricultura, la ganadería y la extracción de la madera, entre otros. Como sociedad anónima el banco funcionó de buena manera e incrementó varias veces su capital, al tiempo que cambió de sede en dos ocasiones, para finalmente establecerse, a partir del primer día de enero de 1904, en la esquina de Calle Mayor (hoy 20 de noviembre) y Constitución, en el edificio que se muestra. El banco emitía su propio papel moneda respaldado en los depósitos de sus asociados, la mayoría de los capitalistas locales de Durango. Luego de apoyar los negocios de los dueños del dinero, después de sortear múltiples descalabros financieros y de falta de circulante, con las limitaciones legales del Gobierno Constitucionalista, el Banco de Durango dejó de ser la institución financiera más importante de la entidad y para 1927, dejó de funcionar definitivamente. En su mejor momento el Banco de Durango tuvo a Carlos Bracho como su presidente y a Francisco Asúnsolo como su cajero.9 9 RODRÍGUEZ LÓPEZ, MA. GUADALUPE. “Préstamo y progreso”, en: VILLA GUERRERO, GUADALUPE Y FRANCISCO DURÁN (Coord.) Durango. Tierra de retos, Tomo I, México, Milenio / La Opinión / Multimedios /Gobierno del Estado de Durango / Gobierno Municipal de Durango 2007-2010 / PEÑOLES / ¡Vamos! Gómez Palacio / LXIV Legislatura del Estado de Durango 2007-2010, 2009, pp. 141 a 162.
  • 193. 193 Banco en Ciudad Lerdo, ubicado en el Edificio de los Hermanos Luengas, municipio de Lerdo, inaugurado en 1897
  • 194. 194 Dos imágenes de la última sede del Banco de Durango, inaugurado el primer día de enero de 1904 Interior del Banco de Durango, 1906
  • 195. 195 Membrete del Banco de Durango
  • 196. 196 Una acción del Banco de Durango, 1904
  • 197. 197 Cartón de Xavier Gómez sobre una anécdota sucedida en el Banco de Durango en 1912 Carlos Bracho. Presidente del Banco de Durango
  • 198. 198 Francisco Asúnsolo, cajero del Banco de Durango
  • 199. 199 Billete de cincuenta centavos. Banco de Durango, 1882 Billete de un peso. Banco de Durango, 1882
  • 200. 200 Billete de un peso. Banco de Durango, 1892 Cheque del Banco de Durango, 1900
  • 201. 201 Anverso y reverso de billete de cinco pesos del Banco de Durango, 1914 Billete de cinco pesos del Banco de Durango, 1891
  • 202. 202 Anverso y reverso de billete de diez pesos, del Banco de Durango, 1914 Anverso y reverso del billete de cincuenta pesos del Banco de Durango, 1914
  • 203. 203 Anverso de billete e diez pesos del Banco de Durango, 1914 Anverso de billete de veinte pesos del Banco de Durango, 1914
  • 204. 204 Anverso y reverso de billete de cien pesos. Banco de Durango, 1914 Anverso de billete de quinientos pesos. Banco de Durango, sin fecha
  • 205. 205 Otros bancos en Durango Membrete de Banco de Londres y México, 1900’s Membrete de Banco Minero Chihuahua, sucursal de Gómez Palacio, 1900’s
  • 206. 206 Acción de la Mapimí Mining Company emitida en 1882 Acción de la Compañía Minera La Purísima y Anexas del municipio de Guanaceví, emitida en 1895
  • 207. 207 Acción de la Tenería y Fábrica de calzado La unión de Gómez Palacio y Mapimí, emitida en 1902 Acción de la Compañía Minera El Duraznito de Tejamen, municipio de Canatlán, emitida en 1906
  • 208. 208 Dos imágenes de una Acción de la Compañía Maderera de Durango, emitida en 1912
  • 209. 209
  • 210. 210
  • 211. 211 También el Gobierno del Estado participaba de la actividad financiera. Tres Bono del Estado de Durango, 1907, 1910 y 1910
  • 212. 212 Libro sobre la producción y la actividad financiera en Durango
  • 213. 213 VIII. Los medios de transporte Arrieros, conductas, recuas y diligencias Hasta el presente aún hay lugares en el estado a los que solamente se puede acceder mediante el uso de cabalgaduras, remudas, bestias de carga, o acémilas, transitando por los llamados caminos de herradura. A finales del siglo XIX arribaron a Durango los primeros ferrocarriles franqueando los llanos pero dejando aisladas a las zonas serranas. Antes del ferrocarril, los viajes largos se hacían en las diligencias o acompañando a las conductas o conjuntos de arrieros que, con escolta armada, transportaban los metales, desde los minerales hasta las ciudades. Antiguo escudo del municipio de Vicente Guerrero
  • 214. 214 Fotografía de una diligencia de Durango en 1898
  • 215. 215 Cartón de Xavier Gómez sobre los viajes en diligencia de Durango a la ciudad de México Carretas de la Hacienda de La Punta
  • 216. 216 Conductores de plata del mineral de Bacís, dirigida por Braulio Meraz Quintero, 1900’s Preparando la conducta de plata del mineral de Bacis, dirigida por Braulio Meraz Quintero, 1900’s
  • 217. 217 Acarreo de algodón en la región Lagunera, a principios del siglo XX
