Las redes sociales permiten, entre otros muchos aspectos, incrementar nuestro nivel de exposición. Este hecho implica a su vez que el nivel de riesgo también se incrementa, poniendo en peligro nuestra privacidad, que puede ser abusada con intenciones muy diversas. La presentación expone los riesgos a los que se expone cualquier usuario cuando crea una identidad digital en una red social, pero desde un punto de vista nada habitual. Para ello, se presentan casos prácticos en los que se demuestra las capacidades de explotación de los datos que exponemos, tanto de forma consciente como inconscientemente.