Este documento narra la historia de la Virgen de la Paloma de Madrid a través de cuatro secciones. Relata cómo una paloma siguió a una imagen de la Virgen hasta una iglesia, dando origen al nombre de la calle de la Paloma. Describe cómo un cuadro de la Virgen fue encontrado y colocado en esta calle, atrayendo devotos. Explica la tradición de presentar bebés ante la imagen y la procesión anual el 15 de agosto. Finalmente, describe las celebraciones de la Verbena de la Paloma en honor a la
5. Todo tiene su historia o su leyenda, así que os
invito a que me acompañéis a conocerla
La Virgen a la que todos llamamos de la Paloma,
no es una imagen tallada en madera
ni una estatua…
sino… UN CUADRO
de autor desconocido,
realizado en el siglo XVIII y
sin gran valor artístico.
7. I. La calle
Una tradición cuenta como un día se estaba transportando a
la Virgen de las Maravillas a una iglesia en esta misma calle
cuando una paloma pareció seguir a la virgen hasta el interior
del templo.
A partir de entonces la paloma permaneció siempre
acompañando a la imagen de la Virgen de las Maravillas
hasta su muerte, y por ello la calle fue rebautizada con el
nombre de calle de la Paloma.
8. II. El cuadro
El cuadro se encontraba abandonado debajo de un montón de leña y lo
encontró un hombre que allí había acudido para buscar leña. Este
hombre se lo regaló a unos niños que estaban jugando. Una mujer
llamada Andrea Isabel Tintero les vio jugar con el lienzo y decidió
quedarse con él a cambio de unas pocas monedas. Después de limpiarlo,
le puso un marco y a continuación lo situó en la entrada de su casa, que
se hallaba en la calle de la Paloma.
9. III. La Tradición
Un día se le ocurrió poner a su hijo
delante de la imagen para obtener
su bendición, y este gesto no
tardaría en ser repetido por sus
vecinos y en poco tiempo se
extendió por toda la ciudad la fama
de que la imagen expuesta en la
calle de la Paloma era milagrosa y
protegía sobre todo a los bebes.
A partir de entonces se inició la costumbre entre
las madres de presentar a sus hijos ante la
imagen de la Virgen de la Soledad de la calle de
La Paloma, costumbre que aún perdura y que
se celebra especialmente el 2 de febrero,
festividad de La Presentación de Jesús, o "día
de las candelas", con una popular y bulliciosa
asistencia de padres y abuelos que llevan a sus
hijos a cumplir esa devoción.
11. Cada 15 de Agosto por la tarde, un escuadrón del Cuerpo de Bomberos baja
el cuadro de Nuestra Señora desde su retablo.
A partir de 1939, se comenzó a llevarla en un coche de bomberos, adornado
con mantones de Manila, y, desde entonces, los bomberos tienen a gala bajar
y subir el cuadro al tiempo de la procesión, y darle escolta de honor por todo
el recorrido.
Actualmente la Virgen es entronizada en su carroza y comienza su recorrido
por las calles del barrio.
13. Las fachadas han sido
engalanadas y de ellas
cuelgan faroles,
guirnaldas y mantones
multicolores, y los más
castizos ya han
recogido del tinte sus
trajes de chulapos y
chulapas para lucirlos
en los paseos y bailes
de verbena.
14. "La Paloma –decía Francisco Azorín- no
es patrona de Madrid, pero sí reina
plenamente en muchos corazones
humildes que habitan en la Villa”
16. Para terminar
una Zarzuela
te has de marcar….
La historia transcurre en Madrid
en el atardecer y noche del 14 de
Susana y Casta, dos jóvenes trabajadoras de un
agosto.
comercio de la zona, aceptan los galanteos de
un maduro boticario, don Hilarión.
Julián, que está enamorado de la Susana se
pone de los nervios y no ve con buenos ojos ni
al viejo boticario ni sus intenciones.
Llega el día de la Verbena de la Paloma y las
dos jóvenes, con su mantón de Manila y un
vestido de seda chiné, deciden acompañar a su
anciano admirador a la verbena…
Julián estará allí, acompañado de su Tía Rita,
que no cesa de intentar disuadirle de ceder a la
ira, recordándole a cada paso: "que tiés madre“