  • 218. 218 Ferrocarriles Los Tramos del Ferrocarril Central Mexicano en Durango Durante el primer periodo de gobierno del general Porfirio Díaz (1876-1881), se otorgó a la compañía Ferrocarril Central Mexicano, organizada en Boston, Massachusetts, la concesión y subvenciones para construir el ferrocarril de vía ancha entre la ciudad de México y Ciudad Juárez, (antes Paso del Norte) Chihuahua. Según los historiadores durangueños* , el primer trazo del ferrocarril Central incluía el paso por las ciudades de México, Querétaro, Celaya, Salamanca, Irapuato, Guanajuato, León, Aguascalientes, Zacatecas, Durango, Chihuahua y Paso del Norte. El gobernador de Durango, Francisco Gómez Palacio, ya estaba pensando en celebrar la llegada del Ferrocarril Central a la ciudad de Durango, cuando de pronto se enteró de que el trazo de la vía cambiaba y excluía a la capital del estado, esto significaba postergarla de la comunicación con el centro del país y la frontera con los Estados Unidos. De nada sirvieron las gestiones de Gómez Palacio, ante el presidente de la República, Manuel González y ante la compañía del Ferrocarril Central. El tren no pasaría por la ciudad de Durango. Las razones que alegaron para hacer el cambio de la ruta fueron muy variadas: se habló de que don Francisco Gómez Palacio no quiso pagar una cantidad exagerada, por la gracia de que el ferrocarril pasara por Durango, otro argumento fue que algunos capitalistas que tenían inversiones en la entonces inhóspita Región Lagunera, presionaron por el cambio de la ruta; se llegó también a correr el rumor de que el gobernador no dejó pasar el tren por Durango porque traía consigo enfermedades, microbios y moscos. Sin embargo, la razón más creíble de la desviación del Central fue la del ahorro de costos de construcción de la subvención otorgada al hacer pasar la vía por la sólida y árida planicie del Bolsón de Mapimí, región con mayores posibilidades de desarrollo minero que el centro del estado. * José Ignacio Gallegos, Everardo Gámiz y Arnulfo Reyna.
  • 219. 219 El 10 de abril de 1884 se inauguró el Ferrocarril Central Mexicano que, en tierras durangueñas tiene tres tramos; uno en el municipio de San Juan de Guadalupe, al extremo este del estado en los límites semidesérticos con Zacatecas y Coahuila, con tres estaciones que siguen el curso del Río Aguanaval, San Isidro, Symón y Acacia. El segundo tramo, el más pequeño, incluye las estaciones de Picardías y Nazareno en el municipio de Lerdo, al este de Durango y en los límites con el suroeste de Coahuila. El último tramo del Central en territorio durangueño se tiende, luego de la ciudad de Torreón, Coahuila, por los municipio de Gómez Palacio y Mapimí, con estaciones en: Gómez Palacio, Vergel, Noé, Brittingham, Santa Clara, Bermejillo, Peronal, Conejos, Yermo y Zavalza, de allí la vía continúa su ruta por el estado de Chihuahua. Los trenes de vapor que comenzaron a cruzar la Región Lagunera propiciaron en la zona un gran movimiento de capitales y de atracción de población, sobre todo de peones acasillados y bonanceros. De esta manera, en 1886, la estación Lerdo, situada en la hacienda de Santa Rosa, cercana a la población de Lerdo, Durango, fue llamada Gómez Palacio y su rápido desarrollo industrial dio lugar a la formación del municipal de Gómez Palacio, segregado del de Lerdo. Establecida la línea trocal de Ciudad Juárez a México, la ruta se trazó, tal como está, para sacar plata, plomo, oro, cobre y mármol de Mapimí, Bermejillo, San Juan de Guadalupe y Dinamita (antes La Tinaja). A los metales se añadieron algunos productos como vinos, jabones, calzado, harinas; cultivos como algodón y trigo. Otros productos que empezaron a ser trabajados en la Región Lagunera con los capitales de los Lavín, Brittingham, Sánchez, Prince, Torres, Siller, Rockefeller y la Tlahualilo Company, entre otros, fueron la candelilla y el guayule. Para el mejor funcionamiento de la industria se tendieron múltiples líneas ferroviarias ramales en la Región Lagunera.
  • 220. 220 Carta del Ferrocarril Central Mexicano, 1892
  • 221. 221 El Ferrocarril Central Mexicano nunca llegaría a la ciudad de Durango (caricatura de Xavier Gómez) Tren del Ferrocarril Central Mexicano cruzando el puente sobre el Río Nazas, 1883
  • 222. 222 Mapa de terrenos cedidos al Ferrocarril Central Mexicano por el gobierno del Estado de Durango en Gómez Palacio Casa redonda de la antigua estación ferrocarril Gómez Palacio
  • 223. 223 Estación Gómez Palacio del Ferrocarril Central Mexicano Otro ángulo de la estación Gómez Palacio
  • 224. 224 Vista de Gómez Palacio con vías de ferrocarril y cables de electricidad Actual Estación Gómez Palacio
  • 225. 225 Antigua Estación Noé del Ferrocarril Central Actual Estación Noé, en la Región Lagunera
  • 226. 226 Dos imágenes de ferrocarril de cremallera de la Mina de Ojuela, perteneciente a la Compañía Minera Peñoles en Mapimí
  • 227. 227 Locomotora de la Compañía Minera Peñoles Tren de vía angosta en Tlahualilo, Durango
  • 228. 228 Vía de acceso a la fábrica y pueblo de Dinamita, Durango Ferrocarril de mulitas, también llamado de sangre, en Tlahualilo
  • 229. 229 Ferrocarril Urbano de Durango En 1884 John B. Olagaray formó una sociedad con 21 firmas accionistas de la localidad para construir los ferrocarriles urbanos de la ciudad de Durango; la razón social de los inversionistas fue Compañía Limitada de Tranvías de Durango. Los tranvías de Durango fueron de tracción animal (ferrocarril de sangre) y fueron conocidos como “de mulitas”. La compañía de tranvías puso en servicio tres líneas: 1.- Plaza de Armas – Panteón de Oriente. 2.- Plaza de Armas – Santuario de Guadalupe. (Cuando el Ferrocarril Internacional llegó a la ciudad de Durango (1892) esta línea dio servicio a la estación del ferrocarril). 3.- Plaza de Armas – Baños de Canoas. La línea llegaba hasta el puente Fugeman, sobre la Acequia Grande, conocido después como puente de El Ariel, que fue demolido al ser entubada la Acequia Grande de la década de 1980 del siglo XX. Los tranvías de la ciudad de Durango nunca tuvieron energía eléctrica.
