Pablo emprende su segundo viaje por Asia Menor acompañado de Silas y Timoteo. Lucas se les unirá más tarde. Guiados por el Espíritu, se embarcan rumbo a Macedonia. Empieza la misión de Pablo y sus compañeros en tierra gentil: fundan comunidades en Filipos, Tesalónica y Berea. Huyendo de los judíos que no aceptan el mensaje de Jesús, Pablo se refugia en Atenas, donde se le abrirá un campo inhóspito de misión.
2. Llegó a Derbe y luego a Listra. Había allí un discípulo que se
llamaba Timoteo, hijo de una judía creyente, pero de padre
griego. Los hermanos de Listra y de Iconio daban buenos
informes de él. Pablo quiso que fuera con él y, puesto que
todos sabían que su padre era griego, por consideración a los
judíos de la región, lo tomó y lo hizo circuncidar. Al pasar por
las ciudades, comunicaban las decisiones de los apóstoles y
presbíteros de Jerusalén, para que las observasen.
Hechos 16, 1-4
3. Timoteo
Pablo y Silas pasan por las comunidades de Asia Menor
comunicándoles la decisión tomada en Jerusalén sobre las
prescripciones de la Ley. En Listra fichan al joven Timoteo, hijo de
gentil y judía. ¿Por qué Pablo lo hace circuncidar? No estaba
obligado a hacerlo. ¿Lo hace por agradar a los judíos que todavía no
se han convertido a la fe en Jesús?
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5. Atravesaron Frigia y la región de Galacia, al haberles
impedido el Espíritu Santo anunciar la palabra en Asia. Al
llegar cerca de Misia, intentaron entrar en Bitinia, pero el
Espíritu de Jesús no se lo consintió... Aquella noche, Pablo
tuvo una visión: se le apareció un macedonio, de pie, que le
rogaba: Pasa a Macedonia y ayúdanos.
Hechos 16, 6-10
6. El freno del Espíritu
Solemos pensar en el Espíritu como un viento que empuja. Pero, en
ocasiones, el Espíritu frena el paso para impedir un desvío. Pablo
descubre que el Espíritu de Jesús le impide seguir predicando en
Asia. En sueños, lo llama a dar el salto a Grecia, a tierra de los
gentiles. Ya no debe demorarse más.
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8. Compañeros de Viaje
En este segundo viaje por Asia, Pablo lleva a Silas, profeta de
Jerusalén, y por el camino se les ha unido Timoteo, de Listra. En
algún lugar también se encuentran con Lucas (a partir de Hechos
16, 10, en el relato aparece el «nosotros»). La evangelización es una
tarea de equipo, de comunidad.
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10. Travesía hacia Macedonia
Cruzan el Bósforo y saltan a tierras helenas. Pablo y sus
compañeros toman la Via Egnatia, una calzada romana que cruza
Macedonia y llega hasta las costas albanas, donde enlaza con la
vía marítima hacia Roma. Ese es su destino.
12. Macedonia
Se adentran en territorio gentil. En Asia, el Espíritu les ha
mostrado que muchos judíos rechazan a Jesús, pero los gentiles
se convierten y abrazan el evangelio. El reto ahora es alejarse del
territorio judío y lanzarse a predicar a los gentiles que no
conocen ni siquiera la fe de Israel.
15. Mujeres en oración
Segunda capital de Macedonia, Filipos es una ciudad comercial y
próspera donde no hay sinagoga. Pablo, Silas y Timoteo van a un
lugar de oración, al aire libre, donde se reúnen unas mujeres
devotas, quizás prosélitas o simpatizantes del judaísmo.
Hechos 16, 11-13.
17. Lidia, la empresaria
Lidia escucha a Pablo y abre su corazón a sus enseñanzas. Es una mujer
emprendedora, comerciante de púrpura, procedente de Asia Menor.
Convencida, se hace bautizar, ella y toda su casa. Ofrece alojamiento a
Pablo y a los suyos, «obligándolos» a estar en su hogar.
Hechos 16, 14-15.
18.
19. La esclava liberada
Una joven poseída por un espíritu es explotada por sus amos para
sacar dinero con sus dotes adivinatorias. La muchacha se pone a
gritar cada vez que ve pasar a Pablo y sus compañeros: «¡Estos
hombres son siervos del Dios altísimo y nos traen la salvación!»
Pablo, indignado, manda salir al demonio y la libera de la posesión.
Hechos 16, 16-18
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21. Persecución y cárcel
Los amos de la joven liberada, que pierden su fuente de ingresos,
se enfurecen contra Pablo y lo denuncian a las autoridades de la
ciudad por causar desorden público. Los magistrados ordenan
apresar a Pablo y a Silas: los apalizan y los meten en la cárcel.
Hechos 16, 19-24
22.
23. Terremoto y liberación
De noche, en la celda, Pablo y Silas cantan himnos... Un
terremoto sacude la tierra y las cadenas y los cerrojos saltan.
