(2024-05-06)Sesion Anticoncepción desde atencion primaria (DOC)
Embriología
1. Introducción.
El desarrollo de la cara y cavidad bucal comprende una serie dinámica de hechos
que comienzan durante el segundo mes de la vida intrauterina. El origen complejo
de esta región a partir de diferentes centros de crecimiento, con el desarrollo de
siete procesos diferentes que crecen en proporciones variables, hace notable la
poca frecuencia de las malformaciones. Cambios críticos dan lugar a la formación
de la cara embrionaria, el conducto nasal y la lengua, y a la separación de las
cavidades bucal y nasal mediante la formación del paladar. Este periodo se puede
dividir en dos fases.
En la primera fase, durante la quinta y sexta semanas, se preparan los bloques
formadores de la cara, se establece la comunicación entre la cavidad bucal y el
intestino anterior, y de forman los conductos nasales. Al final de este periodo las
cavidades nasal y bucal se comunican ampliamente y la lengua ya se ha
desarrollado.
En la segunda fase, durante la séptima y octava semanas, se efectúa el desarrollo
del paladar, dando lugar a la separación de las cavidades bucal y nasal. Las
malformaciones más comunes de la cara, el labio hendido y el paladar hendido, se
originan respectivamente durante la primera y segunda fases.
2. Objetivos.
Objetivo general:
Definir las diferentes etapas que el embrión recorrerá para el desarrollo y
crecimiento de las estructuras que principalmente darán origen y conformación a
la cabeza, la cara y la cavidad bucal.
Objetivos específicos:
Demostrar detalladamente las estructuras embriológicas que se originarán
a través de cada uno de los arcos branquiales.
Explicar la función que realizarán los bloques formadores de la cara hasta
que ésta alcance su máximo desarrollo.
Mostrar los diferentes músculos que van a derivar del I y II arcos
branquiales.
Determinar la formación de la lengua, exponiendo sus partes y los
músculos de los que se compone.
3. Cambios embriológicos que dan origen a cabeza y cara.
Después de la fecundación del óvulo, una serie de divisiones celulares da origen
a una masa celular que recibe el nombre de mórula. En la mayoría de los
vertebrados, inclusive en el ser humano, la mayor parte de esta masa celular
forma las membranas extraembrionarias y estructuras nutricias, tales como la
placenta. Menos de una cuarta parte de células de dicha masa celular se reúne
eventualmente para formar un grupo único, que constituirá el embrión.
La movilización de las células convierte luego este disco embrionario en una
estructura bilaminar con un espacio intermedio, o espacio potencial. Otro
movimiento bien integrado de células migratorias activas desde la capa superior
de ambas capas lleva a la formación de una tercera capa lleva a la formación de
una tercera capa de células (gastrulación) que ocupa el espacio entre ellas. De
estas capas “germinativas” la superior se denomina ectodermo; la media,
mesodermo, y la inferior endodermo. De tal modo, en este periodo, principalmente
por división y migración, han aparecido tres poblaciones diferentes de células
embrionarias, las cuales, al continuar el desarrollo, siguen una trayectoria
definidamente separada.
4. Es durante la gastrulación cuando comienza a
formarse un surco en la línea media (línea
primitiva), que se va a extender a lo largo del
disco. Se pueden distinguir 2 extremos: extremo
cefálico o craneal (en el cual se formará
posteriormente la cabeza), y el extremo caudal,
(que corresponde con la parte caudal de la
médula espinal).
Posteriormente las células que se invaginan del nódulo primitivo forman la
notocorda, las migraciones de células crean nuevas asociaciones entre las
células, las cuales a su vez permiten posibilidades únicas para el desarrollo a
través de interacciones, aislando
diferentes poblaciones celulares o
tejidos.
Por ejemplo, una banda
intermedia de células
mesodérmicas (la notocorda) que
se extiende por toda la longitud del embrión induce la formación de la placa neural
dentro del ectodermo suprayacente. A partir del ectodermo que sigue los bordes
de la placa neural se desarrolla una población única de células. Son las células de
la cresta neural. Experimentan amplias migraciones, comenzando por lo común al
mismo tiempo que se produce el cierre del tubo y dan origen a una variedad de
células diferentes que forman componentes de muchos tejidos. Estas células de
la cresta que emigran hacia la región del tronco forman, células nerviosas,
endocrinas y pigmentarias, mientras que las que emigran hacia la cabeza y el
cuello contribuyen a los tejidos esqueléticos y conectivos (por ejemplo, cartílago,
hueso, dentina, dermis, etc.). De los tejidos duros de la región facial, parecería que
el esmalte dentario es el único que no es formado por elementos de la cresta, ya
que las células que lo forman derivan del ectodermo que tapiza la cavidad bucal.
5. Las células de la cresta neural se hallan localizadas en un principio entre la lámina
neural y el ectodermo superficial, pero estas migran en dirección del plegamiento.
El tubo neural se forma a
partir de las células del
ectodermo (la capa exterior),
las cuales comienzan a formar
el surco neural, que se
formará a partir de la línea
media. El surco comenzará a
profundizarse y las paredes a
ensancharse, formando los
pliegues neurales. Dichos
pliegues se irán acercando a
la línea media formando las crestas neurales y finalmente al cerrarse formarán el
tubo neural. El tubo neural más tarde forma los principales componentes del
encéfalo y la médula espinal.