  • 230. 230 Tres imágenes de unidades de servicio de la Compañía Limitada de Tranvías de Durango
  • 231. 231 Estación de tranvías en la ciudad de Durango Calles de Durango con carretas y tranvía, 1900’s
  • 232. 232 Caricaturas de Xavier Gómez sobre los ferrocarriles urbanos de Durango Una acción financiera de la Compañía Limitada de Tranvías de Durango
  • 233. 233 Ferrocarril Internacional Mexicano Obedeciendo más a las órdenes e intereses de las inversiones de capital, que a las pasiones políticas regionales, durante el periodo presidencial de Manuel González (1880-1884), el 7 de febrero de 1881 se autorizó la concesión del Ferrocarril Internacional Mexicano a la Southern Pacific Railroad. Esta empresa se comprometió a trabajar sin subsidios federales, pero con plazos mayores de construcción. El trazo de Internacional incluía a las ciudades de Piedras Negras (antes Porfirio Díaz) y Torreón, con extensión hacia la ciudad de Durango. El gobierno duranguense del general Juan Nepomuceno Flores firmó, el 27 de abril de 1886, el contrato de construcción y explotación del Ferrocarril Internacional, en su tramo Durango-Torreón. Para el primer día de marzo de 1888 el Internacional entroncó en Torreón con el Central y de manera muy lenta se comenzó a introducir en el estado de Durango. En 1889 se incluyeron en el contrato del Durango-Torreón, los intereses de la Steel and Iron Co., Septimus Hedges, H. Huntington y un sindicato inglés. Tres años después se fundieron los clavos de plata para clavar el último trozo de vía del Torreón-Durango y el 16 de octubre de 1892, se inició la gran fiesta por la llegada del primer tren a la Perla del Guadiana, y por la inauguración de los talleres de reparación de máquinas, conocidos como Casa Redonda. Los trenes que van de Durango a Torreón pasan por las estaciones de Labor de Guadalupe, General Carlos Real, Villa Montemorelos y estación El Chorro, en el municipio de Durango; Francisco I. Madero (antes Avilés y hoy Ciudad Juárez) y San Carlos, en el municipio de Lerdo. De allí el ferrocarril se dirige a la ciudad de Torreón y se interna en el estado de Coahuila. La longitud del Ferrocarril Internacional en territorio durangueño es de 253 kilómetros. El Internacional, además de comunicar a la ciudad de Durango con la ciudad de México y la frontera con los Estados Unidos, facilitó la transportación de los minerales de la región de Cuencamé, Velardeña, Pedriceña y la ciudad de
  • 234. 234 Durango (Cerro del Mercado), así como los productos agrícolas de las haciendas del este y el centro del estado. Las boletas de los fletes del Internacional comenzaron a llenarse con los nombres de los Asúnsolo, Escárcega, Cincúnegui, Fernández, Harzer, Weber, Windisn, Torres, Curbelo, Gómez Palacio, Damm Drünert, Flores, González, Sarabia, Gurza, Hildebrand, López Negrete, Manzanera, Mendarozqueta y Rodríguez Cristóbal, entre otros nacionales e internacionales. Los vagones de carga que mayormente salen de Durango son los que transportan ganado, grano o minerales y son pocos los que llegan con combustible o cargados con enseres domésticos destinados a las mansiones de las familias pudientes de la ciudad o con productos y maquinaria industrial o minera. El Ferrocarril Internacional aceleró el movimiento de población a la Región Lagunera en sus épocas bonancibles de las pizcas de algodón, así como el traslado directo de los coterráneos a los Estados Unidos iniciando la migración de durangueños a lugares como la ciudad de Chicago, Illinois. Con el troncal ya funcionando fue costeable, para la Velardeña Mining Company, la construcción del ramal de Pedriceña a Velardeña y de allí a la Mina The Cooper Queen. El contrato entre el gobierno del estado y la Velardeña Mining para el tendido de la vía se firmó el 16 de diciembre de 1902, este es el único ramal con que cuenta el ferrocarril de Durango a Torreón. El mismo ferrocarril propició la construcción de la fundidora de Pedriceña, misma que fue terminada por la ASARCO (American Smelting And Refining Company) en 1906. La mexicanización de los ferrocarriles y la creación de la compañía Ferrocarriles Nacionales de México, en 1908, incluyó el cambio de propiedad y concesión del Ferrocarril Internacional, del que fue necesario comprar acciones que estaban en poder de la Southern Pacific Railroad.
