1. EL RUIDO DE LA CALLE
Rajoy: Antiguo Testamento
RAÚL DEL POZO
La Moncloa no es un palacio, sino un complejo. Carece de
frescos o estatuas; por las noches sobrevuelan los tejados los
vampiros, que llegan del cementerio de San Isidro, desde la orilla
derecha del río Manzanares. Los presidentes que habitan en el
recinto salen sonados, con una imagen sobrevalorada de sí mismos.
No sé cómo quedará la chola de Mariano Rajoy después de su
segundo mandato, por ahora no da síntomas de megalomanía.
Los escribas del presidente me cuentan que no está crecido por haber sido el único
que acertó en diciembre lo que va a pasar en noviembre. Les llamo escribas porque si digo
sus nombres no vuelven a dar carrete; en realidad, son amanuenses, fontaneros, expertos
en la escritura jeroglífica del poder. Manuel Vázquez Montalbán describía a los escribas
con las manos posadas sobre las rodillas y la cabeza inclinada en señal de devoción;
éstos son más libres. Se preparan para estar en La Moncloa otros cuatro años, o menos,
como les dirá Rajoy.
Esperan una Legislatura corta y trepidante, pero valoran a su jefe: «Tantas veces
nos han dicho que Mariano Rajoy no iba a gobernar ni de coña y ahora resulta que fue el
único tipo que leyó correctamente los resultados, el que acertó por dónde venía el aire».
Es verdad que Rajoy otea el aire como los canes de palleiro y, contra todas las
previsiones, está a punto de volver a ser investido.
Les comento a los escribas que Íñigo Errejón le está diciendo a Carlos Alsina,
mientras éste come almendras, que el Gobierno será débil, de corto recorrido, sin agenda
y sin apoyos suficientes; y cuando les insinúo que van a formar Gobierno gracias a los
patriarcas del Antiguo Testamento responden: «Los del Antiguo Testamento del PSOE han
acertado al decidir pronto y de una vez. Si hay que darse de hostias, vamos a darnos de
hostias, que es como siempre terminan las cosas entre socialistas y comunistas. No le van
a pasar una a los de Podemos. Esta Legislatura tiene que servir para que el PSOE se
rearme; será muy difícil gobernar, porque aprobar una ley de tráfico es irrelevante, pero
aprobar presupuestos, pensiones o leyes de gasto que choquen con Europa es más
problemático».
El poder estará en La Moncloa, con permiso de San Jerónimo y de un Partido
Socialista que, según los escribas, ha perdido un millón y medio de votos desde las
elecciones de junio. El nuevo Ejecutivo –según Ángel Collado– planea recurrir al Tribunal
Constitucional para que reconozca el derecho al veto del Gobierno ante las propuestas de
la oposición que supongan gastos o disminución de ingresos. Esa treta presidencialista,
ajena a los códigos del parlamentarismo, para evitar que se gobierne desde el Congreso
será derrotada en la Cámara.
2. Además, hace falta un plan para evitar la desconexión de Cataluña. Me informan
desde Barcelona: «La kaleborroka catalana sigue adelante. Todo se radicalizará. Conviene
que el nuevo Gobierno acuerde una comisión independiente o subcomisión que empiece a
estudiar reformas»
Esta Legislatura tiene que servir para que el PSOE se rearme; será muy difícil
gobernar, porque aprobar una ley de tráfico es irrelevante, pero aprobar presupuestos,
pensiones o leyes de gasto que choquen con Europa es más problemático».