1. Comentario del nuevo edificio del IES Segundo de Chomón
-Victoria Barrado y Sara Gómez-
Introducción:
Este edificio se trata de un instituto de educación secundaria y formación profesional, diseñado
por el arquitecto turolense José Antonio Gómez Muñoz. Construido entre el año 2008 y el 2010,
está situado entre el barrio Ensanche y el barrio La Fuenfresca, en la zona que, debido al
crecimiento de la ciudad, está siendo urbanizada. El motivo de su construcción ha sido el
necesario traslado del IES Segundo de Chomón, cuyo edificio era “antiguo” y también estaba en
una zona en la que ya había dos institutos más, mientras que en su nueva ubicación, casi con la
misma cantidad de vecinos, no había ninguno.
Gómez Muñoz también ha sido el encargado del diseño de los nuevos edificios educativos de la
Ciudad Escolar, como el Colegio Mayor, el Vicerrectorado y el edificio de Bellas Artes, que
siguen la misma línea estética; así como el edificio de la DGA.
A pesar de su apariencia tan moderna y actual, ya hace un siglo que otros arquitectos idearon
edificios parecidos a este.
Análisis formal:
Se trata de un instituto, cuya función es albergar
a profesores y alumnos para la enseñanza.
Tiene una planta en forma de H, con alguna
prolongación. Viéndolo desde la perspectiva de
la persona que entra, se divide en tres partes: la
parte central, donde se encuentran los
principales servicios, como conserjería,
secretaría, la biblioteca…; en la parte izquierda
se sitúan las aulas de ESO (1ºy 2º en la planta
baja; y 3º y 4º en la primera) y bachillerato (en la
segunda planta), así como los diferentes departamentos de los profesores; y en la parte de la
derecha se encuentran las aulas de los ciclos formativos (futuros talleres de automoción y
gimnasio en la planta baja; aulas del ciclo formativo de electrónica y electricidad en la segunda; y
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2. aulas del módulo de informática y peluquería en la tercera). A la izquierda de la zona de ESO y
bachiller está situado el aparcamiento para los profesores; por delante y por detrás del módulo
central hay jardines (cuyas plantas y árboles todavía no han tenido tiempo de crecer); y a la
derecha de la zona de los módulos están las pistas de fútbol al aire libre, con gradas y una zona
vacía (sólo hay suelo) entre el edificio y las
gradas/pistas.
En cuanto a los muros, sólo tienen función de cierre,
pues los elementos sustentantes del edificio son los
pilares circulares visibles por todo el edificio (aulas,
pasillo de informática y peluquería…) y los pilares
rectangulares que no se aprecian desde el exterior,
más que en el pasillo de la biblioteca.
Los materiales utilizados son los propios de la
arquitectura del siglo XX (hierro, ladrillo, hormigón
armado, cristal, y en el interior utiliza la madera o
compuestos de ella).
Al exterior podemos observar el ladrillo cara vista
dispuesto a soga; hormigón armado visto en los
porches; cristales en toda la parte central por delante, y
en la sala de profesores y las esquinas de la biblioteca
por detrás, así como en las escaleras de los módulos
laterales; hierro en las barandillas de los balcones y en
las cristaleras; placas de madera o similar de color marrón óxido en las fachadas lateral y trasera
de la biblioteca (armonizando con la escultura de la rotonda); y otro tipo de metal para las
persianas de las aulas de la primera y la segunda planta, así como en la fachada de los talleres y
aulas del edificio de los ciclos formativos que da a las pistas.
Al interior hay hormigón armado visto
pulimentado en los pilares circulares;
madera en las puertas; cristal en las
ventanas que dan al interior; placas de
madera o similar policromadas (verde
pistacho, azul, gris) en las paredes; y piedra
pulida en el suelo.
Todas las cubiertas son planas o
arquitrabadas, sin ninguna viga que lo
sustente excepto en el gimnasio, ya que por
su dimensión necesita un elemento de
apoyo.
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3. De entre los vanos del edificio, unos tienen una función práctica, como las ventanas para ventilar
o las puertas para entrar y salir; y otros de iluminación y para dejar ver la estructura, como las
cristaleras de las escaleras. En algunas ocasiones (zona central) atraviesan el espacio.
Las fachadas del edificio se corresponden con la estética del interior, reforzándola, ya que son
simples, sin decoración, y se basan en líneas rectas.
No hay elementos decorativos como tales, sino que las cristaleras, las placas de madera
policromada (que aportan calidez a las superficies), los balcones sin función del ala izquierda
(que distancia la entrada de la luz excesivamente directa al mediodía) y el saliente triangular del
taller de automoción son los únicos que puede que realicen esa función. La decoración es
estructural, la ausencia viene marcada por la funcionalidad y por el valor de “menos es más”
(Mies van der Rohe). Sin embargo, en el pasillo de la sala de profesores hay dos cuadros que
sirven para animar el entorno de reciente incorporación.
El tipo de espacio de este edificio es centralizado, pues de la zona común (biblioteca,
secretaría…) se conectan las alas laterales, especializadas
en diferentes campos. Sólo utiliza el espacio unitario en la
biblioteca porque es un espacio diáfano, así como en el
gimnasio y los talleres de automoción. La compartimentación
del resto de los espacios depende de su función.
En este edificio el arquitecto tuvo muy en cuenta el estudio
de la luz, a la que concede gran importancia mediante la
apertura de amplios vanos y de luz indirecta en zonas como
el gimnasio y el pasillo de peluquería e informática.
Relaciones:
Este edificio recibe influencias de arquitectos como Le
Corbusier y del edificio de la escuela de La Bauhaus.
Le Corbusier ha influido en esta obra en el uso de
volúmenes cúbicos en sus edificios, el uso del hormigón
visto, la racionalización en la arquitectura, la forma de las
ventanas (rectangulares y alargadas horizontalmente, como
las de Villa Saboya), y, en general, el uso de formas puras y
simples.
Gómez Muñoz pretende llevar a la práctica el aforismo de
Le Corbusier: “la vivienda es una máquina para vivir”,
aplicado al mundo de la enseñanza.
El edificio Bauhaus influye a Gómez Muñoz en su planta
centralizada, las extensas superficies de vidrio que dan
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4. apariencia de ingravidez y el predominio de la línea recta. Así como la especialización en
bloques según su funcionalidad.
De Mies van der Rohe ha incorporado el concepto estético de paseo arquitectónico sin
interrupción de las perspectivas, pues en cada pasillo nos encontramos un vano que abre el
muro proyectando la visión al espacio exterior.
Y, a pesar de que no tiene nada que ver con el organicismo, sí que se aprecia alguna similitud
estética con la Casa de la Cascada de Wright, como el uso del vidrio y las aperturas al exterior y
en la proyección del interior hacia el exterior.
Asimismo, en cierto modo podría decirse que recibe la influencia de Mondrian y Rietveld
(neoplasticismo holandés) en el uso del color uniforme, aunque en este caso no primario, en
formas geométricas regulares como las placas de madera.
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