El tubo neural da la forma del embrión, de éste se desprende el crecimiento del
sistema nervioso central. En la zona más cefálica existe un notorio crecimiento o
ensanchamiento, lo que permitirá conformar una región de mayor volumen,
correspondiente a la región facial.
A partir que el embrión se encuentra de catorce días, la extremidad cefálica puede
reconocerse por ser la región opuesta a aquella en la que aparece la línea
primitiva. Cuando aparece la placa precordal, queda indicado el lugar donde se
formará más adelante el estomodeo, primer esbozo de la boca.
En la tercera semana embriológica, los pliegues neurales no se han fusionado aun
en la región cefálica. Las células de los bordes de los pliegues neurales desde el
diencéfalo hacia el lado posterior constituyen la cresta neural.
6. Las células de las crestas a nivel prosencefálico no emigran y forman regiones
craneales concretas cuando el neuroporo anterior se cierra, como ejemplo la
adenohipófisis y, algo más, a cada lado, las placodas olfativas (origen del epitelio
olfativo), la piel del labio superior y la de la parte central del área frontonasal,
(incluida la mucosa que cubre la porción anterior del paladar).
Llegado el día diecinueve postovulación,
el embrión inicia un plegamiento a nivel
cefálico. La región prosencefálica del
tubo neural se encuentra recubierta por
ectomesénquima emigrado de la cresta
neural mesencefálica, bajo el ectodermo
superficial y hace protrusión en la región
craneal a la membrana bucofaríngea.
Esta prominencia recibe el nombre de
proceso frontonasal donde,
bilateralmente, se aprecian unos
pequeños engrosamientos epiteliales: las
placodas olfativas. Más dorsalmente, el
ojo se está desarrollando por la
interacción entre la vesícula óptica, el
mesénquima circundante y el ectodermo
suprayacente.
Caudal a la membrana bucofaríngea, el
mesénquima que ocupa el espacio entre
el endodermo de la cara ventral de la faringe y el ectodermo superficial, forma
unas barras bilaterales que crecen en dirección ventral, entre las cuales
ectodermo y endodermo contactan virtualmente originándose los arcos
branquiales, viscerales o faríngeos, los cuales separan ahora la membrana
bucofaríngea de la región cardíaca.
7. Se forman seis arcos sucesivamente, si bien los dos últimos apenas son
perceptibles externamente, de modo que solo cuatro son claramente reconocibles.
Son: el primer arco o arco mandibular, el segundo arco o arco hioideo y el tercer y
cuarto arcos.
Un arco branquial típico está formado, por tanto, por una región central de
mesénquima y un epitelio que lo recubre externa e internamente. Entre los arcos,
el epitelio externo e interno contacta y forman, en la cara interna, las bolsas
faríngeas y, en la cara externa, las hendiduras branquiales, de donde derivarán
importantes estructuras.
El epitelio que recubre los arcos
branquiales externa e internamente
tiene diferentes orígenes. El epitelio
externo es de origen ectodérmico
para todos los arcos, mientras que
el interno es de origen ectodérmico
en el primer arco y endodérmico en
los demás.
El epitelio de los arcos branquiales sufre modificaciones conforme éstos se
desarrollan. La modificación de las hendiduras branquiales y las bolsas faríngeas
conduce a la formación del contorno del cuello.
El arco más craneal, y el primero en aparecer hacia el día 22 postovulación, es el
primer arco o arco mandibular. Este arco está formado inicialmente por dos
prominencias bilaterales que crecen ventromedialmente en el suelo de la faringe
hasta fusionarse en la línea media (procesos mandibulares), a las que se añaden,
algo más tarde, dos protrusiones situadas en su región dorsal: los procesos
maxilares.
Del mesénquima de origen crestal que contiene el primer arco se forman dos
cartílagos a cada lado. El más dorsal parece formar el yunque y contribuir al ala
mayor del esfenoides y a las raíces de las apófisis pterigoides. El más ventral, de
8. mayor tamaño, es el cartílago de Meckel, que se fusiona en la línea media con el
contralateral. La porción más dorsal de este cartílago se separa y forma el martillo.
El cartílago de Meckel induce a su alrededor la osificación membranosa de la
mandíbula y se reabsorbe posteriormente.
El segundo arco es el arco hioideo. Su elemento cartilaginoso es el cartílago de
Reichert, que se extiende desde la base del cráneo hasta la línea media. Su parte
dorsal se separa y da lugar al estribo.
El mesénquima de los arcos tercero a sexto no origina cartílagos más que en su
porción ventral. El del tercero forma el asta mayor del hioides y la porción caudal
del cuerpo, mientras que el cartílago tiroides, aritenoides, corniculado y cuneiforme
se desarrollan del cuarto y quinto arcos.
DESARROLLO DE LA CABEZA.
Las estructuras de la superficie de la cabeza y de la cara, se desarrollan
asociadas al mesénquima del proceso frontonasal y de los arcos branquiales.
El mesénquima es el tejido conectivo primitivo que deriva tanto del mesodermo
primitivo como de la cresta neural. El proceso frontonasal y el primer par de arcos
branquiales forman los límites del estomodeo, que luego dará como resultado el
origen de la boca.
El estudio de las etapas del desarrollo embriológico de la cabeza se divide en dos
porciones:
- Porción neurocraneana
- Porción visceral.