  • 235. 235 El cruce de las vías del Ferrocarril Central Mexicano y del Ferrocarril Internacional Mexicano, en la ciudad de Torreón, Coahuila, significó la posibilidad técnica de que las cintas de acero llegaran a Durango Plano general del arribo del primer tren a la ciudad de Durango, el 16 de octubre de 1892
  • 236. 236 Imagen de la Estación en el momento en que se reportó la primera llegada del Ferrocarril Internacional Mexicano a Durango Plano general de la Estación del Ferrocarril Internacional Mexicano en Durango
  • 237. 237 Locomotora del Ferrocarril Internacional Mexicano en Durango Fotograma de la película Train hour in Durango, 1897, filmada por los enviados de Thomas Alva Edison
  • 238. 238 Ruinas de la Estación del Ferrocarril Internacional Mexicano en la ciudad de Durango Otra imagen de la Estación del Ferrocarril internacional Mexicano en Durango
  • 239. 239 Estación Pasaje del Ferrocarril internacional Mexicano Talleres de la antigua estación del ferrocarril en la ciudad de Durango
  • 240. 240 Dos caricaturas de Xavier Gómez sobre el Ferrocarril Internacional Mexicano
  • 241. 241 El Ferrocarril Internacional Mexicano conectó a Durango con los rieles de la red ferroviaria nacional
  • 242. 242 Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón En 1889, como comunicación vecinal, se tendieron 5 kilómetros de vías de un “ferrocarril de sangre”, es decir, de un tranvía de tracción animal, entre Lerdo y Gómez Palacio. En 1897 la misma compañía lerdense extendió el tranvía tirado por mulas 5 kilómetros más, hasta la entonces villa de Torreón, y para 1901 este tranvía fue transformado en el Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón, S. A. La planta de energía eléctrica que movió el Lerdo-Torreón se instaló en Lerdo, Durango, además cubrió las necesidades de alumbrado público tanto de Gómez Palacio como de Lerdo. El Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón fue el signo de toda una época de transporte vecinal en el triángulo de Torreón-Gómez Palacio y Lerdo, hasta que, a principios de la década de 1950 fue substituido por el transporte de vehículos de motor de combustión interna. Membrete del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
  • 243. 243 Plano del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón Primera planta eléctrica que alimentó el Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
  • 244. 244 Dos imágenes Tranvía del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón cruzando el puente sobre el Río Nazas
  • 245. 245 Tres puentes sobre el Río Nazas
  • 246. 246
  • 247. 247
  • 248. 248 Ocho imágenes del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
  • 249. 249 Una acción del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón
  • 250. 250 Ferrocarril de Parral a Durango En 1899, el Gobierno del estado de Durango firmó sendos contratos con las compañías, Ferrocarril Internacional y Ferrocarril Central Mexicano para la construcción de dos vías: una de Durango a Tepehuanes con prolongación al mineral de Guanaceví y la otra de Parral, Chihuahua hasta Guanaceví, respectivamente, para conectarse entre sí y conformar la línea de Parral a Durango. Luego de cubrir el difícil tramo de Chinacates, la vía de Durango a Guanaceví avanzó relativamente rápido y para el 12 de mayo de 1902 el tren llegó a la población de Tepehuanes: El Ferrocarril de Durango a Guanaceví, nunca avanzó más allá de Tepehuanes y tradicionalmente el tramo fue considerado como un ramal del Ferrocarril Internacional, de Durango a Piedras Negras. El tramo Durango-Tepehuanes incluye las siguientes estaciones: Durango, Casa Blanca y Carpintero en el municipio de la capital; Cacaría (hoy Nicolás Bravo), Canatlán, Pinos (hoy Francisco Zarco, Sauces (hoy General Maclovio Herrera), Laguna de Santiaguillo (hoy Arnulfo R. Gómez), las Olas, Guatimapé y Alisos en los municipios de Canatlán y Nuevo Ideal; Chinacates, estación Huizaches, Santiago Papasquiaro; y Corrales, Sandías, Presidio y Tepehuanes en el municipio de Tepehuanes. El total de la extensión del Durango- Tepehuanes es de 218 kilómetros. Por otro lado, el tramo Parral-Guanaceví comenzó a ser construido con vía angosta y se introdujo en territorio durangueño por el norte del municipio de Ocampo con un recorrido de 34 kilómetros y con estaciones en Ojitos, Llano Blanco, Ornelas, Mesa de Sandías, Palomas y Rosario, todas ellas en el municipio de Ocampo.