¡Están libres! El carcelero, desesperado y temiendo que todos los
presos huyan, quiere suicidarse. Pablo lo detiene.
Hechos 16, 25-28
24.
25. ¿Qué debo hacer?
¿Qué debo hacer para salvarme? El carcelero quiere huir no sólo
de la muerte, sino de una vida sin esperanza ni propósito.
Después de asegurar a los otros presos, busca a Pablo y a Silas y
les pide ayuda. Los prisioneros ofrecen al carcelero la liberación.
Hechos 16, 29-31
26.
27. Catequesis y bautismo
En una sola noche, Pablo y Silas imparten una catequesis rápida
al carcelero y a su familia. Todos se hacen bautizar y, de
madrugada, ofrecen un banquete a los apóstoles para celebrarlo.
La conversión siempre va seguida de una fiesta.
Hechos 16, 32-34
28.
29. "Toda su casa"
Lucas recoge varias conversiones en las que se dice que «la
salvación llega a esta casa»: Zaqueo, Cornelio de Cesarea, Lidia
de Filipos... y ahora, el carcelero. La conversión del padre o la
madre de familia no significa que todos se conviertan, pero sí
abre las puertas de la salvación a todos los que dependen de él:
hijos, familiares, sirvientes y esclavos.
30.
31. Liberación y dignidad
Las autoridades, asustadas por el terremoto y al saber que
Pablo y Silas son ciudadanos romanos, quieren soltarlos
discretamente. Pablo, ofendido, exige que los liberen en público
y a pleno día. Hace valer sus derechos... pero quizás ha perdido la
oportunidad de evangelizar también a estos magistrados, como
lo hizo con el carcelero o con Sergio Paulo (Hechos 16, 35-39).
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33. Sacudirse las sandalias
Los magistrados de Filipos les piden que abandonen la ciudad y
así lo hacen. Se despiden de Lidia y del carcelero y se van. Pero
dejan una incipiente comunidad, que irá creciendo. Pablo
profesará un afecto especial a Filipos, será la comunidad que le
dé menos problemas y más ayuda económica.
Hechos 16, 39-40
36. El intento de Pablo
Pablo vuelve a intentarlo: durante tres sábados predica en la
sinagoga de los judíos; unos pocos se convierten a Cristo, entre
ellos un hombre notable llamado Jasón.
Pero donde Pablo y Silas tienen más éxito es entre los gentiles y
las damas notables de la ciudad. Muchos se convierten.
Hechos 17, 1-4
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38. Denuncia y Fianza
Los judíos denuncian a Pablo y sus compañeros ante los
politarcas de Tesalónica: por desorden público, desacato al César
y a Jasón por alojarlos en su casa. Pablo y Silas están escondidos,
pero Jasón es arrastrado ante las autoridades y debe pagar una
fianza para que los dejen marchar.
Hechos 17, 5-9
41. Fe y Discusiones
Huyendo de Tesalónica, pasan a Berea. De nuevo van directos a
la sinagoga de los judíos. Estos, que «son generosos», aceptan
escuchar y discuten largamente sobre lo que las escrituras dicen
sobre el Mesías. Pero el resultado es el mismo: pocos judíos
creen y, en cambio, muchos gentiles y mujeres paganas.
Hechos 17, 10-12
42.
43. Huida por Mar
Los judíos de Tesalónica van a Berea para disuadir a sus
correligionarios y a la gente de creer en Jesús y en la predicación
de Pablo y sus compañeros. Se dedican a «confundir a la
multitud». Pablo es enviado a Atenas por mar. Pero Silas y
Timoteo se quedan en Berea.
Hechos 17, 13-14
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45. Una terrible ironía
El salmo 2 habla de lo que Dios hará contra las naciones que
conspiran contra su Ungido: dispersar y confundir.
Los judíos de Tesalónica hacen lo mismo contra la ciudad de
Berea, que acoge el evangelio.
46. Salmo 2
¿Por qué se amotinan las naciones,
y los pueblos planean un fracaso?
Se alían los reyes de la tierra, los príncipes conspiran
contra el Señor y contra su Mesías:
«Rompamos sus coyundas, sacudamos su yugo».
El que habita en el cielo sonríe, el Señor se burla de ellos.
Luego les habla con ira, los espanta con su cólera:
«Yo mismo he establecido a mi Rey en Sión, mi monte santo».
47.
48. Soledad de Pablo
Silas y Timoteo deciden quedarse en Berea. ¿Por qué?
¿Se ha dado alguna fricción o distancia con Pablo?
El Espíritu impide a Pablo ir a Tesalia y se dirige en barco a
Atenas. Por primera vez, se encontrará completamente solo en
medio de un ambiente pagano.
49.
50. Discurso Fallido
Dios avala a este hombre, pues lo ha resucitado de entre los
muertos. Apenas habla de la resurrección, algunos griegos se
burlan y los demás no quieren seguir escuchando.
Pablo se marcha (Hechos 17, 32-33).