Porción neurocraneana: esta porción presenta un desarrollo verdaderamente
acelerado en las primeras semanas embrionarias. Es la más visible del embrión y
partir de ella se forman las siguientes estructuras:
9. Las estructuras óseas o de sostén (calota craneal).
El sistema nervioso cefálico.
Los ojos, los oídos y la porción nerviosa de los órganos Olfatorios.
La porción neurocraneana deriva del ectodermo y en menor proporción del
mesodermo (en porción externa del oído principalmente).
Porción Visceral: entre los principales elementos que intervienen en la formación
de la porción visceral están los arcos branquiales y sus derivados. Cabe destacar
que los arcos branquiales son 6, sin embargo, en el humano el quinto tiene un
carente desarrollo y el sexto no aparece. Esta porción es visible en la etapa fetal y
postnatal y dará origen a:
La porción inicial de los aparatos:
a) Digestivo: La boca o cavidad bucal y sus anexos.
b) Respiratorio: la nariz y las fosas nasales.
Las estructuras faciales, que se forman a partir de los arcos branquiales
(originados, a su vez, de la faringe primitiva) con sus tejidos duros y
blandos.
Bloques formadores de la cara.
DESARROLLO DE LA CARA Y DE LAS CAVIDADES NASAL Y BUCAL.
Al terminar la migración inicial de las células de la cresta y la vascularización del
mesénquima de ellas derivado, una serie de protuberancias
o evaginaciones que se denominan “procesos faciales” dan
comienzo a los periodos siguientes del desarrollo facial.
Antes de la migración de las células de la cresta, el
ectodermo superficial se encuentra recubriendo al
prosencéfalo en desarrollo. Influencias inductoras que se
originan en el prosencéfalo dan comienzo a la formación de
10. las placodas nasales en el ectodermo superficial. Se reconocen las placodas como
engrosamientos ectodérmicos, y dan origen a una variedad de estructuras tales
como el cristalino del ojo y el epitelio del oído interno. Las placodas nasales
formarán más tarde el epitelio sensitivo para la olfacción. Luego de la inducción,
las células mesenquimáticas separan el ectodermo de la placoda nasal, del
prosencéfalo subyacente.
Desarrollo temprano. En el embrión humano (Figura A) de 3mm. de longitud (3
semanas), la mayor parte de la cara consiste de una prominencia redonda
formada por el cerebro anterior (prosencéfalo), que está cubierto por una capa
delgada de mesodermo y por ectodermo. Debajo de la prominencia redondeada
hay un surco profundo, la fosa bucal primaria (estomodeo o depresión
estomodeal), limitada caudalmente por el arco mandibular (primer arco branquial),
lateralmente por los procesos maxilares, y hacia la extremidad cefálica por el
proceso frontonasal (Figura B). Durante las fases tempranas de desarrollo, se
pueden observar dos salientes situadas en la porción lateral y anterior, sobre el
arco mandibular, unidos en la parte
central por una cópula (Figuras A a E).
Estas salientes desaparecen más tarde
alrededor de la séptima semana. (Figura
F).
El estomodeo profundiza para encontrar
el fondo de saco del intestino anterior. El
estomodeo y el intestino anterior están
separados por la membrana
bucofaríngea, compuesta de dos capas epiteliales. Hay una bolsa ectodérmica
adicional, derivada del estomodeo, la bolsa de Rathke, que forma después el
lóbulo anterior de la hipófisis. El revestimiento del estomodeo es de origen
ectodérmico. Por lo tanto el revestimiento de las cavidades bucal y nasal, el
esmalte de los dientes y las glándulas salivales son de origen ectodérmico. El
revestimiento faríngeo es endodérmico, puesto que se forma a partir del intestino
11. anterior se establece alrededor de la tercera o la cuarta semanas, cuando se
rompe la membrana bucofaríngea.
Esencialmente, la cara se deriva de siete esbozos: los dos procesos mandibulares
que se unen muy tempranamente, los dos procesos maxilares, los dos procesos
nasales laterales, y el proceso
nasal medio. Los procesos
mandibulares y maxilares se
originan del primer arco
branquial, mientras que el
nasal medio y los dos nasales
laterales provienen de los
procesos frontonasales, que a
su vez se originan en la
prominencia que cubre al
cerebro anterior.
El primer cambio importante en la configuración de la cara es consecuencia de la
proliferación rápida del mesodermo que cubre el cerebro anterior. (Figura A y B).
Esta prominencia, el proceso frontonasal, formará la mayor parte de las
estructuras de las porciones superior y media de la cara. A continuación lo más
notable es la formación y el ahondamiento del estomodeo, de las fositas olfatorias
(nasales) y la división de la porción caudal del proceso frontonasal en los procesos
nasal medio y los dos nasales laterales. (Figura C a F). Los procesos nasales
laterales están junto a los maxilares (Figura C), y separados de ellos por medio de
los surcos poco profundos, los surcos nasomaxilares. Antiguamente se llamaban
surcos nasolagrimales, pero se reconoce ahora que los surcos nasolagrimales,
que dan origen a los conductos del mismo nombre, aparecen en una situación
paralela y media en relación a los surcos nasomaxilares.
El proceso nasal medio al principio es mayor que los procesos nasales laterales
(Figura C y D), pero después se retrasa en su crecimiento. (Figura E a G). Sus
ángulos inferolaterales, prominentes y redondeados, se conocen como los
12. procesos globulares (Figura D), y están unidos originalmente con los procesos de
ambos maxilares. En este sitio no se produce fusión. (Figura E). Los procesos
nasales laterales no contribuyen a formar el límite superior del orificio bucal.