  • 251. 251 Tramo del Ferrocarril de Durango a Tepehuanes Locomotora del Ferrocarril de Durango a Tepehuanes
  • 252. 252 Tren transitando en el tramo de Parral a Mesa de Sandías en el Ferrocarril de Parral a Durango Estación del Ferrocarril de Tepehuanes, Durango
  • 253. 253 Estación del Ferrocarril en Santiago Papasquiaro, Durango, 1900’s Locomotora del Ferrocarril Parral – Durango
  • 254. 254 Estación Rosario del Ferrocarril. Durango-Parral, 1900’s Estación Canatlán
  • 256. 256 Rieleros tendiendo vía entre Chinacates y Santiago Papasquiaro, 1900 Trabajadores ferrocarrileros cortando leña para surtir la caldera del tren, 1900’s
  • 257. 257 Rieleros tendiendo la vía de Santiago Papasquiaro a Tepehuanes, 1900 Mapa de alturas Ferrocarril de Durango a Tepehuanes
  • 258. 258 Itinerario del ramal de Ferrocarril de Durango a Tepehuanes, 1902
  • 259. 259 Transporte de pasajeros de la población a la Estación de ferrocarril en Santiago Papasquiaro Vías de ferrocarril en el Estado de Durango hasta 1910
  • 260. 260 Sistema ferroviario de Durango hasta 1910
  • 261. 261 Libro sobre el Ferrocarril de Durango a Tepehuanes
  • 262. 262 IX. Ciencia, artes, cultura, academia y diversiones Científicos y académicos Carlos Santamarina, primer director del Instituto de Niñas, 1870 y director del Instituto Juárez de 1872 a 1877 y de 1895 a 1900
  • 263. 263 Ingeniero Carlos Patoni y su familia, 1902 Vicenta Saracho Arce. Inspectora del Instituto de Niñas, 1874
  • 264. 264 Dos imágenes del pedagogo Bruno Martínez, 1880’s
  • 265. 265 Juana Villalobos, directora de la Escuela Primaria anexa a la Normal y de la Escuela Normal del Estado Leandro Fernández, ingeniero, académico, funcionario federal y gobernador. Fue secretario de obras públicas del gobierno porfirista
  • 266. 266 Logo del Instituto Juárez desde los 1880’s El Instituto Juárez a fines del siglo XIX
  • 267. 267 Exterior del Instituto Juárez a finales del siglo XIX Antiguo edificio del Instituto Juárez
  • 268. 268 Rafael Pescador. Director del Instituto Juárez, 1880’s Esteban Fernández. Director de Instituto Juárez, 1890’s
  • 269. 269 Juan Santa Marina. Director de Instituto Juárez, 1890’s Diploma del Instituto Juárez, 1899
  • 270. 270 Sociedad de Alumnos del Instituto Juárez, 1900 Alumnos de la materia de Física. Instituto Juárez, 1904
  • 271. 271 Alumnos de Física del Instituto Juárez, 1906 Guadalupe Gracia García, alumno del Instituto Juárez, 190
  • 272. 272 Geólogo José Guadalupe Aguilera, 1900’s
  • 273. 273 Dos imágenes del cirujano Rafael Lavista, 1890’s Cartón de Xavier Gómez en honor al cirujano durangueño Rafael Lavista
  • 274. 274 Fernando Zárraga. Médico, 1900’s Clase de pintura en Escuela de Niñas de Durango, 1900
  • 275. 275 Artistas e intelectuales En las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del XX, la ciudad de Durango fue lugar de residencia de las familias de los latifundistas, concesionarios mineros, comerciantes y demás capitalistas que desarrollaron sus negocios en el enclave económico del territorio estatal, vinculado con el corredor que unió a la entidad con la Región Lagunera y a la ciudad de Monterrey, Nuevo León, merced a la comunicación que ofreció el Ferrocarril Internacional Mexicano, con sus múltiples ramales. En este contexto la ciudad tuvo, a su vez, la oportunidad de recibir a múltiples compañías artísticas, de teatro, música sinfónica, conciertos, recitales, ópera, de títeres, de funciones de cine silente y zarzuela, entre otras, al tiempo que algunos de los miembros de las familias acomodadas podían, sin preocupaciones económicas, dedicarse al solaz de las actividades culturales y desarrollar diversas expresiones artísticas, con los lineamientos estéticos europeos, como en los casos de compositores como: Luis Baca, Alberto Amaya, Gustavo E. Campa, Ricardo Castro y Alberto M. Alvarado, entre otros, que dieron a una buena cantidad de sus partituras de óperas, operetas, canciones, valses y sinfonías, entre otras composiciones, sonidos que recordaban a los que salían de las orquestas, compositores y cantantes europeos. Es innegable que los compositores de la élite económica de la época aportaron su creatividad al acervo de la cultura nacional y muchas de sus piezas siguen siendo números obligados en el repertorio de las diversas orquestas de música sinfónica mexicana, como es el caso del Vals Capricho, de Ricardo Castro. De esta época y generación fue el compositor Alberto M. Alvarado nació en Durango, el primer día de diciembre de 1864, y falleció en la misma ciudad, el 18 de julio de 1939, además de ser empresario teatral en su ciudad natal, su música destacó nacional e internacionalmente. Una de sus composiciones más famosas fue el vals Recuerdo, que se sigue interpretando en sus versiones
