El documento describe las responsabilidades de un Chef de inversión (CIO) comparándolo con las de un chef de cocina. Un CIO, al igual que un chef, debe tener conocimientos amplios, experiencia, creatividad e instinto para innovar, seleccionar un buen equipo, y crear carteras de inversión equilibradas que satisfagan las necesidades de los clientes y la entidad. Al igual que un chef, la reputación y éxito de la entidad dependen en gran medida del trabajo de un CIO.