Los cambios subsecuentes que ocurren se deben solo en parte a la unión de los
procesos inicialmente separados. Los procesos, en la mayor parte de los casos,
estaban separados por surcos proco profundos (por ejemplo, los procesos
maxilares y mandibulares) o por fositas (por ejemplo, los procesos nasal medio y
los laterales). Por ello, la mayoría de los cambios considerados como “fusiones”.
resultan de la disminución en profundidad y la desaparición de los surcos o fositas.
Eventualmente, los procesos medionasal y lateronasal establecen contacto entre
sí, por debajo de la fosita olfatoria en desarrollo. Durante la quinta semana de la
gestación humana, una parte del epitelio adherente se desintegra de manera que
el mesénquima de los dos procesos adquiere continuidad.
FORMACIÓN DE LA CAVIDAD BUCAL
El estomodeo es la depresión que se forma a consecuencia del plegamiento
trilaminar al final de la tercera semana. Esta cavidad está limitada por:
13. - Delante: por el proceso frontal en desarrollo.
- Detrás y hacia abajo: por la eminencia cardíaca.
- Lateralmente: por los arcos branquiales.
- Fondo: está separada de la faringe por la membrana bucofaríngea.
La membrana es bilaminar y está constituida por dos capas de células, una de
origen ectodérmico y otro endodérmico, respectivamente. El revestimiento del
estomodeo es de naturaleza ectodérmica. A nivel del techo se origina una
invaginación, es una bolsa adicional derivada del estomodeo llamada bolsa de
Rathke, que formara el lóbulo anterior de la hipófisis.
La comunicación entre la cavidad bucal primitiva y la faringe se establece al
finalizar la cuarta semana al romperse la membrana bucofaríngea. Las estructuras
que rodean al estomodeo crecen y se agrandan rápidamente.
Solo dos semanas después de este acontecimiento, cuando el embrión tiene
alrededor de seis semanas, se produce la diferenciación de la lámina dental o
listón dentario, primer signo del desarrollo de los órganos dentarios u
odontogénesis.
La boca primitiva es superficial, la profundidad resulta del crecimiento hacia
delante de las estructuras que la rodean. Se encuentra tapizada por un epitelio
biestratificado constituido por una capa profunda de células altas y otra superior de
células aplanadas. Al tercer mes en el epitelio de la mucosa basal y la superficial.
El número de hileras celulares de este epitelio plano estratificado va aumentado
en relación directa con la edad gestacional, hasta alcanzar en general un número
de ocho o nueve estratos celulares al nacimiento.
FORMACIÓN DEL PALADAR.
El paladar primario se desarrolla entre la quinta y sexta semanas.
El paladar secundario: entra la séptima y octava semanas a expensas de la cara
interna de los procesos maxilares.
14. La fusión: en la décima u onceava semanas de desarrollo.
Para formar el paladar primario los procesos nasales medios (PrNm) se unen no
solo en superficie, sino también en profundidad y surge así una estructura
embrionaria especial el segmento intermaxilar o pre maxilar el cual está
constituido por 3 estructuras:
1. Componente labial: que forma la parte media o filtrum del labio superior.
2. Componente maxilar: que comprende la zona anterior del maxilar que
contiene a su vez a los cuatro incisivos superiores y su mucosa bucal.
3. Componente palatino: es de forma triangular con el vértice dirigido hacia
detrás y da origen al paladar primario.
Las fositas olfatorias comprendidas entre los procesos nasales medios y los
procesos nasales-laterales se invaginan aún más en el mesénquima cefálico y su
extremidad caudal se une al techo de la boca primitiva de la que está separada
por una membrana buconasal de origen exclusivamente ectodérmico. A la sexta
semana se perfora y se establece el contacto entre las cavidades nasal y bucal.
15. El orificio se llama coana primitiva y está situado por detrás del paladar primario.
Más tarde esta apertura se ubica en la faringe, cuando se forma el techo definitivo
de la cavidad bucal, que separa la cavidad bucal de la nasal.
El desarrollo del paladar secundario, y mientras tiene lugar los mecanismos de
formación del macizo facial, de la cara interna de los procesos maxilares que
forman las paredes laterales de la boca, se originan dos prolongaciones a manera
de estantes que se denominan procesos palatinos laterales o crestas (PrPl). Estos
crecen hacia línea media para unirse más adelante entre sí y formar el paladar
secundario.
Al final de la octava semana, al descender la lengua y el piso o suelo de la boca,
los procesos palatinos laterales o crestas, cambian de dirección dirigiéndose hacia
arriba, luego se ubican de manera horizontal, lo que facilita el contacto entre sí,
dando origen a una fusión real de ambos procesos. De esta forma se constituye el
paladar secundario.
Músculos derivados de I y II arcos branquiales.
o Músculos del primer arco faríngeo.
Músculos de la masticación.
Los músculos de la masticación se originan embriológicamente del primer arco
branquial, por lo que están inervados por la raíz motora del nervio trigémino. En
los vertebrados inferiores constituyen una masa única extendida desde la base del
cráneo hasta la mandíbula, la cual en el desarrollo filogenético se diferencia en los
diferentes músculos a medida que la función masticatoria adquiere más
importancia y los movimientos mandibulares se hacen más complejos. En los
mamíferos el músculo lateral se diferencia en el masetero y el temporal, y el
músculo medial se diferencia en el pterigoideo medial y pterigoideo lateral.