  • 276. 276 instrumental y cantada. En 1966, durante los festejos del IV Centenario de la fundación de la ciudad de Durango, el vals Recuerdo fue declarado como himno regional de la ciudad. Ricardo Castro, compositor, nació el 7 de febrero de 1864, en la Hacienda de Santa Bárbara, Municipio de Nazas, Durango, falleció en la ciudad de México – el 28 de noviembre de 1907
  • 277. 277 Otra imagen de Ricardo Castro Placa conmemorativa en la casa donde nació Ricardo Castro
  • 278. 278 Casa de la calle de Negrete, en la ciudad de Durango, donde vivió el compositor Ricardo Castro Los compositores Ricardo Castro y Gustavo G. Campa, 1883
  • 279. 279 Diploma de curso impartido por Ricardo Castro 1897
  • 280. 280
  • 281. 281
  • 282. 282
  • 283. 283
  • 284. 284
  • 285. 285
  • 286. 286
  • 287. 287
  • 288. 288 Partituras de algunas obras de Ricardo Castro
  • 289. 289 Programas de conciertos de Ricardo Castro Monumento a Ricardo Castro afuera del teatro que lleva su nombre (antiguo Teatro Principal)
  • 290. 290
  • 291. 291
  • 293. 293 Alberto M. Alvarado, el compositor en su juventud El compositor Alberto M. Alvarado, adulto mayor
  • 294. 294 Partitura del Vals Recuerdo, de Alberto M. Alvarado, himno de la ciudad de Durango Partitura del Vals Río Rosa, de Alberto M. Alvarado
  • 295. 295 Otras partituras de Alberto M. Alvarado
  • 296. 296 Monumento a Alberto M. Alvarado, en el Parque Guadiana de la ciudad de Durango Monumento a Alberto M. Alvarado en el Teatro que lleva su nombre en la ciudad de Gómez Palacio
  • 297. 297 Manuel Herrera Álvarez, compositor Alberto Amaya, compositor
  • 298. 298 Dos imágenes de Francisco Fournier Salas, compositor
  • 299. 299 Quinteto Fournier Conjunto musical escolar durangueño de principios del siglo XX
  • 300. 300 Orquesta Típica de Durango, 1908 Orquesta del maestro Arturo Lugo, 1900’s
  • 301. 301 Banda actuando en Gómez Palacio en 1911 Orquesta Femenil de Santa Clara, municipio del mismo nombre, 1904
  • 302. 302 Rafael Ceniceros y Villarreal El político, dramaturgo, cuentista, novelista, abogado y moralista Rafael Ceniceros y Villarreal nació en la ciudad de Durango el 11 de julio de 1855. Durante algunos años, Ceniceros estudió en el Seminario Conciliar de Durango, pero abandonó la carrera clerical para estudiar jurisprudencia en el Instituto Juárez de la ciudad de Durango. Desde joven Ceniceros se inició como escritor de piezas teatrales, especialmente melodramáticas. Al recibir su grado académico de abogado, Rafael Ceniceros trasladó su residencia a la ciudad de Zacatecas en donde continuó escribiendo obras dramáticas, novelas, cuentos, poesías, artículos periodísticos y catecismos, entre otras cosas. Hombre interesado en los problemas sociales de su tiempo, Ceniceros se dedicó a una intensa actividad política, participando como miembro de la Orden de los Caballeros de Colón y desde el bando conservador y por el Partido Católico Nacional, PCN, ocupó en dos ocasiones el poder ejecutivo del estado de Zacatecas. La obra narrativa de Ceniceros y Villarreal consta de dos novelas: La Siega, publicada en 1905 y El Hombre Nuevo, que se puso a la venta en 1908. Los relatos de Ceniceros incluyen una colección de 48 cuentos cortos que se dieron a conocer en 1909. En sus relatos, Ceniceros y Villarreal, apegándose al género de realismo costumbrista, recrea un sistema de ideas conservador de la clase media y la clase alta de la provincia mexicana de su tiempo. Consecuente con su pensamiento conservador, Ceniceros actuó como opositor político de los primeros gobiernos de la Revolución por lo que, entre 1914 y 1926, estuvo en prisión en catorce ocasiones. Fungió como presidente del Partido Nacional Republicano, PNR, y en 1926, al momento de la Primera Rebelión Cristera, el para entonces ya anciano novelista, tuvo el papel protagónico de presidente de la Liga Nacional Defensora de la Libertad Religiosa, LNDRL, organización urbana de extrema derecha que tuvo una parcial relación con la instigación de la rebeldía cristera.
  • 303. 303 El 27 de diciembre de 1931, en la ciudad de México, con su fortuna y sus luchas perdidas, el empobrecido y senil Rafael Ceniceros y Villarreal dejó de vivir. Rafael Ceniceros y Villarreal, escritor Obras de Rafael Ceniceros y Villarreal
  • 304. 304 Primeros antropólogos en Durango Carl Lumholtz y Conrad Theodor Preuss fueron los primeros investigadores extranjeros que se ocuparon del estudio de los pueblos indígenas de Durango, en las postrimerías del siglo XIX y los principios del XX. Los textos: México desconocido, de Carl Lumholtz y Mitos y Cuentos Nahuas de la Sierra Madre Occidental de Konrad Theodor Preuss, son dos de las principales aportaciones y fuentes de la cultura de los pueblos primigenios de México. Por otra parte, los trabajos de Lumholtz y Preuss incluyeron fotografía, audiotranscripción musical, grabaciones sonoras y narrativa etnográfica. Carl Lumholtz, imagen y firma
