1. La cuadra
Diana, que está echada entre las patas de Platero, viene a mí,
bailarina, y me pone sus manos en el pecho, anhelando
lamerme la boca con su lengua rosa. Subida en lo más alto del
pesebre, la cabra me mira curiosa, doblando la fina cabeza de
un lado y de otro, con una femenina distinción. Entre tanto,
Platero, que, antes de entrar yo, me había ya saludado con un
levantado rebuzno, quiere romper su cuerda, duro y alegre al
mismo tiempo. Por el tragaluz, que trae el irisado tesoro del
cenit, me voy un momento, rayo de sol arriba, al cielo, desde
aquel idilio. Luego, subiéndome a una piedra, miro el campo. El
paisaje verde nada en la lumbrarada florida y soñolienta, y en el
azul limpio que encuadra el muro astroso, suena, dejada y
dulce, una campana.
2. Diana, que está echada entre las patas de Platero, viene a mí,
bailarina, y me pone sus manos en el pecho, anhelando
lamerme la boca con su lengua rosa. Subida en lo más alto del
pesebre, la cabra me mira curiosa, doblando la fina cabeza de
un lado y de otro, con una femenina distinción. Entre tanto,
Platero, que, antes de entrar yo, me había ya saludado con un
levantado rebuzno, quiere romper su cuerda, duro y alegre al
mismo tiempo. Por el tragaluz, que trae el irisado tesoro del
cenit, me voy un momento, rayo de sol arriba, al cielo, desde
aquel idilio. Luego, subiéndome a una piedra, miro el campo. El
paisaje verde nada en la lumbrarada florida y soñolienta, y en el
azul limpio que encuadra el muro astroso, suena, dejada y
dulce, una campana.
3. Una historia personal de Alexandru
Platero, hoy te quiero contar
una historia que no se la he
cuento a nadie, pero a ti sí, ya
que eres un buen amigo.
Esta historia sucedió en el día
de Navidad, cuando vino Papá
Noel, que era mi tío disfrazado,
trajo a todos un regalo menos
a mí, y yo al ver que todos
tenían regalo menos yo, me
entristecí mucho. De repente,
mi padre se fue a su
habitación, vino
con un regalo, y me dijo que
era mío. Cuando abrí el
regalo había un casco de
motocross y unos guantes
de moto. Yo, por dentro, me
preguntaba... ¿para qué
quiero yo esto si no tengo
una moto?, cuando de
repente mi padre me dijo que
fuera con él a la furgoneta.
Cuando llegamos, me dio
unas llaves, yo estaba
confuso, y cuando abrió las
puertas de la furgoneta
había un quad, y en ese
momento me quedé de
piedra.
4. Historia personal de Amin
Un día, me senté con Platero
junto a un manzano, veníamos
cansados de un viaje largo,
parecía aburrido y decidí
contarle una historia personal.
Le conté a Platero que una vez
estaba en un valle de Valencia y
me encontré a un señor
malherido. Este me contó que
estaba en una mina
abandonada y que encontró en
una parte de la mina oro.
Además me dijo que esa parte
parecía que no había
sido tocado.Al intentar coger
una piedrecita de oro de
repente se derrumbó y yo
logré escapar, pero unas
piedras me cayeron encima.
Yo fuí a ver la mina, pero
desgraciadamente estaba
derrumbada y cerrada por un
escombro de gigantes
piedras. Sin embargo
encontré una piedra que
llevaba incrustadas
piedrecitas de oro, conseguí
coger unas cuantas y me
pude pagar un viaje a París
que tanto deseaba para ver
mis familiares.
5. Historia personal de Mohamed
Te voy a contar una
historia,Platero. El año
pasado en el instituto me
aburría mucho, no hacia
nada. Solo me ponía a
hablar con un
compañero, Mohamed
Amin Daki. No sé si lo
conoces es una persona
normal con un buen
fondo .
ponía a hablar con un
compañero, Mohamed
Amin Daki. No sé si lo
conoces es una
persona normal con un
buen fondo .