16. En el primer arco faríngeo, el mesodermo paraxial derivado del cuarto somitómero
craneal da lugar a los músculos de la masticación: temporal, masetero y
pterigoideo lateral o externo y medial o interno, así como a los músculos
milohiodeo, vientre anterior del digástrico, tensor timpánicos y tensores del velo
del paladar.
Músculo temporal
El músculo temporal (crotáfites) ocupa la fosa
temporal. Se extiende desde la fosa temporal
hasta el proceso coronoideo de la mandíbula.
Desde las diferentes áreas de origen las fibras
musculares convergen para terminar insertándose
en la cara medial y borde anterior del proceso
coronoideo. Al lado de este tendón se observan
fascículos que se originan en la cara infratemporal
del ala mayor del esfenoides y terminan en el margen lateral del borde anterior del
proceso coronoideo, hasta la proximidad de la línea oblicua de la mandíbula y el
trígono retromolar.
La inervación procede de la rama mandibular del trigémino, que le suministra tres
nervios temporales profundos: anterior, medio y posterior.
La acción del músculo temporal es elevador de la mandíbula y la aplica contra el
maxilar. El análisis funcional de las porciones del músculo indica que: a) la fibras
anteriores, verticales, son elevadoras de la mandíbula; b) las fibras medias,
oblicuas hacia atrás y arriba, tiran de la mandíbula en la misma dirección; y c) las
fibras posteriores u horizontales tiran de la mandíbula hacia atrás cuando el
cóndilo se encuentra desplazado hacia de la delante de la cavidad articular.
17. Músculo masetero.
El masetero es un músculo fuerte y robusto, de forma rectangular, que se extiende
desde el arco cigomático hasta la cara lateral de la rama mandibular. Por su
tamaño y las características de la sección de su corte transversal, el músculo
masetero se considera el más fuerte de todo el organismo.
La inserción del masetero presenta dos porciones o fascículos, uno superficial y
otro profundo. La porción superficial es la más voluminosa, toma su origen en el
borde inferior del arco cigomático y se extiende por una lámina aponeurótica
superficial desde la sutura cigomático maxilar hasta el cigomático temporal.
La porción profunda se origina por fibras carnosas de la cara medial del arco
cigomático, en la parte correspondiente al hueso temporal. Sus fibras se dirigen
hacia abajo y adelante casi verticalmente, y quedan cubiertas por la porción
superficial para insertarse en la cara lateral de la rama.
El músculo masetero está inervado por el nervio masetérico, procedente de la
rama mandibular del trigémino, el cual alcanza el músculo por su cara profunda.
Las arterias proceden de la maxilar, la transversa de la cara y la facial. El músculo
masetero desarrolla la acción de ser elevador de la mandíbula.
Músculo pterigoideo medial.
El músculo pterigoideo medial (pterigoideo
interno) se encuentra situado en la fosa
infratemporal, por dentro de la rama
mandibular. Es grueso, de forma
rectangular, y se extiende desde el proceso
pterigoideo hasta la cara medial de la rama.
Por su analogía con el fascículo superficial
del masetero también se le ha
llamado masetero interno
18. El pterigoideo medial se inicia por arriba en la fosa pterigoidea, por debajo de la
fosa escafoidea, en lo que corresponde a la cara medial de la lámina lateral, el
fondo de la fosa pterigoidea y el proceso piramidal del palatino (fascículo palatino).
Está inervado por el nervio pterigoideo medial, una rama del nervio mandibular del
trigémino. El nervio penetra en el músculo en la proximidad de su borde posterior,
junto con la arteria pterigoidea. Las arterias proceden de la palatina ascendente y
de la maxilar. El pterigoideo medial es elevador de la mandíbula y, a causa de su
oblicuidad, participa con poca acción en el movimiento de lateralidad, el cual
depende fundamentalmente de pterigoideo lateral.
Músculo pterigoideo lateral.
El músculo pterigoideo lateral (pterigoideo externo) se encuentra situado en la fosa
infratemporal, por dentro de la rama mandibular. Tiene forma triangular, con la
base dirigida hacia delante. Es más grueso por el borde superior que por el
inferior, y se extiende desde la base del cráneo hasta el cuello del cóndilo
mandibular.
El músculo presenta dos fascículos: uno superior o
esfenoidal, y otro inferior o pterigoideo. La porción
esfenoidal se inicia en la cresta esfenotemporal del
ala mayor del esfenoides; la porción inferior o
pterigoidea se inicia en la lámina lateral del proceso
pterigoideo, la cara lateral del proceso piramidal del
palatino y la tuberosidad del maxilar. La porción
esfenoidal se inserta por detrás en la fosita
pterigoidea y cápsula articular, y en el borde
anterior del disco articular de la articulación
temporomandibular. La porción inferior lo hace en la fosita pterigoidea del cuello
del cóndilo mandibular. El músculo se encuentra inervado por ramas procedentes
del nervio temporobucal, y la irrigación arterial procede de ramas de la arteria
maxilar.
19. El músculo pterigoideo lateral, al igual que los demás músculos de la masticación,
tiene su punto fijo en la base craneana y un punto móvil en el cóndilo de la
mandíbula. La acción de músculo tiende a tirar del cóndilo hacia delante, abajo y
adentro, de acuerdo con la dirección de sus fibras.