  • 305. 305 Altar de Mitote Cora, por Carl Lumholtz, 1904 Patio sagrado de los coras, con arco musical al centro. Lumholtz, 1900’s
  • 306. 306 Mitote Cora, Lumholtz, 1904 Poblado mexicanero de San Pedro Xícoras, Lumholtz, 1904
  • 307. 307 Semana Santa Cora, 1904 Troje tepehuana cerca de Lajas. Lumholtz, 1900’s
  • 308. 308 Una edición de El México desconocido de Carl Lumholtz
  • 309. 309 La sierra del Nayar por Konrad Theodor Preuss, 1904
  • 310. 310 Konrad Theodor Preuss, 1904 Libro de Konrad Theodor Preuss
  • 311. 311 Carlos Hernández, autor del libro Durango Gráfico, 1908 Portada de Durango Gráfico de Carlos Hernández
  • 312. 312 Juan B. Barney. Fotógrafo. Durango (1850-1918). Muchas de las placas que integran este libro son de la autoría de Barney
  • 313. 313 Los inicios del cine en Durango En 1896, Thomas Alva Edison designó en su Departamento de Kinematógrafo a James White, para que se encargara de realizar la producción de películas de cine silente. A mediados de 1897, James White y el camarógrafo británico Frederick Blechynden, iniciaron un viaje de filmaciones, con la ventaja de que las compañías ferroviarias, para obtener publicidad, les ofrecían a los cinematografistas los viajes con todos los gastos pagados. Después de recorrer los Estados Unidos, White y Blechynden llegaron a México, por la vía del Ferrocarril Internacional Mexicano y por el Ferrocarril Nacional Mexicano. En agosto 1897, la entonces última terminal del Ferrocarril Internacional Mexicano era la ciudad de Durango y luego de su arribo, los enviados de Edison rodaron las cinco primeras películas filmadas en Durango: Wash Day in México, Train Hour in Durango, Bull Fight # 1, Bull Fight # 2 y Bull Fight # 3. En la primera película filmada en Durango, Wash Day in México, Día de lavado en México, o Lavanderas, se observa a un grupo de mujeres que lavan su ropa en la rivera de la Acequia Grande, a un costado del Paseo de las Alamedas. Al fondo e izquierda, está el puente de Analco. En primer plano se ve a un niño desnudo jugando a un lado de una lavandera. Todas usan rebozo como tocado sobre sus cabezas, a la usanza tradicional de las mujeres durangueñas de los siglos XIX y hasta mediados del XX. Durante el transcurso de la película una de las mujeres se levanta y sacude una prenda de vestir. Una pareja y un perro cruzan al fondo. Un paisano está recargado en un árbol y, en la ribera izquierda de la acequia, una alta mujer está de pie, mientras que otra mujer lava en medio de la corriente. Otro filmador que rodó cine silente en Durango, antes de 1910 fue Julio Kemenydy.
  • 314. 314 Fotograma de Wash day in México, primer filme dorado en Durango, 1897 Fotograma de Train hour in Durango, 1897
  • 315. 315 Fotograma de la película Bull fight 1, 1897 Fotograma de Bull fight 2, 1897
  • 316. 316 Secuencia de la película Bull fight 3, 1897 Joaquín Navarro Quinito, primer torero filmado el Durango, 1897
  • 317. 317 James White, al centro, primer productor de películas en Durango, 1897 Julio Kemenydy, filmando en Durango, 1908
  • 318. 318 Cartón de Xavier Gómez sobre las primeras proyecciones de cine en Durango
  • 319. 319 Libro sobre Historia del cine silente en Durango
  • 321. 321 Cartel de corrida de toros, 1896 Otra corrida, 1903
  • 322. 322 Imágenes de dos corridas en la Plaza de toros, de adobe y piedra, de la ciudad de Durango, 1890’s. La plaza fue demolida a principios del siglo XX
  • 323. 323
  • 324. 324 Tres imágenes de las gradas del Hipódromo de la ciudad de Durango, 1900’s
  • 325. 325 Programas de teatro de la ciudad de Durango, 1895
  • 326. 326 Dos imágenes de actores en funión en el interior del Teatro Coliseo, 1900’s
  • 327. 327 Dos programas del Teatro Unión de Gómez Palacio
  • 328. 328
  • 329. 329 Tres imágenes del Teatro Unión de Gómez Palacio, 1900’s Programa de Teatro de títeres de Rosete Aranda en Gómez Palacio, 1900’s
  • 330. 330 Excursión al Pueblito, municipio de Durango Cancionero con grabado de José Guadalupe Posada. De Torreón a Lerdo, 1907
  • 331. 331 Cartón de Xavier Gómez sobre las diversiones en el Durango de las postrimerías del siglo XIX
  • 332. 332 Periódicos La luz, apareció en 1870 El nivel, apareció en 1870
  • 333. 333 El obrero constitucional, apareció en 1874 El eco religioso, apareció en 1874
  • 334. 334 El caniculario, apareció en 1875 La enseñanza civil, apareció en 1875
  • 335. 335 La sombra de la guerra, apareció en 1877 Semanario de avisos y variedades, apareció en 1877
  • 336. 336 El eco popular, apareció en 1877 La brocha, apareció en 1881
  • 337. 337 El domingo, apareció en 1883 La Época, apareció en 1884
  • 338. 338 La revista de policía, apareció en 1898 La idea, apareció en 1899
  • 339. 339 El comercio de Durango, apareció en 1892 La República, apareció en 1892
  • 340. 340 La bandera roja, apareció en 1896 El repórter, apareció en 1901