Músculo milohioideo.
El músculo milohioideo es un músculo que va desde la mandíbula hasta el hueso
hioides, formando el suelo de la cavidad oral. Estos músculos son de origen
mesodérmico.
El músculo milohioideo es plano y triangular, y está situado inmediatamente por
encima del vientre anterior del músculo digástrico. Forma, con su compañero del
lado opuesto, un piso muscular de la cavidad de la boca. Surge de toda la longitud
de la línea milohioideo de la mandíbula, que se extiende desde la sínfisis frente al
último diente molar atrás. Las fibras posteriores pasan inferomedial para insertar
en el cuerpo del hueso hioides. Por lo tanto, pertenece a los músculos
suprahioideos.
Las fibras medias y anteriores se insertan en una mediana Raph fibroso que se
extiende desde la sínfisis mentoniana hasta el hueso hioides, donde se junta en un
ángulo con las fibras del músculo opuesto.
Junto con el vientre anterior del músculo digástrico, el músculo milohioideo está
inervado por el nervio milohioideo, una rama del nervio dentario inferior, que es
una rama del nervio mandibular V3, una división del nervio trigémino también
conocido como nervio craneal V. El milohioideo deprime la mandíbula y eleva el
hioides, el suelo de la cavidad oral, y la lengua. Esto es especialmente importante
durante la deglución y el habla.
20. Músculo tensor del tímpano.
El tensor del tímpano, el más grande de los dos músculos de la cavidad timpánica,
está contenido en el canal óseo encima de la parte ósea de la trompa de
Eustaquio. Su función es amortiguar los sonidos, tales como las producidas por
masticar.
Surge de la porción cartilaginosa de la trompa de Eustaquio y la parte adyacente
de la gran ala del esfenoides, así como desde el canal óseo en el que está
contenido. Al pasar hacia atrás a través del canal, que termina en un tendón
delgado que entra en la cavidad timpánica, hace una curva cerrada alrededor de la
extremidad del tabique, conocido como el cochleariformis processus, y se inserta
en el mango del martillo, cerca de su raíz.
Al tensarse, la acción del músculo es tirar del martillo medialmente, tensar la
membrana timpánica, amortiguación de las vibraciones en la cadena de
huesecillos del oído y reduciendo de ese modo la amplitud de los sonidos. La
inervación del tensor del tímpano es del nervio tensor del tímpano, una rama de la
división mandibular del nervio trigémino. A medida que el tensor del tímpano está
inervado por fibras motoras del nervio trigémino, que no recibe fibras del ganglio
del trigémino, que sólo tiene fibras sensoriales.
Músculo tensor del velo palatino.
El tensor del velo palatino se encuentra antero-lateral del velo palatino músculo
elevador del ano. Se origina por una lámina plana de la fosa escafoides en la base
de la placa pterigoideo medial, de la angularis espina del esfenoides y de la pared
lateral del cartílago de la trompa de Eustaquio.
Descendente vertical entre la placa pterigoideo medial y el músculo pterigoideo
medial, que termina en un tendón que serpentea alrededor de la hamulus
pterigoideo, que se conservan en esta situación por parte de las fibras de origen
21. del músculo pterigoideo medial. Entre el tendón y el hamulus es una pequeña
bolsa. El tendón pasa entonces medialmente y se inserta en la aponeurosis
palatina y en la superficie detrás de la cresta transversal en la parte horizontal del
hueso palatino.
El tensor del velo palatino está inervado por el nervio pterigoideo medial, rama del
nervio mandibular, la tercera rama del nervio trigémino - el único músculo del
paladar no inervado por el nervio vago. La acción del tensor del velo palatino tensa
el paladar blando y, al hacerlo, asiste al elevador del velo del paladar en la
elevación del paladar para obstruir e impedir la entrada de los alimentos en la
nasofaringe durante la deglución. El paladar tensado en consecuencia,
proporciona una plataforma estable para la elevación de la faringe durante la
deglución por los músculos de la faringe.
Vientre anterior del músculo digástrico.
El músculo digástrico está situado en la región anterior del cuello y sus vientres
son los límites de la submandibular (digástrico), submentoniana y triángulos
carótidas. El triángulo submandibular está delimitado por los vientres anterior y
posterior del músculo digástrico y por el margen inferior de la mandíbula. Contiene
la glándula submandibular, ganglios linfáticos submandibulares, vena facial, nervio
hipogloso, nervios y vasos para el músculo milohioideo y la vaina carotídea, que
contiene las arterias carótidas externa e interna, la vena yugular interna y el nervio
vago. El triángulo submentoniano está delimitado por el vientre anterior del
músculo digástrico, el hueso hioides y la línea media anterior, y contiene los
ganglios linfáticos submentoniana y la vena yugular anterior.
El desarrollo del vientre anterior del músculo digástrico comienza en la cuarta
semana de embarazo. Dado que las estructuras derivadas de cada arco faríngeo
están inervados por el nervio correspondiente a cada arco, el vientre anterior del
músculo digástrico está inervado por el nervio trigémino (par craneal V), mientras
que el vientre posterior está inervado por el nervio facial (VII par craneal).
22. o Músculos del segundo arco branquial.
El segundo arco braquial da lugar a la formación del hueso hioides y a la
formación de las regiones adyacentes del cuello. También da origen al estribo del
oído medio, a la apófisis estiloides del hueso temporal y al ligamento estilohioideo.
Las células musculares de los músculos de este Segundo Arco Branquial
provienen de los somitomero 4º y 5º y son inervados por el nervio facial.
La musculatura procedente de este arco es la mímica, importante para la
expresión emocional; también da origen al musculo del estribo, al musculo
estilohiodeo y el vientre posterior del musculo digástrico. La inervación de esta
muscular corresponde al nervio (del VII par craneal).
Los músculos derivados del Segundo Arco branquial Son:
1. Los Músculos de la expresión Facial.
2. Estilohioideo.
3. Vientre posterior del digástrico.
4. Músculo estapedial o del estribo
1. Músculos de expresión facial.
Son los músculos que intervienen en la expresión facial de las emociones.
Los músculos de la expresión facial se dividen en cuatro grupos que son:
Músculo epicraneano (músculo occipito-frontal).
Músculos periorbitales y palpebrales (músculos orbiculares del ojo y el
músculo depresor de la ceja).
Músculos nasales.
Músculos mucolabiales (músculo elevador del labio superior, músculo
elevador del ángulo de la boca, músculo depresor del ángulo de la boca,
músculo risorio, músculo depresor del labio inferior, músculo orbicular de la
boca, músculo cigomático mayor, Músculo Mentoniano).
23. 2. Músculo estilohioideo
Situado oblicuamente desde la apófisis
estiloides de el hueso temporal al hueso
hioides, por adentro y por encima del
vientre posterior del músculo digástrico.
El estilohioideo acompaña en casi toda su
extensión al vientre posterior del digástrico.
Este músculo tiene como función la
elevación y retracción del hueso hioides, lo
que provoca el alargamiento del suelo de la boca.
3. Músculo digástrico
Es llamado digástrico por estar constituido por dos vientres musculares, se
extiende desde la base del cráneo al hueso hioides y desde éste a la porción
central de la mandíbula.
24. Representa en su conjunto
un largo arco de
concavidad dirigida hacia
arriba, que abraza a la vez
a la glándula parótida y la
glándula sub-mandibular.
Cuando el músculo
digástrico se contrae,
produce el elevamiento del
hueso hioides. Si el hioides
se mantiene en su posición
(debido a los músculos
infra-hioides), tiende a
impulsar hacia abajo la
mandíbula y abre la boca adelante y adentro para insertarse finalmente en la fosita
digástrica ubicada en la cara interna del cuerpo de la mandíbula. Que ese
movimiento contribuye en la masticación.
Los músculos más importantes de la cabeza son de las expresiones faciales y los
de la masticación. Los músculos de la masticación que posibilitan el acto de la
digestión, comprenden cuatro grupos:
Temporal, masetero, pterigoideo medial y pterigoideo lateral.
4. Musculo estapedial o del estribo.
Estribo: Deriva de la porción dorsal del organizador del segundo arco
branquiogeno. Es una estructura más o menos redondeada que se encuentra
unida al resto del cartílago, por el segmento interhiliano de Broman. El estribo está
atravesado por un rama arterial de la estapedia, del segundo arco aórtico. Más
tarde una porción mesenquimatosa próxima, denominada lamina estapedial, se
une con la porción correspondiente del estribo, constituyendo la platina definitiva.
25. Cuando el embrión tiene 18 mm (8 semanas aprox.) el estribo se está formando
en un área adyacente al extremo dorsal del segundo arco faríngeo. El estribo en
esta época es una condensación en forma de anillo con la arteria estapedial
atravesándola.
El músculo estapedial hace su primera aparición como una pequeña colección de
premioblastos tardíos en la parte caudal del extremo dorsal del segundo arco
faríngeo. A los 18-20 mm (8,4 semanas), el músculo estapedial se define mejor y
está compuesto de mioblastos tempranos que se unen al estribo y al segundo
cartílago.
El músculo estapedial amortigua la capacidad de la vibración del estribo y protege
el oído interno de altos niveles de ruido, principalmente el volumen de su propia
voz. Comparar también la función del músculo tensor del tímpano, que amortigua
los sonidos asociados principalmente con la masticación.
26. Formación de la lengua.
La lengua comienza a formarse entre la cuarta y quinta semana del desarrollo, a
partir del primer, segundo, tercer y cuarto arco branquial.
El primer arco branquial se encuentra cubierto por ectodermo, y de esta porción va
a surgir lo que será el cuerpo de la lengua; mientras que la raíz de la lengua, que
proviene del segundo, tercer y cuarto arco branquial, está revestida por epitelio
endodérmico también van a surgir dos prominencias o protuberancias, las
protuberancias linguales laterales; y el tubérculo impar, que después formarán los
dos tercios anteriores o el cuerpo de la lengua.
A partir del mesénquima del segundo, tercer y parte del cuarto arco branquial,
aparecerá la cópula o eminencia hipobranquial; y por último, existe otra
prominencia derivada de la porción posterior del cuarto arco, indicando el
desarrollo de la epiglotis.
Estas dos porciones, los dos tercios anteriores de la lengua, y el tercio posterior se
encuentran separados de la raíz por el surco terminal que presenta forma de V.
En la línea media entre el tubérculo impar y la cópula se forma la glándula tiroides
primitiva como un divertículo epitelial dentro del piso o suelo de la faringe. Este
divertículo se separa de la mucosa que le da origen y emigra en dirección caudal.