  • 341. 341 El correo de Durango, apareció en 1902 La estrella, apareció en 1904
  • 342. 342 Boletín de la Sociedad Cooperativa de Auxilios Mutuos, apareció en 1909 Arlequín, apareció en 1910
  • 343. 343 X. Los ámbitos urbanos Desde la restauración de la República y durante todo el periodo porfirista la ciudad de Durango se engalanó con la construcción de una gran cantidad de edificios y casas de lujo de los capitalistas locales. Algo similar sucedió en algunos de los partidos del interior del estado. De hecho, este periodo marcó el centro de la ciudad de Durango con su estilo arquitectónico que, como se verá, posteriormente fue parcialmente destruido. La ciudad de Durango Plano hidrográfico y topográfico de la ciudad de Durango, 1888
  • 344. 344 Plano de la ciudad de Durango, 1890 Plano de la ciudad de Durango, 1900
  • 345. 345 Plano del Partido de Durango, 1902
  • 346. 346 Plano de la ciudad de Durango, 1909 Plano topográfico de la ciudad de Durango, 1909
  • 347. 347 Plano topográfico de la ciudad de Durango, 1909 Plano de la ciudad de Durango, 1909
  • 348. 348 Croquis de una bomba para combatir incendios ofrecida en presupuesto al Ayuntamiento de Durango, 1870’s Primer edificio del Ayuntamiento de la ciudad de Durango, 1870’s
  • 349. 349 Palacio Municipal de Durango, 1890 Panorámica de la ciudad de Durango, pintura de León Trusset, 1884
  • 350. 350 Tarjeta postal con panorámica de la ciudad de Durango, 1900’s (circa) . Plaza de armas del la ciudad de Durango, 1884
  • 351. 351 Calle del Comercio antes de 1894 Calle del comercio después de 1894
  • 352. 352 Calle Principal en 1890 Calle de Constitución esquina con Principal en 1898
  • 353. 353 Plaza de Armas, en las actuales calles de 20 de noviembre y Juárez, 1900’s Otro ángulo de la anterior
  • 354. 354 Sitio de carros de alquiler de tracción animal frente a la Catedral, 1900's Actual calle principal 20 de noviembre, en los 1900’s
  • 355. 355 Entrada del Mercado Francisco Gómez Palacio, 1890’s Calle de 5 de febrero, 1890’s
  • 356. 356 Casa de las lágrimas. Acuarela de José Antonio Treviño Fuentes, 1894 Inauguración del Jardín Hidalgo, 1896
  • 357. 357 Calle de Durango con alumbrado público, 1900’s Calle Principal de Durango, 1900’s
  • 358. 358 Calle Mayor en 1902 Actual calle de 5 de febrero, lado oriente, en los años 1900’s
  • 359. 359 Actual calle de 5 de febrero, lado poniente, en los años 1900’s Plaza de armas, 1890’s
  • 360. 360 Proyecto de entubación del agua potable en la ciudad de Durango, 1895 Canalización de la Acequia grande, 1899
  • 361. 361 Estanque de los Patos, 1900’s Calle de 5 de Febrero, 1900’s
  • 362. 362 Casa de Bruno Hartzer, 1900’s Tarjeta postal con el Jardín Patoni
  • 363. 363 Tarjeta postal con el Jardín Juárez, 1900’s Cerro de Los Remedios, 1900’s
  • 364. 364 Hospicio San Carlos, 1900’s Barrio de Analco, 1880’s (circa)
  • 365. 365 La Acequia Grande, 1890’ El Portal de Palomas en la ciudad de Durango, 1900’s
  • 366. 366 Plaza de Armas, 1900’s Otro ángulo de la Plaza de Armas, 1900’s
  • 367. 367 Calle del Mesón, 1900’s Calle Constitución con postes de energía eléctrica, 1900's circa
  • 368. 368 Chalet en la huerta del Sabino, 1990’s En perspectiva El Cerro de los Remedios, 1900’s
  • 369. 369 Paseo de Las Moreras, 1900’s Calle Mayor de Durango
  • 370. 370 Calle de Teresas, un 16 de septiembre, en la ciudad de Durango, 1900’s Parque Ortiz der Zárate, Durango, 1900’s
  • 371. 371 Casa de Roberto Windish 1900’s Consulado Alemán en Durango, 1900's
  • 372. 372 Kiosco de la Plaza de Armas, 1900’s Palacio de Zambrano transformado en Palacio de Gobierno
  • 373. 373 Paseo de Las Alamedas Lago de los Patos en el Parque Guadiana, 1900’s
  • 374. 374 Otra imagen del Lago del Parque Guadiana Teatro Coliseo, hoy Teatro Victoria, 1900’s
  • 375. 375 Puente de Analco, sobre la Acequia Grande1900’s La Acequia Grande, 1900’s (circa)
  • 376. 376
  • 377. 377 Tres imágenes de la entrada a la antigua Penitenciaría, 1904 (circa) Vista de un pabellón de la Penitenciaría, 1904
  • 378. 378 Teatro Principal en construcción, 1902 Panorámica de Durango y el Cerro de Mercado, 1901
  • 379. 379 Panorámica de la ciudad de Durango, 1907
  • 380. 380 Comercios y hoteles en la ciudad de Durango Primer edificio de la Ferretería Alemana, 1900’s
  • 381. 381 Dos imágenes del edificio El Palomar o Ferretería Alemana, 1900 Interior de la Ferretería Alemana
  • 382. 382 Dos imágenes de publicidad de la Ferretería Alemana
  • 383. 383 Señor y señora Bose, propietarios de la Ferretería Alemana Grandes almacenes o El Gran N° 11, en su primer sede
  • 384. 384 El Palacio del conde de Súchil, transformado en almacén de Maximiliano Damm, llamado El Gran Número 11 Interior de Casa del Conde de Súchil. Tienda El Gran Número 11
  • 385. 385 Publicidad del El Gran Número 11, en 1903 Casa Daesslé, 1900’s