El esbozo de la glándula tiroides se desarrolla en la parte caudal del tubérculo
impar mediante una invaginación endodérmica que va emigrando hacia abajo por
delante de la cavidad intestinal. El punto de origen, donde se produce esta
invaginación en la base de la lengua, es el denominado agujero ciego.
27. Las protuberancias linguales laterales, en su crecimiento, van comprimiendo al
tubérculo impar, que se va haciendo más pequeño hasta que, por último
desaparece. Esta fusión de las protuberancias linguales laterales se hace evidente
gracias al rafé medio lingual. A partir de las ocho semanas empiezan a formarse
en la superficie de la mucosa dorsal, lo que son las papilas linguales donde estas
se empiezan a esbozarse en la superficie de la mucosa dorsal. Hay cuatro tipos de
papilas linguales, sin embargo las que primero se diferencian, son las papilas
fungiformes, luego las filiformes, las caliciformes y las foliadas.
En las semanas 18 y 20 semanas comienzan aparecer los que son las fibras
musculares con su estriación transversal. También las glándulas linguales
comienzan su formación morfológica en donde a la vez se están formando lo que
son los tejidos del órgano lingual y están comenzando a tomar una mejor
expresión de la estructura del órgano.
Se observa los tejidos linfoides de la amígdala lingual por la parte de atrás de las
papilas caliciformes, ya que pertenece a la raíz faríngea de la lengua.
Una vez formado el piso o suelo de la boca a expensas principalmente de la cara
interna del proceso mandibular, la lengua desciende, conjuntamente con el maxilar
inferior, y transforma la cavidad bucal de virtual en real a las nueve semanas. Esto
facilita que los procesos palatinos laterales del paladar secundario, como ya
indicamos previamente se horizontalizen y se fusionen entre sí.
Partes de la formación de la lengua.
El cuerpo o porción bucal comprende los 2/3 anteriores, la raíz o porción faríngea,
el 1/3 posterior, separados ambos por la V lingual o istmo de las fauces. Las
partes de la lengua son:
Cara superior: También se llama dorso de la lengua, que presenta la V lingual,
abierta hacia delante, formada por las papilas caliciformes. La superficie del dorso
de la lengua por delante de la V lingual, está en relación con el paladar, suele ser
lisa y poseer unos surcos congénitos y otros adquiridos que diferencian las
28. lenguas de los individuos. Un tipo de lengua con surcos irregulares es la lengua
escrotal. La mayoría de las personas poseen una línea central que es el surco
central. La superficie de la parte posterior de la lengua es más irregular y
comprende a la amígdala lingual, que está en relación con la faringe. Más abajo se
encuentra la epiglotis y los repliegues glosoepiglóticos.
Cara inferior: Descansa en el suelo de la boca. En la línea media se encuentra el
frenillo o filete lingual, de forma semilunar, muy resistente que limita los
movimientos de la lengua. A ambos lados del frenillo de la lengua, en su parte más
anterior, aparecen dos tubérculos perforados en su centro que son los orificios de
los conductos de Wharton u orificios de salida de las glándulas salivales
submaxilares. Más posteriores se encuentran los orificios de salida de las
glándulas sublinguales. Las venas raninas se visualizan azuladas en la cara
inferior de la lengua, a ambos lados del frenillo.
Bordes linguales: Son libres, redondeados y en relación con los arcos dentarios.
Base de la lengua: Es gruesa y ancha y está en relación de delante hacia atrás
con los músculos mil hioideos y gen hioideos, con el hueso hioides y con la
epiglotis a la que se halla unida por los tres repliegues glosoepiglóticos.
Punta lingual: También se llama vértice lingual.
Una vez formado el piso o suelo de la boca a expensas de la cara interna del
proceso mandibular, la lengua desciende con el maxilar inferior y transforma la
cavidad bucal de virtual en real a las nueve semanas. Esto facilita que los
procesos palatinos laterales del paladar secundario, como ya indicamos
previamente se orientaliza y se fusionen entre si.
MÚSCULOS DE LA LENGUA
Algunos de los músculos de la lengua probablemente se diferencian in situ, no
obstante, la mayoría de ellos se organizan a partir de mioblastos.
29. La musculatura lingual permite a la lengua gran movilidad. Esta musculatura
consiste en músculos extrínsecos, originados fuera de la lengua, y músculos
intrínsecos, originados dentro de ella. Todas las fibras musculares de la lengua
son esqueléticas. Los músculos de la lengua son 17 y son:
1. Músculo genio gloso: Se inserta en la apófisis geni de la mandíbula y se
dirige en forma de abanico a la lengua.
2. Músculo estilogloso: Se inserta en la apófisis estiloides del hueso temporal.
3. Músculo hiogloso: Se inserta en el hueso hioides.
4. Músculo palatogloso: También se llama músculo glosoestafilino y constituye
el espesor del pilar anterior del velo del paladar.
5. Músculo faringogloso.
6. Músculo amigdalogloso.
7. Músculo lingual superior: Es un músculo impar y medio.
8. Músculo lingual inferior:
9. Músculo transverso de la lengua:
Los corpúsculos gusta torios presenta cinco tipos de células:
1. Células oscuras.
2. Células claras.
3. Células intermedias.
4. Células basales e internas.
5. Células de sostén.